Este poema habla sobre encender tres hogueras para esperar la llegada de Jesús en Navidad. La primera hoguera será en lo alto de un monte como señal de esperanza. La segunda hoguera estará al borde de un camino para representar la paz. La tercera hoguera estará en el centro de una plaza para simbolizar la alegría. El autor espera que Jesús encienda también una hoguera en su casa para renovarlo con su amor. El poema desea que el fuego de Jesús ilumine al mundo entero con amor
4. Han pasado más de veinte siglos desde aquella vez primera, y sigue estando dormido el mundo cuando tú llegas. Y la noche de las gentes sigue ajena a tus estrellas, y tu voz sigue encontrando desiertos cuando resuena...
5. Mas tú, Señor de la historia, sigues viniendo a la tierra, sigues pidiendo posada en una calle cualquiera,
6. Esta vez, para esperarte voy a encender tres hogueras. Y estás a la puerta y llamas como aquella vez primera.
7. Una en lo alto del monte, será ESPERANZA en vela: para leer desde lejos los signos de tu presencia; E S P E R A N Z A para descubrir tu rostro, en todo rostro que vea; para alertar tu venida, como hicieron los Profetas.
8. Pondré otro fuego encendido al borde de la vereda, o en el cruce, donde a veces, se pierde el paso y la espera. Y será un fuego de PAZ con una llama serena, porque la paz es camino que siempre a tu encuentro lleva. P A Z C a l l e d e l a P A Z
9. En el centro de la plaza, a donde las gentes llegan a buscar, aún sin saberlo, la felicidad que anhelan, pondré un fuego de ALEGRIA entre canciones de fiesta.