Identificación de los elementos manieristas lis rodriguez
1. Identificación de los elementos
manieristas
Realizado por :
Lis Rodríguez C.I. 24766172
Extensión Porlamar
Instituto Universitario Politécnico
¨¨Santiago Mariño¨
Historia II
SAIA
2. Pintura
Madonna del cuello largo
Parmigianino
Se caracteriza por la arbitrariedad en el uso del color y las
proporciones. Las proporciones anatómicas se alteran a su
voluntad, El alargamiento de las figuras es constante
Parmigianino , creador de la pintura y perteneciente a la
escuela manierista distorsiona la naturaleza para conseguir
sus mejores propósitos artísticos, La Virgen no tiene
proporciones humanas con dedos largos y elegantes y casi
tiene el doble del tamaño de los ángeles que hay a su derecha .
utiliza figuras alargadas que consigue mediante el empleo de
lentes aberrantes
Jesús es también extremadamente grande para ser un bebé, y
descansa precariamente sobre el regazo de María como si
fuera a caerse en cualquier momento.
Mediante la iluminación el pintor italiano crea contrastes que
refuerzan el volumen de los personajes y además emplea la
técnica de los paños mojados pegando las telas al cuerpo para
mostrar su anatomía
3. Júpiter e Ío
(Io e Zeus)
Correggio
Se prefiere el trazado serpentiforme, los abundantes y tensos
escorzos, la distorsión como forma de expresar una
dramática escisión en la conciencia y en el mundo.
Las figuras está constreñidas en marcos estrechos, lo que
acentúa las expresiones angustiadas.
Ío era, según la mitología griega, una doncella de Argos, hija
de Ñaco y sacerdotisa de Hera (o hija del rey Yaso), a la que
Zeus (dios griego del que es equivalente el Júpiter romano)
visitó transformado en una gran neblina y aprovechó para
arrebatarle su virginidad
El cuadro representa el momento de la unión carnal entre Ío
y Zeus que la envuelve en forma de nube, abrazándola. No
resulta fácil representar a un hombre disfrazado de nube
haciendo el amor a una joven: aquí lo resuelve haciendo
entrever una mano y un rostro de hombre en la nube
El efecto cromático se basa en el contraste entre el cielo,
dibujado con densas nubes oscuras, y la blanca figura de Ío,
en una postura retorcida típicamente manierista
4. El Descendimiento de la cruz
(Pontormo)
Es una de las creaciones del manierismo que marca las
pautas para el futuro.
Las figuras tienen formas duramente modeladas y están
unidas por una línea serpentinata. Destaca en Pontormo el
colorido. Es el manierista de colores más suaves, como el
azul claro o el rosa pálido, pero los utiliza brillantes, en
contraste unos con otros: el rosa y el amarillo o amarillo
anaranjado, el naranja y el verde, los violetas muy claros
sobre un fondo añil.
poses en equilibrio precario, una perspectiva caída,
ambientaciones irracionales y una iluminación teatral.
Pontormo ejemplifica el manierismo con figuras alargadas
y posturas formadas, en un ambiente misterioso a él se
debe una obra muy representiva del manierismo,
especialmente por sus colores irracionales y su luz fría y
poco natural
5. Escultura
El grupo lo componen tres personajes desnudos: un
hombre romano que levanta por encima de su cabeza a la
sabina que parece querer desprenderse de su secuestrador,
mientras, atrapado entre las piernas del joven, se encuentra
el padre de la joven con evidentes muestras de
desesperación e impotencia. Las tres figuras se hallan
profundamente entrelazadas, tanto por la acción que
desarrollan individualmente como por la escena que
componen entre ellas.
Los rasgos manieristas superficiales son patentes: el
alargamiento de las figuras, el gesto desmedido y poco
coherente, el espacio angosto... Pero lo propio de
Giambologna es su capacidad para introducir estas notas -
que son generales a todo el Manierismo- en un movimiento
que rompe de forma definitiva con la estatua clásica. El
rapto de las sabinas responde todo él a la forma
serpentinata
El rapto de la sabina
(Giambologna)
6. Se trata de una escultura que representa de forma
emblemática una de las características definitorias de la
plástica manierista, como evolución de las formas
renacentistas. Esta característica no es otra que la forma
“serpentinata”, cuya definición más pomposa es la
ascensión contorsionada de formas que suben
helicoidalmente, o lo que es lo mismo, el retorcer las
figuras y sus miembros igual que se retuercen las
serpientes al deslizarse
Desde el punto de vista de tallar o moldear las formas
escultóricas es muy complicado plasmar ese movimiento
y además obliga al artista a tener en cuenta múltiples
puntos de vista para su obra, ya que se generan
innumerables perspectivas para el espectador.
Esta fuente realizada entre los años 1563 y 1566, tal vez
sea junto a la escultura del Rapto de las Sabinas, las dos
obras de este artista donde mejor generó este
movimiento curvo en las figuras.
Fuente de Neptuno
(Giambologna)
7. La tendencia al desgarramiento propio de este estilo
aparecen en la exagerada musculatura de “Perseo con la
cabeza de Medusa” de Benvenutto Cellini. Fue fundida en
bronce de una sola pieza
La escultura, representa a Perseo y Medusa; Perseo la acaba
de decapitar con la espada que empuña en la mano
derecha, mientras que con la mano izquierda, sostiene
triunfante la cabeza del monstruo tomada por su cabellera.
Esta obra escultórica rompe con la tradición clasicista de
serenidad y armonía vista en años anteriores en Italia,
dando paso al movimiento y la distorsión de las formas o
"manierismo" que caracterizará el arte desde finales del
siglo XVI y que tuvo gran influencia en toda Europa.
considerada una de las obras cumbre de la escultura
manierista italiana y una de las estatuas más famosas de la
Piazza della Signoria en Florencia, Italia
Perseo con la cabeza de Medusa,
también denominada el Perseo de
Cellini
8. Arquitectura
como ejemplo vivo de esta corriente artística, nos
encontramos en el Palacio del Té -situado en las afueras
de Mantua, Italia-, una estructura manierista que estuvo
a cargo del Giulio Romano, un reconocido pintor,
arquitecto y decorador italiano del siglo XVI
Es básicamente una casa cuadrada erigida alrededor de
un patio en forma de claustro. Un jardín formal
complementaba la casa. Este se encontraba rodeado por
un exterior en forma de columnata terminada en forma
semicircular conocida como Esedra
las fachadas del exterior no son exactamente iguales, en
ellas los intercolumnios adquieren distintas medidas
teniendo en cuenta las deformaciones ópticas del ojo del
espectador, en la decoración se entremezclaban distintas
escenas mitológicas con grutescos y formas naturales y
geométricas.
El Palacio del Té, en Mantua, obra
de Giulio Romano
9. En la Rotonda se observa simetría, armonía, la estructura
con elementos clásicos como: el frontón y las columnas
formando un edificio hexástilo, y la repetición de la fachada
principal en los tres lados restantes, sin embargo hay un
cambio, ya que internamente una estructura circular que
unifica los espacios.
Ernest Gombrich (reconocido crítico de arte) señala que a
pesar de la armonía exterior de carácter clásico; en su
interior nos revela cierto vértigo por su circularidad, pues al
no ser común esta forma resaltamos el artificio que genera el
manierismo en cuanto a la correspondencia entre la
funcionalidad y la forma que debería tener un espacio
arquitectónico, pues seria complicado vivir y realizar
actividades en un espacio tan poco convencional.
Esto lo podemos relacionar con el planteamiento de Hausser
al decir que en el manierismo se deforman los espacios y las
proporciones que tanto fueron estudiados por los
renacentistas.
VILLA LA ROTONDA
Andrea Palladio
10. En la arquitectura manierista, los edificios pierden la
claridad de composición y pierden solemnidad con respecto
al clasicismo pleno, en los edificios se multiplican los
elementos arquitectónicos, aunque no cumplen una
función arquitectónica, la decoración gusta por
compartimentar las fachadas de los edificios
la construcción de este palacio cuenta con un estilo
representativo en los patios más ricos de toda la
cristiandad, su interior está compuesto por monumentos,
estatuas y cuadros que ilustran el edificio, además de eso
tiene un pequeño patio interno, se caracteriza
principalmente por los diseños de su interior.
Se observa que este palacio tiene buena monumentalidad,
tensión y abstracción en las formas en contraposición con
los cánones clásicos, que es muy decorativo lo cual es
característico de este estilo manierista
El Palacio Marino
Galeazzo Alessi
11. Fue construida por el papa Julio III entre los años
1550 y 1555. Se produce un distanciamiento del ideal
clásico, es decir el edificios pierden la claridad de
composición y solemnidad con respecto al clasicismo
pleno.
La Villa Julia (en italiano,
Villa Giulia)
En la parte trasera se encuentra un Ninfeo de dos
pisos. Esta estructura de logias cubiertas, decorada con
estatuas de mármol de grades dimensiones confieren
al conjunto un inquietante equilibrio.
La villa tenía una entrada urbana y otra rural, por lo
que se encontraba en el umbral entre estos dos
mundos.
La villa fue construida en una área de Roma conocida
como Vigna Vecchia, enclavada en las laderas del
monte Parioli, como una villa suburbana y lugar de
reposo.