El documento analiza el potencial del turismo en la Reserva de la Biosfera. Señala que la reserva tiene valores culturales y ambientales únicos pero que el desarrollo turístico es aún incipiente. Propone diversificar la economía local a través del turismo de una manera sostenible que beneficie a la población y conserve los recursos naturales y culturales. También recomienda mejorar la interpretación del patrimonio, ampliar la oferta básica de manera planificada y promocionar de forma coordinada los recursos y productos turístic
1. La Reserva de la Biosfera desde
el punto de vista turístico
Julio Grande
2. La Reserva de la Biosfera
La Reserva implica a un territorio que dispone de una
serie de valores culturales y ambientales que muestran
un equilibrio entre el hombre y el entorno.
Un equilibrio que ha permitido mantener un desarrollo
sostenible en el territorio hasta nuestros días.
¿Estos valores son susceptibles de convertirse en
atractivo turístico y, por tanto, generar actividad
económica en este sector?
3. ¿Por qué turismo?
Porque necesitamos diversificar nuestra actividad
económica.
Porque el turismo puede operar como dinamizador
social.
Porque puede contribuir a fijar población.
Porque creemos que tenemos recursos suficientes para
interesar a terceros.
Porque el turismo puede reforzar la identidad local.
Porque puede contribuir a la conservación de muchos
elementos
4. ¿Qué necesitamos del turismo?
El territorio tienen una serie de limitaciones, la más
importante la baja densidad de población que dificulta
la puesta en marcha de grandes o medianos proyectos.
Por otro lado los resultados económicos que el turismo
puede aportar no hace falta que sean demasiados,
tienen que estar en consonancia con la realidad
territorial.
Es necesario establecer un equilibrio entre rentabilidad
suficiente, capacidad de atractivo, capacidad de
inversión y sontenibilidad ambiental y social.
5. Tenemos claro que…
El desarrollo turístico del territorio es
muy incipiente.
CASI TODO ESTA POR HACER
6. Valorizar nuestros recursos
El territorio tiene muchos y variados elementos de
valor patrimonial. Esto no quiere decir en primera
instancia que disponga de muchos recursos turísticos.
Para que podamos considerar que existen recursos
turísticos hacen falta dos cosas:
• Que le interesen al mercado turístico
• Que los elementos patrimoniales estén puestos en
valor de una manera suficiente
7. Valorizar nuestros recursos
Así el inventario de recursos se convierte en nuestra
estrategia en una pieza fundamental. Es un proceso
permanentemente abierto considerando siempre:
• La aparición de nuevos elementos
• La inversión o trabajos de puesta en valor de
determinados elementos, lo que cambia sustancialmente
su valoración
• Los nuevos cambios de la demanda, que cambian la
potencialidad de los recursos
• Las nuevas estrategias de producción y ensamblaje
turístico que permite nuevas conceptualizaciones sobre
los recursos
9. Valorizar nuestros recursos
Una gran parte de nuestros recursos no son fácilmente asimilables por el
público. Por eso es necesario prestar una especial atención a la interpretación
del patrimonio.
• Para el turista el patrimonio sólo puede no ser suficiente, necesita de medios que sean capaces de
potenciar una comunicación entre ambos y que genere en el visitante una experiencia satisfactoria.
• El turismo no es una actividad educativa, sino lúdica. Nuestro objetivo no es enseñar al visitante, es
hacerle pasar un buen momento, una buena experiencia. El objetivo educativo es, en nuestra opinión
irrenunciable pero secundario.
• Esto no implica que la comunicación, la interpretación que se realice, deba ser trivial, poco rigurosa o
excesivamente ligera. Hay que atender dos aspectos: el rigor es un elemento imprescindible, y cada
visitante necesita un determinado nivel de interpretación en función a sus expectativas, necesidades o
experiencias y/o conocimientos previos.
• Debemos buscar un punto de enganche entre la realidad visitada y a la realidad cotidiana del visitante.
Deberemos buscar el valor universal de lo singular. Sin esto corremos el riesgo de convertir al visitante
en un mero observador pasivo.
• El turista en un consumidor de historias, no de información. Dar mucha información no es
necesariamente el mejor camino. Ahora bien, sin información no puede existir una adecuada
interpretación.
• La interpretación debe contribuir a la mejora de la conservación del patrimonio y a reforzar los valores
de identidad y autoestima de las sociedades receptoras con una estrategia compartida en la
interpretación facilite también a las poblaciones locales el descubrimiento de su propia identidad.
10. Valorizar nuestros recursos
Decálogo de turismo en nuestro territorio.
1. El patrimonio tiene un valor de existencia y un valor de uso. El turismo es lo segundo; centremos
nuestra atención preferentemente en lo primero
2. La autenticidad es un factor fundamental. Tratemos de conservar los fines originales de los espacios,
de los monumentos y elementos patrimoniales y su vinculación con la población local.
3. Hagamos primero feliz a la población local, priorizando sus necesidades y diseñando a su medida.
4. Apostemos por soluciones globales en la gestión de los espacio patrimoniales y evitemos criterios y
estrategias fachadistas o monumentalistas.
5. No se disfruta lo que no se quiere; no se quiere (ni respeta) lo que no se entiende. Pongamos al
patrimonio en diálogo con el visitante
6. Hay que organizar sistemas para que los beneficios del turismos reviertan en la conservación del
patrimonio natural y cultural
7. Los beneficios del turismo deben alcanzar a la población local. Debe ser una oportunidad para amplias
capas sociales y no para un pequeño número de beneficiarios
8. Pongamos a hablar a todos los responsables: administración turística, ambiental, cultural, urbanística,
local y a los propios afectados (participación)
9. Organizar adecuadamente las infraestructuras y los servicios turísticos en el territorio,
compatibilizando su instalación con las necesidades de al población local.
10. Nuestro compromiso es con el desarrollo sostenible, y esto no es un tópico.
11. La oferta básica
No puede existir actividad turística sin oferta
básica.
En la Reserva existe una oferta limitada y
distribuida de manera irregular.
Hay que plantear una estrategia que garantice
unos números de actividad suficientes y, a
continuación, tratar de plantear un incremento
de la oferta con una distribución racional
respecto a los productos.
12. Del recurso al producto
Hay que trabajar un catálogo de productos
turísticos reales.
Existe una excesiva tendencia a un
funcionamiento del turismo por eventos.
Estos eventos son de gran interés pero no
pueden ser el único soporte de la actividad
en el territorio.
Hacen falta productos más estructurados
14. Los planes de competitividad
turística
Los planes de competitividad tienen como
objetivo desarrollar destinos emergentes para
que puedan incorporarse con éxito a la actividad
turística. Son pues planes de impulso.
Se desarrollan con la colaboración de las tres
administraciones: nacional, regional y local.
En la Reservase están desarrollando dos: paisaje
humanizado y senda termal. No ocupan la
totalidad del territorio.
15. Los planes de competitividad
turística
La primera estrategia planteada en los planes ha
sido la trabajar con una marca única: Reserva de
la Biosfera. De esta manera se ha buscado
reforzar el elemento de marca más importante
del territorio.
De esta manera los dos planes han utilizado
como imagen el logo de la Reserva de la Biosfera
y se ha trabajado conjuntamente con la misma
toda la estrategia de comunicación.
16. Los planes de competitividad
turística
Están centrando su trabajo en:
Activar
nuevos
recursos
• Minas de Jubera
• Cicloturismo
• Trujal
• Astroturismo
• Naturaleza
Impulsar
productos
• Termalismo
• Arqueología
• Dinosaurios
Promoción
• Web
• Redes sociales
• Material
impreso
• Presencia en
ferias
• Eventos
Coordinación
• Intentar que
exista un trabajo
coordinado
17. Los planes de competitividad
turística
Algunos logros de los planes:
• Implementar el catálogo.
• Generar confianza en nuevos productos.
• Un razonable periodo de ejecución.
• Reforzar el conocimiento de la Reserva por
parte del público.
• Integración del territorio en redes de turismo
específicas.
• Inicio de algunas colaboraciones.
18. Retos a futuro del turismo en la
Reserva
• Constancia. El turismo necesita para su éxito un
esfuerzo mantenido en el tiempo. Aunque se lleva ya
un tiempo trabajando en algunos temas, otros
necesitan todavía una apuesta y un apoyo para su
implantación.
• Asumir el concepto de marca Reserva de la Biosfera. Es
un reconocimiento potente al que desde el punto de
vista turístico no le hemos sacado todavía el suficiente
partido. Hay que creer en la marca.
• Apostar por la producción. El recurso por si mismo
tiene poco valor. Es necesario desarrollar los recursos.
19. Retos a futuro del turismo en la
Reserva
• La interpretación como factor clave. Tenemos
muchos recursos complejos, hay que
estudiarlos e interpretarlos.
• Debemos mejorar la oferta básica y diseñar un
plan racional de crecimiento.
• Es necesario que la actividad turística se
interiorice más en la población local.
• Es necesario mejorar la calidad de los
servicios.
20. Retos a futuro del turismo en la
Reserva
• Hay que reforzar la promoción y entenderla
como una inversión imprescindible para el
turismo.
• Hay que entender que los equipamientos no
son condición suficiente para el desarrollo
turístico. No por más obras tendremos más
turistas.
• Hay que superar el individualismo. La única
forma de alcanzar el éxito es el trabajo
solidario y colectivo.
21. Muchas gracias por su atención
Julio Grande
jgrande@sepinum.com
Tenemos una buena marca y unos buenos recursos. Tenemos que
trabajar con inteligencia para poder conseguir que el turismo sea
una pieza clave en el desarrollo sostenible del territorio.
No es sencillo, pero desde luego es posible.