El documento habla sobre la alegría de María. Explica que María vivió con una auténtica y plena felicidad, como se puede ver en el Magníficat. El Magníficat expresa la mayor alegría de María, cuyos motivos eran su encuentro con Dios y el anuncio de que sería la madre del Salvador. María encontraba su alegría en Dios.
1. Día 5º. María que vive la alegría desde dentro
19 de septiembre de 2011
Valor: Alegría
Monición:
(Retomar el día vocacional)
Hoy, en este quinto día de la novena reflexionamos
sobre la alegría de María, y no es difícil imaginar que la
Virgen María vivió toda su vida alegre, sonriente, con
una felicidad auténtica y plena.
Pero, ¿por qué aseguramos que María vivió
continuamente en la alegría? Acerquémonos a las
Sagradas Escrituras y veamos el fundamento de su
felicidad, de su alegría.
En muchos pasajes de los evangelios podemos ver
actitudes y palabras de alegría de la Virgen María, pero
el más conocido de todos estos pasajes es sin dudas la
alabanza que ella hace a Dios después del cálido
recibimiento de su parienta Isabel cuando María fue a
visitarla. Lo conocemos como el canto del Magníficat.
Este canto, es la expresión mayor de la alegría de María
y si lo leemos detenidamente podemos encontrar los
motivos de la felicidad de la Madre de Dios y nuestra
Madre.
2. Lo primero que debemos recordar es el contexto en que
se produce el Magníficat. Versículos antes nos cuentan
que esta joven de Nazareth tuvo la experiencia más
importante de su vida: El encuentro con Dios, con un
Dios que la llama “Amada”, “llena de gracia”, “llena de
Dios”, un Dios que le anuncia, como pidiendo permiso,
ser la Madre del Salvador. Este encuentro con Dios la
lleva a exclamar “Proclama mi alma la grandeza del
Señor, y mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador”.
María encuentra su alegría en el encuentro con Dios.
.Canto: ¨Gracias¨. Folder # 141
Moniciones a los salmos del día
Salmo 10
Como mercedarias necesitamos recuperar nuestra
alegría y nuestra paz, tal vez rota por las ocupaciones
del día. Los brazos acogedores de Dios Padre nos la
devolverán de nuevo.
Salmo 14
Descubriremos la cercanía de Dios desde nuestra vida.
Sólo quienes viven la justicia, la lealtad, el amor al
prójimo… gozarán de un Dios cercano.
Cántico
Los comportamientos de Dios con nosotras siempre
son sorprendentes: nos ha elegido desde siempre, en
3. Cristo, para ser sus hijas. Toda una sorpresa de su amor
sin medida.
Lectura: del día de la novena
Jn. 2,1-11
Opcional: Lc. 2, 15-20
Constituciones:
María nos enseña a acercar a la humanidad a amor que Él
vino a revelar: amor que se concreta, sobre todo, en los que
sufren, en los cautivos, los oprimidos y los pecadores.
En su condición de mujer, y como pobre de Yahvéh, nos
muestra el camino del Evangelio hecho cercanía, acogida,
justicia y misericordia.
Frases inspiradoras del Beato P. Zegrí:
“María de la Merced es de todos y para todos”.
P. Zegrí.
4. Reflexión:
María de la Merced, “mi sin igual Madre y
protectora”, como la llamaba el Beato P. Zegrí,
sigue asumiendo el proyecto curricular de Dios,
sigue enviando a su pueblo liberadores y
liberadoras de las nuevas formas de cautividad
que se van haciendo presentes en las distintas
épocas de la historia.
María de la Merced, experta en valores, nos
educa, a todas sus seguidoras, en los grandes
valores de la vida: la ALEGRÍA, la ternura, la
paciencia, la afabilidad, la misericordia
entrañable, el silencio ante la adversidad
(guardaba las cosas en lo profundo de su
corazón), la dulzura, la esperanza, la humildad, la
obediencia, la justicia, el amor y la solidaridad.
Esa María de la Merced se hace de nuevo
presente en el banquete de bodas del día a día
de nuestra tarea pastoral en nuestros centros y
en nuestras comunidades, se nos aparece y nos
acompaña, como a Jesús en Caná de Galilea, y
mirando nuestro quehacer diario nos susurra,
5. con ternura y amabilidad, que en el banquete
pastoral de nuestros proyectos, planes y
actividades hay algunos y algunas que “no tienen
vino”.
En la Anunciación-Encarnación, el ángel invita
a María a vivir la alegría mesiánica: "Alégrate, llena
de gracia..." (Lc 1, 28). María se llena de gozo en
el Señor pues el Mesías nacerá de Ella por obra del
Espíritu Santo. El cántico del Magníficat es una
hermosa expresión de alegría humilde, limpia,
transparente, profunda. María exulta de gozo "en
Dios mi salvador porque ha hecho en mí grandes
maravillas" (Lc 1, 47.49). Cuando María y José
presentan al niño en el templo, tanto el anciano
Simeón como Ana se gozan en el Espíritu ante la
presencia del Reconciliador (Lc 2, 29-38).
Tiempo de oración personal: Música de fondo
Canto final: Magníficat. 170 Folder
Padre nuestro:
Oración Final: