Este documento presenta un resumen del tercer número de la revista "Multitud". Incluye una editorial donde agradecen a los colaboradores y comentan sobre el proyecto de llevar la revista al formato digital. También presentan los temas abordados en este número, entre ellos "El estado chileno frente a la cuestión mapuche". El índice muestra artículos sobre este tema, historia, política y sociedad, así como secciones de poesía y cartas.
2. | REVISTA MULTITUD
Agradecemos la colaboración especial en este número de:
Mario Utz, Elsa Santander, Leonora Vicuña, Michel Figueroa, Daniel
Topaz, Alan Berezin, Patricia Espinoza, Estelí Slachevsky, Julio Sarmiento,
Pedro Canales, Mario Menoza, Felipe Alarcón, Danny Monsálvez, Brian
Chales, Eloísa Vicuña, Ana Urbain, Lee Busel, Nina Yacher, Conrad, João
Gonçalves, Claudia Drago, Francisco Ide y Paulo Slachevsky.
Diseño y diagramación: Estelí Slachevsky
Comité Editorial: Dafna Barley, Miguel Carmona, Victor Chautard y
Nicolás Slachevsky
contactanos:
revistamultitud@gmail.com | http://multitudrevista.blogspot.com
3. NOVIEMBRE 2009 |
Dicen que recién a los tres
números una revista se consolida
realmente como proyecto. Ya
cumpliendo nuestro primer año
de publicaciones sale hoy a la
luz nuestro tercer número, y
esperamos que así sea. Es ahora
el momento de dar un primer
vistazo hacia atrás y agradecer
a todos aquellos que desde un
principio nos han brindado su
apoyo, tanto como a quienes
para este último número
nos enviaron sus respectivos
artículos, permitiendo a nuestra
revista ampliarse un poco más
en cuanto al grupo de personas
involucradasylograrlaamplituddel
debate que desde nuestro primer
manifiesto nos propusimos. Ya con
el año cumplido con este tercer
número en mano, como diría
el italiano, nos vamos con tutti.
Preservando el carácter impreso de
“Multitud” como un compromiso
con la palabra escrita, la expresión
crítica y las artes gráficas, un
nuevo equipo ha comenzado a
articularse paralelamente para
darle vida a “Multitud” en la web,
fortaleciendo así nuestro vinculo
con la realidad social y política
contingente, que es vínculo
también con la posibilidad de
expresión plural que representa
Internet, con un proyecto
crítico más estable y con una
creación artística constante y
comprometida.
Así, partiendo por lo práctico,
con respecto al tema anunciado
inicialmente para el Dossier de
este número, “Izquierda y Estado”,
fue cambiado por el de “El Estado
Chileno frente a la cuestión
mapuche” principalmente por
el hecho de que el número de
artículos recibidos al respecto no
“Alegría”. Lamentablemente, este
último tema no ha sido tratado
en este número (por lo que nos
resultaba imprescindible hablar
de aquello en la Editorial). Mas
con “El estado Chileno frente a la
cuestión mapuche” creemos dar,
al menos, perspectivas de uno
de los movimientos sociales más
perseguidos durante el último
tiempo (sin ignorar que se trata
de un problema histórico), y el
que más presente se ha hecho
este año, anteponiéndose a las
reivindicaciones laborales del
profesorado, del sector público
en general y de los “pingüinos”,
quienes jugaron un papel
protagónico en cuanto a los
movimientos sociales en el
gobierno de Bachelet.
En este sentido es clara la posición
de esta revista frente a las
elecciones presidenciales y
parlamentarias de fin de año,
tal como lo expusimos en los
primeros números de esta revista:
ponemos en duda el concepto
de Estado como estructura de
dominación del capitalismo.
“Multitud” se queda del lado de la
Multitud,ynopodríamosverelvoto
más que como algo estratégico
en los intereses de los movimientos
sociales que se oponen al poder
económico y biopolítico del
capitalismo.
Nuestro ideal de democracia
jamás va a estar en una urna cada
cuatro años; la multitud tiene
la posibilidad de organizarse
autónomamente: es lo que hay
que construir.
Comité Editorial de
la Revista “Multitud”
nos permitió formar un dossier
sobre el primer tema, además que
el nuevo tema de portada resultó
ser no solamente viable sino
tambiénmásinteresanteencuanto
se trata de un problema que
latente a lo largo de todo el año,
tanto por el movimiento mismo
de las fuerzas sociales, por las
endurecidas reacciones del Estado
como por el fuerte vuelo que ha
tomado el tema en los medios
de comunicación tradicionales,
siempre, como es esperables
de estos, a la defensa de los
intereses privados y el principio
del “Orden”.
Estrechamente ligado a este
tema, más por la forma reactiva
del estado y de sus aparatos
ideológicos que por las
características del movimiento,
ha sido la persecución llevada en
los últimos meses al movimiento
okupa del cual los medios se han
aferrado, sobre todo luego de
la muerte de Mauricio Morales
y ahora con el reciente
enfrentamiento con la PDI. De esta
manera los allanamientos a los
diferentes espacios asociados se
han intensificado y una solapada
reacciónrepresiva se haencargado
de desalojar numerosos e
históricos espacios autónomos y
hostigar a sus miembros con una
fuerte infiltración de sus redes,
con maltrato y con el despliegue
de artículos difamadores en la
prensa que no vacila en hablar de
“terrorismo”, que termina siendo
en éstos sinónimo de “anarquista”
y “okupa”. El gobierno de Michelle
Bachelet se acaba con un último
repaso por la cara represiva
que durante los 20 años de
concertación no ha dejado de
existir bajo el discurso de la
EDITORIAL
Comité Editorial
3
4. | REVISTA MULTITUD
indice
ORTADA
5 EL ESTADO FRENTE A LA CUESTIÓN
MAPUCHE
6 Breve exposición sobre los últimos
sucesos en la araucanía | Nicolás
Slachevsky
8 El problema mapuche, el problema de
ellos | Mauricio Utz
10 INTERVENCIÓN DEL HISTORIADOR
SERGIO GREZ EN EL SEMINARIO “JUSTICIA
MILITAR EN CAUSAS MAPUCHES”
P
istoria
32 simone de beauvoir: estudios diacrónicos
en torno a los temas del amor y la subjetividad
en sus memorias y cuadernos de juventud
| Elsa Santander
35 opus dei ¿la verdadera obra de dios?
| Michael A. Figueroa
h
36 en busca de una justificación del
cambio (o el valor critíco de
stirner) | Miguel Carmona
38 participación politica en contextos
en transformación | Daniel Topaz
39 por la carretera | Alan Berezin
ndividuo y
ociedadis
spacio
riticoec
26 bolaño y el manifiesto infrarealista
| Patricia Espinoza
30 LA LIBERTAD DE ELECCIÓN EN EL
PROCESO DE “DE-EVOLUCIÓN” / FREEDOM
OF CHOICE, DEVO. | Miguel Carmona
31 el che frente a soderbergh y la
historia |Nicolás Slachevsky
24 20 años sin muro [berlin]
| Recopilación por Estelí Slachevsky
oja de
ontactohc
oociedad,
organización y estadoz
12 crisis del consejo de rectores
concepto de universidad pública e intereses
privados | Julio Sarmientos
14 movimientos indígenas e izquierdas
en america latina del campesino
pauperizado al sujeto movilizado...
| Pedro Canales
16 los otros pinguinos el movimiento de
estatales y municipales del 2008
| Mario Mendoza
19 cuestiones de organización
| L. Felipe Alarcón
22 democracia, tutelaje religioso y
estado laico | Danny Monsálvez &
Brian Chales
etras
40 viviremos “un poco más allá”
| Eloisa Vicuña
41 dicotomía (s)electa | Lee Busel
K | Conrad
42 itaca | Claudia Drago
43 fue repentinamente - SOÑÉ| Estelí
ansiedad a gamba | Lee Busel
44 el poder y otras bestias | Conrad
45 carta | João Gonçalves
l
5. NOVIEMBRE 2009 |
P oRTADA
Sin duda, desde los primeros
días del gobierno de Bachelet
con “revolución pingüina”, quedó
claro el perfil activo que tomarían
los movimientos sociales
en el cuarto gobierno de la
Concertación, luego de años
de una participación marginal
en el escenario político. Así, es
sin duda el conflicto que hoy
tiene lugar en las tierras de la
Araucanía el que más presente
se ha mostrado este año con
una intensificada reivindicación
de sus demandas históricas a las
cuales el gobierno ha respondido
con constante represión y
hostigamiento.
Es por ello que como “Multitud”
nos resulta un imperativo
pronunciarnos al respecto
y creemos cumplir nuestro
compromiso con las
reivindicaciones sociales con los
dos artículos que presentamos
a continuación. A este conjunto
bien se le podría agregar el
artículo de la sección “Zoociedad,
organización y estado” en el cual
se presenta el panorama latino-
americano de los movimientos
indígenas.
elestadofrentealacuestiónmapuche
5
6. | REVISTA MULTITUD
ORTADa
P
6
Con el reciente asesinato del
comunero mapuche Jaime
Mendoza Collio, el problema
indígena vuelve a salir a flote,
poniéndose en énfasis la
violencia “injustificada” de
“minorías radicales”, opuesta a
la civilidad con que el Estado
chileno afronta el tema. A esto se
suma la fiabilidad que el Estado
posee gracias al buen manejo
comunicacional,dictandoundiscurso
que a través del recuerdo de
su compromiso con el fin de la
dictadura, nos refriega como un
imperativosusupuesta “democracia”
y “transparencia”. Así es como, aun
existiendo una relativa gama crítica
hacia las políticas concertacioncitas
desde la institucionalidad política
misma, toda crítica o reivindicación
viniendo de los movimientos sociales
es restada de fiabilidad; es decir,
la crítica existente sólo se pone
en un nivel de panfleto. El Estado,
que en cierto modo implícito abarca
también instituciones privadas como
la prensa, se ha reservado, además
del derecho a la violencia legítima,
el derecho a la legitimidad de la
historia y de la objetividad noticiosa.
Las informaciones que dichas
instituciones nos hacen ver sobre
el actual conflicto de los territorios
el gobierno está, ante todo, para
defender los derechos de los
ciudadanos. Sin embargo, la
situación represiva en la Araucanía
va más allá de una posible definición
democrática del conflicto. Por una
parte hay una reducción noticiosa
de las demandas indígenas que
parecieran solo abarcar las vastas
tierras que hoy están en manos de
grandes propietarios agrícolas. Pero
dicho problema está en el corazón
de los altos índices de pobreza de la
población mapuche, cuya soberanía
alimentaria es devastada por
monocultivos de eucalipto, pino,
palma aceitera, caucho, jatrofa y
otras especies que, plantadas bajo
el camuflaje de la forestación,
esterilizan la tierra cultivable de las
comunidades en pos del mercado
de exportación. La resistencia
indígena, por otra parte, es también
una lucha contra la aculturación
que se viene dando desde la
colonización y que se prosiguió con
la formación del Estado chileno en
el llamado proceso de “pacificación
de la Araucanía”.
Diversas fuentes mapuches han
revelado videos en los que denotan
el alto grado de vigilancia policial
que hoy en día se mantiene en la
mapuchessontodo,menosobjetivas.
La última guerra de Chile fue la del
Pacífico. El Estado-Nación no ha
necesitado de más enemigos
extranjeros para su consolidación,
pues nunca ha faltado de donde
crearse enemigos internos. Por esto,
hoy en día numerosas campañas
de terror y seguridad se desarrollan
a lo largo y ancho del país, en
nuestras ciudades y en el seno de
nuestros mismos barrios. Se han
instaladocámarasenlascalles;senos
intenta convencer de que debemos
estar alerta constantemente a
nuestros mínimos actos cotidianos,
analizando en qué medida
contribuyen a nuestra seguridad o
nos hacen peligrar. Y así es como,
poco a poco, una sociedad de control
se establece de forma permanente
y con nuestro consentimiento,
un fenómeno que se globaliza
integrándose en los fundamentos
de la vida urbana occidental.
Mas, en la Araucanía lo que se ha
establecidoesunestadodeexcepción.
Se ha dicho que en la Araucanía no
se va a instalar una situación militar,
que se va a actuar con la legalidad;
se ha dicho que el gobierno quiere
dialogar, mas la respuesta ha sido
sólo violencia. Se ha dicho que
Breve exposición sobre los
últimos sucesos en la araucanía
Nicolás Slachevsky
Estudiante de 4º medio y miembro del comité editorial de la revista
7. NOVIEMBRE 2009 |
contingencia
7
Araucanía, en los que además se
revela la utilización de armamento
de guerra por parte de carabine-
ros: bombas lacrimógenas, fusiles
de asalto, armas de fuego a balines
y perdigones y armas de fuego a
bala de grueso calibre. Con dicho
armamento es que la policía
asedia las zonas mapuches y que
se han llevado operativos altamente
riesgosos, como el desalojo del
Liceo Alonso de Ercilla ocupado
por estudiantes desarmados que
solamente protestaban por la
represión policial. Es también un
síntoma de los niveles de represión
a los que se ha llegado en las tierras
de la Araucanía el sistemático uso
de la ley antiterrorista heredada de
la dictadura y a todas luces abusivo.
Numerosos prisioneros políticos
mapuches, por otra parte, han
declarado de qué manera se han
pasado a llevar sus derechos en las
prisiones estatales donde han sido
frecuentementemaltratadosydonde
se les han tomado ilegalmente
muestras de ADN que fácilmente
pueden ser utilizadas para su
incriminación.
En lo estrictamente político la
situación no es mejor y el gobierno
ya ha violado el convenio 169 de
las autoridades de gobierno que la
violencia desatada por la policía
en la región sólo legitima el derecho
a la autodefensa de aquellos
históricamente agredidos”.
Por lo demás, es un deber para la
izquierda estar informada de lo
sucesos en la Araucanía que la
prensa oficial esconde o tragiversa
de manera grosera. Lo mismo con
todos los conflictos sociales del
último tiempo en los que se ha
intentado, entre otros, hacer caer
al movimiento okupa con una
constante criminalización como
también los espacios de expresión
autónoma con la persecución
llevada por la ARCHI, al amparo
de la Ley de Telecomunicaciones,
de un gran número de radios
comunitarias. Así, en lo que respecta
el conflicto mapuche, remitirse a;
www.mapuche-nation.org
www.mapuexpress.net
como también a aquellos medios
informativos no mapuches que
han tomado el desafío de la prensa
independiente (como, por ejemplo,
El Ciudadano) y que al parecer son
la única manera de romper con el
cerco informativo y permitirnos
solidarizar de manera informada
con el pueblo mapuche desde
nuestra posición.
la OIT que rige desde el 15 de
septiembre cuando, un par de
meses antes, se declaró la exclu-
sión de los proyectos de inversión
en los procesos de consulta para las
medidas estatales que afecten
directamente a los pueblos
indígenas, que es lo que establecía
el convenio. Al parecer, como bien
lo remarca la Segunda Declaración
de Historiadores en Apoyo al pueblo
Mapuche, las demandas indígenas
no han sido escuchadas por el
gobierno, y hay que agregar que
el horizonte no es prometedor. Se
hace evidente no solo la brutalidad
con que las fuerzas represivas han
actuado –lo de Mendoza Collio
fue, sin más, un asesinato-, sino
también que el estado a priorizado
una vez más por los intereses
del empresariado y sin una real
disposición al dialogo. Dadas las
circunstancias, no podemos más
que firmar con el último punto de
la declaración de los historiadores
en la que dice: “Frente a la justicia
delasdemandashistóricasdelpueblo
mapuche y teniendo presente el
actual escenario represivo que el
Estado chileno ha configurado en
la Araucanía, manifestamos nuestra
más profunda solidaridad con el
pueblo mapuche y advertimos a
FOTO | Leonora Vicuña
8. | REVISTA MULTITUD
PoRTADA
8
Pretender decir algo sobre el conflicto
mapuche es una cuestión delicada,
debemos hablar sin dejar de hacer
la máxima justicia posible. La sola
mención de la palabra justicia resulta
impúdica, en nombre de esta se
persigue, flagela y marca, la justicia se
transforma en una mancha; al mismo
tiempo su ausencia ensordecedora
revela el otro sentido de la tragedia;
se nos expone un doble sentido de la
falta, una doble falta y doble injusticia.
Para seguir hablando debemos
recuperar tal nombre de quienes
han sostenido el largo oprobio sobre
el pueblo mapuche. Si bien estamos
lejos de lograr esto aquí, porque sus
pecados han llegado hasta el cielo,
podemos comenzar a enderezar
algunas cosas.
A ratos se ha querido presentar
el conflicto mapuche como una
simple reivindicación de feudos en
el sur del país. Nada más alejado de
la realidad. El conflicto mapuche es
antiquisimamente actual, basta
reconocer que antecede con creces a
lo que ha venido a imponerse sobre
ellos con el nombre de Chile.
¿Qué es este Chile impuesto que a
ratos intenta asimilar como suyos a
los que llama “araucanos” (quizás
buscando consuelo por una
independencia mediocre en la
resistencia indígena frente al español),
mientras instaura su maquinaria
policíaca en sus territorios
ancestrales?
Escuchemos a Detienne: Es sabido
desde hace mucho tiempo: una de las
características de la especie humana
es inventar incesantemente prácticas,
más allá, reconocer tal como la poeta,
la exclusión del mapuche como
continuidad de un momento anterior;
vale decir: un momento europeo.
Desde la independencia este país
se ha pensando en la negación de
otra historia, la que se prestaría a
reconocer que la República de Chile ha
sido hasta ahora, y hasta quien sabe
cuando, menos una ruptura con la
dominación española que una situación
de complicidad con los tiempos
coloniales (necesidad de remarcar
el carácter español de la colonia de
entre los siglos XVI al XVIII; necesidad
de pensar dos, tres o más veces la
legitimidad de la expresión
independencia en el contexto de
1810-1818), y desde el cual se levanta
el mito de la identidad, la religión, la
sangre y la tierra, como reproducción
barata de aquel ejemplo excelso de
esquizofrenia, no menos presente
en Chile, que solo persiguiendo y
expulsando a judíos y moros, a quienes
tanto debía y debe, se pudo
transformar en la bestia de avanzada
de la contrarreforma, en la España
eterna y católica .
Mucho menos negado el otro vínculo,
el discurso metafísico de la “vieja”
Europa en sus afamadas variantes de
modernidad franco-anglo-germana
(que empezamos a conocer recién
desde finales del XVIII, y del cual
suele hacerse alarde), nos heredó el
modelodeestadomodernoqueescondía
(y dudosamente ha dejado de
hacerlo,) bajo mitos de talante liberal
y democrático, el imperialismo que se
sostenía a través de medio orbe.
¿Qué desprendemos de estas
ceremonias,técnicas,representaciones
de todo tipo que hacen cultura, en
el sentido más libre, cosas que se
transmiten o se olvidan; ciertos días
parecen transformar el mundo; a
veces, una sola noche alcanza para
aniquilarlas. ¿Y adonde pareciera
llevar esto? Nada más trivial para un ser
viviente que hacerse su madriguera,
su territorio inmediato. Lo demás
viene solo .
A los discursos emanados de la
necesidad de la madriguera los
llamaremos Mitología Nacional. Y
agreguemos, mitología aun en gesta,
nacida de la necesidad de afirmar
una identidad, de levantar la
madriguera, y como toda afirmación
de identidad, necesita excluir, necesita
de lo otro para negarlo. Pero como
toda mitología, esta no es simple, es
un compuesto enmarañado de todo
tipo de mitos: mito de la nación,
mito de la democracia, mito de la
reconciliación. Uno de los mitos
que llaman la atención es el que ya
denunciara Gabriela Mistral, aquella
idea de la “invención poética de Chile”
amparada en La Araucana de Ercilla,
a quien llamará pieza de carne de la
máquina infernal de una conquista, y
sobre cuya obra dirá que está muerta
y sin señales de resurrección. Sin
embargo los criollos insisten en
mantener vivo el mito ercillano de la
“raza araucana”, mito que deforma
y que hace notar algo común a
españoles y criollos: que por cristianos
son incapaces de comprender el
“amor indígena por el suelo” . Si tanto
Ercilla como su obra pueden encajar
dentro de aquella maquinaria infernal
de conquista española, es preciso ir
El problema mapuche,
Mauricio Utz | Estudiante de Filosofía, Universidad de Chile
9. NOVIEMBRE 2009 |
contingencia
9
La pregunta sobre los otros se revela siempre como una pregunta sobre nosotros
Notas
1. Inversión intencional de otra frase: La pregunta sobre nosotros se revela siempre como una pregunta sobre los otros (Nota,
Posdata [a El laberinto de la Soledad], 1970, Octavio Paz).
2. Detienne, Marcel, Como ser autóctono, ¿De qué se trata?, página 12 - 13
3. No voy a citar a Gabriela pues más me interesa indicar, en este mismo sitio, a otro autor: Patricio Marchant, que él se encargue
de llevar adonde sea (en el texto que cito a continuación P.M. alude de manera más detallada a Música Araucana de Mistral), por
mi parte lo recomiendo encarecidamente: Atópicos, etc. E indios espirituales (nota acerca del racismo espiritual europeo), parte IV,
sección A; puede encontrarse en un compilado de textos del autor bajo el nombre de Escritura y temblor así como en la web.
4. Franco todavía repetía la letanía bajo la cual España se sentía española desde hace 400 años antes: En España se es católico o
no se es nada, repleto de miedo, como si la guerra civil hubiera convocado fuerzas demoníacas que demostraban lo frágil y torcido
del mito español a pesar los siglos que había tenido para fortalecerse.
5. Voces como las de Jacques Derrida o Emmanuel Lévinas.
6. Aquí se expresa toda la violencia de la fundación del estado chileno. ¿Pero es posible una fundación sin violencia? ¿Puede dejar
de fundarse constantemente el estado, de prolongar aquella violencia originaria que le dio ser y lo mantiene en él? ¿Y para que la
fundación? ¿Por qué aquella “necesidad” de fundar algo?
herencias? El mito nacional, de poca
creatividad, se ha cimentado en
modelos de exclusión, modelos
que esconden el hecho de que toda
pregunta por los otros es una pregunta
sobre nosotros mismos. Modelos
que no quieren escuchar a las voces
contemporáneas que han
hecho denuncia de la incapacidad del
pensamiento europeo para no tratar
con la alteridad sino a base de dominio,
exclusión o asimilación ¿Incapacidad
metafísica del estado chileno para
escuchar y acoger al otro, en lugar de
acallarlo como ha venido sucediendo
hasta ahora? Incapacidad del estado,
e incapacidad metafísica, en tanto
somos capaces de reconocer la
complicidad política y ética de gran
parte del pensamiento europeo (en
sus variantes políticas, científicas,
filosóficasyreligiosas)enladominación
colonial e imperial. Reproducción de
una lengua de dominación, lengua
que ensalza al mercado, la supremacía
blanca, el dominio técnico-científico
del mundo, la soledad de los hombres,
y la diferencia salvaje en lugar de una
alteridad sagrada.
En esa alteridad imposible, en la
cuestión del otro, es donde el llamado
conflicto mapuche nos envuelve a
todos. Nos envuelve, porque en él el
estado chileno se nos revela, se expone
de manera hiperbólica en toda su
violencia originaria , en el amor
patológico por su mitología, en las
prácticas necesarias para sostener día
a día aquello, de lo que no se puede
huir incluso cuando se esta dispuesto
a transar cierto precio, a asumir el
valor relativo que concede el mercado.
Pero tampoco se trata de simplemente
escuchar, el estado chileno no
escuchará, esa es, repetimos, su
imposibilidadmetafísica,constituyente,
a lo más instalará la ficción del diálogo.
¿Cómo evitar quedarse en una política
de la mera diferencia? No podemos
intentar cerrar el problema mapuche
temporal y geográficamente al locus
nacional cuando este se desparrama en
todas direcciones: al descubrimiento
y conquista de América, al auge y con-
solidación del capitalismo universal, a
la pregunta global sobre el porvenir
¿Se puede pasar por alto todo esto?
El pueblo mapuche nos interpela
de manera doble, tal como la
injusticia que lo agobia, a perseguir
una reflexión profunda y una acción
liberadora, a sobrepasar la crítica
ondescendiente con las estructuras
más íntimas de la dominación y la
auto-consolación acomodada de
la “rebelde” crítica universitaria.
¿Qué tan fuertes somos para eso?
Esperamos que lo suficiente como
para conjurar la injusticia y la muerte.
Lo suficiente como para empezar a
reconocer que el problema de ellos, es
el problema de nosotros.
el problema de ellos
FOTOS | Leonora Vicuña
10. | REVISTA MULTITUD
PoRTADA
He sido invitado a este Seminario por
haber sido uno de los impulsores de
dos declaraciones y manifestaciones
de historiadores en apoyo al pueblo
mapuche: la primera, con motivo del
asesinato por la espalda del comunero
mapuche Matías Catrileo cometido por
un Carabinero en enero de 2008, y
una segunda declaración en agosto de
2009, luego de un nuevo asesinato por
la espalda cometido por Carabineros
de Chile contra la persona de otro
comunero mapuche, Jaime Mendoza
Collío, declaración a la que se sumó
una manifestación de protesta de
historiadores, profesores de Historia
y alumnos de carreras de Historia,
en las calles de Santiago el 10 de
septiembre del presente año.
Sin despojarme de mi condición de
historiador (no especializado en la
cuestión mapuche), en esta ocasión
hablaré sobre todo como ciudadano.
Porque como ciudadano (cualquiera
sea mi especialización en tanto
historiador) no puedo callar, no
podemos callar ante los graves
sucesos que están ocurriendo en la
Araucanía.
Día a día las comunidades mapuches
que luchan por recuperar sus tierras
son rodeadas, hostigadas, allanadas y
violentadas por las fuerzas policiales
del Estado chileno. Día a día hombres,
mujeres y niños mapuches son
maltratados, insultados, humillados,
golpeados, arrastrados y detenidos
por Carabineros y la Policía de
Investigaciones. Algunos, como Matías
Catrileo y Jaime Mendoza Collío son
asesinados por la espalda.
que pronunciaba la DINA durante la
dictadura de Pinochet. Aunque nunca
tuvimos la prueba formal de ello,
en 1975, cuando estábamos en el
campo de concentración de Puchuncaví
circulaba insistentemente entre los
presos políticos el rumor acerca de
estas “condenas” informales decididas
por la policía política de la dictadura.
Como no éramos sometidos a proceso
ya que habíamos sido arrestados de
manera absolutamente arbitraria y
discrecional, la DINA decidía nuestro
futuro determinando cuantos meses o
años debíamos permanecer “fuera de
circulación”. Algo similar parece que
está ocurriendo con el procedimiento
de los fiscales contra los presos
mapuches…
Entretanto, el gobierno de la
Presidenta Bachelet ofrece “diálogo”,
envía su ministro Viera Gallo a la
Araucanía, pero anuncia que las
comunidades que amparen a los
“violentistas” no serán beneficiadas
con la entrega de tierras. De esa
manera se pretende dividir al
movimiento mapuche aislando a los
“malos” de los “buenos”.
Paracompletarelpanorama,losgrandes
propietarios de la zona forman
cuerpos paramilitares de “guardias
blancas” patronales para reprimir al
pueblo mapuche, tal como ha sido
anunciado con la creación del Comando
Hernán Trizano.
Todo esto nos lleva a concluir que
el Estado de Chile y los grandes
propietarios de la zona, beneficiarios
de la usurpación histórica de los
Los helicópteros policiales vuelan día
y noche por sobre las tierras de estas
comunidades. Los mapuches sufren
controles de identidad abusivos,
vejatorios. Sus luchas son
criminalizadas y judiciliadizadas
por el gobierno y el poder
Judicial, y son deformadas y
condenadas por la prensa (salvo
contadas y honrosas excepciones)
y por los partidos políticos con
representación parlamentaria.
Losmilitantesmásactivosycombativos
de la causa mapuche son perseguidos,
maltratados, torturados, encarcelados
y sometidos a procesos tanto por
la Justicia Civil como por la Justicia
Militar. A ellos se les aplica la Ley
Antiterrorista heredada de la
dictadura Militar y utilizada
profusamente bajo los gobiernos de la
Concertación.
Cuando una causa criminal parece
no prosperar (por insuficiencia o
debilidad de pruebas), los fiscales
civiles y militares (respondiendo a
las insinuaciones del gobierno), se
afanan en inventar nuevas
acusaciones para poder retenerlos
largos períodos en prisión. Es lo que
está ocurriendo con Héctor Llaitul,
dirigente de la Coordinadora Arauco-
Malleco (CAM) a quien le comunicaron
en estos últimos días la apertura de un
nuevo proceso. Cada causa significa
hasta nueve meses de prisión
preventiva mientras dura la
investigaación.
Este proceder de los fiscales me
recuerda las “condenas clandestinas”
INTERVENCIÓN DEL HISTORIADOR SERGIO GREZ
EN EL SEMINARIO “JUSTICIA
MILITAR EN CAUSAS MAPUCHES”
Organizado por los Familiares de los presos políticos mapuches y la Agrupación mapuche
Kilapán, Santiago, Universidad Alberto Hurtado, 21 de octubre de 2009.
10
11. NOVIEMBRE 2009 |
contingencia
territoriosmapuches,estánempezando
a implementar una estrategia de
guerra de baja intensidad en el
Wallmapu para quebrar la resistencia
mapuche.
Los métodos empleados así lo indican:
militarización del territorio mapuche a
través de la Instalación permanente de
la policía militarizada de Carabineros
en las zonas más álgidas del conflicto
para actuar como guardia pretoriana
de los empresarios; violencia
policial creciente contra las
comunidades; cerco mediático (salvo
honrosas excepciones como Radio
Bío-Bío); acción de una vasta red de
espionaje y soplonaje, intervención
de correos electrónicos y escuchas
telefónicas (incluyendo a los abogados
defensores de los presos políticos
mapuches), etc. A ello se suma la
aplicación sistemática de la Ley
Antiterrorista heredada de la dictadura
y utilizada profusamente por los
gobiernos de la Concertación junto
a la doble acción de fiscales civiles y
militares. ¿Qué significa en concreto
la intervención de la Justicia Militar en
las causas mapuches?
Significa, entre otras cosas, que un
imputado puede estar detenido hasta
por cinco días sin real expresión de
causa, incomunicado, arraigado,
prontuariado, con prisión preventiva
indefinida; que esta persona ve
suspendidos sus derechos ciudadanos,
que no puede conocer el sumario
secreto, y que la investigación puede
tardar los años que el Fiscal determine
que sean necesarios para el cierre del
sumario.
Estas facultades excesivas de la
Justicia Militar chilena ha sido objeto
de numerosas críticas, especialmente
por parte de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos (CIDH).
Según este organismo, en un Estado
democrático de Derecho la jurisdicción
penal militar ha de tener un alcance
restrictivo y excepcional, de acuerdo
con lo planteado por muchos juristas,
según los cuales la Justicia Militar
debe ocuparse exclusivamente de
velar por ciertos valores del ámbito
militar como disciplina, jerarquía
y seguridad militar. De lo que se
desprende que los tribunales militares
solo deben conocer delitos de función
cometidos por militares en servicio
activo y que en ninguna circunstancia
los civiles pueden ser sometidos a la
jurisdicción de los tribunales militares.
Chile se encuentra en las antípodas de
estos principios.
A diferencia de lo que ocurre en la
inmensa mayoría de los Estados
democráticos de derecho en los cuales
los tribunales militares solo conocen
aquellos delitos que por la naturaleza
de los bienes jurídicos penales
castrenses son estrictamente militares
y constituyen conductas graves
cometidas por militares que atenten
contra esos bienes jurídicos, en
Chile los poderes de estos tribunales
son extensísimos. A ello se agrega
el hecho de que la Justicia Militar
chilena en tiempos de paz vulnera la
imparcialidad e independencia que
deben tener los tribunales por su
estructura y composición. Porque los
integrantes de los tribunales militares
son militares en servicio activo que
están subordinados jerárquicamente a
sus superiores a través de la cadena
de mando, porque no cuentan con
garantías suficientes de inamovilidad
y no poseen una adecuada formación
jurídica.
La imparcialidad de estos jueces
también se ve afectada porque el
Fiscal concentra las funciones de
investigar,acusaryjuzgar(característico
de los sistemas inquisitivos, escritos
y de prueba reglada). Como si fuera
poco, el procedimiento penal militar
significa una merma significativa de
las garantías judiciales porque los
tribunales militares no garantizan que
los juicios sean públicos al no prever
una etapa oral, desarrollándose los
procesos de manera inquisitoria con
una etapa preliminar sumaria, secreta
y escrita.
Estas normas, impropias de un Estado
de Derecho democrático, son las
que el Estado chileno está aplicando
sistemáticamentecontralosluchadores
mapuches
Es necesaria una enérgica reacción
de todos quienes viven en este
país, winkas, mapuches y demás
pueblos originarios, para frenar los
preparativos de la guerra de baja
intensidad que el Estado de Chile
está empezando a implementar en la
Araucanía.
Hoy son los mapuches, mañana será
cualquier grupo o sector social que
se levante de manera decidida para
luchar por sus derechos.
11
12. | REVISTA MULTITUD
Z oociedad,
12
ElConsejodeRectoresestáviviendo
uno de los momentos de máxima
tensión de su historia y detrás de
la crisis se vislumbra una disputa
no sólo económica, sino también
una pelea en la que se juegan
las fichas ideológicas de lo que se
entiende por universidad pública.
Resulta que nuestra instituciona-
lidad universitaria tiene un fuerte
componente histórico, que gira en
torno a un grupo de universidades
que tradicionalmente asumieron
la responsabilidad de formar
profesionales y generar
investigación para el país.
Instituciones que jugaron un
papel fundamental en el desarrollo
económico y social del siglo
pasado, de manera abierta a la
comunidad, con costos que
recaían principalmente en el
Estado. Un singular mecanismo
de financiamiento entendido bajo
la lógica de estar comprometidas
con el proyecto país de aquel
entonces. Nadie hubiera pensado
en esa época del lucrativo negocio
que sería después la educación
superior, ni de la importancia
estratégica que tendría para la
formación ideológica de las futuras
élites dirigenciales del país.
Se podría afirmar que la Educación
Superior Pública en Chile surgió
con la peculiar característica
de ser mixta en términos de
propiedad, y es justamente aquí
donde está el concepto en disputa
quecomienzaanublarelpanorama.
Prácticamente ningún país del
mundo está en una situación
similar. El natural entendido apunta
financiamiento estatal, pese al
ligero matiz de referirse ellas como
tradicionales y no como públicas,
lo que implicaría una serie de
compromisos con el Estado que
hoy día se pasan por alto.
Mucho ha cambiado desde aquel
inocente origen donde todas las
universidades se alineaban con
los intereses de todos. Con las
reformas aplicadas por el gobierno
militar entraron al juego muchas
otras motivaciones que hay que
considerar a la hora de analizar
que ocurre hoy día en el Consejo
de Rectores y hacia donde va el
manoseado concepto de
universidad pública. Concepto
que se ve amenazado de quedar
vacío, al punto de considerar como
pública a cualquier institución que
produzca una externalidad social
según podemos inferir del discurso
de Carlos Peña, (UDP).
En los años 80 se reestructuró la
educación superior, y los objetivos
fueron claros a mi entender, por
un lado el interés económico y
por otro lado la necesidad de
reforzar la barrera del acceso al
conocimiento a los sectores
más populares para reforzar la
hegemonía del modelo socio-
económico.
Sobre lo primero no hay mucho
más que decir, el lucro ha estado
presente en todo debate y es
un secreto a voces que la única
motivación de muchas instituciones
es esta. Lo hacen de manera
inescrupulosa, con publicidad
engañosa,sinregulación,yjugando
con las oportunidades de familias
a considerar como lo público sólo
a lo estatal, utilizando este medio
para suplir las necesidades sociales
sin requerir colaboración de
institucionesprivadas.Estasexisten
con la natural motivación de
llevar adelante proyectos
educativos complementarios de
carácter privado, orientados a un
sector de la sociedad, sin rendirle
cuentas a nadie, y sin tener que
sacrificar la exclusividad que
siempre les ha caracterizado. Casi
todos los sistemas universitarios
son mixtos, pero con claridad
distinguen entre instituciones
públicas y privadas, estando las
primeras en propiedad del estado,
siendo además gratuitas, laicas
y pluralistas; a diferencia de las
segundas que se asumen como
privadas sin ningún complejo, y
se dan el lujo de cobrar altísimo
aranceles, elegir a quienes
admiten y enseñar lo que les
place.
Sin embargo resulta que conceptos
y roles tan claros no parecen tan
obvios en el debate universitario
actual, donde la existencia del
Consejo de Rectores no se basa en
principios de compromiso social,
sino solamente en su evolución
histórica. Existe una ambigüedad
que no se han querido esclarecer
porque sin duda, podría poner en
juego una serie de privilegios que
tienen instituciones que responden
a intereses privados, pero que
pasan desapercibidas dentro del
respetable Consejo. Este aún sigue
entendiéndose como la agrupación
de universidades que merecen
Crisis del Consejo
concepto de universidad pública
Julio Sarmientos [ Articulo escrito en Julio 2009 ]
Estudiante de Medicina, Directivo de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile y Senador Universitario
organización y estado
13. NOVIEMBRE 2009 |
humildes que se endeudan por
pagar aranceles que nada se
condicen con la calidad de la
educación que reciben. Lo peor es
que algunas lo hacen con fondos
fiscales, que a través del AFI y el
AFD terminan en instituciones que
no rinden cuenta sobre la manera
en que los utilizan, porque
recordemos, no son estatales y por
tanto sus recursos no pasan por
contraloría ni por chilecompras,
ni tienen la responsabilidad de
invertirlos en el bien de todos.
Por suerte este es un privilegio
aún limitado principalmente a las
universidades tradicionales, pero
¿qué pasaría si se abriera esta
posibilidad a todas las acreditadas
como algunos plantean?
Sobre lo segundo hay más que
agregar. Pablo Imen, un académico
argentino habla de cómo en los
países latinoamericanos se
restringe el acceso al conocimiento
a través de cuatro mecanismos
principales: Inclusión/exclusión:
propiciando una limitación a la
inserción en el sistema, algo que
ocurre en Chile con los sectores
populares que no alcanzan los
puntajes de corte en la PSU;
Segmentación horizontal: que
implicalafragmentacióndelsistema
en establecimientos de distintas
calidades en un mismo nivel, frente
a lo cual nuevamente son los
sectores humildes los que
acceden a una mala educación
que no asegura inserción laboral;
Segmentación vertical: implica la
fragmentación entre niveles, como
la brecha entre formación técnica
preocupado porque detrás de
la propuesta de un Nuevo Trato
para las estatales, está el olvidado
principio de que la educación
pública debe ser el pilar
fundamental del sistema
universitario de cualquier país que
aspire a su desarrollo. Educación
Pública que quizás pueda ser
impartida por instituciones de
propiedad privada, pero no las que
se encuentran aisladas, elitizadas
y lejos del poder adquisitivo de la
mayor parte del pueblo de Chile.
Una institución pública es aquella
que se comprometa a ser abierta
a la sociedad, sin concentrar a un
grupo socioeconómico o a una
ideología en particular, para que
permita el encuentro y la diversidad
social; aquella que sea pluralista,
contando con libertad de cátedra
y libertad de asociación; y
aquella que sea democrática
permitiendo que en su gobierno
estén representados todos los
estamentos para que su proyecto
de desarrollo no quede secuestrado
por los intereses de un grupo
de académicos, de un dueño, o
simplemente del mercado. De este
compromisoinapelabledelopúblico
ninguna privada ha querido
hablar, porque después de todo son
privadas y no les sirve eso de
comprometerse, pero a mi juicio
este compromiso con lo público
debería ser la condición del
financiamiento estatal, un
compromiso recíproco de dar y
recibir teniendo siempre claro que
el objetivo está como dijera Andrés
Bello “en Chile y las necesidades
de su pueblo”.
y universitaria; y la Fuga hacia
Adelante: que se aplica al vaciado
de contenidos que sufren los
niveles masificados, que obligan
a optar por un nivel superior para
obtener el grado de calificación
adecuado, algo típico del fenómeno
de los postgrados en las carreras
que han aplicado reformas a su
pregrado.
En esta realidad de la educación
superior impuesta en dictadura y
avalada en su marco estructural
por los gobiernos subsiguientes,
suena totalmente anacrónico el
concepto de universidad pública,
de calidad, pluralista, masificada
y gratuita como mundialmente
se conoce. Sería entregar a la
población todo ese capital social
y cultural que hasta hoy día se
mantiene convenientemente
al margen de gran parte de la
juventud chilena, encerrado en las
selectas universidades privadas
que el padre Berrios llamara de
“cota mil” donde se forman las
élites intelectuales seleccionadas
con pinzas de cierto sector social y
aisladas de toda idea o realidad que
afecte su simpatía hacia el status
quo. Universidades que en la
ambigüedad discursiva de sus
voceros,hablandeestarcumpliendo
también con un rol público que el
Estado debería financiar, ¿de qué
rol estamos hablando?
En su ofensiva al interior del
Consejo de Rectores, encabezando
a las universidades privadas
tradicionales, el Rector Rosso
(PUC) ha hablado de discriminación
hacia “algunas instituciones”,
de Rectores
e intereses privados
ZOOCIEDAD,
organización y estado
IMAGEN Nicolás Slachevsky
13
14. | REVISTA MULTITUD
Z oOciedad,
14
Las interrogantes que articulan
esta reflexión y sus afanes de
discusión son las siguientes: ¿La
recomposición de las izquierdas
en la región permite augurar un
vínculo permanente y consolidado
con los movimientos indígenas?
Dicho de otra manera ¿Qué
sucederá en el corto plazo si no
surge otro Evo Morales en la
región?
La discusión es amplia, polémica
y detenta muchas miradas. Por
ejemplo, Ethel del Pozo en su
libro Organizaciones campesinas
e indígenas en América Latina
(1998), indica acerca de la
relaciónentreizquierdaseindígenas
en América Latina, que “Las ideas
socialistas penetraron en América
Latina desde fines del siglo XX.
Sin embargo, es solamente a
partir de la segunda década del
siglo XX que estas ideas empiezan
(con la constitución de partidos
socialistas y comunistas), a
arraigarse en la cultura política
desplazando al anarquismo” .
Para Ethel la relación entre
socialismo y movimientos
indígenas se produjo en gran
medida por los discursos y
aspiraciones recíprocas y por el
cohecho sociopolítico imperante.
Dice la autora: “En esta época, el
socialismo encarnaba ya, por una
parte, una idea de modernidad, y
No obstante, enfatiza García
Canclini, la paradoja fue evidente.
Por un lado admiración por lo
indígena, y por otro “(...) en
los países latinoamericanos el
exterminio y el arrinconamiento
de negros e indios coexistió con
políticas de mestizaje desde el
siglo XIX y con un reconocimiento
(desigual) de su ciudadanía, que
llegó a la exaltación simbólica de
su patrimonio en el indigenismo
mexicano” . Esta tendencia será
constante en la historia de esta
tierra. Los indígenas no serán
vislumbradoshastabienadentrado
el siglo XX.
Luis Maca, insigne dirigente
indígena ecuatoriano, sostiene
que “Para entender el contexto
socio político y económico en el
que las organizaciones indígenas
aparecen como actor deliberante
en los años 90, hay que empezar
analizando el proceso que ha
vivido el movimiento indígena
que surge en la década de los 80,
década que ha sido denominada
como ‘perdida’, pero que desde
una visión más histórica y a largo
plazo, puede ser considerada más
bien como una década ganada
por el movimiento indígena”.
Según Alejandro Rojas, en
contextos nacionales y en
perspectiva de búsqueda de
modelos gubernamentales, en los
cuales los movimientos indígenas
por otra parte, de revolución en el
sentido que Lenin y Trosky habían
dado a estas palabras” . La idea fue
pulverizar la vieja nomenclatura
latinoamericana de partidos
conservadores y liberales.
Hoy en día ¿Quiénes incluyen las
demandas identitarias,
autonómicas y redistributivas
impulsadas por los movimientos
indígenas? ¿La izquierda de Lula,
Bachelet, Cristina Fernández,
Tavares Vásquez, Chávez u
Ortega? o exceptuando la
experiencia Boliviana y en
algo la Ecuatoriana, ¿sólo las
izquierdas extraparlamentarias,
denominadas “duras” o “no
renovadas” incluyen en sus
discursos las demandas
identitarias y autonómicas?
Ahora bien, la temática indígena
y el interés de los grupos socio-
políticos no indígenas de captar
la atención y apoyo de éstos,
posee larga data. Néstor García
Canclini indica en Globalización
Imaginada que “Ya las fórmulas
‘nuestra América mestiza’ en
José Martí y ‘raza cósmica’ en
José Vasconcelos buscaba una
integración de la herencia indígena
que ellos mismo diferenciaron
de lo que ocurría en ‘la América
rubia’, blanqueada, de Estados
Unidos” .
MovimientosIndígenas
Pedro Canales Tapia
Profesor de Historia (USACH, Chile). Magíster Ciencias Sociales Aplicadas (UFRO, Chile). Tesista Doctoral Procesos Sociales
y Políticos en América Latina (UARCIS, Chile). Académico Universidades Pedro de Valdivia y del Mar, sede La Serena.
organización y estado
15. NOVIEMBRE 2009 |
ZOOCIEDAD,
15
cada vez más participan, “El
problema de la democracia y el
socialismo es en última instancia,
el problema de construir una
sociedad basada en la equidad y
en la diversidad” .
La década de 1980 comienza con
un hecho que marca un antes y
un después en la historia de la
región. “En 1979 la caída de
Somoza –indica José del Pozo-
señaló el comienzo de un nuevo
período de democratización en
América Latina” . Y una nueva
socialización entre la izquierda
y los movimientos indígenas
regionales.
La redemocratización incipiente,
permitió que la ruralidad volviese
a generar organizaciones sociales,
constituyéndose en el lugar
propicio de múltiples
movilizaciones. Pero éstas
asumieron nuevo formato. “(...)
en lugar de sindicatos y ligas
vinculados a partidos políticos
y organizaciones nacionales
proliferaron los grupos autónomos
cuyas reivindicaciones y
estrategias se definían por medio
de un alto grado de participación
de las bases locales” . Los objetivos
de estas movilizaciones no se
planteaban como temas de clase
social, sino más bien desde una
perspectiva de derechos humanos,
conciencia ecológica, religiosidad,
Indígenas del Ecuador (CONAIE),
ha estado a la vanguardia de esas
actividades políticas, organizando
grandes “levantamientos”
indígenas pacíficos en su país en
1990, 1993, 1999 y en los primeros
años del siglo XXI también, que
paralizaron Ecuador y llevaron a
los gobiernos de turno a abdicar o
negociar con los indígenas acerca
de temas agrarios principalmente.
Icono del comportamiento radical
de un presidente “socialista” lo
hemos conocido recientemente.
En la Amazonía peruana los
sucesos de sangre, muerte,
detención y desaparición, etnocido
según los expertos, ha marcado
la agenda noticiosa. Patético por
decir lo menos son las apariciones
en la prensa del presidente aprista
Alán García defendiendo el
accionar militar y la calificación
“delictual” del proceder indígena.
“En mi opinión, indica el historiador
peruano José Ragas, se trata
de una arremetida del gobierno
contra poblaciones indígenas
por el control de sus recursos.
Siguiendo el modelo del estado
colonial y republicano, para el
estado no existen variantes
indígenas, sino que todas son
iguales, y en ese sentido, son
‘atrasadas’: anticapitalistas, no
quieren del progreso del país ya
que se oponen a la ‘modernidad’
y a la inversión extranjera” .
temas de género, entre otros .
Una característica adicional de
estas organizaciones indígenas
y sus movilizaciones tiene que
ver con la desconfianza hacia
el aparato estatal, apareada
con situaciones de corrupción e
ineficienciapropiadelosregímenes
autoritarios, que además sufrieron
el derrumbe de sus sistemas
financieros durante la década de
1980. “(...) que dió por resultado
la privatización de empresas
públicas y suspensión de planes
de desarrollo” . A mediados de la
década de 1990 existían
varios cientos de asociaciones,
de todo tipo y forma: “(...)
organizaciones locales,
intercomunalesyregionales,grupo
de defensa de intereses
estructurados formalmente,
federaciones nacionales, ligas y
uniones, alianzas transnacionales
y coaliciones, con intensos
contactos y actividades
internacionales” .
De acuerdo a estudios de Rodolfo
Stavenhagen”(...) puede afirmarse
queesasorganizacionesindígenas,
sus líderes, sus objetivos,
actividades e ideologías
emergentes constituyen un nuevo
tipo de movimiento social y
político en la América Latina
contemporánea (...)” . La
Confederación de Nacionalidades
organización y estado
eizquierdasenAméricaLatina
del campesino pauperizado al sujeto movilizado…
16. | REVISTA MULTITUD
Z oOciedad,
16
E
l año 2006 fue el año del
estallido de la juventud
estudiantil, “la revolución
pingüina” sacudió el país, las
tomas de liceos y las marchas
de los escolares pusieron en
la mesa del debate nacional la
educación. Ese conflicto aún
sin desenlace se suma a otros
que la sociedad chilena no ha
resuelto, como el de la salud, la
previsión, las violaciones a los
derechos humanos, el dominio
de nuestras riquezas básicas, el
trabajo…
El 2008 arremetieron los “otros
ubicación estratégica en el
continente, su escasa población,
sus riquezas y la resistencia
indígena obligaron a la Corona
española a fundar un super-
Estado para dominar este
super-territorio. La República
continuó y extendió esta
característica, un super-Estado
al servicio de la Corona y las
clases dominantes, apoyado
en un ejército de funcionarios
militares o civiles jerarquizados,
de allí la importancia de éste
sobre la sociedad civil, desde su
fundación hasta ahora.
pingüinos”. Ante el petitorio de
un 14,5% de reajuste hecho por
la mesa de 15 organizaciones de
trabajadores estatales tuteladas
por la CUT, la negativa torpe del
gobierno llevó a las gigantescas
movilizaciones de noviembre.
Ni un vidrio roto, pero el estado
“civil” paralizado, con la
comprensión de la población
y la simpatía del “pueblo con
uniforme”, que también “iba en
la parada” del reajuste. El triunfo
del 10% en medio de una crisis
económica ha sido un grato
respiro y la oportunidad de
reflexionar y preparar la próxima
oleada de este año…
CHILE; UN SUPERESTADO
PARA UN SUPERTERRITORIO
La extensión geográfica, el
aislamiento y dureza climática
de Chile, combinado con su
LOS OTROS PINGÜINOSEL MOVIMIENTO DE ESTATALES Y MUNICIPALES DEL 2008
MARIO MENDOZA | Dirigente Sindical Municipal
organización y estado
¿MÁS ESTADO?
¿MENOS ESTADO?
La crisis mundial de la
economía capitalista parece
haber zanjado la vieja discusión
entre los que abogan por dejar
libre las “fuerzas del mercado”
de la camisa de fuerza del
Estado… hasta que el mercado
en crisis, sin fuerzas, clama el
auxilio del estado… La verdadera
discusión no es acerca de
permitir más o menos
intervención del estado en la
economía, sino del carácter
de éste y de ésta y al servicio
de qué clase se encuentran. El
Estado no es “neutral”, tiene un
signo de clase y eso lo sabemos
muy bien sus empleados...
LA COMUNA Y
EL ESTADO MODERNO
La comuna es más antigua que
el Estado moderno y hunde sus
raíces en la Edad Media, donde
fue desarrollándose y ganando
fueros ante los señores
feudales. En ellas estaba el
embrión de la nueva sociedad
burguesa moderna que
terminaría con el feudalismo,
proceso cuya expresión
emblemática fue la Revolución
Francesa. Esa relativa autonomía
de la antigua comuna de alguna
manera se mantuvo bajo el
Estado moderno. Aún hoy,
las comunas pueden generar
sus propios recursos, alguna
legislación (ordenanzas
municipales), autoridades e
instituciones autónomas, como
el reciente plebiscito en Vitacura.
Contradictoriamente, el estado
moderno, nacional e integrador
fue mucho más lento en su
propia modernización y más
aún en la modernización de los
municipios. Pero el carácter
genético de la comuna puede
permitir ricas experiencias
democráticas y de poder local
aún sin explorar.
LOS TRABAJADORES
ESTATALES Y MUNICIPALES
COMO PARTE DEL MOVIMIENTO
SINDICAL CHILENO
Existe una deuda no reconocida
por la sociedad con los
trabajadores estatales y
municipales como forjadores
del movimiento sindical
17. NOVIEMBRE 2009 |
ZOOCIEDAD,
17
chileno. Es un “olvido motivado”
–como diría una psicóloga-
porque asumirla plenamente
sería reconocer el potencial
poder del movimiento sindical
chileno, numéricamente el 10%
de la masa asalariada chilena
pero cualitativamente tal vez
el más organizado y poderoso.
Se ha dicho en otra parte: un
sindicato de 600.000 socios
movilizados es “insoportable”
para cualquier tipo de gobierno…
Por ello que, aunque está
en los libros de historia los
organización y estado
i. Es democrático: Con sus
imperfecciones, el
sindicalismo municipal es
democrático, rasgo creciente
a partir de los últimos años.
Es imperativo desarrollar aún
más este carácter, desde la
dirección a las bases y
viceversa. Debe promover
más dirigentes jóvenes, más
luchadores, más mujeres,
superando lastres
burocráticos y sectarios.
ii Es nacional: Con cerca de
40.000 afiliados, es
prácticamente el único gremio
que tiene presencia en cada
Trabajadores) presidida por
Clotario Blest y de la cual fueron
parte activa Humberto
Valenzuela y los trabajadores
municipales. Su experiencia
lo llevó a escribir en 1972 su
“Historia del movimiento obrero
chileno”, texto todavía fresco,
pleno de anécdotas y lecciones.
LA PARADOJA CHILENA EN
EL CONFLICTO DE LOS
ESTATALES Y MUNICIPALES
El régimen de trabajo estatal
chileno es altamente
IMAGENNicolásSlachevsky
nombres de Clotario Blest y
Tucapel Jiménez, sólo se
menciona a la pasada que
fueron dirigentes de los
trabajadores estatales.
LOS MUNICIPALES Y
LA PRIMERA CUT
Humberto Valenzuela era el
dirigente de los trabajadores
municipales del aseo de
Santiago cuando en 1951 estalló
una huelga del magisterio.
Ex trabajador salitrero y de la
construcción,militantetrotskista,
Valenzuela llamó a solidarizar
con los profesores y Santiago
quedó varios días sin extracción
de basura. La huelga fue un
éxito y sentó las bases del CUS
(Comité de Unidad Sindical) que
a comienzos de 1953 confluyó
conotrosgremiosenlafundación
de la CUT (Central Única de
contradictorio, conviviendo
en las reparticiones públicas
y municipios la desigualdad
de trabajadores a contrata y
honorarios, en su mayoría
altamente precarizados (paraíso
de los “flexibilizadores”) con
funcionarios de planta con un
régimen de relativa estabilidad
y algunos derechos adquiridos,
aunque sin el más importante:
el derecho a negociación
colectiva y el derecho a huelga.
Pero la realidad siempre camina
delante de los esquemas: si
bien el Estatuto Administrativo
Para Funcionarios Municipales,
promulgado por la Junta Militar
de Gobierno en 1989
-plenamente vigente en estos
años de democracia- prohíbe
expresamente “…promover o
participar en huelgas,
interrupción o paralización
de actividades, totales o
parciales…” es letra muerta en
cada episodio de movilizaciones
de los trabajadores municipales,
la paradoja chilena es que la
propia prohibición de negociar
colectivamente ha llevado -de
hecho- a negociaciones anuales
informales, que han devenido –
de nuevo de hecho- en
movilizaciones y paros, cuya
expresión más alta fue el
movimiento de noviembre de
2008.
SIETE CLAVES PARA UN
NUEVO SINDICALISMO
MUNICIPAL DEL SIGLO XXI
Si hablamos de un nuevo
sindicalismo municipal,
esbozamos sus características
programáticas:
18. | REVISTA MULTITUD18
Z oOciedad,
organización y estado
LOS “CORDONES
MUNICIPALES”, BALANCES
Y PERSPECTIVAS
ASEMUCH –la confederación de
funcionarios-eslagranconquista
y herramienta de los
trabajadores municipales y
necesita democratizarse –ya
lo hemos dicho- y fortalecerse
aún más a nivel de base. La
movilización del año pasado
sacó a la calle espontáneamente
a los trabajadores estatales,
la mayoría de las veces, en
especial en provincias y
pequeñas ciudades, dirigidos
por los municipales. Entre
municipios, consultorios y
colegios se crearon incipientes
“cordones municipales” que
sostuvieron el paro, cubrieron
emergencias y explican gran
parte del éxito de la movilización
nacional. En ese nivel cobra la
mayor importancia la necesidad
de fortalecer el rol de las
federaciones, como instancia
intermedia entre la base y la
dirección, aún débil ante el
gobierno.
LA ACTUAL CRISIS DE
REPRESENTACIÓN DE LA
SOCIEDAD
Lapoblaciónchilenasereparteen
partes iguales en una mitad que
participa en elecciones y elige
sus representantes entre la
limitada oferta que entrega el
sistema binominal, y otra mitad
quedeliberadaovoluntariamente
seencuentraexcluida,marginada
de una representación válida
aunque esté inmersa de
lleno en el mundo social y haga
oír su voz por otros medios.
Esa división en dos mitades
no es “geográfica” ni de clase,
es transversal, combinada y
contradictoria: como una
tormenta en primavera, un
estamento perfectamente
representado y contenido
por sus líderes puede en un
una de las 345 comunas. Una
red de sindicatos que sesiona
on line.
iii Es “político”: por lo
indicado en el punto anterior,
tiene opinión acerca del
acontecer público de todo
el país. Sirve a la población,
conoce sus problemas y sus
demandas, y por eso mismo
debiera tener una propuesta
de país.
iv Es transversal y unitario:
Agrupa ejemplarmente hasta
hoy a todos los estamentos y
escalafones de funcionarios
municipales, directivos,
jefaturas, profesionales,
administrativos y auxiliares.
Es parte activa de la CUT y
de la mesa de trabajadores
estatales, extendiendo en los
hechos sus reivindicaciones al
conjunto de los trabajadores
estatales, incluyendo a los
trabajadores de uniforme,
fuerzas armadas y
carabineros.
v. Es independiente:
Debemos luchar contra toda
tentativa de someter el
sindicalismo municipal al
alcalde o al gobierno de
turno, a las burocracias
sindicales, a los partidos
políticos, al estado y menos
maniatarlo con leyes de
“arbitrajes obligatorios”.
vi. Es “histórico”: Busca
encontrarse con sus raíces
históricas, de cara al futuro.
vii. Es internacionalista: Se
hace parte de la lucha
mundial de los trabajadores
estatales por un trabajo
decente, por la defensa de los
derechos laborales de todos
los trabajadores del mundo,
por servicios públicos de
calidad y por una sociedad
mejor.
momento dado desbordar y
hacer estallar la calma del
día anterior. Así sucedió con
los “pingüinos” el 2006 y así
puede haber pasado con los
estatales y municipales el
año pasado. Todo lo sólido se
desvanece en el aire y se han
visto muertos cargando adobes,
trabajadores confundidos
votando por empresarios,
empresarios añorando a un ex
presidente socialista, dirigentes
sindicales oponiéndose a un paro
hoy y mañana convocándolo
frenéticamente…
¿FALTA UN PARTIDO, QUÉ
TIPO DE PARTIDO?
No hay que temer a las
preguntas audaces. El
movimiento de los estatales y
municipales, parte viva del gran
movimiento sindical chileno
atrae como la miel a las moscas
a los políticos de todo color. No
cualquier partido político saca
a la calle a lo largo de Chile
decenas de miles de personas,
vuelca votaciones en el
parlamento y puede botar
ministros. Lo hicieron nuestros
hijos, los pingüinos, y lo hicimos
nosotros. Pero los movimientos
sindicales no pueden finalmente
sustituir a los partidos, y la
necesidad de confirmar los que
existen o crear uno nuevo es
una pregunta para ésta época.
El sindicato no es un fin en sí,
sino sólo uno de los medios a
emplear en la marcha hacia la
emancipacióndelostrabajadores
y la construcción de una
sociedad nueva. El año 2008, en
una de las comunas de nuestra
federación le comentaba a un
concejal que los funcionarios
movilizados, con el municipio
prácticamente en toma “no se
daban cuenta del poder que
tienen”. El concejal –que ahora
es alcalde- replicó: “y es mejor
que no se den cuenta…”.
19. NOVIEMBRE 2009 | 19
ZOOCIEDAD,
organización y estado
La obra de Gramsci, como toda
obra, es infinita. Me hago cargo y
toco sólo un punto: la manera de
organizar la lucha revolucionaria.
Un punto amplio, se verá.
1Gramsci parte de lo que
llama un «hecho primordial»:
existengobernadosygobernantes.
ún las consideraciones más
elaboradas sobre el origen y la
moralidad de la distinción dejan el
hecho intacto.
Si se sigue la exposición de
Gramsci en “Maquiavelo y Lenin”,
se comprende que hay que partir
del hecho de que existen
gobernantes y gobernados, hay
que trabajar sobre esta base. Pero
trabajarsobreestabasenosignifica
perpetuarla. Gramsci, en las
primeras páginas, consigna que
la innovación fundamental del
marxismo, en el campo de
concreto, por supuesto, pero
lo importante no es si debe
haber o no un jefe, sino qué
relaciones tiene ese jefe, ese
gobernante, con sus gobernados.
Gramsci va a plantear que las
relaciones deben ser orgánicas,
históricas. El jefe debe ser un
elemento de la clase obrera,
representar sus intereses y
aspiraciones más vitales. Siendo
así, el problema no está ya en la
“personalización física de la
función de mando […] (sino) en
la naturaleza de las relaciones que
los jefes o el jefe tengan con el
partido de la clase obrera, y de las
relaciones que existen entre ese
partido y la clase obrera” .
Es fácil adivinar la queja contra
Gramsci en este punto. ¿Por qué
es necesario un Jefe, un partido,
o más gruesamente, una
la ciencia de la política, es la
demostración de que no existe
una naturaleza humana abstracta,
fija, universal, sino una naturaleza
humana que es resultado de un
conjunto de relaciones sociales
históricamente determinadas.
Así puestas las cosas, la tarea
fundamental es la formación de
dirigentes y dirigidos capaces no
sólo de acabar con esta distinción
sino también, y quizás sobre todo,
de crear un nuevo tipo de Estado.
Un Estado fundamentalmente
obrero.
Pero un Estado obrero sigue siendo
un Estado y todo Estado es una
dictadura . Consecuentemente se
necesita un Jefe. El punto aquí
es que ese jefe, ese Príncipe en
términos de Maquiavelo, no
será una persona concreta sino
el un partido. Tendrá un jefe,
cuestiones de organización
L Felipe Alarcón
Estudiante de Administración Pública, Universidad de Chile. Investigador del Centro de Estudios y Análisis Político, CAIP / falarcon@caip.cl
FOTOL.FelipeAlarcón
20. | REVISTA MULTITUD
organización para llevar a cabo un
proceso revolucionario? Gramsci
parece derivar la necesidad de la
organización de la existencia real
de la división entre gobernantes
y gobernados, pero aún así la
pregunta queda abierta. La
respuesta tiene dos niveles. Nos
encargaremos ahora del primer
nivel, que es el que Gramsci
somete a discusión. Gramsci
pone la cuestión en éstos
términos: o dirección consciente o
espontaneidad.
2Gramsci, como tantos otros,
utilizará a Georges Sorel
como contrapunto a sus ideas. Lo
utilizará y dirá: la huelga general,
que para Sorel es la mayor
expresión de la actividad práctica
del sindicato, no es sino “una
actividad pasiva de carácter
negativa y preliminar (el carácter
positivo está dado solamente por el
acuerdo logrado en las voluntades
asociadas)” y, en este sentido, no
alcanzará nunca una verdadera
fase activa, constructiva. Una
«verdadera» fase constructiva,
pues haría falta saber si es
posible que exista destrucción,
negación,sinunaafirmación,sinuna
construcción implícita. Lo que
hace falta a lo espontáneo es la
disciplina, ya se verá.
El problema de Gramsci será cómo
concretar una voluntad colectiva.
Y el problema, dice Gramsci, ya lo
ha resuelto, en parte, la historia:
es el partido político el organismo
capaz de aglutinar y concretar
una voluntad colectiva. Resulta,
entonces, que la inmediatez que
aparece en Sorel no puede ser,
por su naturaleza, sino obra de un
individuo concreto, nunca de una
voluntad colectiva. El problema
del inmediatismo será doble: por
una parte, no permite la actuación
de una voluntad colectiva que se
afirme en la acción y, por otra
parte, la acción rápida, fulminante
que por fuerza propone el
inmediatismo, elimina el senti-
do crítico pues es una acción de
respuesta, sin alcance,
precisamente porque no tiene un
programa. O más bien porque no
tiene un programa explícito. Se
abandona a la fuerza del azar, se
diría. Gramsci dirá, incluso, algo
que Carl Schmitt dirá luego sobre
el romanticismo político: el
inmediatismo supone una
voluntad colectiva ya existente,
un cierto soporte material. Es
decir, una acción directa efectiva,
por ponerlo en términos actuales,
necesita de una voluntad
colectiva ya constituida. La política
en Gramsci, es pasión, y esa
pasión debe aliarse con la
economía para poder constituirse
a largo plazo. Es decir, esa pasión
destructora, digamos, de la huelga
general, tener un sustrato
económico, de clase, para
constituirse en lo que, en términos
modernos, se podría denominar
proyecto político, de otra manera,
queda sólo en pasión. Algo así
como esto: poner bombas es,
por fuerza, un acto individual y
puramente político. Un acto
individual que además, para ser
efectivo, supone una voluntad
colectiva consciente, que
vea en el acto un intento de
destruir las relaciones jurídicas y
morales existentes. Si no, es un
espectáculo triste, infértil. No
funda nada.
Hay un segundo punto de la
crítica de Gramsci a Sorel, el asunto
en torno al mito político, a la
ideología-mito. Sobre esto habrá
que hablar en otra ocasión.
3Hasta aquí, el partido
aparece como el único
organismo capaz de sobrellevar un
proceso revolucionario. Pero hay
vida fuera del partido. Gramsci,
junto a Togliatti, inició en 1919
una campaña por los consejos de
fábrica a través de LON . De lo que
se trataba era de trabajar en los
«centros de vida proletaria», es
decir, en los talleres, los círculos
socialistas y las comunidades
campesinas. Este trabajo tenía, al
menos, dos propósitos. En primer
lugar, al partido le llevaría años,
décadas incluso, aglutinar a las
fuerzas del proletariado, mientras
que el trabajo en lugares donde
la clase, por excelencia, se
concentra permitiría un mayor
campo de acción, a la vez que
daría el ejemplo vivo a los obreros
menos avanzados en el proceso
de toma de conciencia. Resolvería
también el problema de las
dimensiones del partido: el partido
sólo puede aceptar en sus filas
a los más preparados, a los más
conscientes, pero no pueden
quedar fuera del proceso las
amplias masas de trabajadores.
No se trata de una élite
revolucionaria. Una especie de
función articuladora y disciplinaria,
entonces.
Luego, en segundo lugar, la
estrategia de los consejos de
fábrica tiene una tarea
fundamental: una vez
desarrollados, éstos serán los
órganos del poder proletario
que sustituirán a los del poder
capitalista en las funciones
de dirección y administración.
Los obreros sabrán ya cómo
organizarse, cómo dirigir y
administrar tareas, y este
conocimiento será clave en el
momento de la toma del poder.
20
Z oOciedad,
organización y estado
21. NOVIEMBRE 2009 | 21
ZOOCIEDAD,
organización y estado
Se podría ensayar algo así: el
partido es el encargado de la
dirección general, ideológico-
práctica, de la voluntad colectiva,
mientras que los consejos de
fábrica se encargan de la dirección
local, de algo así como la
micropolítica. Gramsci dirá,
incluso, que el partido “ocupa, en
las conciencias, el lugar de la
divinidad o del imperativo
categórico, deviene la base de
un laicismo moderno y de una
completa laicización de toda la
vida y todas las relaciones de
costumbres” .
4Hasta este punto del texto
ha tenido la manera de la
exposición, no ha aparecido la
primera persona. Ahora aparecerá,
y aparecerá para decir esto: si
bien el pensamiento de Gramsci,
esquemáticamente expuesto
aquí, me parece uno de los
puntos más altos de la manera de
organización comunista, enfrenta,
debe enfrentar, ciertos problemas.
En primer lugar, la identificación
de política y pasión, que
hace impensable un proyecto
político que no se base en la lucha
económica. En segunda instancia,
el punto sobre el inmediatismo
me parece acertado, salvo un
punto: Gramsci pone como
contraparte a Sorel, ataca por
uno de los flancos débiles de las
maneras de organización no
marxistas, o no exactamente
marxistas. Habría que enfrentar
la tesis de Gramsci a la de los
anarquistas y la de la izquierda
del marxismo occidental. Pien-
so aquí en Lukács diciendo ““la
organización no es una premisa,
sino la consecuencia de la huelga
general, y, por lo tanto, de la
revolución. La consigna del
Manifiesto Comunista según la
cual el proletariado se organiza
como clase por la revolución ha
sido claramente confirmada por
la revolución rusa” , por ejemplo.
Habría que pensar, también,
sobre el supuesto obvio de la
exposición gramsciana: el fin
es alcanzar una nueva forma de
Estado. Gramsci dirá que el que
quiere el fin debe querer también
el medio, y consecuentemen-
te, quien quiere acabar con la
distinción entre gobernantes y
gobernados deberá querer la
existencia del partido, como
medio. Ya es conocido el
argumento anarquista: no se
pueden conseguir fines libertarios
por medios autoritarios. Fines
y medios no son separables, y
si bien Gramsci no los separa
explícitamente, sí lo hace
implícitamente. Por otra parte,
la tesis de Gramsci supone, por
cierto, que un punto central del
proceso revolucionario es la toma
del poder político por parte del
proletariado. Pero acá hay un
punto, que Lukács expone mejor
de lo que yo podría hacerlo aquí:
“La gran diferencia entre los
marxistas revolucionarios y los
oportunistas pseudo-marxistas
consiste en que para los primeros
el estado capitalista cuenta sólo
como factor de fuerza contra el
cual hay que movilizar la fuerza
del proletariado organizado,
mientras que para los otros
el estado es la institución
superclasista por cuyo dominio
luchan el proletariado y la
burguesía” . Habría que ver en
qué vereda está Gramsci.
Ya se ve, son preguntas
abiertas, son cuestiones por
resolver. Una apertura con la
forma de conclusión.
Notas
1. Gramsci, Antonio.
Maquiavelo y Lenin.
Santiago de Chile: Editorial
Nascimento, 1971.
2. Gramsci, Antonio. «Jefe»,
En Antología. Buenos Aires:
Siglo veintiuno editores,
2004. Pp. 149 a 152
3. Gramsci, Antonio. «Jefe»,
En Antología. Buenos Aires:
Siglo veintiuno editores,
2004. P. 150
4. Gramsci, Antonio.
Maquiavelo y Lenin.
Santiago de Chile: Editorial
Nascimento, 1971. P. 29
5. Gramsci, Antonio.
Democracia Obrera, En
Antología. Buenos Aires:
Siglo veintiuno editores,
2004. Pp. 58 a 62
6. Gramsci, Antonio.
Maquiavelo y Lenin.
Santiago de Chile: Editorial
Nascimento, 1971. P. 37
7. Lukács, Georg. Prefacio a
Huelga de masas, partido y
sindicatos, de Rosa
Luxemburg. Citado por
Löwy, Michael. El
marxismo olvidado.
Barcelona: Editorial
Fontamara 1978. P. 130.
8. Lukács, Georg. Historia
y consciencia de clase.
Estudios de dialéctica
marxista. México DF:
Editorial Grijalbo, 1969.
P. 271
22. | REVISTA MULTITUD
desligado de todo tutelaje
religioso y confesional.
Si bien el Estado se separó de
la Iglesia con la Constitución de
1925, en la práctica el Estado
chileno y la sociedad siguen
enmarcados bajo un fuerte
predominio religioso, a través de
acciones fácticas que las diversas
confesiones religiosas ejercen por
medio de sus respectivos brazos
económicos y políticos (dirigentes
y personeros) situados en los
diferentes poderes del Estado.
Ejemplo de aquello son la
penalización del aborto
terapéutico, la denegación
de constitucionalidad para la
distribución de la denominada
“píldora del día después”,
sumadas a otras iniciativas
valóricas y de derecho de
conciencia que simplemente no se
debaten o quedan en un segundo
plano ante los denominados
“problemas reales”, que tanto
gusta hablar a la clase política.
Que decir de cambios políticos-
institucionales como una nueva
Constitución política o la idea
de debatir la formación de una
Asamblea Constituyente .
La constitución de un Estado
Laico en Chile, como requisito
fundamental para una democracia
ha sido atropellada por distintos
poderes fácticos que poseen
claras conductas confesiona-
les. Así como por personeros de
gobierno, legisladores,
funcionarios públicos de irrestricto
compromiso religioso que sólo
velan por sus intereses y no por
Danny Gonzalo Monsálvez Araneda
Académico de Historia de Chile Contemporánea en el Depto. de Ciencias Históricas y Sociales, Facultad de
Humanidades y Arte, Universidad de Concepción. E-mail: monsalvez@gmail.com
Brian Ali Chales Aoun
Alumno de primer año de la Carrera de Ciencias Políticas y Administrativas, Facultad de Ciencias Jurídicas y
Sociales, Universidad de Concepción. E-mail: brian_chales@hotmail.com
22
El debate por los temas valóricos,
los llamados “defensores de la
vida” y de “La Verdad”, acusan
a quienes no comulgan con su
discurso de ser personas muy
subjetivas en sus apreciaciones
y analizar los temas desde una
perspectiva relativista; como si
estos dos conceptos conllevaran
en sí un aspecto negativo (todo
vale, cultura de la muerte);
sin embargo ignoran u omiten
premeditadamente que la
subjetividad es la forma que tiene
todo hombre de interconectarse
con su entorno. Siendo uno
de los aspectos importantes la
razón; o sea, construir un discurso
coherente de acuerdo a la
relación con su realidad
social. Sumado lo experiencial; es
decir, lo que tengo en la memoria,
lo que conservo de la experiencia
social e individual. Podemos
agregar los estados anímicos, que
contribuye a la interpretación, las
denominadas verdades íntimas,
la capacidad de imaginar y la
capacidad creativa.
En ese sentido, la relación con
nuestro entorno es una relación
mediada. Esto quiere decir que
la información debe ser tratada,
sistematizada, traducida a nivel
mental. Este tratamiento mental
es la subjetividad. Por lo tanto,
necesitamos llevar a cabo la
experiencia de los objetos.
En el caso del relativismo
epistemológico , que es distinto
al relativismo moral, es la
aceptación y tolerancia a la
diversidad, del otro, de lo distinto.
Se enmarca en el conocimiento;
por lo tanto va vinculado con la
razón y ésta (razón) requiere una
herramienta, métodos racionales
de investigación y de conocimiento
(ciencia), que respalden las
comprobaciones para aspirar a la
verdad.
El relativismo epistemológico no
se funda en el dogma, la fe, la
tradición, lo que otros ya hicieron
o constituyeron, en lo que da
certeza y firmeza.
Parafraseando al sociólogo Peter
Berger , quien tiene fe no tiene
certeza, ya que si tuviera certeza
de las cosas, no requiero de fe,
“no necesito tener fe para saber
que usted está sentado aquí,
frente a mí” decía Berger a su
entrevistador.
El tema de “La Verdad”, es un
camino delicado que corre el
peligro de imponer postulados
totalitarios por sobre otros
fundamentos; peor aún, intentar
falsear u omitir una realidad
social, caracterizada por ser
ilimitada, invisible, multi-
dimensional y que está en
permanente cambio y evolución.
En vista de aquello, una de
las aristas que tiene el debate
sobre los llamados temas valóricos
en nuestros país dice relación
con los derechos ciudadanos y la
libertad de conciencia, pero a
nivel estructural con la
profundización de nuestra
democracia a través de un
auténtico y verdadero Estado
laico; es decir un Estado
Democracia, tutelaje religioso
Z oOciedad,
organización y estado
23. NOVIEMBRE 2009 |23
NOTAS
1. Faerna, José Manuel. Relativismo:
racionalidad científica y diversidad
cultural. Diccionario Crítico de
Ciencias Sociales, 2002.
2. “Quien tiene fe no tiene certeza”,
El Mercurio, domingo 23 de mayo
de 2004, p. E 1-2 y 3.
3. Al respecto: Grez Toso, Sergio: “La
ausencia de un poder constituyente
democrático en la historia de Chile”,
publicado en: Tiempo histórico,
Nº1,Santiago,UniversidadAcademia
Humanismo Cristiano, junio de
2009.
y Estado laico
ZOOCIEDAD,
organización y estado
los de la sociedad en general.
Nuestra sociedad muestra una
diversidad religiosa y moral,
constituida no sólo por una mayor
cantidad de confesiones religiosas
que a través del proselitismo se
disputan a los feligreses, sino
también por sectores cada vez
más significativos de agnósticos y
ateos, todos los cuales contribuyen
a dar vida a las convicciones
morales ciudadanas y respecto de
las cuales un Estado laico debe
garantizarsulibertaddeconciencia
y su convivencia cívica. Al mismo
tiempo, podemos encontrar en
nuestra sociedad una creciente
diversidad de grupos, movimientos
y expresiones que representan
distintas sensibilidades sociales
y culturales frente a los cuales
el Estado debe velar por el
respeto a su realidad, sociabilidad,
identidad, libertad y derechos
fundamentales, de modo de
garantizar en la práctica la
expresión de la diversidad.
Entrado el siglo XXI y después de
casi 20 años del retorno a esta
democracia electoral, se requiere
como objetivo primordial la
consolidación de las libertades
individuales, la libertad de
conciencia, los derechos
fundamentales de todas las
personas y la igualdad ante la ley.
Resulta imperioso que el Estado
chileno asuma la vanguardia de la
secularización y el laicismo como
un vía y forma cívica de abordar
la creciente diversidad religiosa,
moral, filosófica y de intereses
de la sociedad en su conjunto,
respetando y valorando el derecho
de expresión privada y pública
de cada cual, e independizando
al Estado de la injerencia y poder
de toda particularidad, cualquiera
que ella sea.
Es por ello que ante la insistencia
desectoresreligioso-confesionales
y sus respectivos poderes fácti-
cos por imponer su ¿verdad? y
opción de conciencia, los ciuda-
danos, aquellos de espíritu libre,
deben observar y supervisar la
conducta de la élite política
dirigente, a quienes han ejercido
funciones de representación en el
parlamento y quienes aspiran a
ser electos por la ciudadanía, para
así evaluar su conducta y forma
de imponer su pensamiento;
es decir, si efectivamente son
auténticos representantes, con
una visión amplia, pluralista y
tolerante frente a cuestiones
valóricas y de conciencia, o
más bien son personeros que
anteponen sus puntos de vista
religiosos y dogmáticos por sobre
el interés de sus electores y la
diversidad que una sociedad como
la nuestra exige que se respeten.
En definitiva, para que alcancemos
una auténtica democracia como
expresión de la legitimidad de
la sociedad civil, se requiere la
constitución de un Estado laico
que entre otros cosas contribuya
a garantizar la igualdad de
oportunidades en la expresión
de la diversidad, fortalecer las
opciones estatales y laicas en
materia educativa, un pluralismo
informativo y el irrestricto respeto
a la libertad de conciencia de los
ciudadanos.
26. | REVISTA MULTITUD
SPACIO
RÍTICOEC
26
Patricia Espinosa H. | Crítica literaria.
Profesora Universidad de Chile y Universidad Catolica
[Articulo aparecido en Rocinante N°84, Octubre 2005]
Bolaño
El movimiento infrarrealista surge
entre fines de 1975 y comienzos
de 1976, en México DF, y lo
conformanMarioSantiago,Ramón
Méndez y Héctor Apolinar, que
venían del fracasado taller de
poesía de Difusión Cultural de la
UNAM, coordinado por el poeta
y académico Juan Bañuelos. El
lugar específico de gestación fue
la casa del poeta chileno Bruno
Montané. El grupo rápidamente
se amplía a 30 o 40 personas,
incluyendo tanto a escritores
como músicos y pintores. Surge
luego una revista infra y una
editorial, aparte de sucesivas
irrupciones infras en recitales de
poesía oficial. Entre los nombres
a considerar dentro del grupo
están: Juan Esteban Harrington
(¿García Madero?), Piel Divina,
Cuauthémoc Méndez, Oscar
Altamirano, José Peguero, Pedro
Damián, Elmer Santana, Ramón
Méndez, Guadalupe Ochoa, Edgar
Altamirano, Mará Larrosa, Vera
Larrosa (¿las hermanas Font?),
Kyra Calvan, Víctor Monjarás,
Carlos David Marfarón, Geles
Lebrija, Rubén Medina, José
Rosas Ribeyro, Estela Ramí-
rez, Lorena de la Rocha y Javier
Suárez Mejía.
“Déjenlotodo,nuevamente.Primer
Manifiesto del Movimiento
Infrarrealista” es el título del
Manifiesto escrito por Bolaño y
publicado en Correspondencia
Infra, Revista Menstrual del
Movimiento Infrarrealista, N° 1
(México D.F, Octubre/Noviembre
1977, 5000 ejemplares) . Hay un
dato en el origen del concepto
“infrarrealismo” que Bolaño no
menciona en sus entrevistas. Un
dato que he logrado detectar
tras la lectura de “Déjenlo todo,
nuevamente”. El primer párrafo,
constituido de ocho líneas
entrecomilladas,esunacitaexacta
del relato “La infra del dragón”,
escrito por el autor ruso Georgij
Gurevic, aparecido originalmente
en 1959 y compilado por Jacques
Bergier en Lo mejor de la ciencia
ficción rusa (Bruguera, Colección
Libro Amigo, Barcelona, 1968). El
párrafo que Bolaño literalmente
cita del texto de Gurevic, dice así:
“Hasta los confines del sistema
solar hay cuatro horas-luz; hasta
la estrella más cercana, cuatro
años-luz.Undesmedidoocéanode
vacío. Pero, ¿estamos realmente
seguros de que sólo haya un
vacío? Únicamente sabemos que
en este espacio no hay estrellas
luminosas; de existir, ¿serían
visibles? ¿Y si existiesen cuerpos
no luminosos u oscuros? ¿No
podría suceder en los mapas
celestes, al igual que en los de
la Tierra, que estén indicadas
las estrellas-ciudades y omitidas
las estrellas-pueblos?”. El relato
de Gurevic es el de una tripulación
de seis hombres en el siglo XXI,
que parten desde la Tierra en
una nave cósmica hacia los soles
negros, cuerpos no luminosos
u oscuros, estrellas-pueblos no
indicadas en los mapas celestes
orientados siempre a las estrellas
-ciudades. Soles invisibles, negros
como el carbón, planetas
calentados desde dentro, serán
también llamados INFRA y
constituirían un mundo al revés.
La misión de los tripulantes,
entonces, será buscar
desesperadamente una INFRA.
El término ‘infrarrealismo’ alude
a un territorio nuevo, pero al
revés, en el cual impera la
inversión de las reglas de nuestro
“mundo real”. El calor o la energía
en el territorio infra, viene desde
dentro, desde las mismas vísceras.
Tal como el realvisceralismo de
Los detectives salvajes. Bolaño
27. NOVIEMBRE 2009 |
ESPACIO CRÍTICO
27
así dice: “Escritores soviéticos
de ciencia ficción; el rostro a
medianoche”. Encontramos aquí
no solo su recurrente complicidad
con el escritor desesperado, sino
también con los llamados géneros
B, géneros bastardos, ya sea
cine porno, ciencia ficción,
peplumorelatopolicial.Escrituras,
en cualquier caso, de individuos
que se arañan el rostro. Como
Mario Santiago Papasquiaro,
Sensini, Ulises, Belano, Amalfitano
o el propio Archimboldi. Bolaño
ve desesperación en aquellos
escritores soviéticos de la Guerra
Fría, que intentan generar un
discurso que opere como un
pliegue respecto al sistema de
control. La búsqueda de la infra
funciona como metáfora de la
subversión del sujeto, único mito
posible, única utopía posible de
sustentar. “Soñamos con utopía
y nos despertamos gritando”
(p. 11). Bolaño propone una
poesía antiburguesa, una vuelta
al arte-vida sin posibilidad alguna
de “normalizar” las relaciones
entre el arte y la sociedad. Se
trataría de derrumbar el muro de
la institución, la distancia entre
el arte y la vida. “Cortinas de
agua, cemento o lata, separan
una maquinaria cultural, a la que
lo mismo da servir de conciencia
o culo de la clase dominante”
(p. 6). La lógica dominante
se centraría, entonces, en
concepciones dogmáticas de arte
bello, negándose a cualquier
irrupción desestabilizante. Un
orden que irremediablemente
parece llevarnos al cagadero
o a la revolución (p.6). Bolaño
plantea un alejamiento de lo que
denomina “lógica y buen sentido”.
Aquí puede advertirse cierta
vinculación con la propuesta de
liberarse de la razón planteada
por los surrealistas; sin embargo,
en Bolaño no existe la promesa
de acceder a la realidad absoluta
de corte trascendentalista, sino
que apela a la acción política
continua, sin un deseo colmado.
Otro aspecto que lo distancia del
surrealismo es no privilegiar el
universo onírico, el subconsciente
ni el automatismo como práctica
de elaboración estética. La
internalización de lo nuevo
devendrá en subversión. Tal
como sucede con los soles
negros, lo negativo se volverá
energía potenciadora interior. Es
decir, aquello que quitaba fuerza,
el acoso del poder o los poderes,
devendrá potencia. Bolaño alude
a la necesidad de recuperar el
ánimovanguardista,peronodesde
el presupuesto moderno que
creía en la “originalidad”, sino
con la clara certeza de que todo
está nombrado, desvelado. Por
tanto el discurso de Bolaño, más
que vanguardista sería posible
de calificar como “neovanguar-
dista” o “postvanguardista”. Ya
no hay secreto posible nos dice
Bolaño: “todo está develado”. Sin
embargo, el secreto siempre
parece rondar en su escritura.
Qué oculta el único poema de
Cesárea; qué hay detrás de
la ventana; qué oculta el libro
que cuelga en el tendedero de
Amalfitano; qué oculta
Archimboldi; qué lleva a Klaus
Haas a cometer la seguidilla de
crímenes o quiénes cometen y por
qué los crímenes de Santa Teresa.
Bolaño necesita que sigamos
las pistas que el texto nos entrega,
infinitizadas,enbuscadeunorigen;
sin embargo, este origen resulta
ser un falso origen. Juega con la
tradición metafísica del inasible,
del secreto del texto, del aura
inalcanzable. Juega con nuestra
ansia desesperada de referente
que nos solucione el problema.
y el manifiesto InfrarealistA
28. | REVISTA MULTITUD28
SPACIO
RÍTICOEC
El referente que el manifiesto
instala es tanto político-social
como estético: “Son tiempos duros
para el hombre, decimos nosotros,
volviendo a las barricadas después
de una jornada llena de mierda
y gases lacrimógenos” (p.7). El
poeta está inmerso en la historia,
es un sujeto político instalado en
la barricada, en lucha callejera
cotidiana. “Nuestra ética es la
Revolución, nuestra estética la
Vida: una-sola-cosa” (p. 8). Ética,
Revolución, Vida: tres términos
que configuran unidad para el
infrarrealismo. Es decir, no es
posible tener ética sin asumir la
revolución y tampoco es posible
vivir si no es estéticamente. O
también, podríamos señalar, no
es posible la revolución sin una
estética y la vida sin ética. Una
sola cosa.
Ahora, quiero volver a la cita de
hace un rato: “El poeta como
héroe develador de héroes, como
el árbol rojo caído que anuncia
el principio del bosque” (p.8). El
poeta es un héroe, aunque se
trata de una heroicidad siempre
degradada. No estamos ante la
figura del gran héroe mítico. Sino
ante un héroe posmoderno que
opera siempre desde la caída
de todo mito. Sin embargo este
héroe menor tiene la capacidad
de generar mediante sus
micropolíticasdevida,decreación,
heroicidades menores o
subalternas. Quiero insistir en el
carácter político del Manifiesto.
Para ello tomemos nuevamente
una cita: “Los burgueses y los
pequeños burgueses se la pasan
en fiesta. Todos los fines de
semanatienenuna.Elproletariado
no tiene fiesta. Sólo funerales
con ritmo. Esto va a cambiar. Los
explotados tendrán una gran
fiesta. Memoria y guillotinas”
(p. 8). La demarcación del lugar
periférico: anteriormente la
Institución Arte, la maquinaria
cultural y, ahora, el territorio de
la comodidad burguesa versus
el proletariado, los explotados:
lugar de los infrarrealistas.
Memoria y guillotinas, dice el
manifiesto,elrecuerdoyelcastigo:
Acción, Acción. Pero también
violencia.
El viaje continuo que atraviesa
la literatura bolañeana es esta
permanente ‘desterritorialización’
de la que nos habla el Manifiesto,
una nomadía que probablemente
no conduzca a un lugar
determinado. El viaje posmoderno
dice adiós al viaje mítico. Ya no
más el viaje trascendental, el
grandioso viaje metafísico, donde
el camino de regreso será la
superación, el aprendizaje, la
revelación. Estamos ante un viaje
probablemente sin retorno, un
desplazamiento infinitizado, sin
destino posible. La heterotopía
fractalizada al límite, donde la
bellezasetramaenladegradación:
“Un arco iris que principia en
un cine de mala muerte y que
termina en una fábrica en huelga”
(p. 11). Nos encontramos con
un sujeto sin lugar posible y en
permanente flujo, que solo tiene
parasílamemoria:“Quelaamnesia
nunca nos bese en la boca. Que
nunca nos bese” (p. 11). Hacia el
final del Manifiesto, Bolaño asume
con certeza: “Soñamos con utopía
y nos despertamos gritando”
(p. 11). Es el tiempo de la post-
utopía y ahora solo queda el
terror. Sin embargo, todavía hay
vitalismo para señalar la necesidad
de recuperar el sentido: “Hacer
aparecer las nuevas sensaciones-
Subvertir la cotidianidad. O.K.
DÉJENLO TODO NUEVAMENTE.
LÁNCENSE A LOS CAMINOS”
(p. 11).
1. En carta al poeta Edgar Altamirano, el también poeta José Vicente Anaya
señala que escribió un ManifiestoInfrarrealista simultáneamente al escrito
por Bolaño. | http://gbooks2.melodysoft.com/appl?ID=infrarrealismo
2. “El infrarreaslismo es un movimiento que Roberto Matta crea cuando
Bretón lo expulsa del surrealismo”. Cf. María Teresa Cárdenas y Edwin Días,
“Fragmentos de una conversación desconocida” en Revista de Libros de El
Mercurio, 25 de octubre de 2003.
29. NOVIEMBRE 2009 |29
ESPACIO CRÍTICO
Entre la música de los 70-80 la banda
Devo tiene un lugar bastante definido
dentro de la música. En un estilo que
varía principalmente entre el postpunk
electrónico y el new wave, tienen
diferentes hits, clásicos, entre
los cuales aquellos que llegaron
principalmente a Chile serían Girl U
Want, Whip It y Peek-a-boo. El disco
que presentaremos aquí, titulado
Freedom of Choice posee dos de
aquellos tres clásicos y representa un
referente dentro de la obra bastante
vasta de este grupo, aunque nos
preocuparemos más de las canciones
críticas de este grupo que en aquellas
de valor meramente estético.
En este sentido cabe destacar la burla
a la supuesta libertad de elegir en la
sociedad actual que muestra la canción
de ese nombre, Freedom of Choice
que da el nombre al disco. A través
de un par de ejemplos irónicos que
incluyen una situación en que tu barco
se hunde y tienes que elegir entre
hundirte y nadar y un poema griego
acerca de un perro que decide tomar
un hueso, lamer el otro, caminar en
círculos y caer muerto, así como la
ironía amenaza nuevamente en los
versos previos al coro exclamando:
“Lo diré de nuevo en la tierra de los
libres, usa tu libertad de elegir”, el
mensaje queda bastante claro.
Otro ejemplo de crítica en este disco
es el tema que sigue a Freedom of
Choice, Gates of Steel (Puertas de
Hierro), que ahonda en el tema de la
“de-evolución”, central en este grupo
que de hecho se llama DEVO por
ese mismo concepto, la idea de que
el hombre no evoluciona sino todo
lo contrario. Así, el tema exclama “el
principio era el fin de todo ahora/ el
mono considera su cola/ está pegado
a ella/ repite hasta que falla/ mitad
estúpido y mitad dios/ un hombre no
está hecho de metal”. Esto junto con la
idea de derribar las puertas de hierro
puede ser considerado como un intento
paramostrarloqueespropiodelhombre,
la irracionalidad, la animalidad que no
logramos ver por la magnitud de los
descubrimientos y logros científicos,
la influencia de la racionalidad, el
positivismo, la idea de una realización
del hombre a través de la ciencia.
“Derríbalas y grita/ la tierra gira muy
lento/ pero la tierra es lo que todos
sabemos/ pagamos por humanidad...”,
lo que muestra a Devo como parte de
esa corriente de pensamiento que
conocemos como posmodernismo.
Finalmente, el último tema del cual
hablaremos aquí será Whip It (Azótala)
que no es una canción sobre
sadomasoquismo (según una
entrevista a Devo efectuada por
Songfacts), sino una parodia a la
sociedad en un estilo imitado al del
libro Gravity’s Rainbow de Thomas
Pynchon. De todas maneras luego de
una lectura a la letra de esta canción
se ve claramente una burla a las ideas
obsesivas y de un cierto culto a la
personalidad, ahondando un cierto
tema de maltrato al resto. “Bajo
cualquier situación, azótala”, grita la
canción.
A través de estas tres canciones se
puede ver el cómo de la influencia
de este grupo sobre las otras bandas
que no es sólo algo musical (influencia
que se podría ver por ejemplo en Los
Prisioneros), es por eso que en el inicio
de este texto cito a Pogo, ex-integrante
de los Fiskales Ad-Hok y de Locos por
Larry que hoy está de vuelta con su
grupo más conocido, Los Peores de
Chile. Seguramente esta idea de burla
debió haberlo influenciado más bien
a través de bandas como los Dead
Kennedys,perolaideaeslamisma.Una
crítica con cara de risa, tal como otro
personaje que nos enseña a reír: “En
verdad, semejante a mil infantiles car-
cajadas diferentes penetra Zaratustra
en todas las cámaras mortuorias,
riéndose de esos guardianes nocturnos
y vigilantes de tumbas, y de todos los
que hacen ruido con sombrías llaves” .
En sus Mitologías, Barthes define
al mito ideológico como un sistema
semiológico (significante+significado
=signo) que agrega un concepto a
un signo previamente establecido. Y
así podemos considerar al trabajo de
grupos como Devo en sus letras, es
la elaboración de mitos, de imágenes,
de nuevas significaciones que buscan
en cierta medida representar nuestra
realidad social de ópticas diferentes.
Después de todo, sí existen los mitos
de izquierda.
NOTAS
1. “El adivino”. Segunda parte. Así habló
Zaratustra. Friedrich Nietzsche. Alianza
Editorial. Pág. 200.
–La música que haces es una respuesta, por lo menos, divertida a todo lo que
te incomoda.
–Amarguras no quiero. Hay que tratar en lo posible de enfrentarlo con ironía
porque me parece patético. Algunos personajes me pueden parecer siniestros, y
si tuviera que dar mi comentario no los trataría con mucha ironía: los mandaría a
la concha de su madre. Pero vivo en una sociedad que me causa risa, la veo tan
torpe, tan ingenua, con tanto retraso de ideas. Cuando relato estoy relatando el
mundo. Es como un noticiario del siglo XX. Es como eso, tío, una cosa insana.
- Entrevista de Luis Felipe Saavedra a Pogo en MUS.cl
Miguel Carmona
Estudiante de 4º medio y Miembro del comité editorial de Multitud
La libertad de elección en el proceso de
“de-evolución” / freedom of choice, Devo.
30. | REVISTA MULTITUD
SPACIO
RÍTICOEC
30
En más de en una ocasión intenté
escribir sobre el Che, tarea en la
que es demasiado fácil caer en el
panfleto, en gritos de inclemencia
excesivamente arraigados al
registro patético y espetados
como si fueran balas echadas
al vacío o expulsadas desde un
cañón muy ancho como para
salvarlas de una trayectoria
ridícula.
Si hoy nuevamente intento escribir
sobre el che es luego de haber
visto la saga de Soderbergh, “Che
el argentino” y “Che guerrilla”,
sin duda uno de los más bellos
homenajesalguerrilleroargentino,
encarnado en la cinta por
Benicio del Toro. Es bello porque
justamente no es panfleto, porque
no hay un intento de recurrir al
registro patético para emocionar
al espectador con mecanismos
vulgares. Al contrario, es una
película compleja, los guiños son
sutiles y la realidad descarnada: o
sea, de que se pelea, se pelea y de
que se fusila, se fusila. La película
rescata al Che en su oficio mismo,
la guerrilla, y para quien no cree
en la revolución, para quien
no cree en la guerrilla y que no
cree siquiera en el guerrillero, la
película no se sustenta en la
creación de un mito humano como
lo hiciera, por ejemplo, “Diarios
de Motocicleta”. Por el contrario -y
es donde reside tal vez uno de los
valores fundamentales de la saga-
el héroe es enmarcado en un
contexto donde su acción depende
de la acción de otros hombres
y de los determinantes de un
contextos. Es lo que intenta
dejarnos claro Soderbergh en la
primera parte de la película donde
la experiencia guerrillera de la
revolución cubana se alterna con
el viaje del Che a NY para su
famoso discurso en la ONU donde
ya convertido en un mito,
entrevistado por una periodista
norteamericana, intenta
desmitificar su propia figura. Es
algo así como bien decía una crítica
en The Clinic, un “cine con
vocación marxista del siglo XXI,
opuesto por esencia a la propuesta
capitalista-hollywoodense”. Por
lo demás, “Che: El Argentino” es
quizás uno de los retratos más
vividos de la revolución cubana
y podemos en ella descubrir los
fundamentos políticos que
movieron aquella generación
guerrillera, la fuerza con que la
propuesta del hombre nuevo se
forjó en los combatientes y, en
ese mismo sentido, el como se
formó la ética revolucionaria del
Che, su sentido de la disciplina y
la consecuencia.
Sin embargo, a la pregunta ¿quién
era el Che?, es quizás “Guerrilla”,
la segunda parte de la saga,
la que mejor responde. El Che
enfrentado al asedio permanente,
el Che enfrentado a las dificultades
de la organización de la guerrilla,
El Che
31. NOVIEMBRE 2009 |
ESPACIO CRÍTICO
31
el Che enfrentado a la falta de
apoyo del pueblo boliviano, el
Che enfrentado a la derrota;
inevitablemente, también es el
personaje enfrentado al sentido
de su obra, cuestionado por ella.
Es tal vez lo que hace su dignidad
más evidente, porque su fe en la li-
bertad va más allá de su existencia
y esto nos lo deja ver cuando
entrevistado por uno de sus
captores sobre las causas del
nulo apoyo del pueblo boliviano
dice: “Tal vez nuestra derrota los
haga despertar”. Soderbergh nos
muestra la rápida degradación del
proceso revolucionario boliviano
que desde un principio parece
condenada al fracaso. Se trata de
una guerrilla torpe y que plantea
un dilema: contrariamente al caso
cubano, no se trató en Bolivia
de un movimiento de origen
nacional que fuese la expresión las
fuerzas sociales activadas en el
país y que por definición nacen de
su propio potencial. Al contrario,
era una guerrilla exportada. Para
Nicolás Slachevsky
Estudiante de 4º medio y Miembro del comité editorial de Multitud
el Che, sin embargo, la lucha no
espera, y la muerte es secundaria
cuando ya se han tomado las
armas, o como dijo Juan Gelman
que oyó decir a un servidor: “Pero
si él dice que no hay que pelear
hasta morir, hay que pelear hasta
vencer, así que no está muerto”,
lo que es lo mismo que: “En
cualquier lugar que nos sorprenda
la muerte, bienvenida sea, siempre
que ese, nuestro grito de guerra,
haya llegado hasta un oído
receptivo y otra mano se tienda
para empuñar nuestras armas”.
El Che es sin duda un referente
obligatorio para todo aspirante
a revolucionario, pues de cierta
manera es la revolución misma,
y no el poder. “Otra vez siento
bajo mis talones el costillar de
rocinante; vuelvo al camino con
mi adarga al brazo” dice en la
carta de despedida a sus padres.
Es de donde se construye el ícono
que proyecta la imagen de un cristo
al final del milenio. En su Elegía al
frente a Soderbergh y la historia
Che, Lihn dice que “las condiciones
de la tragedia están dadas, y
no faltan los héroes;/ más bien
ellos forman ahora un ejército
regular,/ un río subterráneo
que se ramifica en los lugares
estratégicos”. Es también la idea
de la película, centrada en los
pasos del héroe quijotesco en un
contexto de héroes.
En la última escena de la película
se vuelve a la imagen en que el
Che desde el Granma mira el mar
y mira a sus compañeros. Es tal
vez uno de los únicos momentos
de la película en que se recurre a
la subjetividad del personaje. La
mirada del Che es infinita, y sin
embargo,¿quéproyecta?¿Esacaso
la derrota? ¿Es acaso una mirada
inquisidora hacia Fidel y las
futuras figuras del poder en
Cuba? ¿Es la incertidumbre o
la certeza de una victoria final?
¿Qué nos dice la última mirada del
revolucionario?