Este documento presenta la elaboración de un vino tinto seco por estudiantes del 3er grado "A" en el año 2010. Explica los pasos del proceso que incluyen lavar y aplastar las uvas, hervirlas con canela y clavo, fermentarlas durante 18 días y embotellar el vino final. También resume los beneficios para la salud del consumo moderado de vino tinto, como reducir la acumulación de grasa y proteger el corazón.
2. Ingredientes:
2k y ½ de Uva negra
Canela
Clavo
Materiales:
Recipiente
Mortero
Olla
Tela
Botella para vino
Preparación:
1. Se lava las uvas.
2. Con un mortero se aplasta la uva para que así salga su jugo.
3. 3. Se pone a hervir y se echa clavo y canela. Se deja hervir hasta que obtenga un aroma.
4. Después de hervir, con mucho cuidado se pone en un recipiente y se deja tapado con una
tela.
5. Se deja 18 días en fermentación.
4. 6. Al noveno día se encuentra así:
7. El día 18, ya termino su fermentación.
5. 8. Sobre una tela se basea en un recipiente el vino ya fermentado.
9. Después de ponerlo en otro recipiente se basea a la botella (la botella se pone de costado
para que así no se salga el alcohol).
7. Información sobre el vino tinto
El consumo moderado de vino tinto reduce la acumulación de grasa y así,
ser una fuerte aliado contra el aumento de peso corporal.
El vino tinto protege al corazón porque no sólo favorece la circulación
sanguínea, sino que actúa en el metabolismo de las grasas pudiendo impedir su
excesiva acumulación en el organismo y así, prevenir sus consecuencias para la
salud.
Si bien es demasiado pronto recomendar la ingesta de vino para evitar el
aumento de peso, no es para nada disparatado recomendar su consumo (de
1 o 2 copas por día), para favorecer la buena salud.
No olvidemos, que esta bebida forma parte de una dieta sana y
equilibrada si se ingiere con moderación, ya que sus propiedades
antienvejecimiento y cardioprotectoras han sido confirmadas.
Beber vino tinto con moderación, es otro de los factores que contribuyen a vivir
más y mejor, que ahora, está mostrando sus múltiples beneficios sobre el
organismo humano.
Tal vez con el tiempo beber 1 copa diaria en las mujeres y 2 en los hombres,
sea una recomendación a la que no podremos faltar si queremos cuidar nuestra
salud.
Como todos sabemos el vino contiene alcohol, el alcohol aumenta el nivel de las
lipoproteínas de alta densidad , que son buenas para el corazón. Pero aunque el
alcohol en general (con prudencia por supuesto) disminuye el riesgo de
enfermedades del corazón y arterias, el vino tinto es el mejor.
¿Por qué el vino tinto?
El vino tinto tiene polifenoles y flavonoides, y éstos serían los factores que le
dan ese poder antioxidante. :
Hacen más inofensivo el colesterol LDL impidiendo su oxidación
Evitan que las plaquetas de la sangre se aglutinen formando coágulos
Disminuyen las inflamaciones
8. VINO TINTO, ¿CORAZON CONTENTO?
Se ha comprobado que cuando el colesterol malo se oxida, mediante los
mecanismos de oxidación naturales del organismo, se promueve el desarrollo de
enfermedades cardíacas. La reducción del riesgo es del 44% entre los bebedores
de una a dos copas por día con relación a los no bebedores.
La Asociación Americana del Corazón recomienda la necesidad de insistir en las
medidas clásicas de protección cardiovascular y no olvidarse de ellas pensando
que dos copas pueden sustituirlas.
las enfermedades cardíacas encabezan la lista de causas de muerte en todo el
mundo. Por eso a nadie sorprende que se tejan y destejan tantas hipótesis sobre
los posibles métodos para prevenirlas. Las cardiopatías y los accidentes cerebro
vasculares causan la muerte de 17 millones de personas al año, lo que equivale
casi a una tercera parte de todas las defunciones del mundo.
Si el consumo moderado de vino ayuda en la prevención, hay que tener en
cuenta que no todos los vinos tienen el mismo poder contra la oxidación del
colesterol malo.
Un estudio publicado en el Journal of Agricultural and Food Chemistry, en el cual
un equipo dirigido por el investigador Edwin Frankel analizó 14 vinos tintos y 6
blancos de California, concluyó que los tintos tienen mayor poder antioxidante
que los blancos, en especial los de las variedades antes mencionadas. Los vinos
los tintos inhiben entre el 46 y el 100 por ciento la oxidación del colesterol,
mientras que los blancos sólo lo hacen entre el 3 y el 6 por ciento.
A nadie sorprendería que, en el corto plazo, los fabricantes de vinos incluyeran
en las etiquetas el poder antioxidante de sus productos y los efectos que se le
atribuyen como aliado de un corazón sano.
9.
10. AGRADECIMIENTO:
La elaboración del vino pudo ser echa gracias
a la explicación de la profesora María Julia Martínez Realpe,
además el vino ayuda bastante a controlar la grasa
De nuestro cuerpo.