1. CENTRO DE INVESTIGACIONES PSIQUIATRICAS, PSICOLOGICAS Y
SEXOLOGICAS DE VENEZUELA
INSTITUTO DE INVESTIGACION Y POSTGRADO
SILVIA GUEVARA
SEXOLOGÍA MEDICA
2. INFANCIA
• Para la escuela Bianco:
…“Corresponde al período
indiferenciado, dentro del
postulado del patrón sexual, y se
explica que la conducta sexual
observada, se caracteriza por
que el individuo tiene la
capacidad de generalizar los
estímulos, lo que explica el por
qué responde a estímulos
Bia nc o (2 0 0 9 ). Sexualidad en la Infancia
3. INFANCIA
INFANCIA
• Moles…”se debe tener en
cuenta su desarrollo y
modificación a medida que
avanza en su proceso de
desarrollo intelectual en
interacción con la educación
impartida por el medio en que
se desenvuelve, es así que las
primeras manifestaciones
intelectuales del niño/niña son
Moles (2007) Asesoramiento Clínico, segunda edición. Editorial CIPV)
4. INFANCIA
• UNICEF
…la infancia implica un espacio
delimitado y seguro, separado de la
edad adulta, en el cual los niños y las
niñas pueden crecer, jugar y
desarrollarse…
UNICEF, disponible en:
http://www.unicef.org/spanish/sowc05/childhooddefined.html
5. Sexualidad infantil
• FREUD, manifestó que: …los impulsos sexuales
tempranos no polarizados en un objetivo
concreto pasan por una sucesión de estadios
evolutivos previsibles, indispensables para la
formación de una personalidad adulta y
madura...
Es el primero en
reconocer la existencia
de la sexualidad
durante todo el ciclo
vital.
W. , Jo hns o n, 1 9 8 7 . V. La s e x ua lid a d hum a na , to m o 2 . G rija lbo ,
6. Sexualidad infantil
FREUD
• Fase oral: primer año de vida
• Fase anal: de 1 a 3 años
• Fase fálica: 3 a 5 años
• Fase de latencia 6 hasta
antes adolescencia
• Fase genital: desde la
adolescencia
W. , Jo hns o n, 1 9 8 7 . V. La s e x ua lid a d hum a na , to m o 2 . G rija lbo ,
7. Teoría del aprendizaje y
desarrollo sexual
• El aprendizaje (consecuencia de la
influencia reciproca entre el individuo y el
medio ambiente) es el componente
primario y determinante del
comportamiento.
– Condicionamiento clásico
– Condicionamiento operante
– Teoría del aprendizaje social
Masters W., Johnson V., y Kolodny R (1997). La sexualidad humana. España. Editorial Grijalbo.
8. Sexualidad infantil
La sexualidad infantil tiene una serie de
características que la hacen diferente a la de otras
etapas de la vida:
La sexualidad en las etapas posteriores de la
vida va a tener su base en la sexualidad infantil.
Losgenital no tiene importancia en esta etapa.
Lo aspectos sociales y afectivos
asociados a lo sexual tienen una
gran relevancia.
Los juegos sexuales de este periodo
se basan en la enorme curiosidad y
la tendencia a imitar que le son
es.scribd.com/doc/95592518/modulo2
9. Sexualidad infantil
Las expresiones de la sexualidad en esta
etapa reflejan las necesidades del propio
desarrollo.
El que se puedan establecer vínculos
afectivos satisfactorios en este periodo va a
Las preferencias sexuales no están desarrollo
facilitar un referente para un
determinadas. edad adulta.
armónico en la
Superar problemas como los celos
permiten ver el mundo de modo
menos egoísta y aprender que
compartir no es perder sino ganar
es.scribd.com/doc/95592518/modulo2
10. RECIEN NACIDO
• Antes del nacimiento el feto masculino tiene
erecciones reflejas
• RN: erecciones a los pocos minutos del parto
mujeres lubricación vaginal y erección clitóridica
en el transcurso de las primeras horas
• Es importante el lazo entre los padres y la
criatura
11. RECIEN NACIDO
Puede haber manifestaciones de
placer en forma de orgasmo,
observaciones de respuesta sexual:
erección, vasocongestión,
movimientos rítimos de la pelvis,
cambios en la coloración de la piel,
pérdida de atención al entorno,
contracciones pélvicas y relajación
posterior. Friedrich (1998). Lewis
(1988) Sanchez (2008) Kinsey,
(1953).
12. RECIEN NACIDO a 2 AÑOS
• Mecanismos físicos de la respuesta
sexual están presentes
– sensaciones corporales y sensoriales
(contacto físico por el tacto, ya sea con
la madre, en la succión, las caricias,
cambio de pañal, frotamiento de éstos
contra otras personas u objetos, jugar
13. APEGO Y SEXUALIDAD
• Formación del Apego: se entiende por apego la
estrecha vinculación emocional que el niño
establece con aquellas personas de su entorno
que más directamente interactúan con él,
generalmente las que le cuidan y satisfacen sus
necesidades. Fruto de esa vinculación es el lazo
invisible que le empuja a buscar su compañía y
La característica inconfundible del apego
La característica inconfundible del apego
que perdura a lo largo del tiempo.
es procurar un cierto grado de proximidad
es procurar un cierto grado de proximidad
al objeto de apego, que no siempre
al objeto de apego, que no siempre
implica contacto físico; ese vínculo se
implica contacto físico; ese vínculo se
mantiene en distintas situaciones, incluso
mantiene en distintas situaciones, incluso
en ausencia de la persona objeto del
en ausencia de la persona objeto del
http://html.rincondelvago.com/desarrollo-evolutivo-del-nino-de-los-0-a-2-anos.html
14. FORMACIÓN DEL APEGO
DE 0 A 2 AÑOS
• Fase 1. Orientación De 0 a 3 meses:
– Manifestaciones llanto,
– Amamantamiento
• Fase 2. Interacción privilegiada : De 3 a 7
meses:
– integra la cara, olor, voz.
– Conductas:
– Sonrisa, vocalización, llanto,
irrupción, todo diferencial
15. FORMACIÓN DEL APEGO
DE 0 A 2 AÑOS
• Fase3. Vinculación y miedo a los demás (8-12
meses)
– Forma lazo afectivo a madre o cuidador
– Ansiedad de separación.
El infante explora cuando su figura de apego
se encuentra presente.
– Reacciones de inquietud, rechazo, evitación o
temor
intenso ante extraños
16. APEGO: AL AÑO DEL
EDAD
Apego en la infancia
•A partir del 1er año va conquistando
independencia, este proceso es conflictivo,
exige readaptaciones continuas con ganancias
y perdidas de privilegios
• A partir del 2do año, la experiencia
con las figuras de apego hace que
pueda predecir sus demandas.
Funciona de forma mas flexible y
eficaz
http://html.rincondelvago.com/desarrollo-evolutivo-del-nino-de-los-0-a-2-anos.html
17. PRE-ESCOLAR
Es la educación que el niño recibe
en sus primeros años de vida (0-6),
ésta es una etapa muy importante
en el desarrollo del niño, ya que se
le puede despertar sus habilidades
físicas y/o psicológicas, su
creatividad, se le puede enseñar a
ser autónomo y auténtico; que mas
adelante le pueden servir para
abrirse mundo por sí solo. para ello
se han puesto en marcha distintos
18. Sexualidad de 3 a 5 años
• Despiertan una gran curiosidad,
exploran su cuerpo, para esto utilizan la
mano y algunas niñas comienzan a
frotarse los genitales con una manta o
peluche o, con menor frecuencia, a
insertar un dedo u objeto en la vagina
Kinsey (1953).
19. Sexualidad 3-5 años
• Se vuelven muy curiosos respecto a las diferencias
corporales y de genero
• Exploran su cuerpo
• Empiezan a sentir mucha curiosidad por las
diferencias corporales las sensaciones de placer
• Se interrogan sobre la reproducción
• Juegan a ser médicos, imitan actividades del hogar
u otro
tipo de juegos sexuales con los amigos o hermanos.
• Adquieren la convicción y conciencia firme de ser
hombre o
mujer. http://revistas.concytec.gob.pe/css/scielo2.css
20. Sexualidad 2,3-5 años
• Imitan algunos comportamientos sexuales de
los adultos.
• Dicen palabrotas
• Hacen preguntas y sienten curiosidad por la
anatomía genital del sexo contrario.
• Tienen curiosidad por su origen y hacen
preguntas
• Observan las relaciones sexuales entre adultos,
en la propia familia, en la TV, entre animales,
Sanchez H., (2008) Guía para orientar a las familias. Sexualidad infantil, diversidad de orientaciones sexuales y
nuevos tipos de familias. Educación sexual para niños y niñas de 0 a 6 años. Editorial Narcea, [consulta en línea]
etc.
Disponible: http://books.google.com/books?
id=r60Dyie8qZcC&dq=juegos+sexuales+infantiles+&lr=&hl=es&source=gbs_navlins
21. ESCOLAR
La educación formal o escolar, por
su parte, consiste en la presentación
sistemática de ideas hechos y
técnicas a los estudiantes. Una
persona ejerce una influencia
ordenada y voluntaria sobre otra,
con la intención de formarle. Así, el
sistema escolar es la forma en que
una sociedad transmite y conserva
su existencia colectiva entre las
nuevas generaciones.
http://definicion.de/educacion/
22. Sexualidad 6-8 años
Mayor curiosidad por el origen de los
niños, embarazo y el nacimiento
Participan en juegos de imitación
También se pueden observar
actividades exhibicionistas y
voyeuristas
Fernández L., et al (2000) Creencias, actitudes y conocimientos en educación sexual, Rev. méd.
Chile v.128 n.6 Santiago jun. 2000 [consulta en línea] disponible en http://www.scielo.cl/scielo.php?
pid=S0034-98872000000600002&script=sci_arttext&tlng=es
23. Sexualidad 9-12 años
Se empieza a usar un lenguaje sexual
Explora fantasías sexuales o románticas
El niño se torna más pudoroso
Muchos comienzan a masturbarse por primera
vez
Algunos pueden tener la primera experiencia de
Reynolds, M. A., Herbenick, D. L. yy Bancroft, J. (2003). The nature of childhood sexual
Reynolds, M. A., Herbenick, D. L. Bancroft, J. (2003). The nature of childhood sexual
coito
experiences. Two studies 50 years apart. En J. Bancroft (Eds.), Sexual development in
experiences. Two studies 50 years apart. En J. Bancroft (Eds.), Sexual development in
childhood (pp.134-155). Bloomington: Indiana University Press. World Association for Sexual
childhood (pp.134-155). Bloomington: Indiana University Press. World Association for Sexual
24. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Agrupa las diferentes conductas sexuales infantiles en
nueve categorías
• Límites personales
• Exhibicionismo
• conducta de rol sexual
• Autoestimulación
• Ansiedad sexual
• Interés sexual
• Intrusismo sexual
• Conocimiento sexual
• Conducta voyeurística
Friedrich, W. et al. (1991). Normative sexual behavior in children. Pediatrics 88(3), 456–464
25. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Conductas de autoestimulación: masturbación
infantil.
Martinson (1994) refiere que el
descubrimiento de esta
práctica se da mediante la
exploración curiosa de sus
genitales, .
Kinsey (1953) señalan que lo
hacen a partir de sus amigos,
aprendiendo a masturbarse,
incluso, observando y siguiendo
sus indicaciones.
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención de abusos sexuales a menores. Guía para padres y educadores. Salamanca : Amarú
López (2002)
Martinson, F. M. (1994a). Children and Sex, Part II: Childhood Sexuality. En V.L. Bullough y B. Bullough (Eds.). Human Sexuality:
An encyclopedia. New York: Garland Publishing. [consulta en línea] Disponible:
http://www.ipce.info/booksreborn/martinson/articles/1994_children.html [consultado 2 octubre 2011]
26. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Conductas de exploración sexual:
Los niños sienten una gran necesidad de
explorar, conocer e interpretar lo que observan a
su alrededor, incluidos los temas sexuales.
Los niños sienten curiosidad por
su cuerpo y el de los demás, ya
que necesitan conocer y
comprender su propia identidad y
los aspectos que les diferencian
del otro sexo y de los adultos.
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención de abusos sexuales a menores. Guía para padres y educadores. Salamanca : Amarú
27. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Observación de las conductas sexuales de otros:
Las conductas sexuales que tienen la
posibilidad de observar los niños son
numerosas, y se exponen en diversos
contextos: los animales, la familia, el entorno y
los medios de comunicación.
El 85% de menores según López
y colaboradoes había hecho
alguna pregunta sobre
sexualidad..
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención de abusos sexuales a menores. Guía para padres y educadores. Salamanca : Amarú
28. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Juegos sexuales e imitación de conductas
sexuales:
La mayoría de los juegos sexuales reproducen
conductas concretas o secuencias amplias
propias de los diferentes roles o modelos (el
hombre y la mujer, las parejas, profesiones que
También es común encontrar
implican actividades de exploración, etc.).
juegos que imitan conductas
observadas en adultos (besos,
caricias, acostarse, casarse…) o
incluso aspectos actitudinales
(gestos, emociones, palabras,
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención de abusos sexuales a menores. Guía para padres y educadores. Salamanca : Amarú
29. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Conductas similares a la actividad sexual
“adulta”: Algunas conductas consideradas de la
actividad sexual “adulta”, como imitar o intentar tener
relaciones coitales, tratar de insertar objetos en el propio
cuerpo o el de otro, tener contacto oral-genital con otros
niños, hacer peticiones a otros para embarcarse en
actos sexuales y masturbarse compulsivamente, han
sido observadas con muy baja frecuencia en un 1-2% de
los casos. (1998) y Larsson (2002)
Friedrich
asociadas con posibles
experiencias previas de abuso
sexual o con la observación de la
actividad sexual adulta por parte
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención de abusos sexuales a menores. Guía para padres y educadores. Salamanca : Amarú
30. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Conocimientos sexuales:
El nivel de conocimientos
sexuales de los niños se ve
claramente afectado por la
cantidad de información que
éstos reciben del medio familiar y
escolar, ya que los padres y
educadores con frecuencia se
muestran dispuestos a informar
sobre reproducción y género, e
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención dela hora ade abordar y educadores. Salamanca : Amarú
incómodos a abusos sexuales menores. Guía para padres
31. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Fantasías sexuales:
Este tipo de fantasías suelen permanecer
ocultas a la mirada de los adultos
Reynolds (2003) manifiesta que
la edad de inicio de las primeras
fantasías sexuales se
correlacionó con la edad en que
se comenzó a experimentar
atracción y excitación sexual.
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención de abusos sexuales a menores. Guía para padres y educadores. Salamanca : Amarú
32. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Motivaciones:
• En primer lugar, satisfacer
su curiosidad
(74,3%)
• Divertirse o jugar (70,7%)
• En menor medida, imitar a otros (30%).
La búsqueda del placer
sexual 55.6% de los chicos,
frente 29,5% de las chicas
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención de abusos sexuales a menores. Guía para padres y educadores. Salamanca : Amarú
López (2002).
33. Tipos de juego sexual en la
infancia
• Afectos interpersonales:
Las preferencias, la atracción, la seducción, el
enamoramiento, etc., también son contenidos
que pueden estar presentes en la sexualidad
infantil en menor o mayor grado.
En el estudio llevado a cabo
por López (2002), un 30% de
los chicos y un 70% de las
chicas recordaron haberse
enamorado antes de los 11
años.
López Sánchez, Félix. (2002).Prevención de abusos sexuales a menores. Guía para padres y educadores. Salamanca : Amarú
34. LO QUE DEBERÍA
HACER CUANDO SU HIJO
LE PREGUNTE
Abiertos y atentos a las preguntas
No añadir más información a la que ellos solicitan
Nombrarse los órganos del cuerpo con sus nombres
de verdad
Responder con la técnica: Que piensas tú?
Asegurarse que es realmente lo que quiere saber?
No dar más información de la necesaria
http://www.pediatraldia.cl/sexualidad_antes_pubertad.htm
35. LO QUE NO DEBERÍA
HACER CUANDO SU HIJO
LE PREGUNTE
No se escandalice
No se burle de sus comentarios
No muestre disgusto
No le ignore
http://www.pediatraldia.cl/sexualidad_antes_pubertad.htm
37. Educar sobre la verdad del
sexo y su función y no
solamente en sus
consecuencias negativas
es la única forma de tener
adultos libres y sanos.
Notas do Editor
Bianco (2009). Esta etapa se da solo en la infancia, ya que al ir entrando en la etapa de adolescencia y posterior adultez el individuo es capaz de generar conductas discriminadas según su proceso de aprendizaje.
Siguiendo con lo expuesto Moles (2007) refiere que se debe tener en cuenta su desarrollo y modificación a medida que avanza en su proceso de desarrollo intelectual en interacción con la educación impartida por el medio en que se desenvuelve, es así que las primeras manifestaciones intelectuales del niño/niña son sensoriomotores, es decir fisiológicas.
Falica: interes erotico revierte en los genitales el niño se masturba y experimenta placcer erotico, fantasea con poseer a su madre lo que da el complejo de edipo, siente ccelos del padreal que ve como un rival en busca del cariño de la madre pero teme a su progenitor y le asusta la idea de castigo a traves del corte de su pene. Ya q este es organo de placer y de culpa. Sabe q las niñas no tienen pene por lo cual se lo puede privar. El problema se resuelve de forma creativa, por compormiso de renunciar a poseer a la madre y a la hostilidad hacia el padre, en vez de esto se identifica con el para parecerse a el lo mas posible y satisfacer sus apetencias sexuales. En las mujeres el complejo de electra. Mata a su madre por no tener pene, se siente defraudada, experimenta la envidia del pene q moviliza lel aaan de poseer a su padre y ocupar el puesto de la mdra la envidia persiste durante toda la vida. La resolución de este conflicto se logra antes de los 6 años 6 pugna por intereses no sexuales concernientes a objetios intelecutales y sociales.
Un niño que carezca de intimidad paterna y de afecta puede experimentar más relacion afectiva estrecha con otras personas, o en un terreno más especulativo para sentirse a gusto Durante la gestación, se dan las primeras sensaciones de afectividad. Los padres que han manejado un embarazo óptimo, con cariño y sin preocupaciones, crean una sensación de carga de energía positiva hacia ese bebé, quien recibe estos estímulos sensoriales le ayudará a organizar su sistema nervioso. Podemos afirmar que cuando esos niños nacen, están con mucha energía de vida. con su sexualidad.
Desde el nacimiento hasta los dos años de edad: al nacer los mecanismos físicos de la respuesta sexual están presentes, las sensaciones corporales y sensoriales que el niño experimenta están dadas desde el contacto físico por el tacto, ya sea con la madre, en la succión, las caricias, cambio de pañal, frotamiento de éstos contra otras personas u objetos, jugar con sus genitales al estar desnudo o durante el baño, la respuesta de placer sexual es tal que, incluso, puede llegar a manifestarse a partir del primer año de vida en forma de orgasmo. Esta afirmación se apoya en la observación de una serie de cambios fisiológicos graduales, similares a la respuesta de orgasmo del adulto; tras la autoestimulación de los genitales del niño/a: erección y vasocongestión, movimientos rítmicos de la pelvis, cambio en el ritmo cardíaco y respiratorios, cambios en la coloración de la piel, pérdida de atención al entorno, contracciones pélvicas y relajación posterior. Friedrich (1998). Lewis (1988) Sanchez (2008) Kinsey, (1953). El primer contacto que se da, es el de la madre con el bebé a través del afecto que se canaliza en los brazos y manos de la madre. Esa sensación de placer hace que el niño se vaya sintiendo a gusto normando su sexualidad. Otro punto de contacto entre madre y bebé, se da en la fase de lactancia, ya que el succionar, le provoca una sensación de placer, debido a la carga libidinal que se da a través del pezón; generando en el bebé una sensación de agrado, de placer, de energía, permitiendo que esa líbido sexual se sienta sastisfecha. En esta etapa de la lactancia, se recomienda a la madre que cuando esté dando de lactar a su bebé debe estar con una actitud corporal de acercamiento, dejando otras cosas de lado, como distraerse con otras personas, ver TV, escuchar radio, etc. Debe tratar que momentos antes de lactar, se encuentre relajada, en un estado de ánimo sereno, en paz, de esta forma la madre colaborará con la calidad de la leche permitiendo además realizar un acunamiento perfecto aunado al acariciamiento de la cabecita a los pies. Debemos de saber que cuando nuestro bebé está succionando, está recibiendo: alimento, tranquilidad, inmunidad, relajamiento y sobre todo afectividad; en pocas palabras, recibe el placer de vivir. Es por eso que aquel niño que haya tenido este tipo de lactancia, es un niño muy vital y seguro de si mismo. En cambio, si vemos a un niño que siempre anda lloroso e intranquilo y que la expresión de su carita no refleje tranquilidad descartando la parte mèdica; hay que considerar que podría ser que no esté recibiendo un acunamiento
esarrollo del apego en la primera infancia Dentro de este periodo y dependiendo del autor se establecen tres o cuatro etapas. Félix López establece tres fases o estadios. Fase 1. Orientación hacía las personas sin reconocimiento de las figuras que le cuidan (0-3meses) Desde los primeros momentos de vida las personas ocupan un lugar especial entre los elementos que rodean al bebé. Durante estos tres primeros meses asistimos a una progresiva orientación de las conductas y señales emocionales hacía los seres humanos. Aunque las habilidades para la interacción social se desarrollan lentamente, conforme aumentan los periodos de alerta aumentan las oportunidades de interacción. Algunos de estos progresos en la interacción social son: El llanto : comienza como algo espontáneo, pero desde la segunda semana se relaciona con factores externos, la voz humana se revela entre los estímulos eficaces en su detención y el poder del rostro como inhibidor del llanto comienza a destacar finalizado el primer mes. El amamantamiento : se ha constatado como aparece una alternancia de roles, expresada en la actividad manipulativa materna durante las pausas y la reactivación de la succión por parte del niño cuando cesaba la actividad materna. Sin embargo, no se puede hablar todavía de apego porque los niños no reconocen a las figuras familiares, no las distinguen de los desconocidos. Es cierto que pueden identificar muy precozmente la voz y olor de la persona que les cuida pero esto no quiere decir que la identifique y discrimine visualmente de manera global antes de los tres o cuatro meses. De hecho si se les ofrece cuidados similares a los a los de la madre por otras personas los aceptaran como si se tratase de la madre. Fase 2. Interacción privilegiada con las figuras familiares sin rechazar a los extraños (3-7 meses) El desarrollo de la percepción visual e intermodal permite al bebé integrar percepciones de la cara, el olor, la voz y otras características de la persona que le cuida, lo cual trae consigo el reconocimiento de la figura de apego, aunque aún no rechaza a los desconocidos. Entre las conductas que nos permiten afirmar el reconocimiento de la figura materna se encuentran: Sonrisa diferencial : el niño sonríe más ampliamente y con mayor frecuencia a la madre que a los demás. Vocalización diferencial : vocaliza con mayor frecuencia en la interacción con la madre que con los desconocidos. Llanto diferencial : llorar cuando la madre sale de su campo perceptivo y no cuando le abandona otra persona. Interrupción diferencial del llanto : el llanto cesa cuando la figura materna lo levanta en brazos. El comportamiento diferencial infantil aumenta sensiblemente los cuidados de los padres hacía el bebé, que le consideran ya como un interlocutor que responde al cariño y la atención. Este cambio da lugar a un especial tipo de relación: la interacción cara a cara. Tanto el niño como los cuidadores disfrutan de la experiencia de estar coordinados. Los bebés responden mirando, sonriendo y vocalizando a las iniciativas de los cuidadores y la sensibilidad de éstos a los estados y señales del niño les permite adaptar el ritmo de su comportamiento a la disponibilidad del bebé para mantener el intercambio. A lo largo de estos meses los cuidadores son cada vez más capaces de interpretar las señales del niño y aprenden a ajustar sus respuestas para captar y mantener la atención del niño, y, conforme ambos participan de estas sincronías, la relación es cada vez más satisfactoria. Estas interacciones son uno de los elementos que más contribuyen a la formación del apego recíproco. Hasta ahora hemos hablado de las interacciones privilegiadas con las figuras familiares, pero todavía no se ha establecido el vínculo afectivo. Si la madre no está, el niño no la echa de menos, no se angustia por la separación. No se puede hablar de verdadero apego hacía una persona específica.
Se forma el lazo afectivo (apego) no intercambiable, hacía la madre o quien haga las veces de ésta. Uno de los criterios mas aceptados a la hora de afirmar el establecimiento del apego es la ansiedad de separación. La ausencia de la figura de apego genera inquietud: el niño protesta, llora, intenta seguirla, manifiesta agitación motriz, etc., y cuando vuelve se aferra a ella. Establecido el lazo afectivo, el comportamiento de apego se organiza y se hace más flexible. Las conductas de apego, antes aisladas, se integran en un plan de conducta. Cuando el umbral de distancia se excede o el niño percibe señales de peligro el sistema se activa. Se pone en marcha diferentes recursos de comportamiento (llanto) para restablecer la proximidad. La respuesta no es fija ya que el plan es flexible en los medios. Las figuras de apego se convierten en una base de seguridad para el niño, a partir de ella el niño inicia una exploración de la realidad. Cuando los niños están en lugar desconocido y pierden el contacto con la figura de apego, paralizan la exploración e inician una búsqueda ansiosa, llamadas, protestas, etc. Su seguridad y atrevimiento se transforman en inseguridad y paralización. Poco después de establecerse el apego se modifica también el comportamiento frente a las personas desconocidas, observándose reacciones de inquietud, rechazo, evitación o temor intenso. Se ha constatado que esta reacción aumenta en intensidad a finales del primer año para comenzar a declinar a partir de los 18 meses.
El apego durante la infancia, el periodo escolar A partir del primer año de vida el niño va conquistando cierto grado de independencia gracia a las nuevas capacidades de locomoción. Este proceso es conflictivo porque exige readaptaciones continuas con ganancias y pérdidas de ciertos privilegios. A partir del segundo año de vida la experiencia en la relación con las figuras de apego hace que el niño pueda predecir mejor sus demandas. Es decir puede funcionar con un plan de acción más flexible y eficaz. En los momentos de separación se activan conductas de apego, reaccionando de forma similar a como lo hacía en los primeros años de vida. Depende en gran medida de la situación y las circunstancias en que se produce la separación. Se pueden destacar dos fases en estas separaciones: Fase de protesta: comienzan cuando se dan cuenta de que se quedan solos. Se acaba a las pocas horas, aunque puede durar toda una semana. El niño intenta recuperar las figuras de apego con conductas de búsqueda. También es algo habitual el rechazo a los cuidados y atenciones que le ofrecen los cuidadores. Si durante esta fase se produce un reencuentro rechazaran más fuertemente a los extraños y se mostraran más ansiosos ante posibles nuevas separaciones. Fase de ambivalencia: si permanece separado de las figuras de apego durante un tiempo más largo (8 días) suele pasar a una fase donde pierde el vigor de su protesta y aparece un comportamiento ambivalente ante los cuidadores. Los signos de ansiedad son más evidentes, sollozos, angustia, etc. El niño parece haber perdido la esperanza de reencontrar las figuras de apego pero sigue deprimido. Comienza a aceptar las ayudas que le ofrecen. Cuando durante este periodo reencuentra la figura de apego, la recibirá sin interés o incluso con hostilidad. Esta reacción tardará en vencerse dependiendo del tiempo de separación y de cuanto de injustificada la perciba el niño. La separación fundamental para todos los niños es la incorporación al centro de educación.
Desde los tres a cinco años de edad: en la segunda etapa del desarrollo despiertan una gran curiosidad , exploran su cuerpo, para esto utilizan la mano y algunas niñas comienzan a frotarse los genitales con una manta o peluche o, con menor frecuencia, a insertar un dedo u objeto en la vagina Kinsey (1953). En esta etapa, además, no es extraño observar casos de masturbación en público (p.e. en la escuela), ya que el menor no ha asimilado todavía el concepto de privacidad sexual y su valor como norma social. En todo caso como apunta el estudio de López (2002), cerca de un 70% de los menores no descubre la autoestimulación o, por alguna razón, no la practican. A medida que avanza en esta etapa el niño va asumiendo por la sociedad occidental, que tiene que llevarla a cabo en la intimidad. Así mismo empiezan a sentir mucha curiosidad por las diferencias corporales, anatómicas, del cuerpo de otras personas, tanto adultos, como iguales de más edad o distinto sexo. El hecho de que los genitales suelan permanecer cubiertos, además, alimenta dicha curiosidad incitando a muchos niños a mirar por debajo de la ropa de sus compañeros o de las muñecas; se interrogan sobre la reproducción, juegan a médicos y observan las relaciones sexuales entre adultos, en la propia familia, en la TV, entre animales, etc. Sanchez (2008), Fernandez (2004)
Despiertan una gran curiosidad Exploran su cuerpo Empiezan a sentir mucha curiosidad por las diferencias corporales, anatómicas, del cuerpo de otras personas, tanto adultos, como iguales de más edad o distinto sexo. El hecho de que los genitales suelan permanecer cubiertos, además, alimenta dicha curiosidad incitando a muchos niños a mirar por debajo de la ropa de sus compañeros o de las muñecas Se interrogan sobre la reproducción Juegan a médicos Observan las relaciones sexuales entre adultos, en la propia familia, en la TV, entre animales, etc. Sanchez (2008), Fernandez (2004)
Despiertan una gran curiosidad Exploran su cuerpo Empiezan a sentir mucha curiosidad por las diferencias corporales, anatómicas, del cuerpo de otras personas, tanto adultos, como iguales de más edad o distinto sexo. El hecho de que los genitales suelan permanecer cubiertos, además, alimenta dicha curiosidad incitando a muchos niños a mirar por debajo de la ropa de sus compañeros o de las muñecas Se interrogan sobre la reproducción Juegan a médicos Observan las relaciones sexuales entre adultos, en la propia familia, en la TV, entre animales, etc. Sanchez (2008), Fernandez (2004) - La curiosidad que siente en esta etapa se hace extensiva también a su sexualidad. De ahí que podamos hablar de curiosidad informativa hacia el mundo que le rodea, curiosidad por lo físico y lo emocional, y también en el plano sexual. El niño explora su propio cuerpo y las sensaciones que va percibiendo. Aquí se corre el riesgo de que la actitud de los adultos no sea colaboradora. Deben evitarse los gestos de desaprobación, los silencios o la incomodidad, porque se convierten en un cúmulo de mensajes para los niños y las niñas que influyen de manera notable en la percepción que tendrán sobre su cuerpo. Es evidente que el niño o la niña van a sentir curiosidad por el otro u otra. Querrán investigar en las diferencias físicas; aparecen conductas que se pueden denominar como voyeuristas (mirar) y exhibicionistas (mostrarse). Comienzan los juegos en los que los/as niños/as imitan conductas de marcado carácter sexual, que ven en su entorno, en la televisión etc. Incluso en los últimos años de esta etapa co mienzan las actividades autoexploratorias y autoestimulatorias que pueden generar angustia en los mayores y provocar reacciones reprobatorias hacia el menor si no se contemplan como naturales y no se juzgan ni se intentan corregir. En esta etapa tiene una especial importancia el proceso de identificación e imitación de modelos de conducta sexual, que comienzan a definir las actitudes ante la sexualidad y los modos de relacionarse en los planos erótico y afectivo.
Desde los seis a ocho años de edad: a partir de esta edad empiezan a manifestar una mayor curiosidad por el origen de los niños, embarazo y el nacimiento, algunos niños incluso comienzan a tomar conciencia del vínculo existente entre la reproducción y el placer sexual; si había masturbación la continúan, aunque muchos no la descubren aun. Participan en juegos de imitación que facilita la exploración sexual como jugar a ser médicos que implican desvestirse o la exploración sexual tocamientos, besos, frotamientos, ocasionalmente inserción de objetos en recto o vagina e, incluso, intentos de actos sexuales tipo coito o sexo oral en forma de actividades consentidas entre niños de similar edad y el mismo o distinto sexo, frecuentemente, amigos/as o hermanos/as. También se pueden observar actividades exhibicionistas y voyeuristas, imitación de la conducta sexual de adultos, etc. Estas conductas, en la mayoría de los casos, constituyen una muestra de curiosidad, puesto que permiten explorar su cuerpo propio y el de los demás. Brecher (1973). Fernadez (2004) demuestran que la actividad sexual se incrementa en esta etapa, el repertorio sexual se amplía y el aprendizaje de la sexualidad como algo sano es fundamental para una buena evolución sexual.
De los nueve a doce años: Antes de entrar en la pubertad, se observa en este período que se empieza a usar un lenguaje sexual y explorar fantasías sexuales o románticas producto de fantasías o recuerdos referidos a distintas conductas sexuales. En este período de fantasías y enamoramientos, el niño se torna más pudoroso, empieza a tener más curiosidad por los cuerpos desarrollados, para Reynolds (2003) el tener acceso a material pornográfico en el 80% de los chicos y casi el 50% de las chicas hace que esta conducta puede considerarse bastante común, incluso entre las niñas. Muchos chicos y chicas, incluso, comienzan a masturbarse por primera vez, ya Ramsey (1943) describía que el 73% de los varones se habían masturbado antes de los 12 años y según Rutter (1971) entre el 25-30% de los varones de 13 años habían tenido contactos con alguien del mismo sexo. Algunos pueden tener la primera experiencia de coito, ya que en su transcurso, los menores suelen involucrarse en mayor medida en otro tipo de actividades como besos, abrazos, tocamientos de pechos y genitales, etc. Reynolds (2003). Lewis (1988) Fernandez 2004 Friedrich (1998). La autora enfatiza que desde el nacimiento, los primeros años de vida están dados por respuestas que utilizan los sentidos para explorar su cuerpo e ir descubriendo las zonas de placer que este les brinda, es así que prima las respuestas sensoriomotoras siguiendo los lineamientos fisiológicos de que frente a un estímulo que sobrepase el umbral se producirá una respuesta La autora toma en cuenta la variabilidad, y por tanto de que los diferentes tipos de expresión a nivel sexual está dada por la condición innata del individuo a variar, y comportarse según todas las variables que influyan tanto fuera como dentro de él, pero existe un hecho y es que cada comportamiento es más frecuente en determinados rangos de edad, y estas conductas o juego por parte de los niños pudieran favorecer un adecuado desarrollo y sociabilización. En este periodo el niño y la niña son más autónomos, se manejan mejor en el mundo real y conocen su identidad sexual. Por otra parte, la escuela adquiere una mayor importancia en su desarrollo, aunque de poco sirve en esta disciplina si el mundo académico continúa sin aportar ningún tipo de educación sexual reglada. Es un periodo en el que las prohibiciones en todo lo concerniente a lo corporal y a lo sexual se hacen mucho más explícitas. De ahí que las conductas sexuales se hagan menos espontáneas y abiertas, sean más sutiles y ocultas, y logren pasar desapercibidas a ojos de los adultos. De manera errónea, estas conductas pueden llevar a considerar esta etapa como de desinterés sexual o periodo de latencia. Sin embargo, persisten los juegos sexuales, que, aunque adquieren unas motivaciones añadidas, parten de la curiosidad como elemento básico. El niño y la niña se afirman en lo que conocen por observación de la conducta de los adultos; son conscientes de las sensaciones físicas y emocionales asociad as al contacto y la cercanía física; experimentan la excitación sexual y la relación afectivo-sexual con su grupo de iguales. Por ello, las actitudes de reprobación o castigo por su curiosidad pueden tener una influencia negativa en el desarrollo posterior de la esfera psico-sexual de la persona.
Adoptando también un punto de vista teórico Friedrich (1991) agrupa las diferentes conductas sexuales infantiles en nueve categorías y las recoge en su cuestionario CSBI (Chid Sexual Behavior Inventory), estas categorías conductuales, se describen a continuación con alguna descripción para el esclarecimiento de las mismas Límites personales (aproximarse demasiado o frotarse contra otras personas, tocar los pechos de la madre); exhibicionismo (exponer deliberadamente partes del cuerpo a otros niños o adultos); conducta de rol sexual; autoestimulación; ansiedad sexual (excesiva modestia o intranquilidad en los contactos afectivos con los padres u otros); interés sexual (curiosidad por temas sexuales); intrusismo sexual (conducta sexual coercitiva con otros menores), conocimiento sexual y finalmente, conducta voyeurística (intentos de visualizar a otras personas desnudas).
Por otro lado, Campos (2008), Martinson (1994ª) señalan que si bien muchos padres y pediatras parecen creer que estas conductas son más “genitales” que “sexuales”, otras investigaciones fisiológicas y conductuales han cuestionado esta interpretación al observar en los niños, durante la realización de estas conductas, patrones de activación o excitación que sugieren una motivación sexual o al menos, de reducción de tensión.
Por ello, hay que estar abiertos y atentos a las preguntas de los hijos, y, en la medida de lo posible, no añadir más información a la que ellos solicitan, de acuerdo con su edad. A los niños de 2 a 4 años, deben nombrárseles los órganos del cuerpo con sus nombres de verdad, a fin de evitar confusiones posteriores. Aunque ocasionalmente pueden utilizarse motes o sobrenombres, éstos no deben reemplazar habitualmente a los verdaderos. Entre los 4 y los 6 años, hay que explicarles los fenómenos de la reproducción con sinceridad, sabiendo que, lo que ahora no comprendan, lo volverán a preguntar más adelante. Para hablar con un niño de temas relacionados con la sexualidad, es mejor hacerlo a solas, sin otros hermanos o familiares que puedan coartar su naturalidad, en un clima de intimidad, pero no de secreto. * A sus preguntas e inquietudes no se debe contestar con prisas o en situaciones en las que se dispone de poco tiempo; es más conveniente hacerlo tranquilamente en días festivos o de vacaciones. * A veces, antes de responder a sus dudas, se le puede preguntar qué piensa él de eso o cómo lo ve De este modo, se puede tener una idea aproximada del grado de conocimiento que tiene el niño sobre la materia. * El niño se siente más cómodo preguntando si encuentra en padres y educadores una actitud abierta y franca. Sólo así se atreverá a plantear sus dudas. * Estas conversaciones no hay que forzarlas Los niños preguntan cuando sienten la necesidad de hacerlo, no porque los adultos se lo impongan.
No se escandalice Su hijo tiene todo el derecho a preguntar sobre lo que ignora o no entiende. Si usted se escandaliza de sus preguntas, él puede creer que está haciendo algo que no corresponde a su edad, y que los niños no deben intentar indagar sobre este tema En realidad, el susto que demuestran los padres aterroriza especialmente a su hijo. * No se burle de sus comentarios Dejar a su hilo en ridículo delante de una visita, o reírse de sus observaciones o comentarios sobre el sexo, ocasiona en la autoestima del niño una humillante herida, que puede tener efectos perniciosos más adelante no se atreverá a actuar con naturalidad, a ser él mismo, por temor a decepcionarle o a causar su hilaridad. * No muestre disgusto Si, cuando su hilo le pregunta o hace algún comentario en relación al sexo, usted se enfada o le riñe por lo que ha dicho, él puede creer que está haciendo algo malo, algo que está prohibido y sobre lo que los niños no deberían hablar, y que, por lo tanto, merece un castigo nada más lejos de la realidad. Su sano e inteligente deseo de saber puede verse irremediablemente mutilado, y esto puede afectar otras áreas de su aprendizaje * No le ignore La confianza de un niño se consigue día a día, pero se puede perder en un instante. Si su hijo no se siente respetado, si intuye que nadie le hace caso y que sus padres prefieren ignorar sus preguntas, se creerá menospreciado y tenderá a rehuir la comunicación con los adultos Probablemente, en la siguiente ocasión preferirá no preguntarle.