María del Carmen Galván se jubiló después de 43 años como empleada judicial en los tribunales de Villa Mercedes. Ella comenzó su carrera en el Juzgado de Instrucción y luego pasó 13 años en el Juzgado de Familia. Galván extrañará a sus compañeros, especialmente a una compañera a quien le transmitió sus conocimientos. Ella enfatiza la importancia de llevarse bien con los compañeros y aprender constantemente en el trabajo judicial.
1. INFORME DE PRENSA
“SIEMPRE ESTUVE ORGULLOSA DE SER EMPLEADA JUDICIAL”
Así lo definió María del Carmen Galván en su último día de trabajo en los
tribunales mercedinos
El pasado viernes 27 de abril, la Sra. María del Carmen Galván de Nuñez,
-empleada judicial de la ciudad de Villa Mercedes- desempeñó su último día
laboral, a partir de acogerse al beneficio jubilatorio.
En palabra de muchos, Camucha -como la llaman sus compañeros-, es una
persona agradable y querida por todos, que supo ganarse el respeto de sus pares
y superiores. Después de 43 años de servicio como empleada judicial de la
Segunda Circunscripción Judicial, relató al Centro de Información Judicial, sus
años en los tribunales y su opinión sobre el agente judicial en la actualidad.
¿En qué juzgado comenzó su carrera judicial?
Comencé a desempeñar mis funciones en el Juzgado de Instrucción, antes
denominado Juzgado del Crimen, y luego en el Juzgado de Familia. En esta
última dependencia permanecí durante casi 13 años.
¿Qué cosas piensa que va a extrañar?
Principalmente, el cariño de mis compañeros, particularmente a una de ellas que
quien aprecio un montón, y a la que he tratado de volcarle todos mis
conocimientos, ya que ella será quien me reemplazará. Nunca tuve problemas
con nadie. Han sido muy buenos conmigo, los voy a extrañar a todos.
¿Qué condiciones considera Ud. debe tener un empleado judicial?
Ahora no es lo mismo que antes. Por empezar, teníamos que usar la máquina de
escribir, donde tenías que borrar si te equivocabas y empezar de nuevo. Lo
mejor es tener muchas ganas de aprender, leer mucho y hacerse compañero. No
digo una amistad, sino que a partir de compartir muchas horas en el trabajo, lo
2. mejor es llevarse bien. En lo particular, me llevo amistades de casi 30 años,
personas que adoro un montón. Me relacioné con Jueces y Secretarios de los
cuales he aprendido mucho. Según mi experiencia, lo más importante en un
Juzgado es llevarse bien con los compañeros.
Muchos compañeros han pasado en estos años de trabajo, ¿A quién
recuerda con especial estima?
Hoy vinieron a saludarme mis amigas más cómplices: Camucha, Kity y Miriam.
Me sorprendieron, no las esperaba. Con ellas ingresé al Poder Judicial. Hemos
compartido muchas cosas juntas: casamientos, hijos y cumpleaños. A mí me han
dado mucho amor en Tribunales. Yo siempre he estado muy contenta y orgullosa
de ser empleada judicial.
Informe de Prensa Nº 466 V. Mercedes, 2 de mayo de 2012