El documento habla sobre un circo con muchos payasos, acróbatas, elefantes, leones, monos y malabaristas que formaban una gran familia. Por la noche, cuando todos dormían, dos simpáticos ratoncillos asomaban sus cabezas debajo de las butacas buscando trozos de palomitas y pipas para comer. Después de comer muchas pipas, los ratoncillos tenían la barriga llena.