Este documento presenta información biográfica sobre el pintor francés Édouard Manet y analiza algunas de sus obras más famosas como Desayuno sobre la hierba, Olimpia y El bar del Folies Bergère, caracterizadas por su realismo y representación de escenas cotidianas que escandalizaron a la crítica de la época. El documento también explica el movimiento artístico del realismo que surgió en el siglo XIX como reflejo de los cambios sociales de la revolución industrial.
2. BIOGRAFÍA
(París, 1832 - 1883) Pintor y grabador francés.
Manet fue un mediocre estudiante interesado únicamente en el
dibujo.
Su padre se resistía a que el empezase su carrera como pintor,
hasta que finalmente accedió y en 1850, tras su segundo intento de
ingresar en la Escuela Naval. Su aprendizaje duró seis años.
En 1860 algunas de sus obras comenzaron a hacerse famosas.
Manet contrajo matrimonio con la holandesa Suzanne Leenhoff, con
quien había tenido un hijo ilegítimo poco antes.
En 1868, el joven novelista Émile Zola escribió una laudatoria
recensión de su trabajo en la que identificaba a Manet con la figura
romántica del artista incomprendido.
3. REALISMO
Este movimiento artístico aparece en la segunda mitad del siglo
XIX, como consecuencia de las circunstancias sociales de la
época: la consolidación de la burguesía como clase dominante,
la industrialización, el crecimiento urbano y la aparición del
proletariado.
Las características básicas del Realismo son:
Eliminación de todo aspecto subjetivo, hechos fantásticos o
sentimientos que se alejen de lo real.
Análisis riguroso de la realidad. El escritor nos ofrece un retrato
riguroso de lo que observa.
Los problemas de la existencia humana, sumo interés por la
descripción del carácter, temperamento y conducta de los
personajes.
El artista denuncia los defectos y males que afectan a la
sociedad y ofrece soluciones para detenerlos. Cada autor,
según sus ideas, muestra lo que para él es un mal de la
sociedad.
4.
Desayuno sobre
hierba
Pintado en 1863.
Esta obra fue rechazada por el Salón de 1863. Se expuso en ‘El Salón de
los rechazados.’
Se inspiró en un grabado de Rafael, El juicio de Paris. Pero en el
Almuerzo sobre la hierba, la presencia de una mujer desnuda en medio
de hombres vestidos no está justificada por ningún pretexto mitológico o
alegórico.
La modernidad de los personajes
hace obscena, esta escena casi
irreal.
Abandona los habituales degradados
para entregar contrastes abruptos
entre sombra y luz.
5. Oplympia
Pintado en 1863.
Manet comenzó a trabajar en él en 1863 para presentarlo, sin embargo no
se expuso hasta 1865.
Causó un gran escándalo, ya que aunque el público y la crítica aceptaban
los desnudos en obras mitológicas, no era así cuando se trataba de un
desnudo realista.
En esta en escena la acompaña
llevando un ramo de flores una
mujer negra, cuyo rostro muy
difícil de distinguir sobre el fondo
oscuro, contrasta con los tonos
claros de su vestimenta oriental.
La mujer desnuda que mira
directa y provocadoramente a los
espectadores.
6. El bar del Folies
Bergères
Cuadro pintado entre 1881-1882.
Este cuadro supone la culminación de los cuadros dedicados a la temática
nocturna que tanto habían atraído a Manet desde la década de 1870.
En la imagen se recrea un complejo sistema de ilusión y realidad, que
mezcla lo artificial con lo natural. Ya que gran parte del cuadro es un espejo
que muestra lo que hay detrás del pintor.
Tiene intención de modernidad, fascinación por el mundo urbano,
inmediatez de la escena en pro de la
objetividad, color fluido en largas
pinceladas.
7. El pífano
Este cuadro fue presentado en 1866 al Salón y fue rechazado. En cambio
por el escritor Émile Zola recibió alabanzas.
Algunos especialistas consideran que las manos y el rostro serían los de su
hijo.
La figura se recorta sobre un fondo neutro que no
separa pared y suelo, el joven no resulta una
figura plana ni se eleva sino que, al contrario, es
muy volumétrica y se asienta perfectamente en el
espacio.