El documento describe la evolución de la planificación urbana desde los planes generales tradicionales de las décadas de 1950 y 1970 hacia enfoques más flexibles a partir de 1980. Los primeros planes generales se habían convertido en una "ciencia seudo-exacta" que no podía adaptarse a la realidad urbana cambiante, dando lugar a críticas y el surgimiento de nuevos enfoques como los "planes de tercera generación" de Secchi que buscaban mejorar lo existente y conectar la ciudad con su contexto socioeconómico.