El documento habla sobre cómo el tiempo puede ayudar a curar el dolor de la pérdida de un ser querido. Aconseja utilizar el tiempo para aceptar la pérdida, liberar emociones y aprender a llenar el vacío dejado atrás, en lugar de dejar que la tristeza domine. También sugiere que terminar el duelo no significa olvidar, sino aceptar que la persona no volverá y dejar ir el dolor.