El estoicismo se basa en el ejercicio constante de la virtud y vivir de acuerdo a la naturaleza siguiendo la razón. Busca la felicidad a través de la aceptación del destino y actuando prudentemente distinguiendo lo que está en nuestras manos de lo que no. El existencialismo concibe al ser humano como un proyecto único responsable de tomar decisiones que lo encaminen a cumplirlo.