SlideShare uma empresa Scribd logo
1 de 16
Baixar para ler offline
Lectura analítica de la obra de Richard Sennet
         "La corrosión del carácter"

Aplicación de las narrativas como metodo en
    ciencias sociales al estudio de casos.




                    Núria Pérez Olid ©
                    Facultat de Ciències Econòmiques i
                    Empresarials UB
                    Sociologia General

                                                     1
Indice temático:

•   Introducción: Breve descripción de la obra y resumen de los apartados y conceptos más
    importantes como investigación multidisciplinar en la que conviven antropología, economía
    y sociología para diseccionar lo más sustantivo en el tránsito desde el "capitalismo de clase
    al sistema actual o capitalismo flexible". Pag: 3- 4

•   Lectura analítica de la obra: Profundización en el texto de Sennet respetando su línea
    argumentativa y releyendo en clave personal sus conceptos fundamentales. Pag. 5-10

•   Las narrativas como método en las ciencias sociales: Aproximación al concepto
    narrativas en sus atributos ontológicos y epistemológicos, en virtud a los cuales se pueden
    comprender los sentidos del mundo social y del individuo. Pag. 11

•   Estudio de casos: Presentación de 2 biografías y narrativas asociadas de los
    protagonistas según el estilo de Sennet. Pag. 12-15

•   Bibliografía: Pag. 16




                                                                                               2
Introducción:

Richard Sennett, sociólogo norteamericano afincado en Londres y actual profesor de la London
School of Economics, aborda en su libro La corrosión del carácter (Las consecuencias
personales del trabajo en el nuevo capitalismo) - una investigación multidisciplinaria en la que
conviven antropología, economía y sociología para diseccionar lo más sustantivo en el tránsito
desde el "capitalismo de clase al sistema actual o capitalismo flexible".

Sennet contrapone el modelo estructural del capitalismo fordista al nuevo modelo de
capitalismo que puede resumirse en el siguiente cuadro:


              MODELO ANTERIOR                              NUEVO MODELO
              Fordismo /taylorismo                 Especialización flexible / postfordismo
                      Rigidez                      Flexibilidad – capacidad de respuesta
              Producción en masa                           Producción en lotes
              Maquinaría específica                        Maquinaria flexible
             Productos normalizados                     Productos diferenciados
           Just in case / gran almacenaje            Just in time / almacenaje mínimo
                  Descualificación                            Cualificación
                Integración vertical                   Descentralización decisiones
              Puestos individualizados             Integración tareas / trabajo en equipo
                  Fábrica total                            Fábrica difusa


Sennet estudia las consecuencias psico-socio-económicas que ambos modelos implican sobre
el individuo, en su carácter, en relación con los otros, en la forma de organizar resistencia, en
definitiva en su percepción y ubicación del y en el mundo.

La reflexión que Sennett hace sobre el fracaso laboral es interesante. Según él, el fracaso más
profundo hoy día consiste en "no poder estructurar una vida personal coherente; no realizar
algo precioso que llevamos dentro; no saber vivir sino meramente existir". (p.125).

Del análisis de Sennet se desprende que las nuevas condiciones laborales son, más que
requisitos que demanda un nuevo contexto económico, nuevas estrategias de dominación que
requieren el desmantelamiento de los derechos laborales y sociales (recorte de prestaciones
por subsidios, recortes en gastos de salud, jubilaciones, etc.) y atacan desde su base toda
posible resistencia por parte de la clase trabajadora, sometiendo a todos sus miembros a la
continua amenaza del paro. Sin embargo, este proceso está socavando la legitimidad del
capitalismo actual. Richard Sennet concluye su libro así: "Un régimen que no proporciona a los
seres humanos ninguna razón profunda para cuidarse entre sí no puede preservar por mucho
tiempo su legitimidad". (p. 155).


Sennet se basa en cuatro estudios de caso:

1) Un joven consultor -treintañero- que ha triunfado profesionalmente pero que vive una
   sensación de fracaso personal como padre al no poder encarnar los valores morales que
   intenta transmitir a sus hijos, al no poder ofrecer un ejemplo de vida profesional como lo
   recibió de su padre, y al vivir fugazmente la amistad y la comunidad local de residencia,
   debido a los repetidos cambios de ciudad que ha tenido que afrontar. Su sensación es que
   la nueva economía ha lanzado a la deriva su vida interior y emocional.


                                                                                               3
2) Un grupo de ingenieros que ronda la cuarentena y que ha sido despedido de IBM. La
   sensación de fracaso de este grupo es desoladora. Uno de los miembros dice: "Nos
   hicieron sentir como si fuéramos la causa de su fracaso [el de la empresa IBM, que registró
   fuertes pérdidas] mientras los peces gordos hacían millones". Un efecto especialmente
   grave para la vida social es que todos los miembros del grupo habían perdido interés por
   los asuntos cívicos y se habían refugiado en su interior, haciéndose miembros de las
   iglesias locales.

3) El caso de una mujer madura (53 años) que entra a trabajar en una empresa de publicidad.
   Constata cómo su experiencia se desprecia, y se presenta al trabajador maduro como
   inflexible y reacio al riesgo, en definitiva como inútil. Los prejuicios respecto a la edad,
   según Sennett, sirven a diversos propósitos: en primer lugar, los trabajadores maduros
   suelen ser más críticos con sus superiores que los jóvenes. Aunque suelen ejercer la
   crítica por ser más leales a la empresa, el hecho molesta a sus superiores. Por otro lado,
   los trabajadores mayores son objeto de agrupamiento en un banco de candidatos
   fácilmente disponibles para el despido ante una eventual reestructuración.

4) Un grupo de panaderos que sienten la inutilidad de su larga experiencia en el oficio, ya que
   las tareas a realizar cuando se moderniza la empresa se controlan desde los iconos de la
   pantalla del ordenador, lo cual puede hacer cualquier trabajador sin experiencia. Para el
   enfoque marxista esto representa un paso más allá del despojo sufrido por los trabajadores
   al desposeerles el capitalismo de los medios de producción: en la sociedad de la
   información también se les despoja del conocimiento, que queda reservado para una élite
   de ingenieros.




                                                                                             4
Lectura analítica de la obra:

En la obra, Sennett revisa los cambios que están transformando la experiencia laboral en
sociedades donde la movilidad a este respecto es casi compulsiva. Los efectos “corrosivos” de
esta movilidad en perpetua aceleración sobre el carácter de las personas son tratados
vívidamente gracias a la articulación casi literaria de una serie de historias laborales trabadas
en la historia intelectual del propio Sennett.

Algunas de las historias del libro retoman y continúan indagaciones anteriores del autor, otras
incorporan nuevas experiencias siempre desde el conocimiento directo del autor. De modo que
el libro a la vez que relata una transformación importante en las ideas sobre el trabajo del
mundo en que vivimos, testimonia de los cambios que el propio Sennett ha tenido que asumir
para entenderla.

En efecto, una de las formas privilegiadas de describir esta transformación se refiere a la
ilegibilidad con la que el mundo del trabajo se muestra a quien se aventura en él. Nadie parece
ya poder saber con un mínimo de certidumbre cuándo ha prosperado, ni qué supone una
promoción laboral; tampoco sabe nadie a ciencia cierta quién es el responsable ni cuánto
durará su relación laboral.

Como navegante antiguo con cielo nublado, por abundar en un paraje metafórico humanístico
muy frecuentado por el propio Sennet, quien trabaja hoy se encuentra a la deriva. Me parece
leer que, al mismo tiempo, este mundo se ha hecho algo ilegible para Sennett quien, con toda
la honradez que sólo se puede pedir a un maestro, no deja de hacer constar sus sorpresas
ante el sesgo que ha dado el capitalismo, que ha invalidado muchas de las convicciones acerca
del futuro del mismo. El capitalismo parece tener en la manga muchos más ases de los que
Marx previó. El último era impensable y, sobre todo, inquietante: ha llevado al límite la libertad
hasta “imponerla” al trabajador. ¿Dónde resistir? El carácter parece ser el último baluarte para
hacer frente a un régimen económico que se desvanece en el aire sin dejar de hacer sentir su
peso.

La reflexión que cierra el final del libro revela su esperanza en una resistencia que empieza en
el interior:

"Por lo tanto, mientras entraba y salía de las salas de conferencias, entre montañas de
limosinas y de policías en las montañosas calles del pueblo, me pareció que este régimen
podría la menos perder su control sobre las imaginaciones y sentimientos de los que están
abajo. He aprendido del pasado duro y radical de mi familia: si se produce un cambio, se da
sobre el terreno, entre personas que hablan por necesidad interior más que a través de
levantamientos de masas. No sé cuáles son los programas políticos que surgen de esas
necesidades internas, pero sí sé que un régimen que no proporciona a los seres humanos
ninguna razón profunda para cuidarse entre sí no puede preservar por mucho tiempo su
legitimidad." (p. 155).

Lo que la movilidad laboral suscita en sociedades donde el trabajo es un bien escaso y el
esfuerzo de todos se orienta a conservarlo es la ansiedad de la pérdida y la búsqueda, es decir
convoca una narrativa característica de cuento de hadas. Pero en una sociedad donde el
trabajo no escasea tanto como provoca la insatisfacción del fracaso, el efecto de la movilidad
es más complejo y sutil, toca un momento del ser humano que Sennett localiza en el carácter.
De este modo el juicio se ubica entre el exterior y el interior, esquiva la oposición entre ser y
parecer, y da a lo que vemos de los demás la dignidad de una modesta verdad; un rasgo de
carácter es a la vez propio y público, se ofrece con una legibilidad especial que no tiene ni
aspira a lo único de la personalidad, sino a ese rango de generalidad que admite el juicio, una

                                                                                                5
generalidad que no deriva del alcance de una definición, sino de la constancia y la permanencia
que percibimos en la experiencia del trato con los demás.

Sennett destaca el valor ético del carácter, inseparable de los tiempos largos, que encuentra
expresión en la lealtad, el compromiso, la capacidad de sacrificar lo inmediato en atención a un
deseo más pleno y abarcante. Hablar de carácter exige disponer de un tiempo ancho en el que
percibir el valor del comportamiento de los otros y en el que mostrar la amplitud del propio.

La ojeada sinóptica sobre nuestra vida laboral haría posible en estas condiciones el relato de
cómo hemos llegado a ser lo que somos, expertos conocidos y reconocidos como tales gracias
a una experiencia amplia, una historia de la que derivar incluso consejos y moralejas.

En un mundo de lo inmediato y del corto plazo, de la relación superficial que puede ser
sesgada de raíz sin rozar siquiera la piel de los que la entablan, hablar de carácter es
imposible, y la historia está amenazada constantemente.

Las biografías, en efecto, se responden para componer un análisis de la degradación personal
y una posible salida a la dignidad. En esta ocasión destacare los momentos que parecen dar al
ensayo un ritmo en tres tiempos

He tomado tres historias, la de Rico, la de Rose y la de los técnicos de la IBM, que nos
permiten construir una suerte de narrativa de liberación, precisamente la que parece abolida
por las nuevas formas de trabajo, una que nos permita imaginar un futuro más humano. A la
negación neocapitalista responde Sennet articulando su investigación con “el sentido de un
final”, tímido pero esperanzado.

Una primera historia, la de Rico, nos habla de un éxito, de un hombre que representa a la
perfección el sentido “actual”, o al menos inminente, del trabajo, que se resume en una
disponibilidad absoluta para recomenzar en nuevos empleos desde cero, no ya en el sentido de
su categoría o escalafón. Se trata del cero más sutil, aquel por el que su formación anterior, su
experiencia adquirida en una práctica continuada, sus contactos y conocimientos previos, su
historia laboral en definitiva, no valen, es más, representan un lastre que dificulta su adaptación
a nuevas tareas que exigen una apertura incondicional, una sociabilidad exacerbada y una
cooperación que presenta matices de autosacrificio al equipo.

Una reorientación radical de la idea de empresa, que considera, al parecer según el grueso de
los teóricos de la cuestión, que la antigua gran corporación jerárquicamente organizada y
providencialmente previsora en torno a proyectos a largo plazo es un mastodonte inoperante,
ha encontrado una nueva fórmula que se ha convertido ya en imperativa.

La clave de esta historia de Rico es que, a no ser por el propio Sennett, Rico no la tendría. Las
flexibles condiciones laborales a las que tan bien se ha adaptado y que le han procurado un
triunfo envidiable que pocos alcanzan le han privado de la posibilidad de disponer y exhibir una
historia. Rico se percata de las pérdidas a las que se ve abocado por su éxito, la del control de
su propia vida, la de los vínculos sociales y familiares. Especialmente dramática es la
incapacidad de “dar ejemplo” a sus propios hijos, incapacidad algunos de cuyos efectos
conservadores Sennett subraya: la exaltación de la disciplina en los colegios que compensaran
la que los padres y madres ya no pueden dar.

Una de las partes más atractivas para una lectura analítica del libro es, obviamente, la que
toca al lenguaje, a la vez síntoma privilegiado del cambio y medio terapéutico en la propuesta
de Sennett. El que emplea Rico tiene tabúes muy reveladores: esquiva expresiones que
connoten pasividad: un despido es traducido a propia iniciativa, la movilidad es vocación de
libertad en forma de responsabilidad absoluta por todo lo que le atañe. Ficticiamente ha
                                                                                                 6
realizado una de las paradojas estoicas más escandalosas: quiere todo lo que le pasa. Pero el
modo de hacerse a esta condición sin punto arquimédico es una resistencia a todos los
vínculos que empieza y culmina en el más insidioso, una resistencia al propio carácter, al sí
mismo como firmeza destilada por un tiempo propio de vida, por una experiencia que se ha
consolidado en un saber hacer mejor. Consecuentemente la resistencia se revela para Sennett
vacua, como dejan constatar las inquietudes que asaltan constantemente a Rico sobre el
control que alcanza a tener sobre su vida. El movimiento incesante en el que Rico hace
ejercicio de su libertad acierta sólo a trazar un vacío poblado por la nada.

La historia de Rose desempeña el papel de bisagra. Es la historia de quien desde el modo
tradicional y lento del trabajo se lanza a la barahunda del movimiento compulsivo de la
empresa más desbocada y vana, la de la publicidad. Es una historia ejemplar para Sennet,
pues ya no tiene que rastrear insatisfacciones más o menos bien disimuladas, sino que
tenemos por fin un testimonio directo de quien se retiró no por fracaso o falta de éxitos, sino por
disgusto e incapacidad confesa de sobrellevar esos modos absolutamente intrascendentes de
entender la propia actividad profesional. No es la clásica alienación de los medios y del
producto, ni la explotación salvaje de la capacidad de trabajo, ni de unas condiciones
dickensianas todavía convocadas por ciertos economistas para conjurar los males del capital,
sino, si se quiere, una alienación más sutil, la de la propia actividad.

Los efectos de una vida de riesgo focalizada en operaciones instantáneas, para las que nada
sirven ideas mínimamente generales ni tiene sentido hablar de coherencia, son extenuantes
para Rose y amenazan con el derrumbe de su personalidad. El trabajo “libre” equivale a poner
a la gente en condiciones permanentes de fragilidad y de pérdida, consecuencia de un medio
de incertidumbre donde debemos apostar contantemente; el trabajo en equipo sin jerarquías ni
autoridad claramente establecidas nos arroja a un vagoroso deber de trabajo colectivo donde
sólo se valora esa entrega a la tarea puntual. Desmemorización e infantilización. No es de
extrañar que hayan desaparecido sin dejar rastro las responsabilidades, asumidas
colectivamente, o las iniciativas, fraguadas en un elástico y siempre evasivo consenso. En este
medio de lo único que se responsabiliza al trabajador es de mantenerse en movimiento sin
mostrar atadura alguna. Más allá no hay actividad alguna que logre dar identidad laboral al
trabajador, con lo que nos enfrentamos a la paradoja de que en medio de la mayor libertad y en
ausencia, al menos aparente, de jerarquías de autoridad no logramos literalmente hacer nada,
sino que todo, en cierto modo, nos pasa. La idea obsesiva es la de “ir a la deriva”.

El capítulo dedicado a la ética del trabajo permite a Sennett resumir las líneas fundamentales
de su indagación en torno a una oposición fundamental entre antigua y nueva ética del trabajo.

La antigua ética del trabajo se concentra en la sabia administración del tiempo, tiene su origen
en la labor campesina donde el hombre se las tiene que ver con un tiempo que obliga a una
disciplina de la propia actividad. Hesíodo y Virgilio, poetas de la labor, dan la pauta. Es el
tiempo natural, que traba entre sus grandes e imponentes regularidades un grado
extraordinario de indeterminación y caos; el hombre se hace a esta condición apropiándose del
tiempo en forma de autodisciplina, se impone un régimen de acción que atienda a la vez a la
estación y a la ocasión, que sepa ver la oportunidad en la circunstancia: saber prever y no
posponer. Para contrarrestar el caos natural el ser humano intenta conjurar el caos en sí
mismo. Sennet traza el proceso por el que esta autodisciplina se convierte en virtud: el
estoicismo (el popular, se entiende), culmina la interiorización de la disciplina de la acción en un
carácter que se adquiere por una constante lucha contra aquello que nos impide atenernos a lo
que nos sobrepasa, a nuestras pasiones y nuestro desorden interior.

Una inflexión inusitada del estoicismo tiene lugar cuando esta disciplina se atiene a un modo
fluido de ver al individuo, cuyo ejemplo está en las grandes narrativas de viaje y peregrinación y
cuyo modelo está en la creación artística y su figura literaria en Pico della Mirandola. Pese a
                                                                                                  7
todas las incompatibilidades sigue vigente el imperativo de “darse forma” a uno mismo, la
disciplina que se intensifica con el cristianismo, sobre todo en sus versiones reformadas que
extreman la fórmula en términos “ascetismo mundano”. El espanto que provoca la perdición de
la condición humana mundana y la perdición definitiva que amenaza en el ultramundo cobra
expresión en la actividad denodada que se agota en sí misma con la ansiedad de hacerse
signo de salvación.
Era de esperar, dice Sennett, que la superación de esta ética del trabajo se contemplara en
nuestros tiempos como una liberación.

Sennett es, sin embargo, reservado y llama a la reserva: según sea aquello que lo sustituya, y
las nuevas formas de trabajo en equipo con la ética que las regula, no parecen ofrecer al autor
demasiadas garantías de la ansiada liberación del trabajador. A primera vista, son ciertamente
la antítesis de la moral del trabajo. Sin embargo, Sennett descubre en ellas una gran opresión,
última y suprema.

En el trabajo en equipo ya no hay autoridad directa, no hay jerarquía aparente, las tareas son
inmediatas y la responsabilidad se diluye junto con el éxito. La actividad laboral se reduce a un
proceso de comunicación constante, obsesivamente “facilitado”, que genera una decisión
cuando ha conseguido hacerse una idea generalizada en el grupo. No hay diálogo, hay
conversación continua que genera, como le es propio, un clima de opinión, diríamos un
ambiente, disuelve los conflictos en la multiplicación de los encuentros y la fragmentación
infinitesimal de los intercambios. De quien trabaja se exige sobre todo flexibilidad extrema,
apertura al cambio y sensibilidad a los mínimos estímulos del rumor. Por lo mismo, una
capacidad de desprendimiento sin límite. Lo que une al grupo es una superficialidad
compartida.

El peligro que amenaza en este modo laboral es, pues, el de la superficialidad. En realidad,
como el propio Sennett reconoce, empieza a ser cuestionable que estemos ante una ética del
trabajo. De hecho, si algo caracteriza a esta nueva forma de trabajar es que diluye las fronteras
entre ocio y trabajo, relaciones sociales y laborales. Si no fuera por el dinero que ganan,
podríamos preguntarnos si en este caso las personas están realmente trabajando. Han
desaparecido los rasgos estereotípicos del trabajo: la dureza de la actividad, el esfuerzo, la
monotonía, la asistencia al lugar de trabajo, la rigidez de un horario, la jerarquía laboral, hasta
el sentimiento de explotación en un momento en el que es imposible determinar el tiempo
socialmente necesario para producir algo, y sólo queda el hecho de que se nos paga por una
actividad cuyos parámetros de valor nos son cada vez más opacos.

Ciertamente, Sennett nos recuerda lo ilusorio de algunas de estas “desapariciones”: los jefes y
las promociones son sencillamente menos visibles, más difíciles de leer así como el ejercicio de
su autoridad; la monotonía y la incomodidad menos palpables, el horario más tiránico y el
trabajo en equipo un procedimiento ingenioso para exigir la máxima adhesión de las personas.

Sennet, al describir el poder sin autoridad propio del capitalismo flexible coincide con Michel
Foucault: - Lo que hace que el poder se agarre, que se acepte, es simplemente que no pesa
solamente como una fuerza que dice no, sino que de atraviesa, produce cosas, induce placer,
forma saber, produce discursos, es preciso considerarlo como una red productiva que atraviesa
todo el cuerpo social más que como una instancia negativa que tiene como función reprimir.-

Bajo la gran operación orquestada en Davos se esconde una constatación sibilinamente
empresarial, la de que el individuo liberado es más manipulable por carecer de cualquier
firmeza en forma de vínculo, con los demás o consigo mismo.



                                                                                                 8
Una imagen se impone: la hipocresía en un sentido casi etimológico, la habilidad del actor para
representar repentinamente cualquier papel que se le ofrezca con eficacia y, por supuesto, para
salir de la escena oportunamente.

En definitiva, detrás de esta vagorosa moral del trabajo Sennett descubre la maniobra última
del capitalismo para proseguir con una explotación que le es connatural, sólo que ahora no nos
somete a condiciones de miseria, ni nos cicatea el tiempo o el sueldo, sino la vida laboral y de
paso la vida misma. Cualquier modalidad de vínculo duradero y estable que nos permitiera un
respiro para dar una ojeada a nuestra vida y reconocer en ella una línea que se prolonga en el
futuro es vista en realidad por el empresario como un peligro de alta traición.

Naturalmente, para Sennett no se trata de recuperar formas irremisiblemente caducas de
entender el trabajo y la vida profesional, pero sí de cuestionar que la solución moderna de
flexibilidad sea definitiva y buena. La moral primitiva del trabajo esforzado que da forma a
nuestra vida tiene con todo una cierta verdad que se encierra en la posibilidad de narrar y
propone que, si no en las formas férreas de sujeción, si al menos demos algún sentido la
necesidad humana de vínculos estables que, sólo ellos, acertarían a darnos razón para
ocuparnos de los demás y una identidad reconocible a nuestra propia vida.

Rose pudo volver a su antiguo negocio en el que recobró responsabilidad, vínculos e historia, y
pudo así ilustrarnos acerca de lo que se pierde en las nuevas formas de trabajo, ni más ni
menos que la libertad de puro estar en ella.

La última historia es en buena medida complementaria de la primera. Si ésta contaba un éxito
que tiene visos de derrota, la experiencia de los empleados de IBM despedidos en el dramático
proceso de racionalización de la empresa hacia el nuevo modo “fluido” es la historia de cómo
un fracaso laboral deviene una victoria gracias a la narración que logra convertir en acción algo
que realmente nos pasa, como es perder el trabajo. Los despedidos de IBM han sufrido la
revolución laboral de que tratamos: no la han aprovechado como Rico, ni la han experimentado
críticamente como Rose. Han perdido fatal y repentinamente las grandes ventajas de la
empresa providencial que les aseguraba continuidad. Sin embargo logran rehacerse al contar
adecuadamente lo que les ha ocurrido.

El camino por el que llegan a este autorreconocimiento tiene tres etapas. Al principio se
contaron una historia de traiciones y conjuras que, demasiado confiados, no habían sabido leer
a tiempo. Más tarde se recurrió a la competencia desleal de industrias extranjeras, una suerte
de xenofobia encubierta. El victimismo sólo llegó a su fin cuando el acontecimiento dio en
acción responsabilizable: no habían sabido cambiar a tiempo. De este modo la historia
profesional de cada uno de los despedidos empieza a tener parte en la narración, y con ella
entran esos proscritos de la economía flexible: la responsabilidad, la experiencia, la iniciativa, la
voluntad, las opciones personalmente asumidas, el éxito y el fracaso. Al hablar del trabajo en el
que eran expertos, los despedidos alcanzaron realmente algo en común que les faltaba cuando
eran sencillamente tracionados o víctimas.

Se produce una suerte de catarsis bellamente descrita por Sennett:

Los programadores han recuperado hablando la falta de conexión ausente en la pantalla. Su
narrativa parece en realidad pre-posmoderna en su esfuerzo por tener coherencia y una autoría
sólida: “yo”. Podría decirse que la suya es- para usar otra expresión de moda- una narrativa de
la resistencia, pero su alcance ético, el desenlace de esta conversación fue más profundo.

Al final, los programadores hablaban con un aire más de irrevocabilidad resignada que de rabia
por sentir que “habían perdido el tren”, por haber desperdiciado sus posibilidades, aunque
estén en su mejor momento físico.
                                                                                                   9
En esta tercera versión, los hombres sintieron el alivio de no tener ya que luchar; antes sentían
ese cansancio tan hondo de la vida que sobrecoge a mucha gente de mediana edad.
Cualquiera que haya saboreado de verdad el fracaso reconocerá el impulso: ante la pérdida de
la esperanza y el deseo, la preservación de la voz activa es la única manera de hacer el
fracaso soportable.

No es suficiente con declarar simplemente la voluntad de durar. Rico está lleno de principio
orientadores y tiene un montón de consejo que darse a sí mismo, pero estas panaceas no le
evitan sus temores. El consejo que los ingenieros se dan a sí mismo se expresa en locuciones
como “Debiera haberlo sabido...” y “Si hubiera...”. En este lenguaje, el alivio se parece a la
resignación, y la resignación es una manera de reconocer el peso de la realidad objetiva.

"Así su narrativa fue, de alguna manera, una especie de autocuración. En general, la narrativa
sólo hace el trabajo de curar por su estructura, no por medio de consejos. (...) La curación que
produce la narrativa viene precisamente del compromiso con la dificultad. El trabajo terapéutico
no limita su interés a hechos que se resuelvan de la manera correcta. En cambio, una buena
narrativa reconoce y prueba la realidad de todas las maneras erróneas en que puede salir la
vida y, en efecto, sale. El lector de una novela, el espectador de una pieza de teatro,
experimenta un particular consuelo al ver que la gente y los hechos encajan en una estructura
temporal; la moraleja de la narrativa reside en la forma, no en el consejo" (pp. 140-141).

El trabajo de Sennett cuenta en el último capítulo la larga historia de denuncia de la alienación.

"Una de las consecuencias no deliberadas del capitalismo modero (flexible o fluido) es que ha
reforzado el valor del lugar y ha despertado un deseo de comunidad" (p 145).

La deslocalización termino substancial de las nuevas formas de explotación del que en
Catalunya tenemos ejemplos recientes (Cierre de Lear, Cervera al trasladar su producción a
Polonia. SEAT con sus amenazas de trasladar la producción del Ibiza de Martorell a Bratislava,
Eslovaquia), genera como contrapartida un deseo de comunidad. El pronombre "nosotros"
adquiere un valor, una dimensión, más allá de atributos autoprotectores y rechazo al otro, sino
como defensa frente a la confusión a la anómia propiciadas por el modelo de desarrollo actual.

El capitalismo parece haber enajenado a los hombres y mujeres que trabajan de algo nuevo e
inédito, de la posibilidad de representarse como personas que realizan un trabajo: sin jefes
visibles, ni directrices que no sean compartidas por una larga actividad comunicativa, sin tareas
a largo plazo, sin responsabilidad ni aprendizaje acumulable, trabajar se ha convertido en una
actividad inasible de la que quepa hacer una narración de lucha, consigo mismo y con los
opresores, y sin ella es muy difícil construir un discurso de contestación.

Esta enajenación ha dado en una alienación especialmente difícil de combatir. El hastío de los
hombres y mujeres que disfrutan de estas miríficas condiciones de trabajo puede glosarse con
la famosa novela de Kundera que invierte el verso del poeta: las personas no soportamos
ciertamente demasiada realidad, pero tampoco demasiada levedad.




                                                                                               10
Las narrativas como método en ciencias sociales:

En los últimos años, estimulados por los historiadores, los sociólogos como Sennet han
reinventado la noción de narrativa. Desprestigiada por su forma discursiva y por su bajo perfil
"causal-explicativo", el concepto de narrativa tuvo que transformarse radicalmente para
sobrevivir. Y no sólo sobrevivió. En la actualidad se ha convertido en una categoría sancionada
por un amplio abanico de disciplinas y autores.

En su nuevo contexto, la narrativa aparece dotada no solamente de atributos ontológicos y
epistemológicos, en virtud a los cuales se pueden comprender los sentidos del mundo social y
del individuo, también es dueña de cualidades performativas: tiene el poder de crear
identidades sociales.

Las narrativas son constelaciones de relaciones situadas espacial y temporalmente,
constituidas por una intriga o trama causal (Ricoeur: 1985). Esta cualidad relacional permite
transformar eventos contingentes en episodios, articulados más o menos cronológicamente. La
intriga crea una relación de sentido entre eventos aparentemente desconectados, volviéndolos
inteligibles: ella es la sintaxis de la narrativa. La selectividad es otro principio, discriminatorio,
que permite al actor apropiarse solo de ciertos hechos, olvidando o minimizando la importancia
de otros eventos. Finalmente, la trama supone también la priorización de un eje o campo
temático.

Las narrativas son, en suma, historias. Los actores sociales construyen y usan historias para
producir sentidos de vida y para actuar en consecuencia. Pero ellas no son meros artificios,
encadenamientos de historias creadas ex nihilo, sino que se producen y se despliegan en
constante "ajuste" con los contextos sociales. Tampoco las narrativas se agotan en el relato
individual puesto que se aplican también a una comunidad.

Las ciencias sociales han recurrido a la noción de narrativa para interpretar hechos que antes
eran aprehendidos según el modelo de un espacio de posiciones, más o menos fijo. La
subjetividad del individuo (su estilo de vida, sus preferencias electorales, sus inclinaciones
religiosas y estéticas) debía inevitablemente corresponder a una posición o estrato social y
económico. Emulando el oficio del historiador, el sociólogo ha recurrido a las biografías y a las
trayectorias para aproximarse mejor a la complejidad de lo real. La identidad del individuo no
puede ser establecida como una cualidad, sino como una historia. Son trayectorias y crónicas
las que verdaderamente interesan: el lazo social es la experimentación, entrecruzada, de
historias comunes.

La potencia de la narrativa, sin embargo, sólo adquiere plenitud cuando se asocia al concepto
de identidad: identidad-narrativa. Esta articulación conceptual ha permitido superar, por una
parte, las visiones substancialistas de la identidad, en la cuales ésta aparece como una
cualidad -una esencia- de la cual se desprenden relaciones de diferencia y semejanza entre el
individuo y el grupo; aquel, el Yo, se presenta como idéntico a sí mismo, en una variedad de
estados.

Por otra parte, la identidad narrativa también proporciona una respuesta a quienes, desde
Nietzsche hasta los pensadores postmodernos, han denunciado el carácter ilusorio de la
identidad. Ni ilusión, ni esencia: este esquema afirma que la identidad, individual y grupal, no
puede separarse de una narración, a través del cual el sujeto se constituye como diferente e
irreductible a los demás.

La identidad del individuo o la comunidad no se afirma como una continuidad y una unidad
incuestionable, sino que está constituida por una historia que admite el cambio y la
transformación de una vida.
                                                                                                   11
Estudio de casos:

Aplicación de las técnicas narrativas utilizadas por Sennet al caso de 2 biografías.

Andrés 48 años economista, ha cursado un master en marketing, y hasta hace 6 meses
trabajaba como director comercial en una importante firma farmacéutica nacional, actualmente
esta en paro.

Andrés esta casado desde hace 20 años y tiene dos hijos de 18 y 15 años. Su mujer de 42 se
ha dedicado fundamentalmente a atender a sus hijos y a las tareas del hogar.

La empresa en la que trabajaba Andrés ha sido objeto de una fusión con un grupo
multinacional, la nueva dirección hegemónica ha impuesto su organigrama y personal de menor
edad ha cubierto áreas que desempeñaban antiguos empleados.

Junto a Andrés, han sido despedidos otros 50 trabajadores del área comercial, pertenecientes
a niveles inferiores en el escalafón, amén de otros despidos en diversos departamentos.

Andrés se incorporó a esta firma a los dos años de casarse, por tanto lleva 18 años dedicado
"full time" a la compañía, pasando del departamento de finanzas donde ejercía una labor que
no encajaba en sus expectativas, al departamento comercial como responsable del equipo de
su ciudad. La buena gestión desempeñada y su voluntad de aprendizaje le permitieron, en
cuatro años, acceder a la dirección comercial de la compañía, promoción que coincidió con la
jubilación del anterior Director.

Como vive Andrés la situación actual, cuenta: "Nunca hubiera pensado que se produciría como
se produjo; en una primera fase tras la absorción el nuevo equipo directivo nos planteo
expectativas muy interesantes. Nadie, nadie, pudo sospechar lo que ocurriría. En dos meses
fueron despidiendo a miembros de mi propio equipo sin informarme de nada, al volver de mis
vacaciones no pude entrar en mi despacho porque habían cambiado la cerradura".

Andrés a su vuelta de vacaciones encontró en la antesala de su despacho una carta de
despido fechada justo el día siguiente de su marcha de vacaciones de esto hacia 28 días.

Este detalle en la fecha de la carta significó un grave inconveniente al presentar su demanda
por despido improcedente ya que transcurridos 20 de la notificación se sobreentiende que se
ha aceptado el despido sin derecho a indemnización.

A pesar de este inconveniente, pudo conseguir una cantidad interesante, aunque inferior a la
que hubiera conseguido en otras circunstancias.

Ahora ubicado en el paro, Andrés, desorientado, observa que aun siendo una persona bien
formada con excelentes relaciones le es imposible encontrar un empleo de un nivel parecido al
que tenia. En estos seis meses ha intentado a través de lo que el denominaba, "su red de
contactos" conseguir puestos de dirección primero en empresas de su sector, y después en
otros sectores.

Ha aprendido una cosa, que se ejemplifica en razonamientos como este: "Si el cambio lo
hubiera realizado cuando estaba en el mejor momento de mi desempeño profesional, integrado
en mi antiguo trabajo me hubiese sido infinitamente más fácil" Pero esta "red propia" estaba
vinculada más a su puesto que a su persona. Mientras estuvo en activo la podía usar y de echo
la usó en beneficio de la empresa, nunca propio. Ahora desde fuera la "red" no funcionaba,
todo son obstáculos y promesas vagas, el tiempo pasa y todo sigue igual.
                                                                                          12
Andrés en breves días comenzará a trabajar como autónomo, llevando la representación de
una marca de material de oficina, sin sueldo fijo, solamente a comisión y con todo el territorio
de España como campo de trabajo.

Andrés, como tantos otros, se da cuenta rozando los 50 años de que han trabajado como locos
y no son felices, pero a esa edad bajar económicamente es durísimo.

Con toda seguridad saldrá adelante en su nueva labor, su situación familiar dice: "no me
permite entrar en depresiones".

Para Andrés parece imposible, desde su presente flexible y fragmentado crear narrativas
predictivas, sólo comienza a crearlas sobre el pasado y confía, únicamente, en su fuerza de
voluntad para afrontar el futuro. En cierta forma se ha quedado solo, el sistema no le ampara y
su carrera profesional se ha desvanecido, todo el esfuerzo empleado en construirla ha sido
inútil.

Parafraseando a Paul Ricoeur, Andrés tiene la percepción de ser totalmente prescindible,
intercambiable, la empresa sigue y él se ha quedado en la cuneta en un estado de total
confusión, no en términos de falsa conciencia o alienación (como diría Marx), sino al contrario
como reflexión lucida sobre el momento que le ha tocado vivir.

La seguridad que le ofrecía la empresa cercana, en la que los dueños y fundadores de origen
alemán pero afincados en España desde hace 3 generaciones eran persona conocidas, la
trayectoria de su antecesor en el cargo jubilado a la edad máxima legalmente permitida, el
entorno de relación que Andrés construyó en estos 18 años, fueron los referentes que le
impidieron detectar a tiempo lo que se avecinaba.

Ciertamente la empresa había pasado por fases en la que introdujo criterios de reducción de
personal, preferentemente vía jubilaciones anticipadas, en ningún caso afectaban al personal
del escalafón de dirección y siempre se habían realizado contando con la opinión de los
directores y de la manera, aparentemente, menos traumática para los afectados.

Como indica Sennet, la mayoría de personas que cambian de trabajo impulsadas por la
necesidad, van a peor, especialmente si se trata de cargos altos o intermedios, sólo mejoran
los que realizan el cambio en coyunturas favorables, porque se permiten elegir y aprovechan
mejor su posición. El sistema capitalista, siempre pero especialmente ahora, no es muy
acogedor de los que han quedado al margen. Discrimina claramente entre los "Out" y los "In".

La especialización de Andrés en el campo farmacéutico, y la circunstancia de que en su labor
no tuvo necesidad de reciclarse en las nuevas tecnologías; el mismo dice que "me considero
un usuario normal pero conceptualmente analfabeto", le han impedido poder acceder a
empresas de este campo que se hallan en fase de incubación de proyectos, potencialmente
atractivos, a diferencia del otro caso que presento.

El de Aurora 32 años, estudios de Business Administration en EE.UU., cursos de adaptación a
entornos tecnológicamente avanzados y e-comerce, Master en Marketing de servicios por el
IESE.

A diferencia de Andrés, Aurora ha desarrollado su carrera profesional tardía ya que comenzó a
trabajar de un manera más o menos constante a los 26 años, con anterioridad había destinado
sus esfuerzos a la formación y su desempeño profesional se ha desenvuelto en entornos de la
llamada nueva economía.

                                                                                             13
Resumamos la forma de percibir el trabajo y el entorno laboral en que se ha movido Aurora.

Cuenta de una forma exultante su manera de entender la empresa; "se ha acabado la
jerarquía", dice, "la evolución de las empresas actuales, de base jerárquica, a la empresa de
base reticular, es ya una realidad."

En los últimos 6 años Aurora ha participado en mas de veinte proyectos vinculados a 7
organizaciones distintas.

Comenzó como becaria en una compañía que prestaba servicio de outsourcing a CISCO
Systems para el desarrollo de proyectos vinculados a Internet, participaba en la toma de
decisiones de una forma de alto compromiso, pero su nivel retributivo era muy bajo.

Lo compensaba, según ella, "por la gran experiencia que adquiría". La organización se
construía entorno a un proyecto de negocio que era el resultado de la cooperación entre
diferentes componentes de diversas empresas, operando en red entre ellas mientras duraba el
proyecto.

O sea, se trataba de una cooperación temporal orientada a la consecución de un proyecto
concreto, para el que partes de distintas empresas (equipos especializados, o departamentos
específicos ) se ponen de acuerdo y trabajan en red.

Aurora describe su situación: "Es como si la división del trabajo que Adam Smith definió,
tuviera que extenderse ahora a las organizaciones: un proyecto exige la colaboración de piezas
distintas que aportan un conocimiento especifico, que las otras no tienen."

Lo que Aurora estaba dibujando, se puede definir como la presión del tiempo (marcada por el
cambio de interés en los mercados por los productos y servicios) que obliga a un nivel superior,
constante, de innovación, ya no podemos esperar que este Know-how se desarrolle en nuestra
propia empresa, sino que hay que ir a buscarlo allí donde esté.

Durante toda su corta carrera profesional ha vivido ejemplos muy claros y directos de proyectos
que se desvanecían después de realizar múltiples y casi infinitos esfuerzos en construirlos.

- Nunca he tenido tiempo para mí, a veces trabajábamos desde Madrid, en tiempo real, con
equipos que se encontraban en California, a través de vídeoconferencia o por correo
electrónico, esto nos obligaba a trabajar de noche en muchas ocasiones. -

- Pero, cualquier "resfriado" bursátil en EE.UU. daba al traste con todo el esfuerzo y la
empresa perdía dinero a mansalva. Cerraron y nos encontramos en la calle, pero no me
resultó difícil volver a encontrar trabajo en otra empresa vinculada a las nuevas tecnologías.-

La media de permanencia en sus diversos empleos ha sido de un año. Aurora reconoce que
su situación es atípica, su formación, su visión estratégica de los negocios, le permite este
ritmo vertiginoso de cambio, el conocimiento adquirido le posibilita, además, pensar en montar
su propia consultoría.

Si bien es cierto que, en los últimos años, Aurora percibe un sueldo muy superior a la media de
nuestro país, durante mucho tiempo su actividad se ha desarrollado en empresas de capital
riesgo orientadas a promover proyectos de futuro y la remuneración era bastante baja, en
relación con el nivel profesional exigido.

Aurora se mueve en lo que Sennet denomina entornos flexibles (o fluidos), que no le han
permitido construir un entramado social propio y estable, su vida se circunscribe a su trabajo y
                                                                                             14
entre proyecto y proyecto confiesa pasar por fases de "cierta depresión", o como ella lo
describe - Las bajadas de ritmo son fatales -.

No obstante, no cambiaría por un empleo más seguro y rutinario, dice "ya me casaré cuando
pueda, primero tengo que saber con quien".

La Ausencia de jerarquía, no tener un jefe directo, liderar proyectos en un momento y ser pieza
del engranaje en otro que lidera un compañero, el trabajo en red con colegas desconocidos, no
lo vive como dice Sennet "Las redes y los equipos debilitan el carácter -el carácter como
Horacio lo describe, el carácter como conexión con el mundo, como el ser necesario para los
demas-" (p 154) al contrario se siente una pieza no substituible fácilmente, por el valor añadido
que su gestión aporta a la organización. Para Aurora el conocimiento es la clave y su empeño
consiste en conseguir formulas organizativas que permitan compartirlo de una forma más
eficiente y democrática.

En este punto autodefine su profesión como muy progresista, - La información debe ser
compartida por toda la organización y no ser privilegio de unos determinados estratos.-,
también reconoce que estamos lejos de conseguirlo.

Para Aurora, la horizontalización de las organizaciones, es suficiente para hacer al poder tan
borroso que no lo percibe. Ni siquiera es capaz de ver en el "mercado" su representación más
insidiosa.

Las organizaciones dependen cada vez más del uso inteligente de la información y de las
tecnologías de la información para ser competitivas, y se van convirtiendo, pues, en
organizaciones intensivas en información. Los ciudadanos deben desarrollar ( o potenciar si ya
las tienen) habilidades para el mejor manejo de estas tecnologías, para no quedar apartados
del mercado laboral, así como capacidades de análisis crítico para no ser manipulados
informativamente.

Para Aurora este entorno parece hecho a medida, pero la inmensa mayoría de ciudadanos
pueden quedar excluidos dentro del mundo desarrollado, para no hablar de la distancia cada
vez mayor con los países del tercer mundo.

Como bien indica Manuel Castells, en el capitalismo informacional el papel del trabajo como
productor se diferencia marcadamente según las características de los trabajadores. Una
diferencia importante reside, en lo que este autor denomina, trabajador genérico versus
trabajador autoprogramable. La cualidad crucial que diferencia estos dos tipos de trabajador es
la educación y la capacidad de acceder a niveles superiores de educación; esto es la
capacidad de incorporar conocimiento e información . Quien posee educación, y además una
actitud dinámica, como indica Virginia Postrel, en un entorno organizativo adecuado puede
reprogramarse hacia tareas en cambio constante del proceso de producción.

Este parece ser el caso de Aurora, pero no olvidemos a Andrés que con una buena formación,
pero con 16 años mas, contempla un futuro que, en este momento, no parece corresponder al
más brillante de los escenarios.




                                                                                              15
Bibliografía: Richard Sennet. La corrosión del carácter (las consecuencias personales del
              trabajo en el nuevo capitalismo). Editorial Anagrama, Barcelona, 2001.

              Paul Ricoeur. Tiempo y Narración. Editorial Siglo XXI, México, 1995.

              Paul Ricoeur. Autobiografía intelectual. Ediciones Nueva Visión, Buenos Aires,
              1997

              Michel Foucault. Microfisica del poder. Ediciones La Piqueta, Madrid, 1980

              Virginia Postrel. The Future and Its Enemies, Free Press, Nueva York, 1998.

              Manuel Castells. La era de la información I II III, Alianza Editorila 2ª edición,
              Madrid, 1999.

              Milan Kundera. La insoportable levedad del ser. Barcelona: Tusquets editores,
              Colección Fábula 84.



              © Núria Pérez Olid 2005




                                                                © Nuria Pérez Olid 2003




                                                                                               16

Mais conteúdo relacionado

Semelhante a Nuria Perez Olid, Sociologa, Universida de Barcelona UB Master en Marketing Comunicacional por la New York University NYU "Lectura analítica de la obra de richard sennet la corrosión del carácter"

Manuel Castells: el paradigma tecnológico
Manuel Castells: el paradigma tecnológicoManuel Castells: el paradigma tecnológico
Manuel Castells: el paradigma tecnológicoPatricia Bertolotti
 
Ciencias politicas y sociales
Ciencias politicas y sociales Ciencias politicas y sociales
Ciencias politicas y sociales Hugoo Resek
 
Ciencias politicas y sociales 1
Ciencias politicas y sociales 1Ciencias politicas y sociales 1
Ciencias politicas y sociales 1Hugoo Resek
 
Para leer la insurreción que viene
Para leer la insurreción que vienePara leer la insurreción que viene
Para leer la insurreción que vieneJuan Campos
 
Manuel Castells, Informacionalismo y Sociedad Red
Manuel Castells, Informacionalismo y Sociedad RedManuel Castells, Informacionalismo y Sociedad Red
Manuel Castells, Informacionalismo y Sociedad RedPatricia Bertolotti
 
La responsabilidad social de las empresas una propuesta de modelo.
La responsabilidad social de las empresas  una propuesta de modelo.La responsabilidad social de las empresas  una propuesta de modelo.
La responsabilidad social de las empresas una propuesta de modelo.Damaris Costeño
 
Sociologia - FERIA DE CIENCIAS
Sociologia - FERIA DE CIENCIASSociologia - FERIA DE CIENCIAS
Sociologia - FERIA DE CIENCIASClaudia Palumbo
 
Experiencia laboral, flexibilidad e identidad
Experiencia laboral, flexibilidad e identidadExperiencia laboral, flexibilidad e identidad
Experiencia laboral, flexibilidad e identidadRosa Vera Garcia
 
TEMA 7: Las organizaciones sociales
TEMA 7: Las organizaciones socialesTEMA 7: Las organizaciones sociales
TEMA 7: Las organizaciones socialesJoaquín
 
Reseña de "¿Qué es el Materialismo Dialéctico?" de Otto Kuusinen
Reseña de "¿Qué es el Materialismo Dialéctico?" de Otto KuusinenReseña de "¿Qué es el Materialismo Dialéctico?" de Otto Kuusinen
Reseña de "¿Qué es el Materialismo Dialéctico?" de Otto KuusinenColectivo Accion Directa
 
Sociología política 3era clase. Perspectivas
Sociología política 3era clase. PerspectivasSociología política 3era clase. Perspectivas
Sociología política 3era clase. PerspectivasEmma Salazar
 
Antropología Económica. Conceptos clásicos en ámbitos actuales: creación y em...
Antropología Económica. Conceptos clásicos en ámbitos actuales: creación y em...Antropología Económica. Conceptos clásicos en ámbitos actuales: creación y em...
Antropología Económica. Conceptos clásicos en ámbitos actuales: creación y em...planificupmich
 
3 teorías sociológicas clásicas
3   teorías sociológicas clásicas3   teorías sociológicas clásicas
3 teorías sociológicas clásicasangelaguerrero1988
 

Semelhante a Nuria Perez Olid, Sociologa, Universida de Barcelona UB Master en Marketing Comunicacional por la New York University NYU "Lectura analítica de la obra de richard sennet la corrosión del carácter" (20)

Alonso
AlonsoAlonso
Alonso
 
Grandes Rasgos Sociedad Del Conocimiento
Grandes Rasgos Sociedad Del ConocimientoGrandes Rasgos Sociedad Del Conocimiento
Grandes Rasgos Sociedad Del Conocimiento
 
Manuel Castells: el paradigma tecnológico
Manuel Castells: el paradigma tecnológicoManuel Castells: el paradigma tecnológico
Manuel Castells: el paradigma tecnológico
 
Sociedad Red. Manuel Castells
Sociedad Red. Manuel CastellsSociedad Red. Manuel Castells
Sociedad Red. Manuel Castells
 
Ciencias politicas y sociales
Ciencias politicas y sociales Ciencias politicas y sociales
Ciencias politicas y sociales
 
Ciencias politicas y sociales 1
Ciencias politicas y sociales 1Ciencias politicas y sociales 1
Ciencias politicas y sociales 1
 
clasicos en general.ppt
clasicos en general.pptclasicos en general.ppt
clasicos en general.ppt
 
Para leer la insurreción que viene
Para leer la insurreción que vienePara leer la insurreción que viene
Para leer la insurreción que viene
 
Manuel Castells, Informacionalismo y Sociedad Red
Manuel Castells, Informacionalismo y Sociedad RedManuel Castells, Informacionalismo y Sociedad Red
Manuel Castells, Informacionalismo y Sociedad Red
 
Guia de Estudios
Guia de EstudiosGuia de Estudios
Guia de Estudios
 
La responsabilidad social de las empresas una propuesta de modelo.
La responsabilidad social de las empresas  una propuesta de modelo.La responsabilidad social de las empresas  una propuesta de modelo.
La responsabilidad social de las empresas una propuesta de modelo.
 
Sociologia - FERIA DE CIENCIAS
Sociologia - FERIA DE CIENCIASSociologia - FERIA DE CIENCIAS
Sociologia - FERIA DE CIENCIAS
 
Experiencia laboral, flexibilidad e identidad
Experiencia laboral, flexibilidad e identidadExperiencia laboral, flexibilidad e identidad
Experiencia laboral, flexibilidad e identidad
 
TEMA 7: Las organizaciones sociales
TEMA 7: Las organizaciones socialesTEMA 7: Las organizaciones sociales
TEMA 7: Las organizaciones sociales
 
Sociología Politica - Trabajo 1
Sociología Politica - Trabajo 1 Sociología Politica - Trabajo 1
Sociología Politica - Trabajo 1
 
Reseña de "¿Qué es el Materialismo Dialéctico?" de Otto Kuusinen
Reseña de "¿Qué es el Materialismo Dialéctico?" de Otto KuusinenReseña de "¿Qué es el Materialismo Dialéctico?" de Otto Kuusinen
Reseña de "¿Qué es el Materialismo Dialéctico?" de Otto Kuusinen
 
Sociología política 3era clase. Perspectivas
Sociología política 3era clase. PerspectivasSociología política 3era clase. Perspectivas
Sociología política 3era clase. Perspectivas
 
Antropología Económica. Conceptos clásicos en ámbitos actuales: creación y em...
Antropología Económica. Conceptos clásicos en ámbitos actuales: creación y em...Antropología Económica. Conceptos clásicos en ámbitos actuales: creación y em...
Antropología Económica. Conceptos clásicos en ámbitos actuales: creación y em...
 
3 teorías sociológicas clásicas
3   teorías sociológicas clásicas3   teorías sociológicas clásicas
3 teorías sociológicas clásicas
 
Santos castroviejo
Santos castroviejoSantos castroviejo
Santos castroviejo
 

Último

Presentación Bloque 3 Actividad 2 transversal.pptx
Presentación Bloque 3 Actividad 2 transversal.pptxPresentación Bloque 3 Actividad 2 transversal.pptx
Presentación Bloque 3 Actividad 2 transversal.pptxRosabel UA
 
GUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIA
GUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIAGUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIA
GUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIAELIASPELAEZSARMIENTO1
 
SIMULACROS Y SIMULACIONES DE SISMO 2024.docx
SIMULACROS Y SIMULACIONES DE SISMO 2024.docxSIMULACROS Y SIMULACIONES DE SISMO 2024.docx
SIMULACROS Y SIMULACIONES DE SISMO 2024.docxLudy Ventocilla Napanga
 
Fichas de Matemática TERCERO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de Matemática TERCERO DE SECUNDARIA.pdfFichas de Matemática TERCERO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de Matemática TERCERO DE SECUNDARIA.pdfssuser50d1252
 
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación iniciallibro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicialLorenaSanchez350426
 
Fichas de matemática DE PRIMERO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de matemática DE PRIMERO DE SECUNDARIA.pdfFichas de matemática DE PRIMERO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de matemática DE PRIMERO DE SECUNDARIA.pdfssuser50d1252
 
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdfRAMON EUSTAQUIO CARO BAYONA
 
Tarea 4_ Foro _Incorporar habilidades de Siglo XXI
Tarea 4_ Foro _Incorporar habilidades de Siglo XXI Tarea 4_ Foro _Incorporar habilidades de Siglo XXI
Tarea 4_ Foro _Incorporar habilidades de Siglo XXI Manuel Molina
 
PÉNSUM ENFERMERIA 2024 - ECUGENIUS S.A. V2
PÉNSUM ENFERMERIA 2024 - ECUGENIUS S.A. V2PÉNSUM ENFERMERIA 2024 - ECUGENIUS S.A. V2
PÉNSUM ENFERMERIA 2024 - ECUGENIUS S.A. V2Eliseo Delgado
 
Abregú, Podestá. Directores.Líderes en Acción.
Abregú, Podestá. Directores.Líderes en Acción.Abregú, Podestá. Directores.Líderes en Acción.
Abregú, Podestá. Directores.Líderes en Acción.profandrearivero
 
4° SES MATE DESCOMP. ADIT. DE NUMEROS SOBRE CASOS DE DENGUE 9-4-24 (1).docx
4° SES MATE DESCOMP. ADIT. DE NUMEROS SOBRE CASOS DE DENGUE     9-4-24 (1).docx4° SES MATE DESCOMP. ADIT. DE NUMEROS SOBRE CASOS DE DENGUE     9-4-24 (1).docx
4° SES MATE DESCOMP. ADIT. DE NUMEROS SOBRE CASOS DE DENGUE 9-4-24 (1).docxMagalyDacostaPea
 
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024Rosabel UA
 
Técnicas de grabado y estampación : procesos y materiales
Técnicas de grabado y estampación : procesos y materialesTécnicas de grabado y estampación : procesos y materiales
Técnicas de grabado y estampación : procesos y materialesRaquel Martín Contreras
 
4° SES COM MAR 09 Leemos una noticia del dengue e identificamos sus partes (1...
4° SES COM MAR 09 Leemos una noticia del dengue e identificamos sus partes (1...4° SES COM MAR 09 Leemos una noticia del dengue e identificamos sus partes (1...
4° SES COM MAR 09 Leemos una noticia del dengue e identificamos sus partes (1...MagalyDacostaPea
 
Fichas de MatemáticA QUINTO DE SECUNDARIA).pdf
Fichas de MatemáticA QUINTO DE SECUNDARIA).pdfFichas de MatemáticA QUINTO DE SECUNDARIA).pdf
Fichas de MatemáticA QUINTO DE SECUNDARIA).pdfssuser50d1252
 
DETALLES EN EL DISEÑO DE INTERIOR
DETALLES EN EL DISEÑO DE INTERIORDETALLES EN EL DISEÑO DE INTERIOR
DETALLES EN EL DISEÑO DE INTERIORGonella
 

Último (20)

Presentación Bloque 3 Actividad 2 transversal.pptx
Presentación Bloque 3 Actividad 2 transversal.pptxPresentación Bloque 3 Actividad 2 transversal.pptx
Presentación Bloque 3 Actividad 2 transversal.pptx
 
GUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIA
GUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIAGUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIA
GUIA DE TEXTOS EDUCATIVOS SANTILLANA PARA SECUNDARIA
 
SIMULACROS Y SIMULACIONES DE SISMO 2024.docx
SIMULACROS Y SIMULACIONES DE SISMO 2024.docxSIMULACROS Y SIMULACIONES DE SISMO 2024.docx
SIMULACROS Y SIMULACIONES DE SISMO 2024.docx
 
Fichas de Matemática TERCERO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de Matemática TERCERO DE SECUNDARIA.pdfFichas de Matemática TERCERO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de Matemática TERCERO DE SECUNDARIA.pdf
 
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación iniciallibro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
 
Fichas de matemática DE PRIMERO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de matemática DE PRIMERO DE SECUNDARIA.pdfFichas de matemática DE PRIMERO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de matemática DE PRIMERO DE SECUNDARIA.pdf
 
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
 
Tarea 4_ Foro _Incorporar habilidades de Siglo XXI
Tarea 4_ Foro _Incorporar habilidades de Siglo XXI Tarea 4_ Foro _Incorporar habilidades de Siglo XXI
Tarea 4_ Foro _Incorporar habilidades de Siglo XXI
 
PÉNSUM ENFERMERIA 2024 - ECUGENIUS S.A. V2
PÉNSUM ENFERMERIA 2024 - ECUGENIUS S.A. V2PÉNSUM ENFERMERIA 2024 - ECUGENIUS S.A. V2
PÉNSUM ENFERMERIA 2024 - ECUGENIUS S.A. V2
 
Aedes aegypti + Intro to Coquies EE.pptx
Aedes aegypti + Intro to Coquies EE.pptxAedes aegypti + Intro to Coquies EE.pptx
Aedes aegypti + Intro to Coquies EE.pptx
 
Abregú, Podestá. Directores.Líderes en Acción.
Abregú, Podestá. Directores.Líderes en Acción.Abregú, Podestá. Directores.Líderes en Acción.
Abregú, Podestá. Directores.Líderes en Acción.
 
4° SES MATE DESCOMP. ADIT. DE NUMEROS SOBRE CASOS DE DENGUE 9-4-24 (1).docx
4° SES MATE DESCOMP. ADIT. DE NUMEROS SOBRE CASOS DE DENGUE     9-4-24 (1).docx4° SES MATE DESCOMP. ADIT. DE NUMEROS SOBRE CASOS DE DENGUE     9-4-24 (1).docx
4° SES MATE DESCOMP. ADIT. DE NUMEROS SOBRE CASOS DE DENGUE 9-4-24 (1).docx
 
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
 
Técnicas de grabado y estampación : procesos y materiales
Técnicas de grabado y estampación : procesos y materialesTécnicas de grabado y estampación : procesos y materiales
Técnicas de grabado y estampación : procesos y materiales
 
4° SES COM MAR 09 Leemos una noticia del dengue e identificamos sus partes (1...
4° SES COM MAR 09 Leemos una noticia del dengue e identificamos sus partes (1...4° SES COM MAR 09 Leemos una noticia del dengue e identificamos sus partes (1...
4° SES COM MAR 09 Leemos una noticia del dengue e identificamos sus partes (1...
 
Fichas de MatemáticA QUINTO DE SECUNDARIA).pdf
Fichas de MatemáticA QUINTO DE SECUNDARIA).pdfFichas de MatemáticA QUINTO DE SECUNDARIA).pdf
Fichas de MatemáticA QUINTO DE SECUNDARIA).pdf
 
TL/CNL – 2.ª FASE .
TL/CNL – 2.ª FASE                       .TL/CNL – 2.ª FASE                       .
TL/CNL – 2.ª FASE .
 
PPTX: La luz brilla en la oscuridad.pptx
PPTX: La luz brilla en la oscuridad.pptxPPTX: La luz brilla en la oscuridad.pptx
PPTX: La luz brilla en la oscuridad.pptx
 
DIA INTERNACIONAL DAS FLORESTAS .
DIA INTERNACIONAL DAS FLORESTAS         .DIA INTERNACIONAL DAS FLORESTAS         .
DIA INTERNACIONAL DAS FLORESTAS .
 
DETALLES EN EL DISEÑO DE INTERIOR
DETALLES EN EL DISEÑO DE INTERIORDETALLES EN EL DISEÑO DE INTERIOR
DETALLES EN EL DISEÑO DE INTERIOR
 

Nuria Perez Olid, Sociologa, Universida de Barcelona UB Master en Marketing Comunicacional por la New York University NYU "Lectura analítica de la obra de richard sennet la corrosión del carácter"

  • 1. Lectura analítica de la obra de Richard Sennet "La corrosión del carácter" Aplicación de las narrativas como metodo en ciencias sociales al estudio de casos. Núria Pérez Olid © Facultat de Ciències Econòmiques i Empresarials UB Sociologia General 1
  • 2. Indice temático: • Introducción: Breve descripción de la obra y resumen de los apartados y conceptos más importantes como investigación multidisciplinar en la que conviven antropología, economía y sociología para diseccionar lo más sustantivo en el tránsito desde el "capitalismo de clase al sistema actual o capitalismo flexible". Pag: 3- 4 • Lectura analítica de la obra: Profundización en el texto de Sennet respetando su línea argumentativa y releyendo en clave personal sus conceptos fundamentales. Pag. 5-10 • Las narrativas como método en las ciencias sociales: Aproximación al concepto narrativas en sus atributos ontológicos y epistemológicos, en virtud a los cuales se pueden comprender los sentidos del mundo social y del individuo. Pag. 11 • Estudio de casos: Presentación de 2 biografías y narrativas asociadas de los protagonistas según el estilo de Sennet. Pag. 12-15 • Bibliografía: Pag. 16 2
  • 3. Introducción: Richard Sennett, sociólogo norteamericano afincado en Londres y actual profesor de la London School of Economics, aborda en su libro La corrosión del carácter (Las consecuencias personales del trabajo en el nuevo capitalismo) - una investigación multidisciplinaria en la que conviven antropología, economía y sociología para diseccionar lo más sustantivo en el tránsito desde el "capitalismo de clase al sistema actual o capitalismo flexible". Sennet contrapone el modelo estructural del capitalismo fordista al nuevo modelo de capitalismo que puede resumirse en el siguiente cuadro: MODELO ANTERIOR NUEVO MODELO Fordismo /taylorismo Especialización flexible / postfordismo Rigidez Flexibilidad – capacidad de respuesta Producción en masa Producción en lotes Maquinaría específica Maquinaria flexible Productos normalizados Productos diferenciados Just in case / gran almacenaje Just in time / almacenaje mínimo Descualificación Cualificación Integración vertical Descentralización decisiones Puestos individualizados Integración tareas / trabajo en equipo Fábrica total Fábrica difusa Sennet estudia las consecuencias psico-socio-económicas que ambos modelos implican sobre el individuo, en su carácter, en relación con los otros, en la forma de organizar resistencia, en definitiva en su percepción y ubicación del y en el mundo. La reflexión que Sennett hace sobre el fracaso laboral es interesante. Según él, el fracaso más profundo hoy día consiste en "no poder estructurar una vida personal coherente; no realizar algo precioso que llevamos dentro; no saber vivir sino meramente existir". (p.125). Del análisis de Sennet se desprende que las nuevas condiciones laborales son, más que requisitos que demanda un nuevo contexto económico, nuevas estrategias de dominación que requieren el desmantelamiento de los derechos laborales y sociales (recorte de prestaciones por subsidios, recortes en gastos de salud, jubilaciones, etc.) y atacan desde su base toda posible resistencia por parte de la clase trabajadora, sometiendo a todos sus miembros a la continua amenaza del paro. Sin embargo, este proceso está socavando la legitimidad del capitalismo actual. Richard Sennet concluye su libro así: "Un régimen que no proporciona a los seres humanos ninguna razón profunda para cuidarse entre sí no puede preservar por mucho tiempo su legitimidad". (p. 155). Sennet se basa en cuatro estudios de caso: 1) Un joven consultor -treintañero- que ha triunfado profesionalmente pero que vive una sensación de fracaso personal como padre al no poder encarnar los valores morales que intenta transmitir a sus hijos, al no poder ofrecer un ejemplo de vida profesional como lo recibió de su padre, y al vivir fugazmente la amistad y la comunidad local de residencia, debido a los repetidos cambios de ciudad que ha tenido que afrontar. Su sensación es que la nueva economía ha lanzado a la deriva su vida interior y emocional. 3
  • 4. 2) Un grupo de ingenieros que ronda la cuarentena y que ha sido despedido de IBM. La sensación de fracaso de este grupo es desoladora. Uno de los miembros dice: "Nos hicieron sentir como si fuéramos la causa de su fracaso [el de la empresa IBM, que registró fuertes pérdidas] mientras los peces gordos hacían millones". Un efecto especialmente grave para la vida social es que todos los miembros del grupo habían perdido interés por los asuntos cívicos y se habían refugiado en su interior, haciéndose miembros de las iglesias locales. 3) El caso de una mujer madura (53 años) que entra a trabajar en una empresa de publicidad. Constata cómo su experiencia se desprecia, y se presenta al trabajador maduro como inflexible y reacio al riesgo, en definitiva como inútil. Los prejuicios respecto a la edad, según Sennett, sirven a diversos propósitos: en primer lugar, los trabajadores maduros suelen ser más críticos con sus superiores que los jóvenes. Aunque suelen ejercer la crítica por ser más leales a la empresa, el hecho molesta a sus superiores. Por otro lado, los trabajadores mayores son objeto de agrupamiento en un banco de candidatos fácilmente disponibles para el despido ante una eventual reestructuración. 4) Un grupo de panaderos que sienten la inutilidad de su larga experiencia en el oficio, ya que las tareas a realizar cuando se moderniza la empresa se controlan desde los iconos de la pantalla del ordenador, lo cual puede hacer cualquier trabajador sin experiencia. Para el enfoque marxista esto representa un paso más allá del despojo sufrido por los trabajadores al desposeerles el capitalismo de los medios de producción: en la sociedad de la información también se les despoja del conocimiento, que queda reservado para una élite de ingenieros. 4
  • 5. Lectura analítica de la obra: En la obra, Sennett revisa los cambios que están transformando la experiencia laboral en sociedades donde la movilidad a este respecto es casi compulsiva. Los efectos “corrosivos” de esta movilidad en perpetua aceleración sobre el carácter de las personas son tratados vívidamente gracias a la articulación casi literaria de una serie de historias laborales trabadas en la historia intelectual del propio Sennett. Algunas de las historias del libro retoman y continúan indagaciones anteriores del autor, otras incorporan nuevas experiencias siempre desde el conocimiento directo del autor. De modo que el libro a la vez que relata una transformación importante en las ideas sobre el trabajo del mundo en que vivimos, testimonia de los cambios que el propio Sennett ha tenido que asumir para entenderla. En efecto, una de las formas privilegiadas de describir esta transformación se refiere a la ilegibilidad con la que el mundo del trabajo se muestra a quien se aventura en él. Nadie parece ya poder saber con un mínimo de certidumbre cuándo ha prosperado, ni qué supone una promoción laboral; tampoco sabe nadie a ciencia cierta quién es el responsable ni cuánto durará su relación laboral. Como navegante antiguo con cielo nublado, por abundar en un paraje metafórico humanístico muy frecuentado por el propio Sennet, quien trabaja hoy se encuentra a la deriva. Me parece leer que, al mismo tiempo, este mundo se ha hecho algo ilegible para Sennett quien, con toda la honradez que sólo se puede pedir a un maestro, no deja de hacer constar sus sorpresas ante el sesgo que ha dado el capitalismo, que ha invalidado muchas de las convicciones acerca del futuro del mismo. El capitalismo parece tener en la manga muchos más ases de los que Marx previó. El último era impensable y, sobre todo, inquietante: ha llevado al límite la libertad hasta “imponerla” al trabajador. ¿Dónde resistir? El carácter parece ser el último baluarte para hacer frente a un régimen económico que se desvanece en el aire sin dejar de hacer sentir su peso. La reflexión que cierra el final del libro revela su esperanza en una resistencia que empieza en el interior: "Por lo tanto, mientras entraba y salía de las salas de conferencias, entre montañas de limosinas y de policías en las montañosas calles del pueblo, me pareció que este régimen podría la menos perder su control sobre las imaginaciones y sentimientos de los que están abajo. He aprendido del pasado duro y radical de mi familia: si se produce un cambio, se da sobre el terreno, entre personas que hablan por necesidad interior más que a través de levantamientos de masas. No sé cuáles son los programas políticos que surgen de esas necesidades internas, pero sí sé que un régimen que no proporciona a los seres humanos ninguna razón profunda para cuidarse entre sí no puede preservar por mucho tiempo su legitimidad." (p. 155). Lo que la movilidad laboral suscita en sociedades donde el trabajo es un bien escaso y el esfuerzo de todos se orienta a conservarlo es la ansiedad de la pérdida y la búsqueda, es decir convoca una narrativa característica de cuento de hadas. Pero en una sociedad donde el trabajo no escasea tanto como provoca la insatisfacción del fracaso, el efecto de la movilidad es más complejo y sutil, toca un momento del ser humano que Sennett localiza en el carácter. De este modo el juicio se ubica entre el exterior y el interior, esquiva la oposición entre ser y parecer, y da a lo que vemos de los demás la dignidad de una modesta verdad; un rasgo de carácter es a la vez propio y público, se ofrece con una legibilidad especial que no tiene ni aspira a lo único de la personalidad, sino a ese rango de generalidad que admite el juicio, una 5
  • 6. generalidad que no deriva del alcance de una definición, sino de la constancia y la permanencia que percibimos en la experiencia del trato con los demás. Sennett destaca el valor ético del carácter, inseparable de los tiempos largos, que encuentra expresión en la lealtad, el compromiso, la capacidad de sacrificar lo inmediato en atención a un deseo más pleno y abarcante. Hablar de carácter exige disponer de un tiempo ancho en el que percibir el valor del comportamiento de los otros y en el que mostrar la amplitud del propio. La ojeada sinóptica sobre nuestra vida laboral haría posible en estas condiciones el relato de cómo hemos llegado a ser lo que somos, expertos conocidos y reconocidos como tales gracias a una experiencia amplia, una historia de la que derivar incluso consejos y moralejas. En un mundo de lo inmediato y del corto plazo, de la relación superficial que puede ser sesgada de raíz sin rozar siquiera la piel de los que la entablan, hablar de carácter es imposible, y la historia está amenazada constantemente. Las biografías, en efecto, se responden para componer un análisis de la degradación personal y una posible salida a la dignidad. En esta ocasión destacare los momentos que parecen dar al ensayo un ritmo en tres tiempos He tomado tres historias, la de Rico, la de Rose y la de los técnicos de la IBM, que nos permiten construir una suerte de narrativa de liberación, precisamente la que parece abolida por las nuevas formas de trabajo, una que nos permita imaginar un futuro más humano. A la negación neocapitalista responde Sennet articulando su investigación con “el sentido de un final”, tímido pero esperanzado. Una primera historia, la de Rico, nos habla de un éxito, de un hombre que representa a la perfección el sentido “actual”, o al menos inminente, del trabajo, que se resume en una disponibilidad absoluta para recomenzar en nuevos empleos desde cero, no ya en el sentido de su categoría o escalafón. Se trata del cero más sutil, aquel por el que su formación anterior, su experiencia adquirida en una práctica continuada, sus contactos y conocimientos previos, su historia laboral en definitiva, no valen, es más, representan un lastre que dificulta su adaptación a nuevas tareas que exigen una apertura incondicional, una sociabilidad exacerbada y una cooperación que presenta matices de autosacrificio al equipo. Una reorientación radical de la idea de empresa, que considera, al parecer según el grueso de los teóricos de la cuestión, que la antigua gran corporación jerárquicamente organizada y providencialmente previsora en torno a proyectos a largo plazo es un mastodonte inoperante, ha encontrado una nueva fórmula que se ha convertido ya en imperativa. La clave de esta historia de Rico es que, a no ser por el propio Sennett, Rico no la tendría. Las flexibles condiciones laborales a las que tan bien se ha adaptado y que le han procurado un triunfo envidiable que pocos alcanzan le han privado de la posibilidad de disponer y exhibir una historia. Rico se percata de las pérdidas a las que se ve abocado por su éxito, la del control de su propia vida, la de los vínculos sociales y familiares. Especialmente dramática es la incapacidad de “dar ejemplo” a sus propios hijos, incapacidad algunos de cuyos efectos conservadores Sennett subraya: la exaltación de la disciplina en los colegios que compensaran la que los padres y madres ya no pueden dar. Una de las partes más atractivas para una lectura analítica del libro es, obviamente, la que toca al lenguaje, a la vez síntoma privilegiado del cambio y medio terapéutico en la propuesta de Sennett. El que emplea Rico tiene tabúes muy reveladores: esquiva expresiones que connoten pasividad: un despido es traducido a propia iniciativa, la movilidad es vocación de libertad en forma de responsabilidad absoluta por todo lo que le atañe. Ficticiamente ha 6
  • 7. realizado una de las paradojas estoicas más escandalosas: quiere todo lo que le pasa. Pero el modo de hacerse a esta condición sin punto arquimédico es una resistencia a todos los vínculos que empieza y culmina en el más insidioso, una resistencia al propio carácter, al sí mismo como firmeza destilada por un tiempo propio de vida, por una experiencia que se ha consolidado en un saber hacer mejor. Consecuentemente la resistencia se revela para Sennett vacua, como dejan constatar las inquietudes que asaltan constantemente a Rico sobre el control que alcanza a tener sobre su vida. El movimiento incesante en el que Rico hace ejercicio de su libertad acierta sólo a trazar un vacío poblado por la nada. La historia de Rose desempeña el papel de bisagra. Es la historia de quien desde el modo tradicional y lento del trabajo se lanza a la barahunda del movimiento compulsivo de la empresa más desbocada y vana, la de la publicidad. Es una historia ejemplar para Sennet, pues ya no tiene que rastrear insatisfacciones más o menos bien disimuladas, sino que tenemos por fin un testimonio directo de quien se retiró no por fracaso o falta de éxitos, sino por disgusto e incapacidad confesa de sobrellevar esos modos absolutamente intrascendentes de entender la propia actividad profesional. No es la clásica alienación de los medios y del producto, ni la explotación salvaje de la capacidad de trabajo, ni de unas condiciones dickensianas todavía convocadas por ciertos economistas para conjurar los males del capital, sino, si se quiere, una alienación más sutil, la de la propia actividad. Los efectos de una vida de riesgo focalizada en operaciones instantáneas, para las que nada sirven ideas mínimamente generales ni tiene sentido hablar de coherencia, son extenuantes para Rose y amenazan con el derrumbe de su personalidad. El trabajo “libre” equivale a poner a la gente en condiciones permanentes de fragilidad y de pérdida, consecuencia de un medio de incertidumbre donde debemos apostar contantemente; el trabajo en equipo sin jerarquías ni autoridad claramente establecidas nos arroja a un vagoroso deber de trabajo colectivo donde sólo se valora esa entrega a la tarea puntual. Desmemorización e infantilización. No es de extrañar que hayan desaparecido sin dejar rastro las responsabilidades, asumidas colectivamente, o las iniciativas, fraguadas en un elástico y siempre evasivo consenso. En este medio de lo único que se responsabiliza al trabajador es de mantenerse en movimiento sin mostrar atadura alguna. Más allá no hay actividad alguna que logre dar identidad laboral al trabajador, con lo que nos enfrentamos a la paradoja de que en medio de la mayor libertad y en ausencia, al menos aparente, de jerarquías de autoridad no logramos literalmente hacer nada, sino que todo, en cierto modo, nos pasa. La idea obsesiva es la de “ir a la deriva”. El capítulo dedicado a la ética del trabajo permite a Sennett resumir las líneas fundamentales de su indagación en torno a una oposición fundamental entre antigua y nueva ética del trabajo. La antigua ética del trabajo se concentra en la sabia administración del tiempo, tiene su origen en la labor campesina donde el hombre se las tiene que ver con un tiempo que obliga a una disciplina de la propia actividad. Hesíodo y Virgilio, poetas de la labor, dan la pauta. Es el tiempo natural, que traba entre sus grandes e imponentes regularidades un grado extraordinario de indeterminación y caos; el hombre se hace a esta condición apropiándose del tiempo en forma de autodisciplina, se impone un régimen de acción que atienda a la vez a la estación y a la ocasión, que sepa ver la oportunidad en la circunstancia: saber prever y no posponer. Para contrarrestar el caos natural el ser humano intenta conjurar el caos en sí mismo. Sennet traza el proceso por el que esta autodisciplina se convierte en virtud: el estoicismo (el popular, se entiende), culmina la interiorización de la disciplina de la acción en un carácter que se adquiere por una constante lucha contra aquello que nos impide atenernos a lo que nos sobrepasa, a nuestras pasiones y nuestro desorden interior. Una inflexión inusitada del estoicismo tiene lugar cuando esta disciplina se atiene a un modo fluido de ver al individuo, cuyo ejemplo está en las grandes narrativas de viaje y peregrinación y cuyo modelo está en la creación artística y su figura literaria en Pico della Mirandola. Pese a 7
  • 8. todas las incompatibilidades sigue vigente el imperativo de “darse forma” a uno mismo, la disciplina que se intensifica con el cristianismo, sobre todo en sus versiones reformadas que extreman la fórmula en términos “ascetismo mundano”. El espanto que provoca la perdición de la condición humana mundana y la perdición definitiva que amenaza en el ultramundo cobra expresión en la actividad denodada que se agota en sí misma con la ansiedad de hacerse signo de salvación. Era de esperar, dice Sennett, que la superación de esta ética del trabajo se contemplara en nuestros tiempos como una liberación. Sennett es, sin embargo, reservado y llama a la reserva: según sea aquello que lo sustituya, y las nuevas formas de trabajo en equipo con la ética que las regula, no parecen ofrecer al autor demasiadas garantías de la ansiada liberación del trabajador. A primera vista, son ciertamente la antítesis de la moral del trabajo. Sin embargo, Sennett descubre en ellas una gran opresión, última y suprema. En el trabajo en equipo ya no hay autoridad directa, no hay jerarquía aparente, las tareas son inmediatas y la responsabilidad se diluye junto con el éxito. La actividad laboral se reduce a un proceso de comunicación constante, obsesivamente “facilitado”, que genera una decisión cuando ha conseguido hacerse una idea generalizada en el grupo. No hay diálogo, hay conversación continua que genera, como le es propio, un clima de opinión, diríamos un ambiente, disuelve los conflictos en la multiplicación de los encuentros y la fragmentación infinitesimal de los intercambios. De quien trabaja se exige sobre todo flexibilidad extrema, apertura al cambio y sensibilidad a los mínimos estímulos del rumor. Por lo mismo, una capacidad de desprendimiento sin límite. Lo que une al grupo es una superficialidad compartida. El peligro que amenaza en este modo laboral es, pues, el de la superficialidad. En realidad, como el propio Sennett reconoce, empieza a ser cuestionable que estemos ante una ética del trabajo. De hecho, si algo caracteriza a esta nueva forma de trabajar es que diluye las fronteras entre ocio y trabajo, relaciones sociales y laborales. Si no fuera por el dinero que ganan, podríamos preguntarnos si en este caso las personas están realmente trabajando. Han desaparecido los rasgos estereotípicos del trabajo: la dureza de la actividad, el esfuerzo, la monotonía, la asistencia al lugar de trabajo, la rigidez de un horario, la jerarquía laboral, hasta el sentimiento de explotación en un momento en el que es imposible determinar el tiempo socialmente necesario para producir algo, y sólo queda el hecho de que se nos paga por una actividad cuyos parámetros de valor nos son cada vez más opacos. Ciertamente, Sennett nos recuerda lo ilusorio de algunas de estas “desapariciones”: los jefes y las promociones son sencillamente menos visibles, más difíciles de leer así como el ejercicio de su autoridad; la monotonía y la incomodidad menos palpables, el horario más tiránico y el trabajo en equipo un procedimiento ingenioso para exigir la máxima adhesión de las personas. Sennet, al describir el poder sin autoridad propio del capitalismo flexible coincide con Michel Foucault: - Lo que hace que el poder se agarre, que se acepte, es simplemente que no pesa solamente como una fuerza que dice no, sino que de atraviesa, produce cosas, induce placer, forma saber, produce discursos, es preciso considerarlo como una red productiva que atraviesa todo el cuerpo social más que como una instancia negativa que tiene como función reprimir.- Bajo la gran operación orquestada en Davos se esconde una constatación sibilinamente empresarial, la de que el individuo liberado es más manipulable por carecer de cualquier firmeza en forma de vínculo, con los demás o consigo mismo. 8
  • 9. Una imagen se impone: la hipocresía en un sentido casi etimológico, la habilidad del actor para representar repentinamente cualquier papel que se le ofrezca con eficacia y, por supuesto, para salir de la escena oportunamente. En definitiva, detrás de esta vagorosa moral del trabajo Sennett descubre la maniobra última del capitalismo para proseguir con una explotación que le es connatural, sólo que ahora no nos somete a condiciones de miseria, ni nos cicatea el tiempo o el sueldo, sino la vida laboral y de paso la vida misma. Cualquier modalidad de vínculo duradero y estable que nos permitiera un respiro para dar una ojeada a nuestra vida y reconocer en ella una línea que se prolonga en el futuro es vista en realidad por el empresario como un peligro de alta traición. Naturalmente, para Sennett no se trata de recuperar formas irremisiblemente caducas de entender el trabajo y la vida profesional, pero sí de cuestionar que la solución moderna de flexibilidad sea definitiva y buena. La moral primitiva del trabajo esforzado que da forma a nuestra vida tiene con todo una cierta verdad que se encierra en la posibilidad de narrar y propone que, si no en las formas férreas de sujeción, si al menos demos algún sentido la necesidad humana de vínculos estables que, sólo ellos, acertarían a darnos razón para ocuparnos de los demás y una identidad reconocible a nuestra propia vida. Rose pudo volver a su antiguo negocio en el que recobró responsabilidad, vínculos e historia, y pudo así ilustrarnos acerca de lo que se pierde en las nuevas formas de trabajo, ni más ni menos que la libertad de puro estar en ella. La última historia es en buena medida complementaria de la primera. Si ésta contaba un éxito que tiene visos de derrota, la experiencia de los empleados de IBM despedidos en el dramático proceso de racionalización de la empresa hacia el nuevo modo “fluido” es la historia de cómo un fracaso laboral deviene una victoria gracias a la narración que logra convertir en acción algo que realmente nos pasa, como es perder el trabajo. Los despedidos de IBM han sufrido la revolución laboral de que tratamos: no la han aprovechado como Rico, ni la han experimentado críticamente como Rose. Han perdido fatal y repentinamente las grandes ventajas de la empresa providencial que les aseguraba continuidad. Sin embargo logran rehacerse al contar adecuadamente lo que les ha ocurrido. El camino por el que llegan a este autorreconocimiento tiene tres etapas. Al principio se contaron una historia de traiciones y conjuras que, demasiado confiados, no habían sabido leer a tiempo. Más tarde se recurrió a la competencia desleal de industrias extranjeras, una suerte de xenofobia encubierta. El victimismo sólo llegó a su fin cuando el acontecimiento dio en acción responsabilizable: no habían sabido cambiar a tiempo. De este modo la historia profesional de cada uno de los despedidos empieza a tener parte en la narración, y con ella entran esos proscritos de la economía flexible: la responsabilidad, la experiencia, la iniciativa, la voluntad, las opciones personalmente asumidas, el éxito y el fracaso. Al hablar del trabajo en el que eran expertos, los despedidos alcanzaron realmente algo en común que les faltaba cuando eran sencillamente tracionados o víctimas. Se produce una suerte de catarsis bellamente descrita por Sennett: Los programadores han recuperado hablando la falta de conexión ausente en la pantalla. Su narrativa parece en realidad pre-posmoderna en su esfuerzo por tener coherencia y una autoría sólida: “yo”. Podría decirse que la suya es- para usar otra expresión de moda- una narrativa de la resistencia, pero su alcance ético, el desenlace de esta conversación fue más profundo. Al final, los programadores hablaban con un aire más de irrevocabilidad resignada que de rabia por sentir que “habían perdido el tren”, por haber desperdiciado sus posibilidades, aunque estén en su mejor momento físico. 9
  • 10. En esta tercera versión, los hombres sintieron el alivio de no tener ya que luchar; antes sentían ese cansancio tan hondo de la vida que sobrecoge a mucha gente de mediana edad. Cualquiera que haya saboreado de verdad el fracaso reconocerá el impulso: ante la pérdida de la esperanza y el deseo, la preservación de la voz activa es la única manera de hacer el fracaso soportable. No es suficiente con declarar simplemente la voluntad de durar. Rico está lleno de principio orientadores y tiene un montón de consejo que darse a sí mismo, pero estas panaceas no le evitan sus temores. El consejo que los ingenieros se dan a sí mismo se expresa en locuciones como “Debiera haberlo sabido...” y “Si hubiera...”. En este lenguaje, el alivio se parece a la resignación, y la resignación es una manera de reconocer el peso de la realidad objetiva. "Así su narrativa fue, de alguna manera, una especie de autocuración. En general, la narrativa sólo hace el trabajo de curar por su estructura, no por medio de consejos. (...) La curación que produce la narrativa viene precisamente del compromiso con la dificultad. El trabajo terapéutico no limita su interés a hechos que se resuelvan de la manera correcta. En cambio, una buena narrativa reconoce y prueba la realidad de todas las maneras erróneas en que puede salir la vida y, en efecto, sale. El lector de una novela, el espectador de una pieza de teatro, experimenta un particular consuelo al ver que la gente y los hechos encajan en una estructura temporal; la moraleja de la narrativa reside en la forma, no en el consejo" (pp. 140-141). El trabajo de Sennett cuenta en el último capítulo la larga historia de denuncia de la alienación. "Una de las consecuencias no deliberadas del capitalismo modero (flexible o fluido) es que ha reforzado el valor del lugar y ha despertado un deseo de comunidad" (p 145). La deslocalización termino substancial de las nuevas formas de explotación del que en Catalunya tenemos ejemplos recientes (Cierre de Lear, Cervera al trasladar su producción a Polonia. SEAT con sus amenazas de trasladar la producción del Ibiza de Martorell a Bratislava, Eslovaquia), genera como contrapartida un deseo de comunidad. El pronombre "nosotros" adquiere un valor, una dimensión, más allá de atributos autoprotectores y rechazo al otro, sino como defensa frente a la confusión a la anómia propiciadas por el modelo de desarrollo actual. El capitalismo parece haber enajenado a los hombres y mujeres que trabajan de algo nuevo e inédito, de la posibilidad de representarse como personas que realizan un trabajo: sin jefes visibles, ni directrices que no sean compartidas por una larga actividad comunicativa, sin tareas a largo plazo, sin responsabilidad ni aprendizaje acumulable, trabajar se ha convertido en una actividad inasible de la que quepa hacer una narración de lucha, consigo mismo y con los opresores, y sin ella es muy difícil construir un discurso de contestación. Esta enajenación ha dado en una alienación especialmente difícil de combatir. El hastío de los hombres y mujeres que disfrutan de estas miríficas condiciones de trabajo puede glosarse con la famosa novela de Kundera que invierte el verso del poeta: las personas no soportamos ciertamente demasiada realidad, pero tampoco demasiada levedad. 10
  • 11. Las narrativas como método en ciencias sociales: En los últimos años, estimulados por los historiadores, los sociólogos como Sennet han reinventado la noción de narrativa. Desprestigiada por su forma discursiva y por su bajo perfil "causal-explicativo", el concepto de narrativa tuvo que transformarse radicalmente para sobrevivir. Y no sólo sobrevivió. En la actualidad se ha convertido en una categoría sancionada por un amplio abanico de disciplinas y autores. En su nuevo contexto, la narrativa aparece dotada no solamente de atributos ontológicos y epistemológicos, en virtud a los cuales se pueden comprender los sentidos del mundo social y del individuo, también es dueña de cualidades performativas: tiene el poder de crear identidades sociales. Las narrativas son constelaciones de relaciones situadas espacial y temporalmente, constituidas por una intriga o trama causal (Ricoeur: 1985). Esta cualidad relacional permite transformar eventos contingentes en episodios, articulados más o menos cronológicamente. La intriga crea una relación de sentido entre eventos aparentemente desconectados, volviéndolos inteligibles: ella es la sintaxis de la narrativa. La selectividad es otro principio, discriminatorio, que permite al actor apropiarse solo de ciertos hechos, olvidando o minimizando la importancia de otros eventos. Finalmente, la trama supone también la priorización de un eje o campo temático. Las narrativas son, en suma, historias. Los actores sociales construyen y usan historias para producir sentidos de vida y para actuar en consecuencia. Pero ellas no son meros artificios, encadenamientos de historias creadas ex nihilo, sino que se producen y se despliegan en constante "ajuste" con los contextos sociales. Tampoco las narrativas se agotan en el relato individual puesto que se aplican también a una comunidad. Las ciencias sociales han recurrido a la noción de narrativa para interpretar hechos que antes eran aprehendidos según el modelo de un espacio de posiciones, más o menos fijo. La subjetividad del individuo (su estilo de vida, sus preferencias electorales, sus inclinaciones religiosas y estéticas) debía inevitablemente corresponder a una posición o estrato social y económico. Emulando el oficio del historiador, el sociólogo ha recurrido a las biografías y a las trayectorias para aproximarse mejor a la complejidad de lo real. La identidad del individuo no puede ser establecida como una cualidad, sino como una historia. Son trayectorias y crónicas las que verdaderamente interesan: el lazo social es la experimentación, entrecruzada, de historias comunes. La potencia de la narrativa, sin embargo, sólo adquiere plenitud cuando se asocia al concepto de identidad: identidad-narrativa. Esta articulación conceptual ha permitido superar, por una parte, las visiones substancialistas de la identidad, en la cuales ésta aparece como una cualidad -una esencia- de la cual se desprenden relaciones de diferencia y semejanza entre el individuo y el grupo; aquel, el Yo, se presenta como idéntico a sí mismo, en una variedad de estados. Por otra parte, la identidad narrativa también proporciona una respuesta a quienes, desde Nietzsche hasta los pensadores postmodernos, han denunciado el carácter ilusorio de la identidad. Ni ilusión, ni esencia: este esquema afirma que la identidad, individual y grupal, no puede separarse de una narración, a través del cual el sujeto se constituye como diferente e irreductible a los demás. La identidad del individuo o la comunidad no se afirma como una continuidad y una unidad incuestionable, sino que está constituida por una historia que admite el cambio y la transformación de una vida. 11
  • 12. Estudio de casos: Aplicación de las técnicas narrativas utilizadas por Sennet al caso de 2 biografías. Andrés 48 años economista, ha cursado un master en marketing, y hasta hace 6 meses trabajaba como director comercial en una importante firma farmacéutica nacional, actualmente esta en paro. Andrés esta casado desde hace 20 años y tiene dos hijos de 18 y 15 años. Su mujer de 42 se ha dedicado fundamentalmente a atender a sus hijos y a las tareas del hogar. La empresa en la que trabajaba Andrés ha sido objeto de una fusión con un grupo multinacional, la nueva dirección hegemónica ha impuesto su organigrama y personal de menor edad ha cubierto áreas que desempeñaban antiguos empleados. Junto a Andrés, han sido despedidos otros 50 trabajadores del área comercial, pertenecientes a niveles inferiores en el escalafón, amén de otros despidos en diversos departamentos. Andrés se incorporó a esta firma a los dos años de casarse, por tanto lleva 18 años dedicado "full time" a la compañía, pasando del departamento de finanzas donde ejercía una labor que no encajaba en sus expectativas, al departamento comercial como responsable del equipo de su ciudad. La buena gestión desempeñada y su voluntad de aprendizaje le permitieron, en cuatro años, acceder a la dirección comercial de la compañía, promoción que coincidió con la jubilación del anterior Director. Como vive Andrés la situación actual, cuenta: "Nunca hubiera pensado que se produciría como se produjo; en una primera fase tras la absorción el nuevo equipo directivo nos planteo expectativas muy interesantes. Nadie, nadie, pudo sospechar lo que ocurriría. En dos meses fueron despidiendo a miembros de mi propio equipo sin informarme de nada, al volver de mis vacaciones no pude entrar en mi despacho porque habían cambiado la cerradura". Andrés a su vuelta de vacaciones encontró en la antesala de su despacho una carta de despido fechada justo el día siguiente de su marcha de vacaciones de esto hacia 28 días. Este detalle en la fecha de la carta significó un grave inconveniente al presentar su demanda por despido improcedente ya que transcurridos 20 de la notificación se sobreentiende que se ha aceptado el despido sin derecho a indemnización. A pesar de este inconveniente, pudo conseguir una cantidad interesante, aunque inferior a la que hubiera conseguido en otras circunstancias. Ahora ubicado en el paro, Andrés, desorientado, observa que aun siendo una persona bien formada con excelentes relaciones le es imposible encontrar un empleo de un nivel parecido al que tenia. En estos seis meses ha intentado a través de lo que el denominaba, "su red de contactos" conseguir puestos de dirección primero en empresas de su sector, y después en otros sectores. Ha aprendido una cosa, que se ejemplifica en razonamientos como este: "Si el cambio lo hubiera realizado cuando estaba en el mejor momento de mi desempeño profesional, integrado en mi antiguo trabajo me hubiese sido infinitamente más fácil" Pero esta "red propia" estaba vinculada más a su puesto que a su persona. Mientras estuvo en activo la podía usar y de echo la usó en beneficio de la empresa, nunca propio. Ahora desde fuera la "red" no funcionaba, todo son obstáculos y promesas vagas, el tiempo pasa y todo sigue igual. 12
  • 13. Andrés en breves días comenzará a trabajar como autónomo, llevando la representación de una marca de material de oficina, sin sueldo fijo, solamente a comisión y con todo el territorio de España como campo de trabajo. Andrés, como tantos otros, se da cuenta rozando los 50 años de que han trabajado como locos y no son felices, pero a esa edad bajar económicamente es durísimo. Con toda seguridad saldrá adelante en su nueva labor, su situación familiar dice: "no me permite entrar en depresiones". Para Andrés parece imposible, desde su presente flexible y fragmentado crear narrativas predictivas, sólo comienza a crearlas sobre el pasado y confía, únicamente, en su fuerza de voluntad para afrontar el futuro. En cierta forma se ha quedado solo, el sistema no le ampara y su carrera profesional se ha desvanecido, todo el esfuerzo empleado en construirla ha sido inútil. Parafraseando a Paul Ricoeur, Andrés tiene la percepción de ser totalmente prescindible, intercambiable, la empresa sigue y él se ha quedado en la cuneta en un estado de total confusión, no en términos de falsa conciencia o alienación (como diría Marx), sino al contrario como reflexión lucida sobre el momento que le ha tocado vivir. La seguridad que le ofrecía la empresa cercana, en la que los dueños y fundadores de origen alemán pero afincados en España desde hace 3 generaciones eran persona conocidas, la trayectoria de su antecesor en el cargo jubilado a la edad máxima legalmente permitida, el entorno de relación que Andrés construyó en estos 18 años, fueron los referentes que le impidieron detectar a tiempo lo que se avecinaba. Ciertamente la empresa había pasado por fases en la que introdujo criterios de reducción de personal, preferentemente vía jubilaciones anticipadas, en ningún caso afectaban al personal del escalafón de dirección y siempre se habían realizado contando con la opinión de los directores y de la manera, aparentemente, menos traumática para los afectados. Como indica Sennet, la mayoría de personas que cambian de trabajo impulsadas por la necesidad, van a peor, especialmente si se trata de cargos altos o intermedios, sólo mejoran los que realizan el cambio en coyunturas favorables, porque se permiten elegir y aprovechan mejor su posición. El sistema capitalista, siempre pero especialmente ahora, no es muy acogedor de los que han quedado al margen. Discrimina claramente entre los "Out" y los "In". La especialización de Andrés en el campo farmacéutico, y la circunstancia de que en su labor no tuvo necesidad de reciclarse en las nuevas tecnologías; el mismo dice que "me considero un usuario normal pero conceptualmente analfabeto", le han impedido poder acceder a empresas de este campo que se hallan en fase de incubación de proyectos, potencialmente atractivos, a diferencia del otro caso que presento. El de Aurora 32 años, estudios de Business Administration en EE.UU., cursos de adaptación a entornos tecnológicamente avanzados y e-comerce, Master en Marketing de servicios por el IESE. A diferencia de Andrés, Aurora ha desarrollado su carrera profesional tardía ya que comenzó a trabajar de un manera más o menos constante a los 26 años, con anterioridad había destinado sus esfuerzos a la formación y su desempeño profesional se ha desenvuelto en entornos de la llamada nueva economía. 13
  • 14. Resumamos la forma de percibir el trabajo y el entorno laboral en que se ha movido Aurora. Cuenta de una forma exultante su manera de entender la empresa; "se ha acabado la jerarquía", dice, "la evolución de las empresas actuales, de base jerárquica, a la empresa de base reticular, es ya una realidad." En los últimos 6 años Aurora ha participado en mas de veinte proyectos vinculados a 7 organizaciones distintas. Comenzó como becaria en una compañía que prestaba servicio de outsourcing a CISCO Systems para el desarrollo de proyectos vinculados a Internet, participaba en la toma de decisiones de una forma de alto compromiso, pero su nivel retributivo era muy bajo. Lo compensaba, según ella, "por la gran experiencia que adquiría". La organización se construía entorno a un proyecto de negocio que era el resultado de la cooperación entre diferentes componentes de diversas empresas, operando en red entre ellas mientras duraba el proyecto. O sea, se trataba de una cooperación temporal orientada a la consecución de un proyecto concreto, para el que partes de distintas empresas (equipos especializados, o departamentos específicos ) se ponen de acuerdo y trabajan en red. Aurora describe su situación: "Es como si la división del trabajo que Adam Smith definió, tuviera que extenderse ahora a las organizaciones: un proyecto exige la colaboración de piezas distintas que aportan un conocimiento especifico, que las otras no tienen." Lo que Aurora estaba dibujando, se puede definir como la presión del tiempo (marcada por el cambio de interés en los mercados por los productos y servicios) que obliga a un nivel superior, constante, de innovación, ya no podemos esperar que este Know-how se desarrolle en nuestra propia empresa, sino que hay que ir a buscarlo allí donde esté. Durante toda su corta carrera profesional ha vivido ejemplos muy claros y directos de proyectos que se desvanecían después de realizar múltiples y casi infinitos esfuerzos en construirlos. - Nunca he tenido tiempo para mí, a veces trabajábamos desde Madrid, en tiempo real, con equipos que se encontraban en California, a través de vídeoconferencia o por correo electrónico, esto nos obligaba a trabajar de noche en muchas ocasiones. - - Pero, cualquier "resfriado" bursátil en EE.UU. daba al traste con todo el esfuerzo y la empresa perdía dinero a mansalva. Cerraron y nos encontramos en la calle, pero no me resultó difícil volver a encontrar trabajo en otra empresa vinculada a las nuevas tecnologías.- La media de permanencia en sus diversos empleos ha sido de un año. Aurora reconoce que su situación es atípica, su formación, su visión estratégica de los negocios, le permite este ritmo vertiginoso de cambio, el conocimiento adquirido le posibilita, además, pensar en montar su propia consultoría. Si bien es cierto que, en los últimos años, Aurora percibe un sueldo muy superior a la media de nuestro país, durante mucho tiempo su actividad se ha desarrollado en empresas de capital riesgo orientadas a promover proyectos de futuro y la remuneración era bastante baja, en relación con el nivel profesional exigido. Aurora se mueve en lo que Sennet denomina entornos flexibles (o fluidos), que no le han permitido construir un entramado social propio y estable, su vida se circunscribe a su trabajo y 14
  • 15. entre proyecto y proyecto confiesa pasar por fases de "cierta depresión", o como ella lo describe - Las bajadas de ritmo son fatales -. No obstante, no cambiaría por un empleo más seguro y rutinario, dice "ya me casaré cuando pueda, primero tengo que saber con quien". La Ausencia de jerarquía, no tener un jefe directo, liderar proyectos en un momento y ser pieza del engranaje en otro que lidera un compañero, el trabajo en red con colegas desconocidos, no lo vive como dice Sennet "Las redes y los equipos debilitan el carácter -el carácter como Horacio lo describe, el carácter como conexión con el mundo, como el ser necesario para los demas-" (p 154) al contrario se siente una pieza no substituible fácilmente, por el valor añadido que su gestión aporta a la organización. Para Aurora el conocimiento es la clave y su empeño consiste en conseguir formulas organizativas que permitan compartirlo de una forma más eficiente y democrática. En este punto autodefine su profesión como muy progresista, - La información debe ser compartida por toda la organización y no ser privilegio de unos determinados estratos.-, también reconoce que estamos lejos de conseguirlo. Para Aurora, la horizontalización de las organizaciones, es suficiente para hacer al poder tan borroso que no lo percibe. Ni siquiera es capaz de ver en el "mercado" su representación más insidiosa. Las organizaciones dependen cada vez más del uso inteligente de la información y de las tecnologías de la información para ser competitivas, y se van convirtiendo, pues, en organizaciones intensivas en información. Los ciudadanos deben desarrollar ( o potenciar si ya las tienen) habilidades para el mejor manejo de estas tecnologías, para no quedar apartados del mercado laboral, así como capacidades de análisis crítico para no ser manipulados informativamente. Para Aurora este entorno parece hecho a medida, pero la inmensa mayoría de ciudadanos pueden quedar excluidos dentro del mundo desarrollado, para no hablar de la distancia cada vez mayor con los países del tercer mundo. Como bien indica Manuel Castells, en el capitalismo informacional el papel del trabajo como productor se diferencia marcadamente según las características de los trabajadores. Una diferencia importante reside, en lo que este autor denomina, trabajador genérico versus trabajador autoprogramable. La cualidad crucial que diferencia estos dos tipos de trabajador es la educación y la capacidad de acceder a niveles superiores de educación; esto es la capacidad de incorporar conocimiento e información . Quien posee educación, y además una actitud dinámica, como indica Virginia Postrel, en un entorno organizativo adecuado puede reprogramarse hacia tareas en cambio constante del proceso de producción. Este parece ser el caso de Aurora, pero no olvidemos a Andrés que con una buena formación, pero con 16 años mas, contempla un futuro que, en este momento, no parece corresponder al más brillante de los escenarios. 15
  • 16. Bibliografía: Richard Sennet. La corrosión del carácter (las consecuencias personales del trabajo en el nuevo capitalismo). Editorial Anagrama, Barcelona, 2001. Paul Ricoeur. Tiempo y Narración. Editorial Siglo XXI, México, 1995. Paul Ricoeur. Autobiografía intelectual. Ediciones Nueva Visión, Buenos Aires, 1997 Michel Foucault. Microfisica del poder. Ediciones La Piqueta, Madrid, 1980 Virginia Postrel. The Future and Its Enemies, Free Press, Nueva York, 1998. Manuel Castells. La era de la información I II III, Alianza Editorila 2ª edición, Madrid, 1999. Milan Kundera. La insoportable levedad del ser. Barcelona: Tusquets editores, Colección Fábula 84. © Núria Pérez Olid 2005 © Nuria Pérez Olid 2003 16