3. El Verijero
Se porta en la cintura, del lado derecho, la hoja
apuntando hacia la ingle (“verija”), de ahí su nombre,
el filo hacia abajo y el cabo hacia afuera asomando
oblicuo junto a la rastra.
Es un cuchillo de hoja corta (no más de 15 cm.),
destinado al trabajo,
4. El Capador
Este tipo de cuchillo se reservaba para trabajos de
corte delicado como castrar animales.
Es de escaso tamaño, hoja curva y pequeña (alrededo
de 10 cm.) reservado para su tarea específica.
5. El Picazo
Llamado así por su similitud con los colores del
pelaje del caballo “Picazo” (Overo Negro) combina
una vaina de cuero negro, con metal, obteniendo un
hermoso efecto.
Es una variedad del Verijero, su hoja y dimensiones
son similares (15 cm. de hoja).
Las piezas más antiguas muestran cabos realizados
en ébano, cuyo color negro intenso contrasta con los
“soajes” (virolas de plata) que junto con la vaina
negra y plateada logran un atractivo diseño.
6. El Facón
Se diferencia del puñal y de la daga porque la hoja
presenta un solo filo y ocasion un pequeño contrafilo.
Lo que lo define como tal es la existencia del
guardamano o gavilán, de modesto tamaño, y en
forma de arandela, en forma recta, de “C”, de “S”. y
la intrusión del cabo al medio del mango .
Las hojas son de una longitud de entre 30 y 40 cm de
largo por 20 a 25 mm.de ancho.
Para su elaboración se han utilizado en el pasado
hojas de bayoneta y espadas.
7. El Caronero
Es un arma grande, con una hoja de unos 80 cm. de
largo utilizado caza en el monte o para matar reces.
Se lo llama Caronero por que se llevaba en el recado,
entre las coronas
El mango se colocaba hacia adelante y su filo hacia
la izquierda o “lado de montar”.
Los careneros generalmente no poseían guardamano
o gavilán, para facilitar su salida del recado.
8. El Puñal.
Arma blanca con hoja de acero y punta, que
lleva guarda puño entre el cabo y la hoja.
Tiene filo y contra filo, pero este último llega
hasta la cuarta parte de la hoja (de unos
25cm como máximo) y es su característica
distintiva.
9. La Daga.
Esta arma posee filo y contra filo (filo en ambos
bordes) y como el facón, se construía en base a
bayonetas viejas y restos de espadas.
Usualmente presentaban canaletas longitudinales
sobre las dos caras de la hoja (de entre 20 y 60cm.),
que los paisanos justificaban como necesarias para
las sangrías (forma de sacrificar un animal por medio
del desangrado cercenado una vena importante).