En el modo de infraestructura, cada estación informática se conecta a un punto de acceso inalámbrico formando un conjunto de servicio básico (BSS). Varios BSS pueden vincularse a través de un sistema de distribución para formar un conjunto de servicio extendido (ESS). El modo de infraestructura se utiliza comúnmente para conectar equipos inalámbricos a una red cableada existente a través de un punto de acceso.