El documento resume las concepciones griega y bíblica sobre la naturaleza humana según Platón, Aristóteles y Plotino y según el Antiguo Testamento, el Nuevo Testamento y la patrística. Propone que los filósofos griegos veían al hombre como un ser compuesto de cuerpo material e inmaterial alma, mientras que la Biblia no da una doctrina sistemática pero enfatiza la centralidad del hombre y su liberad de elegir obedecer o desobedecer a Dios.
2. 1.- Platón 427-347 Ac
El alma es la parte esencial del hombre, inmortal e
increada, la que da vida al cuerpo
Según el mito del carro alado, presenta su visión
tricotómica de la estructura del alma: el conductor
(auriga) representa la parte racional o intelectual; el
caballo bueno la parte irascible; el caballo rebelde, la
parte concupiscible; el caballo malo empuja al alma hacia
el mundo sensible y hace difícil la guía del carro
El alma existe antes del cuerpo e independiente de él, su
unión es fruto de una caída, y constituye una prisión para
ella.
3. 2.- Aristóteles 484-322 Ac
La antropología de Aristóteles, concuerda con la de
Platón, pues consideran la racionalidad como el
carácter propio del hombre
El cuerpo no es solamente una prisión de la que
liberarse, sino la sede natural del alma.
Cada sustancia está compuesta de materia y
forma, el hombre está compuesto de cuerpo y alma.
Propone tres tipos de almas: vegetativa para las
plantas; sensitiva para los animales; racional para los
hombres.
4. Aristóteles
El alma racional tiene dos niveles: El intelecto
pasivo que recogen los datos de los sentidos; y el
intelecto agente, la parte divina e inmortal, ilumina
los datos sensibles y es la fuente inmediata del
conocimiento.
El hombre es el único animal que tiene razón, que
le indica lo útil y lo dañino, lo justo y lo injusto.
5. 3.- Plotino 205 – 270 Ac
Retoma la idea órfico-platónica de la preexistencia
del alma, ente superior al cuerpo y unida después a
él.
La misión del alma es reconstruir todas las cosas a
la unidad.
En el regreso al Uno se distinguen tres etapas: la
ascesis, la contemplación, el éxtasis
6. Concepción griega: síntesis
La concepción antropológica común
entre los filósofos griegos es la que ve al
hombre como un ser compuesto de un
cuerpo material, pesado e inclinado a las
pasiones, y de un alma, inmaterial o
hecha de una materia más sutil, que es la
sede de sus actividades superiores, la
inteligencia y la contemplación.
7. Concepción griega: síntesis
Elbien, o sea la felicidad, coincide con
la contemplación de las realidades
superiores; la liberación del desorden
de las pasiones; y el alcance de un
estado de armonía en el conocimiento
de la verdad. La vida filosófica se
entiende como el ejercicio asiduo en
esta vía de conocimiento y de sabiduría.
9. La concepción bíblica: Antiguo Testamento
Según Génesis: creado a imagen y semejanza de Dios y libre,
pudiendo obedecer o transgredir el mandamiento de Dios.
Dios crea al hombre modelándolo con la tierra e
infundiéndole un aliento de vida
El Antiguo Testamento no da una doctrina sistemática sobre
el hombre ni sobre su constitución.
El corazón, es la sede de los sentimientos, de los deseos, de
la razón, y el poder de decisión del hombre.
10. La concepción bíblica: Nuevo Testamento
Tampoco hay enseñanza antropológica sistemática.
La preocupación de sus autores no es proponer una
visión filosófica sino anunciar el evento de la
encarnación y de la salvación.
Centralidad del hombre respecto de las criaturas.
El corazón es la sede de las decisiones profundas. La
psyche es el alma o la vida.
Atestigua que somos hijos de Dios.
11. Patrística
Radicalmente cristocéntrica: la antropología es
repensada desde la encarnación del Logos, verdadero
Dios y verdadero hombre.
El cuerpo debe ser transformado por el Espíritu de Dios
Cuerpo templo del Espíritu Santo y destinado a la
resurrección final.
El alma es el vínculo que une el cuerpo al Espíritu y se
inclina hacia el uno o hacia el otro.
El hombre entero, y no sólo el alma, está destinado a la
salvación.