3. • Pío Baroja perteneció a familias muy distinguidas y conocidas
en San Sebastián relacionadas con el periodismo y los
negocios de imprenta.
• El padre de los Baroja, Serafín, era un hombre inquieto y
periodista de ideas liberales, un ingeniero de minas del
Estado, lo que llevó a la familia a constantes cambios de
residencia por toda España. El continuo ir y venir de su
familia inculcó al futuro novelista la afición a los viajes y le
permitió conocer bien el país, pero lo transformó en un
desarraigado. A los siete años marchó con su familia a
Madrid, donde el padre obtuvo una plaza en el Instituto
Geográfico y Estadístico; sin embargo, volvieron a Pamplona
y otra vez de nuevo a Madrid. Baroja se aficionó a la literatura
mientras era joven, habiendo devorado buena parte de la
literatura contemporánea desde el siglo XVIII.
4. • Pío Baroja pensaba que había que acercar el País Vasco
al resto de España, a Madrid, y no al contrario. Daba
por sentada la existencia de España, con su tierra natal
incluida en ella. Su ideología política cambió con el
tiempo, de joven era un anarquista liberal, pero luego
rectificó y aborreció el comunismo, el socialismo y
también la democracia, a la que consideraba la
dictadura de los números, no del sentido común.
• Para Baroja el mundo carecía de sentido, la vida le
resulta absurda y no confía en nadie. Según él no existe
la verdad, solo lo que la ética social considera cierto o
no.
5. • Para él la novela lo abarca todo, es un estilo abierto de escritura.
• Su principal aporte a la literatura, como el mismo dice, es la
observación y valoración objetiva, documental y psicológica de la
realidad que le rodeó.
• En sus novelas reflejó una original filosofía realista, producto de la
observación psicológica y objetiva impregnada quizá con el
profundo pesimismo de Schopenhauer, pero que predicaba en
alguna forma una especie de redención por la acción, de ahí los
personajes aventureros y vitalistas que inundan la mayor parte de
sus novelas, pero también los más escasos abúlicos y
desengañados, como el Andrés Hurtado en El árbol de la ciencia.
6. • Son evidentes sus incorrecciones gramaticales, que él mismo atribuía a su origen.
• Su estilo es perfectamente coherente con su ideal de espontaneidad narrativa.
• Lleva al extremo la tendencia antirretórica de los noventayochistas.
“Para mí, no es el ideal del estilo ni el casticismo, ni el adorno, ni la
elocuencia: lo es, en cambio, la claridad, la precisión, la rapidez” (Memorias).
• El resultado de esa voluntad de estilo es una prosa rápida, nerviosa, vivísima, que
bien puede considerarse “un gran estilo”.
• Inesperada aparición de una pudorosa ternura que nos deparan sus páginas.
• Aspectos concretos de su orientación estilística son sus preferencias por la frase
corta y el párrafo breve.
• Viveza y amenidad del relato. Y asimismo, el especial relieve de sus descripciones.
• Autenticidad conversacional de los diálogos, en los que el autor se muestra como
maestro insuperable.
• Sus novelas o sus cuentos ofrecen breves evocaciones líricas en una prosa
especialmente cuidada y bellísima.
7. • - Tierra vasca, Su unidad está dada por el ambiente.Zalacaín cuenta las
andanzas de un típico ahombre de acción, personaje inolvidable, en medio de
la última guerra carlista.
• - La vida fantástica: En Camino de perfección, su protagonista, Fernando
Osorio, encarna la angustia existencial y el anhelo de hallar un sentido a la
vida; junto a ello, incluye una visión muy noventayochista de las tierras de
Castilla.
• - La lucha por la vida: La busca es para muchos la obra más intensa del autor;
su panorama de los barrios más míseros de Madrid es de un implacable y
desolado realismo; su protagonista, Manuel, es una figura
conmovedora, zarandeada por la sociedad.
• - A La raza pertenece El árbol de la ciencia, que vamos a
estudiar, acompañada por La dama errante y La ciudad de la niebla.
• - Las ciudades: César o nada destaca , cuyo protagonista -Cesar Moncada- es
el hombre enérgico que se enfrenta con el ambiente muerto y degradado de
una ciudad provinciana, y terminara vencido.
• - El mar: Las inquietudes de Santi Andía destaca por el recio tipo de marino
vasco que presenta y por las anécdotas o los personajes que componen un
vivísimo ambiente marinero.
8. • Baroja es una figura sumamente representativa de la
sensibilidad y del ambiente espiritual de su
generación, con esa desazón y esos conflictos que los
españoles compartieron con los escritores europeos de
la misma época.
• Por otra parte, Baroja es el novelista por antonomasia
de la literatura española contemporánea, por sus dotes
de narrador y por su capacidad de creación.
9.
10. • «El árbol de la ciencia es, entre las novelas de carácter
filosófico, la mejor que yo he escrito. Probablemente es el libro
más acabado y completo de todos los míos.»
• Ante todo, la novela tiene mucho de autobiografía. Es sumamente
curioso que, más de treinta años después, al escribir el segundo
volumen de sus Memorias y al contar sus estudios en Madrid, su
estancia en Valencia, o la muerte de su hermano Darío, Baroja
transcribe literalmente largos pasajes de El árbol de la ciencia.
• La obra es toda una radiografía de una sensibilidad y de unos
conflictos espirituales que se hallan en la médula de la época.
11. • El árbol de la ciencia desarrolla la vida de Andrés Hurtado, un personaje perdido en un
mundo absurdo y en medio de circunstancias adversas que constituirán una sucesión de
desengaños.
• Su ambiente familiar hace de él, un muchacho “reconcentrado y triste”; se siente
solo, abandonado, con “un vacío en el alma”. A la vez, siente una sed de
conocimiento, espoleado por la necesidad de encontrar “una orientación”, algo que dé
sentido a su vida. Pero sus estudios de Medicina no colman tal ansia: la universidad y la
ciencia españolas se hallan en un estado lamentable. En cambio, su contacto con los
enfermos de los hospitales, y su descubrimiento de miserias y crueldades, constituyen un
nuevo «motivo de depresión». También agudizan su “exaltación humanitaria”.
• Al margen de sus estudios, Andrés descubre nuevas lacras; las que rodean a Lulú, la
mujer que habrá de ocupar un puesto esencial en su vida. Y, en fin, la larga enfermedad y
la muerte de su hermanito, Luis, vendrá a sumarse a todo como un hecho decisivo que le
conduce al escepticismo ante la ciencia y a las más negras ideas sobre la vida.
• Las etapas posteriores de su vida constituyen callejones sin salida. El ambiente deforme
del pueblo en donde comienza a ejercer como médico le produce un «malestar físico».
Madrid, a donde vuelve, es «un pantano» habitado por la misma angustia; Hurtado, deriva
hacia un absoluto pesimismo político, se aísla cada vez más y adopta una postura pasiva
en busca de una paz desencantada.
• A una paz provisional accederá tras su matrimonio con Lulú. Pero la vida no le concederá
reposo. Pronto le atenazará de nuevo una angustia premonitoria de la muerte de su hijo y
de su mujer, definitivo desengaño que lleva a Andrés al suicidio.
12. Se compone de siete partes que suman 53 capítulos de extensión
generalmente breve.
Se identifican dos partes en la trama: La vida del protagonista y los
intermedios de reflexión.
Las partes de uno y otro ciclo se componen de un número igual de
capítulos, por lo tanto la estructura es equilibrada.
El equilibro pensado expresamente por Baroja no bloquea el relato sino que
el hilo narrativo va devanándose con gran libertad.
13. Andrés Hurtado: Joven y de carácter revolucionario de carácter fuerte y de ideas
contarías a la religión y a la burguesía. Es una persona orgullosa de si misma
pero sin llegar al narcisismo. Esta acostumbrado a la soledad y el abandono, se
cree autosuficiente.
Lulú: Se nos presenta como un producto marchito por el trabajo.
Graciosa, amarga, lúcida y mordaz
Sin embargo tiene un fondo muy humano y notable
Ternura por los seres desvalidos
Personajes secundarios: Don Pedro, despótico y arbitrario
Julio Aracil, cínico ,vividor sin escrúpulos
Luisito
Iturrioz
14. Poco rasgos para darnos impresiones vivísimas.
Maestría para el paisaje.
Sin descripciones detenidas.
Con trazos dispersos para percibir el espacio( Luz, hora del
día, calor…)
15. Son los años en torno al 98
España se descompone en medio la despreocupación
Pobreza cultural del país
Desprecio por la ciencia y la investigación
Importancia aspectos sociales
El mundo rural: mundo inmóvil presidido por la insolidaridad y la
pasividad ante las injusticias. Egoísmo, prejuicios, envidia, crueldad.
Denuncia del caciquismo
La ciudad: En Madrid se vive “una vida sin vida” rodeada de absoluta
miseria
16. No es una novela política sino filosófica
Los conflictos existenciales constituyen el centro de la obra
No es partidario de la religión
En la novela el intelectualismo es estéril.
La ciencia no proporciona respuestas
La vida humana queda sin explicación
La principal influencia es la de Schopenhauer
Se experimenta la soledad y el abandono
17. • La mayor parte de los personajes barojianos son seres inadaptados, que se oponen
al ambiente y a la sociedad en la que viven.
• Su falta de fe en el ser humano le llevan a rechazar cualquier posible solución
vital, ya sea religiosa, política o filosófica y, por otro lado, le conducen a un marcado
individualismo pesimista, y no por ello anarquizante.
• A menudo se ha reprochado a Baroja su descuido en la forma de escribir. Eso se
debe a su tendencia antirretórica.
• RETÓRICA EN TONO MENOR:
– Empleo del período corto.
– Sencillez y economía expresiva: «El escritor que con menos palabras da una
sensación de que es mejor».
– Impresionismo descriptivo: selección de rasgos significativos más que
reproducción fotográfica al detalle característica de los minuciosos y
documentados narradores del Realismo.
– Tono agrio, selección de un léxico que degrada la realidad a tono con la actitud
pesimista del autor.
– Breves ensayos e intensos intermedios líricos.
– Tempo narrativo rápido
– Diálogos respetuosos y con naturalidad.
– Deseo de exactitud y precisión, rasgos estilísticos que confieren la amenidad, el
dinamismo y la sensación de naturalidad y vida que el escritor pretendía para
sus novelas.
18. • El árbol de la ciencia es una novela muy representativa de la
época, es una buena muestra de cómo Baroja y sus coetáneos
anticiparon una gran cantidad de los temas de las corrientes
existenciales contemporáneas.
• Según se dice, “es la más representativa de la novelas barojianas”.