GUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIA
Homenaje a Federico García Lorca
1. A Federico García Lorca
en el 75 aniversario de su
muerte
Poemas realizados por alumnos de
1º de Bachillerato De Artes
Profesores coordinadores
Elena González
Francisco Mendoza
IES CERRO DEL VIENTO (MÁLAGA)
2011-12
2. VERDE QUE TE QUIERO VERDE
Con motivo de la celebración de 75 aniversario de la muerte de Lorca, nos planteamos
qué actividad realizar en nuestro centro buscando implicar al alumnado una propuesta
original y creativa.
Aprovechando que disponemos del Bachillerato de Artes se nos ocurrió desarrollar una
tarea que uniera poesía y escultura.
La inspiración para la actividad concreta surgió a partir del Romance Sonámbulo de
Lorca que hace referencia a un color. Se nos ocurrió que, utilizando el primer verso de
dicho romance, los alumnos crearan sus propios poemas cambiando el color verde por
otro color de su preferencia. Ese mismo color se utlizaría para pintar las esculturas que
realizarían en la clase de Volumen.
Las esculturas, realizadas con papel reciclado y soporte de alambre, debían representar
la imagen de un lector en posiciones diversas.
El resultado es el que mostramos a continuación y creemos que os sorprenderá por su
creatividad como a nosotros nos ha sorprendido.
Elena y Paco
3. Verde que te quiero verde.
Verde viento. Verdes ramas.
El barco sobre la mar
y el caballo en la montaña.
Con la sombra en la cintura
ella sueña en su baranda,
verde carne, pelo verde,
con ojos de fría plata.
Verde que te quiero verde.
Bajo la luna gitana,
las cosas la están mirando
y ella no puede mirarlas.
Verde que te quiero verde.
Grandes estrellas de escarcha
vienen con el pez de sombra
que abre el camino del alba.
La higuera frota su viento
con la lija de sus ramas,
y el monte, gato garduño,
eriza sus pitas agrias.
¿Pero quién vendra? ¿Y por
dónde...?
Ella sigue en su baranda,
Verde came, pelo verde,
soñando en la mar amarga.
4. Compadre, quiero cambiar
mi caballo por su casa,
mi montura por su espejo,
mi cuchillo per su manta.
Compadre, vengo sangrando,
desde los puertos de Cabra.
--Si yo pudiera, mocito,
este trato se cerraba.
Pero yo ya no soy yo,
ni mi casa es ya mi casa.
--Compadre, quiero morir
decentemente en mi cama.
De acero, si puede ser,
con las sábanas de holanda.
¿No ves la herida que tengo
desde el pecho a la garganta?
--Trescientas rosas morenas
lleva tu pechera blanca.
Tu sangre rezuma y huele
alrededor de tu faja.
Pero yo ya no soy yo,
ni mi casa es ya mi casa.
--Dejadme subir al menos
hasta las altas barandas;
¡dejadme subir!, dejadme,
hasta las verdes barandas.
Barandales de la luna
por donde retumba el agua.
5. Ya suben los dos compadres
hacia las altas barandas.
Dejando un rastro de sangre.
Dejando un rastro de
lágrimas.
Temblaban en los tejados
farolillos de hojalata.
Mil panderos de cristal
herían la madrugada.
Verde que te quiero verde,
verde viento, verdes ramas.
Los dos compadres subieron.
El largo viento dejaba
en la boca un raro gusto
de hiel, de menta y de
albahaca.
¡Compadre! ¿Donde está,
díme?
¿Donde está tu niña amarga?
¡Cuántas veces te esperó!
¡Cuántas veces te esperara,
cara fresca, negro pelo,
en esta verde baranda!
Sobre el rostro del aljibe
se mecía la gitana.
Verde carne, pelo verde,
con ojos de fría plata.
6. Un carámbano de luna
la sostiene sobre el agua.
La noche se puso íntima
como una pequeña plaza.
Guardias civiles borrachos
en la puerta golpeaban.
Verde que te qinero verde.
Verde viento. Verdes ramas.
El barco sobre la mar.
Y el caballo en la montaña.
Federico García Lorca
7. CIAN
Cian que te quiero cian.
Eres frío como el hielo,
pero alegre como el cielo.
En todas partes te puedo hallar:
en el cielo, en el río,
en el lago, en la mar.
La naturaleza tiene
de tu esencia mil colores
en las olorosas flores
que nos gusta respirar.
Si en el agua no estuvieras,
si en el río no te hallaras,
si en el cielo no brillaras,
no serían más agua o río,
no sería más cielo frío,
pues les faltarías tú.
Cian que te quiero cian.
Adrián Muñoz
8. MORADO
Morado que te quiero morado.
Moradas las flores del campo,
moradas las risas del árbol dorado
y, morado, tú eres guía
de una joven tímida y perdida.
En mi vida, el día alegras
con tus vetas lilas y negras.
Morado, ausente del arco iris,
pero al acabar el día,
cuando el sol se va,
caminas de la mano
con el cielo estrellado.
Morado que te quiero morado.
desde el alba hasta el anochecer
alegras este corazón olvidado.
Raquel Olmedo
9. BLANCO
Blanco que te quiero blanco.
Traes a mi mente mujeres hermosas,
irreales musas de pálidas caderas.
Tiernas, delicadas y tristes;
sensuales, libres y venenosas.
Musa, musas, musa:
melifluo maná misterioso:
tu visión malcría mi mente enamorada
y acuchilla mi corazón cuando amanece.
Blanco que te quiero blanco.
Blanca que te quiero… tierna,
vestida por Sorolla.
Margaritas florecen de tus pechos
y visten tu cuerpo maternal, tan lleno.
Melina Pivato
10. VERDE MAR
Verde mar que te quiero verde mar:
verde mar el cielo, verde mar su mirar;
verde mar son sus ojos que me hacen soñar;
verde mar es la lluvia que huele a humedad;
verde mar los días soleados después de una
tempestad;
el verde mar me ilumina cada día al despertar.
¡Oh! Verde mar: tú me llenas de alegría y
tranquilidad,
me incitas a sumergirme en las profundidades del
mar,
en sus aguas cristalinas y arrecifes de coral,
el fluir de las corrientes transparentes disfrutar
y los peces de colores en soledad admirar.
Verde mar que te quiero verde mar:
eres vida, eres sueño, eres agua verde mar.
Ana Delgado
11. VERDE AGUA
Verde agua, que te quiero verde agua,
verde el reflejo
de una bella mirada.
Alma transparente
como el agua clara.
Tu naturaleza es pura,
la franqueza te destaca,
y con tu sola presencia,
la tranquilidad me abraza.
Verde agua, que te quiero verde agua.
Cobíjame en tu seno,
tumbémonos en el prado,
y lléname de armonía
y cúrame con tu abrazo.
Y te quiero verde,
y te quiero agua,
en mi vida eres,
verde luz de esperanza.
Verde agua, que te quiero verde agua.
Myriam Sarriá
12. AGUAMARINA
Aguamarina que te quiero aguamarina,
tan transparente, tan cristalina
como las aguas que fluyen libres por los mares;
tan viva, tan alegre
como las propias corrientes marinas.
Aguamarina que te quiero aguamarina.
Sus ojos translúcidos reflejan toda tu hermosura
frágil y fugaz
que cae del cielo en forma de lluvia.
Aguamarina que te quiero aguamarina.
Color del agua que necesitamos;
color que veremos
desde que nacemos hasta ancianos.
Aguamarina que te quiero aguamarina.
Brillante en un día iluminado
cuando el sol te toca con sus rayos.
Color de mar, que inunda de vida.
Suscitas alegría en los días de verano.
Felicidad para un niño que juega en la orilla;
color de agua que se escapa entre las manos.
Noemí Aguilar
13. PÚRPURA
Púrpura que te quiero púrpura.
Dulce dama intocable, no me dejas;
tierna fruta púrpura, déjame entrar.
No te veo, amor prohibido.
Sé mía: la distancia me tortura.
Eres púrpura, cruel ladrona de mi tesoro.
Juegas con él.
Púrpura que te quiero púrpura.
Enciérrame en tu belleza, soy tuyo;
púrpura nuestros ojos: mírame, mírate.
Esa luz que crece nuestra nos rodea.
Frágil sentimiento púrpura, tú me haces fuerte:
el destino nos une, pero el púrpura nos enamora.
Sólo sueño y existo por verte.
Joshua Novosel
14. ALBARICOQUE
Albaricoque que te quiero albaricoque,
lustras tu suave seda y carne;
acurrucado, tu corazón de alcornoque
susurra solo soledades.
Cordiformes hojas de palitroque,
singular surco silvestre,
con destreza combates el jaloque
que le llega a tu entorno alpestre.
Albaricoque que te quiero albaricoque,
del árbol vuelas en picado,
tu ausencia te lamenta con el disloque,
peso pesado bate su tallo.
Tessa Gill
15. ESMERALDA
Esmeralda que te quiero esmeralda.
Desprenden tus ojos,
ojos de profundas aguas,
luces de color,
¡oh, bella dama!
Abandonado por tu amor,
desprendo mil lágrimas,
enredado el corazón
en las redes del alma.
Esmeralda que te quiero esmeralda.
Luces de color
que me dan esperanza.
Cuando tus ojos se fueron,
impregnó su color en mi alma:
sólo el color permanece
y todo lo demás pasa.
Salvador López
16. NEGRO
Negro que te quero negro.
Negra a noite apagada,
negro o vazío sombrío.
Negro que te quero negro.
Negro cúpula celestial,
Escura nada innegrecida.
Negro que te quero negro.
Na dor que me desgarra,
No sentimento meu.
Solta a negra daga
que apágase,
e deixa cair o teu choro
Em este manto,
E solta já a tua tristeza:
Tem forza,
Qua as mortes ja se vâo
e nos deixâo.
17. LAPISLÁZULI
Lapislázuli que te quiero lapislázuli.
Azul oscuro y bello,
lleno de impacto y de fuerza.
Lapislázuli que te quiero lapislázuli.
La joya que regaló
el joven príncipe azul
a su soñada princesa.
Lapislázuli que te quiero lapislázuli.
El cielo al anochecer
que pronto se llena de estrellas
que guían al príncipe azul
hasta su amada princesa.
Lapislázuli que te quiero lapislázuli.
Tú me llenas de alegría
con absoluta destreza
y apartas de mí cada día
la insoportable tristeza.
Ritu Khemlani
18. Rosa que te quiero rosa.
El soñoliento crepúsculo
aún con restos de estrellas
agotaba el tiempo
de nuestra joven fantasía.
Rosa que te quiero rosa.
Amantes infantiles riendo.
El sabor de sus labios.
Bajo el manto del cerezo,
un beso tierno y… robado.
Rosa que te quiero rosa.
El color de sus mejillas en invierno,
el aroma de su oscuro pelo
y su joven corazón
ingenuamente enamorado.
Rosa que te quiero rosa.
Rosas mis recuerdos,
rosas los momentos tiernos,
rosas tus palabras, tus juegos…
Rosas las manos que esperan tu regreso.
Miriam Benezra
19. AZUL CELESTE
Azul celeste que te quiero azul celeste.
Al no poder tenerte cerca
surqué el azul del cielo:
volando entre gaviotas
recordarte era lo más bello.
Azul celeste que te quiero azul celeste.
Al no poder tenerte cerca
surqué el azul del mar:
nadando entre delfínes
no te podía olvidar.
Azul celeste que te quiero azul celeste.
Al no poder tenerte cerca
surqué un río de lágrimas
lloradas por tu amor
que a tus orillas llegan.
Nacho Laguna
20. VERDE LIMA
Verde lima que te quiero verde lima
juntos, unos con otros,
como guanina y citosina,
nos dan la vida a nosotros
algunos con sus aviesos troncos,
bohemios del bosque, como orcos.
Me dirijo a la más alta cima:
Subo para ver los cuadros
que me deja el verde lima.
Verde lima que te quiero verde lima;
verde lima tropical,
tantos colores y ninguno es neutral,
tú que posees tanta belleza natural...
Verde lima que te quiero verde lima,
tú que de tu verde rellenas tantas millas
eres esperanza que brota sin semilla.
Verde lima que te quiero verde lima.
Tú, tu tallo y tu carruaje:
pimpollo que te abres a lo salvaje,
gratificándonos con tu cualidad amable,
Verde lima que te quiero verde lima.
Antonio José Sánchez
21. BLANCO
Blanco que te quiero blanco.
Ancho invierno delgado,
blanco altruismo español,
paz entre hermanos,
paz con acento andaluz.
Hoguera granadina silenciada
calentando sobre el cielo del sur.
Blanco que te quiero blanco.
Armazón duro como mármol,
cabezas escondidas en el barro
juntas, extrañas y acongojadas.
Paredes andaluzas
queriendo nacer otra vez.
Nacho Vílchez
22. BURDEOS
Burdeos que te quiero Burdeos.
la juventud de dos bocas
que se juntan al besarse
y se tiñen de carmín.
Inflamas el corazón de los que se enamoran
y marchitas las rosas de los desencantados.
Burdeos que te quiero Burdeos.
Eres ira en los corazones de los hombres
cuyo pecho tiñes del color de las arenas de los
continentes.
Envejeces como el vino
dejando nuestros corazones jóvenes
como la primera vez que probamos
los labios teñidos de carmín.
Tamara Martín
23. AZUL ULTRAMAR
Azul ultramar que te quiero azul ultramar:
en la tierra, el frío;
la muerte en la mar.
Azul ultramar que te quiero azul ultramar:
como el mar que separa
a los que se podrían amar.
Con entrada, sin salida, como el mar.
Hielo roto, hielo blando, hielo azul ultramar.
La fuerza del torbellino,
del huracán y la tempestad.
Azul ultramar que te quiero azul ultramar:
es el filo de una espada
cortando el viento en canal.
José Antonio Sánchez