2. KTM, que hasta ahora se dedicaba al mundo de las ruedas, ha lanzado este modelo
que dice único: una mezcla entre moto y coche, aseguran. La presentación oficial no
tuvo lugar hasta Ginebra.
3. La versión más básica del X-Bow incluirá un propulsor de origen Volkswagen de 2
litros y 220 CV
4. Una de sus bazas será su peso: apenas 700 kilos gracias a su monocasco de fibra
de carbono. Ya te puedes hacer una idea de todo lo que ofrecerá en carretera
5. El X-Bow incorpora un monocasco en fibra de carbono realizado por Dallara - marca
italiana experta en la fabricación de monocascos para F1 - que destaca por su
ligereza y seguridad, gracias al crashbox integrado en la parte delantera del
vehículo.
6. Su peso, alrededor de los 70 kgs. juega un papel crucial en el espectacular
comportamiento del deportivo austríaco. El sistema de silenciador, situado en
la parte trasera del vehículo, actúa también como crashbox, sistema que en
este caso, absorbe la fuerza de un impacto trasero.
7. Diseñado en el estudio de Gerald Kiska, cada una de las partes del X-Bow
cumplen una función, la tecnología se ha dejado bien visible y los elementos
naranjas que matizan el coche se convierten en elementos flotantes que al
igual que sucede con las motos
8. La producción pasaría a Austria a principios de 2008 con una previsión de 500
a 1000 unidades al año. El proyecto X-Bow involucra a un total de entre 15 a 20
empresas europeas.