Dr. Edgard Cobo C. nació el 27 de julio de 1932 en Cali, Colombia. Es profesor emérito de Obstetricia y Ginecología. Está casado con Bertha Helena Corey y tiene un hijo y una hija. Educación: título de médico, Universidad Nacional de Colombia (1956); Junta de Obstetricia y Ginecología, Universidad de Valle, Cali (1959); miembro del cuerpo docente de fisiología reproductiva del Servicio de Fisiología Obstétrica de la Universidad Nacional de Uruguay (1959-1961); miembro del Population Council de Nueva York, EE. UU. (1969). Cargos más importantes: profesor adjunto, fundador y presidente del Laboratorio de Fisiología Reproductiva (1961); profesor con dedicación exclusiva, (1969); profesor y presidente del Departamento (1972); profesor emérito (1984). Áreas de mayor interés: fisiología clínica del reflejo de eyección de leche; mecanismos desencadenantes del trabajo de parto en la mujer; trastornos hipertensivos del embarazo: aspectos clínicos, terapéuticos y epidemiológicos. Publicaciones: alrededor de 60 artículos originales publicados en revistas nacionales e internacionales, 9 libros y más de 400 resúmenes presentados en reuniones nacionales e internacionales. Distinciones: Premio 25º Aniversario de Investigación Científica, Facultad de Medicina. Premio Anual a la Investigación Científica, Bienestar Público del Estado; Medalla Nacional “Simón Bolívar”, por las sobresalientes contribuciones en educación, ciencia y cultura, Ministerio de Educación de la Nación. Miembro honorario de 12 sociedades médicas y científicas nacionales e internacionales.
Estudios e investigaciones
Edgard Cobo Cobo decidió ser médico por recomendación de su padre, un inmigrante libanés quien le insistió que esa sí era una profesión de prestigio. Aunque no la escogió por convicción, pues quería ser arquitecto, la encaró con entusiasmo y se destacó como un buen estudiante en la Universidad Nacional de Colombia en el año 55.
Sus maestros Arturo Aparicio Jaramillo y Guillermo López Escobar vieron en él algunas inquietudes científicas, mientras la mayoría de sus compañeros de clase más bien pensaban en graduarse y abrir pronto un consultorio privado. “Esta tendencia, que aún sigue siendo mayoritaria, era muy marcada en esa época en la que la totalidad de nuestros profesores clínicos eran médicos de gran prestigio con mucha clientela particular, por lo que solo iban al Hospital en la mañana para dedicar el resto del día a atenderla. Durante mi internado en la Facultad de Medicina de la Universidad del Valle, en Cali, viví una experiencia muy motivadora que marcó mi destino académico: en contraste con ese modelo, acá los profesores permanecían con los estudiantes todo el día pues eran de tiempo completo y dedicación exclusiva, como lo fuimos después muchos de los que los sucedimos”.
Cuando era estudiante del Colegio San Luís Gonzaga en Cali, Edgard Cobo Cobo “escribía poemas y versos m
1. Nelson Sabogal
Colombiano nació el 17 de febrero de 1940 en
Cáqueza (Cundinamarca) es ingeniero y es una
de las personas más expertas en el tema
ambiental, específicamente en el estudio y
conocimiento de la capa de ozono y el manejo
de residuos tóxicos y electrónicos
ESTUDIOS Y CARRERA
Hace doce años, él sorprendió a los medios científicos del mundo con una
investigación sobre el ozono en el trópico, y ahora tiene como responsabilidad, el
control de los desechos tóxicos, catalogados entre los más graves y complejos
problemas que afrontan el mundo y el hombre contemporáneo.
Es uno de los científicos con mayor reconocimiento mundial en asuntos
ambientales. Es consultor y consejero de varios gobiernos, de poderosas
empresas multinacionales y de connotados El empresarios, con los cuales se
comunica en cualquier sitio de la Tierra, utilizando los idiomas que sabe: español,
inglés, francés, ruso, alemán, italiano o chino. Nelson Sabogal trabaja para las
Naciones Unidas en Chatelaine, Ginebra, Suiza, como jefe del Programa mundial
de control de los movimientos transfronterizos de desechos tóxicos.
Entre sus funciones está luchar por el fortalecimiento de una campaña mundial
para alertar a la humanidad sobre el gran peligro que la amenaza; minimizar la
movilización de materiales peligrosos, y ayudar a su rápida eliminación. Coordina
centros regionales del convenio de Viena, en Argentina, Uruguay, El Salvador,
Egipto, Nigeria, Senegal, Sudáfrica, China, Indonesia, Eslovaquia y la Federación
Rusa.
Nelson Sabogal estudió en Rusia, es ingeniero meteorológico y realizó una
maestría en Aerología (estudio de la atmósfera) en la Universidad Hidrometeoro
lógica de San Petersburgo. Se ganó (con honores) un concurso entre más de cien
expertos mundiales y aunque fue contratado por tres meses, completa ya más de
14 años en la ONU. Coordina paneles científicos y recorre el planeta, desde el
Ártico hasta el Antártico.
Nelson Sabogal, su autoridad en materia de ozono Millones de colombianos lo
vieron por televisión en los años 1987 y 1988, cuando llamado por el Noticiero
Cinevisión, revolucionó los informes del estado del tiempo, con un estilo sencillo,
de fácil comprensión, diferente. Se trata del ingeniero colombiano Nelson Sabogal,
hoy una de las personas que más sabe sobre los secretos de la capa de ozono.
Hace doce años, él sorprendió a los medios científicos del mundo con una
investigación sobre el ozono en el trópico, y ahora tiene como responsabilidad, el
control de los desechos tóxicos, catalogados entre los más graves y complejos
2. problemas que afrontan el mundo y el hombre contemporáneo. Es consultor y
consejero de varios gobiernos, de poderosas empresas multinacionales y de
connotados empresarios, con los cuales se comunica en cualquier sitio de la
Tierra, utilizando los idiomas que sabe: español, inglés, francés, ruso, alemán,
italiano o chino. Nelson Sabogal trabaja para las Naciones Unidas en Chatelaine,
Ginebra, Suiza, como jefe del Programa mundial de control de los movimientos
transfronterizos de desechos tóxicos. Entre sus
funciones están luchar por el fortalecimiento de
una campaña mundial para alertar a la
humanidad sobre el gran peligro que la amenaza;
TRABAJOS E INVESTIGACIONES
Podemos decir que uno de los logros más
grandes de Nelson Sabogal ha sido la
investigación que realizo en Colombia, ubicada en
el trópico, en el cual encontró que en el trópico no
se estaba acabando el ozono, todo lo contrario a
lo que decía la NASA por esas mismas fechas.
Comenzó a presentar los datos del estudio, pero
al principio tuvo duras observaciones de sus
colegas.
Volviendo a revisar la investigación, los
resultados que obtuvo fueron los mismos, por lo cual decidió volver a presentar su
investigación; en 1991 la presentó en II Período de Sesiones sobre Cambios
Climáticos que se llevó a cabo en Viena, Suiza. En la cual expuso su trabajo,
demostrando que en las latitudes análogas a las de Colombia la capa de ozono no
se había reducido. Con esta conclusión venció a la NASA (Virfon, 2013), y llego a
ganarse el respeto de toda la comunidad ambiental y científica, siendo citado por
la propia NASA en su investigación sobre el ozono.Debido a sus estudios, ha
llegado a la conclusión que en la capa de ozono no existe agujeros, lo que él
explica es que esta se está deteriorando como una media velada, que cada vez se
vuelve más delgada.(Virfon, 2013)
Más tarde en su vida, Nelson se presentó a un concurso para Kenia, el cual ganó,
pero para su aceptación y obtención tuvo en cuenta la opinión de su esposa; junto
con su familia vivió una gran experiencia, disfrutando de las diversidades de la
sabana africana. En Kenia fue profesor más por una necesidad económica que por
una pasión a la enseñanza.
Ya para el 2002 se dirigió a Ginebra, Suiza, donde volvió a retomar sus estudios,
esta vez enfocándose en los residuos, el tratamiento de los desechos tóxicos. “Se
ganó (con honores) un concurso entre más de cien expertos mundiales y aunque
fue contratado por tres meses, completa ya más de catorce años en la ONU
coordinando papeles científicos”. (Asociación Nacional de Anunciantes, s.f.)
Actualmente Nelson Sabogal, tiene a su mando la campaña para alertar a la
humanidad sobre el peligro de los desechos tóxicos, uno de los problemas
medioambientales más fuertes que afrontan el mundo, debido a la rápida
velocidad con la cual la tecnología se vuelve obsoleta, lo cual significa que cada
3. vez hay más desechos que tratar (Virfon, 2013),
los cuales afectan la salud humana como el medio
ambiente.
Tiene proyectado para su futuro, primero que todo,
radicarse
RECONOCIMIENTOS
Fue nombrado Oficial Superior de Asuntos Científicos de la Secretaria de la Convención de
Viena y el Protocolo de Montreal, en el Programa de las Naciones Unidas (PNUMA) y también
obtuvo el logro de jefe de Servicios de Conferencias y de la Unidad de Gobernanza de la
Secretaria de Convenio de Basilea (SBC) en la ONU, con sede en Ginebra (Juan Angel, 2012).
Tomado de:
http://www.proyectoazul.com/2012/09/cientifico-latinoamericanos-nelson-sabogal/
-sabogal-18500834
NUBIA MUÑOZ CALERO
BIOGRAFIA
La preocupación sobre el nexo entre el cáncer y los agentes infecciosos que producen esta
enfermedad son para la epidemióloga vallecaucana Nubia Muñoz Calero una obsesión desde
sus inicios en la Medicina en los años 60. Ella es pionera en las investigaciones del virus del
papiloma humano y el cáncer. Graduada de la Facultad de Medicina de la Universidad del
Valle en 1964, donde se distinguió por ser una estudiante sobresaliente y sobre todo por su
interés y motivación hacia la investigación en cáncer, Nubia Muñoz Calero siguió su carrera
por este camino al que llegó por su gran mentor, el patólogo y docente e investigador, Pelayo
Correa.
4. INVESTIGACION.
El virus del papiloma humano Una de sus actividades más recientes ha sido la supervisión de
ensayos clínicos de una vacuna contra el virus del papiloma humano, para demostrar su
eficacia en la prevención del cáncer del cuello uterino, el más frecuente en el ámbito mundial
entre las mujeres. Según explica la investigadora, “lo que hi ce fue tratar de demostrar que el
virus del papiloma humano era la causa principal y necesaria del cáncer de cuello uterino y
esto revolucionó el campo de la prevención, porque es la primera vez que se demuestra que
una causa es necesaria”. Llegó a la conclusión de que los agentes infecciosos son la causa
número uno de cáncer en los países en vía de desarrollo y, por consiguiente, si son agentes
infecciosos es posible que se puedan prevenir a través de una vacuna. Justamente esta vacuna
que ya cuenta con la aprobación de uno de los organismos más importantes en materia de
medicamentos del mundo, ayudaría a prevenir el 70 por ciento de los cánceres genitales que
son causados por el
papiloma humano, recordando que este tipo de cáncer es la segunda causa de mortalidad en
mujeres en Latinoamérica. Precisamente, la doctora Muñoz invitó a los directivos de
Laboratorios Merck a Colombia para que conocieran de cerca los trabajos que se están
haciendo en el país. Les mostró los adelantos del Instituto Nacional de Cancerología, y gracias
a esta gestión Colombia participa en el proceso de evaluación de la vacuna dentro de los 33
países que están en ensayos, al lado de Brasil, Perú, México y Costa Rica, entre otros y en el
cual participan 29 mil mujeres en todo el mundo.
TRABAJOS
“Después de estudiar Medicina en la Universidad de l Valle viajé a Estados Unidos donde
trabajé por tres años en el National Cancer Institute en Bethesda, sede de los Institutos
Nacionales de Salud de ese país. Realicé una maestría en Salud Pública con énfasis en
Epidemiología y Virología del Cáncer en la Escuela de Salud Pública de la Universidad Johns
Hopkins en Baltimore, luego me fui a Lyon, Francia, para seguir mi entrenamiento en la
Agencia Internacional para Investigación en Cáncer (IARC) la cual pertenece a la Organización
Mundial de la Salud”, dice orgullosa y sonriente. En la IARC, la doctora Nubia permaneció
durante 30 años, realizando una destacada carrera como investigadora y profesional y siendo
promovida sucesivamente a cargos directivos, entre ellos, Jefe de la Unidad de Estudios de
Campo e Intervenciones. Ha sido la única investigadora latinoamericana que ha alcanzado
este rango en la agencia. Recuerda que dentro de sus planes estaba vivir un tiempo corto en
Francia: “Iba por un año para seguir con mi entrenamiento como epidemióloga, pero dure 30
y me jubilé hace seis”. Hoy está dedicada a dar conferencias por el mundo entero. A lo largo
de su carrera en la que sigue muy activa, la doctora Muñoz Calero ha realizado investigación
epidemiológica en casi todos los tipos de cánceres, sobre todo los relacionados con el cáncer
de estómago y papel del helicobacter pylori, el cáncer del cuello uterino, cavidad oral y del
5. esófago con el virus del papiloma humano y el cáncer de hígado y los virus de la hepatitis B y
C.
TOMADO DE:
http://www.unipamplona.edu.co/unipamplona/hermesoft/portalIG/home_2/recur
sos/biografia/contenidos/15052007/biografia_4.jsp
http://historico.unperiodico.unal.edu.co/ediciones/115/virus.html
http://cienciagora.com.co/galeria_de_cientificos/ciencias-de-la-salud-150/nubia-munoz-
calero/214.html
EDGARD COBO C.
Dr. Edgard Cobo C. nació el 27 de julio de
1932 en Cali, Colombia. Es profesor emérito
de Obstetricia y Ginecología. Está casado
con Bertha Helena Corey y tiene un hijo y una
hija. Educación: título de médico, Universidad
Nacional de Colombia (1956); Junta de
Obstetricia y Ginecología, Universidad de
Valle, Cali (1959); miembro del cuerpo
docente de fisiología reproductiva del Servicio
de Fisiología Obstétrica de la Universidad
Nacional de Uruguay (1959-1961); miembro
del Population Council de Nueva York,
EE. UU. (1969). Cargos más importantes: profesor adjunto, fundador y
presidente del Laboratorio de Fisiología Reproductiva (1961); profesor con
dedicación exclusiva, (1969); profesor y presidente del Departamento (1972);
profesor emérito (1984). Áreas de mayor interés: fisiología clínica del reflejo de
eyección de leche; mecanismos desencadenantes del trabajo de parto en la
mujer; trastornos hipertensión del embarazo: aspectos clínicos, terapéuticos y
epidemiológicos. Publicaciones: alrededor de 60 artículos originales publicados
en revistas nacionales e internacionales, 9 libros y más de 400 resúmenes
presentados en reuniones nacionales e internacionales. Distinciones: Premio
25º Aniversario de Investigación Científica, Facultad de Medicina. Premio Anual
a la Investigación Científica, Bienestar Público del Estado; Medalla Nacional
“Simón Bolívar”, por las sobresalientes contribuciones en educación, ciencia y
cultura, Ministerio de Educación de la Nación. Miembro honorario de 12
sociedades médicas y científicas nacionales e internacionales.
Estudios e investigaciones
Edgard Cobo Cobo decidió ser médico por recomendación de su padre, un
inmigrante libanés quien le insistió que esa sí era una profesión de prestigio.
Aunque no la escogió por convicción, pues quería ser arquitecto, la encaró con
6. entusiasmo y se destacó como un buen estudiante en la Universidad Nacional de
Colombia en el año 55.
Sus maestros Arturo Aparicio Jaramillo y Guillermo López Escobar vieron en él
algunas inquietudes científicas, mientras la mayoría de sus compañeros de clase
más bien pensaban en graduarse y abrir pronto un consultorio privado. “Esta
tendencia, que aún sigue siendo mayoritaria, era muy marcada en esa época en la
que la totalidad de nuestros profesores clínicos eran médicos de gran prestigio con
mucha clientela particular, por lo que solo iban al Hospital en la mañana para
dedicar el resto del día a atenderla. Durante mi internado en la Facultad de
Medicina de la Universidad del Valle, en Cali, viví una experiencia muy motivadora
que marcó mi destino académico: en contraste con ese modelo, acá los profesores
permanecían con los estudiantes todo el día pues eran de tiempo completo y
dedicación exclusiva, como lo fuimos después muchos de los que los sucedimos”.
Cuando era estudiante del Colegio San Luís Gonzaga en Cali, Edgard Cobo Cobo
“escribía poemas y versos más bien vergonzosos, algo frecuente en los
adolescentes de mi época, que para mí terminar sus estudios médicos tuvo una
tentadora y jugosa oferta de trabajo en la ciudad de Villavicencio, pero contrario a
lo que todos pensaban no aceptó, para volver a su Cali natal. Su familia lo tildó de
loco por querer hacer su internado en la Universidad del Valle por una suma de
dinero irrisoria, pero sentía que su vocación estaba en la vida académica más que
en el ejercicio de su profesión. De hecho, después de graduarse como especialista
comenzó a realizar una sub-especialidad en Fisiología y Bioquímica, también en la
Universidad del Valle, que implementaría después en el exterior.
La Fundación Rockefeller le ofreció dos becas, una para viajar a New York y
estudiar Cirugía de Cáncer Ginecológico y otra para especializarse en Ciencias
Básicas (Fisiología Obstétrica) en la Universidad de la República en Montevideo,
Uruguay. “Como escogí la de Ciencias básicas, una actividad conocida solo por su
poca rentabilidad, mi familia reafirmó su convicción sobre mi condición de
chiflado”, dice sonriendo el profesor Cobo, pero cuando poco a poco se fueron
dando cuenta de que le iba bien en su trabajo, sus padres comenzaron a sentirse
orgullosos del hijo médico.
La beca que no aceptó terminó siendo otro regalo para Edgard Cobo Cobo. New
York no salió del todo de sus planes, pues dice que su luna de miel la pasó en esa
ciudad, en donde realizó un curso en Bioquímica de seis meses, también becado
por la Fundación Rockefeller. Comenta agregando que ese país le dejó una
impresión académicamente muy positiva, pero que no logró entender a la clase
media norteamericana por su afán por el dinero y el consumismo. fortuna se
7. extraviaron; después de esos años colegiales solo volví a escribir artículos
médicos y científicos para publicar en revistas nacionales e internacionales”,
recuerda. Artículos que generalmente le publicaron sin mayores dificultades.
“Últimamente, y eso viene con el inventario de los años, me inclino a escribir y dar
conferencias sobre temas históricos”.
Su llegada a Montevideo, Uruguay fue todo un suceso, lo impresionó lo austera
que puede llegar a ser una ciudad tan europea, insertada en Latinoamérica.
“Buenos Aires es la gran capital latinoamericana de marcada influencia italiana y a
su lado, Montevideo es una ciudad encantadora, del mismo ascendiente, donde la
educación era gratuita y obligatoria y sus gentes tranquilas, serias y accesibles.
Era una especie de Italia en español. Y allí tuve dos maestros excepcionales”,
manifiesta el científico Cobo. Ellos fueron Hermógenes Álvarez y Roberto
Caldeyro-Barcia, a quienes describe como dos seres humanos encantadores.
“Uno era el clínico de gran imaginación y creatividad; el otro que en eso lo
emulaba, resultó ser además uno de los más brillantes gerentes de la fisiología
reproductiva en Latinoamérica y el mundo gracias, además de sus conocimientos,
a una imponente y seductora personalidad”, aclara.
Recuerda que justo Hermógenes Álvarez y Roberto Caldeyro lo expusieron al
mundo científico internacional, pues el Laboratorio en el que trabajaba en
Montevideo era visitado permanentemente por destacados investigadores
europeos y norte y suramericanos y recibía becarios de muchos países Allí
aprendió lo que transmitió a sus estudiantes en Colombia al regresar a la
Universidad de Valle, con unas ganas enormes de trabajar sus temas de
investigación.
Apoyado por la Universidad del Valle y la Fundación Rockefeller creó el
Laboratorio de Fisiología de la Reproducción, con el que rápidamente se dio a
conocer en el ámbito internacional y en donde exploró con sus estudiantes
diversos campos como fisiología y farmacología de la lactancia, algunos aspectos
de los mecanismos disparadores del parto humano, actividad contráctil del útero
humano durante el ciclo menstrual y el embarazo, y comportamiento del útero
humano en algunas enfermedades frecuentes en obstetricia, como los estados
hipertensivos en el embarazo, entre otros. También trabajó en animales de
experimentación, siempre en relación con los temas mencionados atrás.
Algunas de sus experiencias.
A los 6 meses de funcionamiento del laboratorio ya teníamos el primer resultado
experimental original y empecé a escribir mi primer trabajo para el American
Journal of Obstetrics and Gynecology y allí lo publicaron. También me esmeraba
8. por mostrarle a mis estudiantes el sentido de la dedicación de lleno a investigación
científica, pero lamentablemente la tendencia a la práctica privada sigue siendo
tan fuerte, que entre muchos alumnos destacados y motivados inicialmente hacia
la investigación, solo encontré uno que siguió este camino y hoy es un destacado
investigador de prestigio internacional, y estoy hablando de muchos años de
ejercicio docente”, comenta el científico.
En Cali, antes de viajar a Montevideo, tuvo un maestro brillante, el profesor Luis
María Borrero. Un hombre disciplinado, un científico puro que enseña con el
ejemplo. El profesor Cobo Cobo dice que la investigación en Colombia es una
actividad relegada y vista como poco rentable y más en su profesión. Desde sus
inicios en el campo científico, siempre vio un error conceptual y practico en los
trabajos de sus estudiantes y de varios colegas, estaban más inclinados a realizar
y publicar trabajos con el supuesto casi siempre falaz de corroborar
investigaciones ya publicadas y en muchos casos científicamente comprobadas,
que en innovar en otros campos de la medicina clínica.
“Preferían investigar sobre lo que ya estaba investigado, para llegar a la
conclusión de que sus resultados confirmaban los resultados obtenidos por
investigadores extranjeros, 10 años atrás. Esto es equivalente al “refrito”, una
característica de la literatura latinoamericana, que criticaba en esos tiempos el
escritor Julio Cortázar”. Después se olvidaban y abrían un consultorio. No digo que
eso del consultorio sea algo malo; de hecho, durante mis 32 años de actividad
como profesor universitario, ejercí en un consultorio privado por más de 10 años,
pero lo veía como un complemento económico que me permitió invertir en la
educación de mis hijos y al tiempo continuar con mi actividad académica y de
investigación”
Reconocimientos y logros.
Doctor Edgard Cobo Cobo, Docente jubilado de la Universidad del Valle, recibió el
título de "Maestros de Maestros" por parte de SOVOGIN.
La Junta Directiva de la Asociación Vallecaucana de Obstetricia y Ginecología -
SOVOGIN-, otorgó el Título de "Maestro de Maestros" de la Ginecología y
Obstetricia del Valle del Cauca, al Dr. Edgar Cobo Cobo. Este es un
reconocimiento a una persona que ha dedicado su vida a la docencia, que lo ha
llevado a una producción intelectual y al respeto y consideración de sus colegas y
alumnos.
El Dr. Cobo es Médico de la Universidad Nacional de Colombia, Especialista en
Obstetricia y Ginecología de la Universidad del Valle, Subespecialista en Fisiología
y Bioquímica de la misma universidad y Subespecialista en Fisiología Obstétrica.
9. En anteriores oportunidades el Dr. Cobo ha recibido reconocimientos como el
Premio Nacional al Mérito Científico en el año 2007, otorgado por la Asociación
Colombiana para el Avance de la Ciencia, ACAC, y el de Profesor Emérito de
Obstetricia y Ginecología, por parte de la Universidad del Valle en el año 1985,
resultados de su trabajo como investigador en el área de fisiología de la
reproducción. A recibido premios y distinciones institucionales como
reconocimiento a su labor, entre otros, el de Miembro Honorario del Servicio de
Fisiología Obstétrica de la Universidad de la República, Montevideo, Uruguay en
1961; Miembro fundador en 1.964, y Presidente, en 2.002-04, de la Asociación
Latinoamericana de Investigadores en Reproducción Humana, Miembro Fundador
y Representante de Colombia ante el Consejo Directivo del Programa
Latinoamericano de Investigación en Reproducción Humana, en 1973; Premio a la
Investigación Científica, Universidad del Valle, en 1979; Premio a la Investigación
Científica de la Beneficencia del Valle del Cauca. Cali, en 1980; Profesor Emérito
de la Universidad del Valle y Condecoración Oficial Simón Bolívar, por servicios
eminentes en el campo de la educación, la ciencia y la cultura, del Ministerio de
Educación, en 1985; Medalla de Oro y Honor al Mérito Perinatal, Maternidad Santa
María en Valencia, Venezuela, en 1992; Miembro Honorario de la Asociación
Latinoamericana de Investigadores en Reproducción Humana, en 2005; Premio
Nacional al Mérito Científico, Categoría Vida y Obra, de la Asociación Colombiana
para el Avance de la Ciencia, en 2007 y Socio Correspondiente Extranjero de la
Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia, Madrid. España, en 2008, entre
muchos otros que aparecen en su hoja de vida y que él mismo prefiere no
nombrar.
http://apps.who.int/rhl/authors/ecinfo/es/
http://cienciagora.com.co/galeria_de_cientificos/ciencias-de-la-salud-
150/edgard-cobo-cobo/416/en-la-ciudad-italiana-de-latinoamerica/page-
1.html
http://salud.univalle.edu.co/index-portal.
php?not_id=190&m=inicio&accion=ver_noticia