1. Equinoccio
Es el momento del año en que los días tienen una duración igual a la de las
noches en todos los lugares de la Tierra. La palabra equinoccio proviene del latín
aequinoctĭum y significa «noche igual». Ocurre dos veces por año: el 20 o 21 de
marzo y el 22 o 23 de septiembre de cada año, épocas en que los dos polos de la
Tierra se encuentran a igual distancia del Sol, cayendo la luz solar por igual en
ambos hemisferios. Equinoccio son asimismo cada una de las fechas en que lo
anterior ocurre. En el equinoccio sucede el cambio de estación anual contraria en
cada hemisferio de la Tierra. Durante los equinoccios el Sol está situado en el
plano del ecuador terrestre, donde alcanza el cenit.
Solsticio
Es un concepto astronómico que se refiere a la época en que el Sol se
encuentra en uno de los trópicos. El solsticio de invierno es conocido como
solsticio hiemal y supone el día más corto y la noche más larga del año en el
hemisferio boreal (en el austral, ocurre exactamente lo contrario).
El solsticio de verano o solsticio vernal produce el día más largo y la noche
más corta del año en el hemisferio boreal (sucediendo lo contrario en el hemisferio
austral).
2. Para el trópico de Cáncer, el solsticio ocurre del 21 al 22 de junio, mientras que,
para el trópico de Capricornio, el solsticio tiene lugar del 21 al 22 de diciembre.
Los solsticios ocurren por la inclinación axial del eje terrestre. Esto permite que el
Sol alcance, en cierto momento del año, su máxima declinación norte respecto al
ecuador celeste (+23º 27′) y su máxima declinación sur (-23º 27′). En otras
palabras, los solsticios son los momentos anuales en los que el Sol alcanza su
máxima posición, ya sea boreal o meridional.
Desde la antigüedad, la llegada de los solsticios suele festejarse con diversos
rituales. El solsticio de junio es festejado en la costa de España con las
Hogueras de San Juan, un rito donde, al encender una hoguera, se trata de dar
más fuerza al Sol que comienza a hacerse más débil a partir de dicho día en el
hemisferio norte.
De igual forma, el solsticio de diciembre es festejado, en el hemisferio norte, como
el regreso del Sol, ya que, a partir de ese momento, los días comienzan a
alargarse. Existe un simbolismo donde se asocia al Sol con el renacimiento y a la
esperanza. Por eso, hay quienes dicen que los cristianos fijaron la natividad de
Jesucristo en diciembre como un símbolo de la llegada de una nueva luz al
mundo. Por otra parte, la Navidad intentaría opacar las festividades paganas que
existían desde hacía mucho tiempo.
4. LA LUNA
Es el único satélite natural de la Tierra y el único cuerpo del Sistema Solar
que podemos ver en detalle a simple vista o con instrumentos sencillos.
La Luna refleja la luz solar de manera diferente según donde se encuentre. Gira
alrededor de la Tierra y sobre su eje en el mismo tiempo: 27 días, 7 horas y 43
minutos. Esto hace que nos muestre siempre la misma cara. No tiene atmosfera ni
agua, por eso su superficie no se deteriora con el tiempo, si no es por el impacto
ocasional de algún meteorito. La Luna se considera fosilizada.
El 20 de julio de 1969, Neil Armstrong se convirtió en el primer hombre que pisaba
la Luna, formando parte de la misión Apollo XI. Los proyectos lunares han
recogido cerca de 400 kg. de muestras que los científicos analizan.
Según la disposición de la Luna, la Tierra y el Sol, se ve iluminada una mayor o
menor porción de la cara visible de la luna.
5. La Luna Nueva o novilunio es cuando la Luna está entre la Tierra y el Sol y por
lo tanto no la vemos.
En el Cuarto Creciente, la Luna, la Tierra y el Sol forman un ángulo recto, por lo
que se puede observar en el cielo la mitad de la Luna, en su período de
crecimiento.
La Luna Llena o plenilunio ocurre cuando La Tierra se ubica entre el Sol y la
Luna; ésta recibe los rayos del sol en su cara visible, por lo tanto, se ve completa.
Cuarto Menguante los tres cuerpos vuelven a formar ángulo recto, por lo que se
puede observar en el cielo la otra mitad de la cara lunar.
Las fases de la luna son las diferentes iluminaciones que presenta nuestro satélite
en el curso de un mes.
6. La órbita de la tierra forma un ángulo de 5º con la órbita de la luna, de manera que
cuando la luna se encuentra entre el sol y la tierra, uno de sus hemisferios, el que
nosotros vemos, queda en la zona oscura, y por lo tanto, queda invisible a nuestra
vista: a esto le llamamos luna nueva o novilunio.
A medida que la luna sigue su movimiento de traslación, va creciendo la superficie
iluminada visible desde la tierra, hasta que una semana más tarde llega a
mostrarnos la mitad de su hemisferio iluminado; es el llamado cuarto creciente
Una semana más tarde percibimos todo el hemisferio iluminado: es la llamada
luna llena o plenilunio.
A la semana siguiente, la superficie iluminada empieza a decrecer o menguar,
hasta llegar a la mitad: es el cuarto menguante. Al final de la cuarta semana llega
a su posición inicial y desaparece completamente de nuestra vista, para
recomenzar un nuevo ciclo.
MOVIMIENTO DE LA LUNA
La Luna es el único satélite natural de la Tierra. La luna gira alrededor de su eje (rotación)
en aproximadamente 27.32 días (mes sidéreo) y se traslada alrededor de la Tierra
(traslación) en el mismo intervalo de tiempo, de ahí que siempre nos muestra la misma
cara. Además, nuestro satélite completa una revolución relativa al Sol en aproximadamente
29.53 días (mes sinódico), período en el cual comienzan a repetirse las fases lunares.
Los instantes de salida, tránsito y puesta del Sol y de la Luna están relacionados con las
fases. La Luna se traslada alrededor de la Tierra en sentido directo, en dirección Este.
Como el Sol se mueve 1° por día hacia el Este. La Luna atrasa diariamente su salida
respecto a la del Sol unos 50 minutos.
7. Rotación y traslación de la Luna
La Luna gira alrededor de la Tierra aproximadamente una vez al mes. Si la Tierra no girara
en un día completo, sería muy fácil detectar el movimiento de la Luna en su órbita. Este
movimiento hace que la Luna avance alrededor de 12 grados en el cielo cada día.
Si la Tierra no rotara, lo que veríamos sería la Luna cruzando la bóveda celeste durante dos
semanas, y luego se iría y tardaría dos semanas ausente, durante las cuales la Luna sería
visible en el lado opuesto del Globo.
Sin embargo, la Tierra completa un giro cada día, mientras que la Luna se mueve en su
órbita también hacia el este. Así, cada día le toma a la Tierra alrededor de 50 minutos más
para estar de frente con la Luna nuevamente (lo cual significa que nosotros podemos ver la
Luna en el Cielo.) El giro de la Tierra y el movimiento orbital de la Luna se combinan, de
tal suerte que la salida de la Luna se retrasa del orden de 50 minutos cada día.
DICCIONARIO
8. Un diccionario es una obra de consulta de palabras o términos que se encuentran
ordenados alfabéticamente. De dichas palabras o términos se proporciona su
significado, etimología, ortografía y, en el caso de ciertas lenguas, fija su
pronunciación y separación silábica