El turismo histórico se centra en sitios, monumentos y manifestaciones del pasado como objetos arqueológicos, arquitectura colonial e histórica, y obras de arte. El documento describe un itinerario de turismo histórico que invita al turista a sumergirse en la historia a través de alojamiento en un hotel colonial, dramatizaciones de la historia por actores locales, y cenas y paseos vestidos con ropa de la época colonial para que el turista se sienta parte de la historia.