2. E – 26-008-E-05 ¶ Exploración física de las articulaciones sacroilíacas
hueso ilíaco hacia atrás para estabilizar la pelvis. Toda
relajación del sistema es susceptible de desencadenar
una disfunción sacroilíaca. Por tanto, los ligamentos y
los músculos deben ser «eficaces», es decir, recíprocamente firmes y flexibles.
Terminología
Para explicar la sintomatología, todas las escuelas se
refieren al concepto de segmento móvil, pero sus
conclusiones difieren en cuanto a la interpretación del
origen de estos fenómenos mecánicos.
Numerosos términos se relacionan con este tipo de
trastorno: esguince, inestabilidad, subluxación, bloqueo,
rigidez articular, etc. Para los osteópatas, todo se debe a
un bloqueo en mala posición [7]. Los quiroprácticos
utilizan el término «subluxación» [8].
En Francia, la Fédération de Médecine Manuelle
recomienda el uso del término «disfunción segmentaria», que se retoma aquí y que tiene la ventaja de no
tomar partido desde el punto de vista fisiopatológico [9].
Parece ser que el término más aceptado es el de
«disfunción sacroilíaca».
La disfunción puede ser o no sintomática; se califica
como rigidez (hipomovilidad) o inestabilidad
(hipermovilidad).
axial) y el ligamento sacroilíaco posterior largo [12]. Al
estar este último con frecuencia bajo tensión durante el
movimiento de contranutación, comprime dos nervios.
La cápsula también recibe ramas sensitivas procedentes
del nervio obturador, lo que explica el dolor en la
ingle [13].
Diagnóstico diferencial
El tipo de dolor que describe el paciente puede hacer
pensar también en [14]:
• síndrome facetario lumbar bajo;
• síndrome dorsolumbar;
• ciática.
El estudio de los signos clínicos posterior a la anamnesis permite descartar estas posibilidades.
El principal problema de una lumbalgia consiste en
diferenciar el dolor sacroilíaco de las demás causas de
lumbalgia [15].
■ Descripción de las pruebas
sacroilíacas
Se distinguen tres categorías de pruebas: de posición,
de movilidad y de reproducción del dolor
Disfunción
Pruebas de posición
Han surgido varias teorías según las diversas escuelas.
La que parece corresponderse mejor con la realidad es la
teoría propuesta por Vleeming et al [10]: la disminución
del tono muscular o un fracaso ligamentoso provocan
una contranutación que se mantiene y que produce
fuerzas de cizallamiento relativamente importantes que
pueden atacar a la región lumbar. Puede constituir, por
tanto, la base para una enfermedad lumbar.
Si se ejercen tensiones externas al conjunto sacrohueso ilíaco, modificando en uno u otro sentido sus
propias tensiones, por ejemplo como resultado de un
choque directo o de un paso en falso, el equilibrio
puede romperse, con pérdida de congruencia articular,
lo cual crea en algunas partes de la interfase articular
una zona de hiperpresión que expulsa el líquido sinovial, lo que produce la adherencia entre ambos cartílagos articulares. La pérdida de la congruencia así creada
provoca dolor, limitación de las amplitudes articulares y
contracturas.
Las pruebas de posición de simetría se utilizan como
referencia de partida para algunas pruebas de movilidad
(espinas ilíacas posterosuperiores[EIPS]) o para precisar
lesiones ilíacas (anterior, posterior, superior) a partir de
la posición de estas marcas.
La base de las pruebas de movilidad depende de una
buena palpación de los puntos de referencia óseos. El
explorador debe plantearse previamente si es capaz de
localizar de forma fiable estos puntos de referencia,
antes de realizar la prueba de movilidad ya que, si existe
un error desde el principio, la prueba de la movilidad
queda falseada.
El límite de una prueba de posición palpatoria como
ayuda al diagnóstico consiste en que la presencia de una
asimetría ósea no puede vincularse a una función
mecánica anómala [16]. Ésta es sin duda la razón por la
que tan pocos estudios se decantan por su evaluación.
La palpación se realiza a través de los tejidos blandos.
Si éstos están tensos o muy desarrollados, como en un
paciente obeso, ello puede dar lugar a un cambio de
posición ilusorio.
La escasa fiabilidad para localizar con precisión los
puntos de referencia óseos podría explicar la baja
fiabilidad de las pruebas de movilidad.
Localización del dolor sacroilíaco
Se describe clásicamente como un dolor glúteo unilateral (en torno a la espina ilíaca posterosuperior, que
puede extenderse a toda la nalga y a la cara posterolateral del muslo).
Este dolor glúteo puede irradiarse hasta el hueco
poplíteo, casi nunca por debajo de la rodilla, a la ingle
o hacia la región lumbar [11].
Altura de las crestas ilíacas
Características del dolor sacroilíaco
Altura de las EIPS
El dolor es sordo, intermitente en la mayoría de
casos. Se incrementa con la posición sentada o la
bipedestación prolongada y con la marcha, generalmente en el lado de la pierna más larga [4].
El paciente está en bipedestación. El terapeuta coloca
sus pulgares bajo el reborde horizontal de las EIPS y
aprecia su nivel (Fig. 1).
Orígenes del dolor
La cápsula y los ligamentos sacroilíacos están inervados por la rama posterior de los dos primeros nervios
sacros. El paquete vasculonervioso pasa entre el ligamento interóseo de la articulación sacroilíaca (ligamento
2
El paciente se coloca en bipedestación. El terapeuta
coloca las partes laterales del índice en el vértice de las
crestas ilíacas y aprecia su nivel.
Pruebas de movilidad
Cabe precisar de entrada que, si son positivas, no
permiten implicar de inmediato la articulación
sacroilíaca ni excluir las demás estructuras adyacentes [17]. Un diagnóstico de exclusión de otras enfermedades resulta indispensable.
Kinesiterapia - Medicina física
3. Exploración física de las articulaciones sacroilíacas ¶ E – 26-008-E-05
Figura 1.
Altura de las espinas ilíacas posterosuperiores.
Existe un cierto grado de movimiento. Walker [18]
pone en duda la capacidad de los médicos para detectar
un movimiento del orden de 1-3°.
Aunque estas pruebas no son lo suficientemente
fiables, siguen utilizándose ampliamente.
A pesar de que es posible detectar de forma fiable la
hipomovilidad o la hipermovilidad, nunca se ha identificado una relación causal entre la alteración del movimiento y los síntomas del paciente.
Por el contrario, Sturesson [19] ha mostrado que no
existen diferencias significativas en términos de amplitud de movimiento entre el lado doloroso y el no
doloroso en pacientes con lumbalgia unilateral que se
habían identificado previamente como portadores de
una posible enfermedad sacroilíaca.
Habida cuenta de que las radiografías, tomografías
computarizadas (TC) y demás tomografías nunca han
demostrado por sí mismas que las anomalías observadas
sean la causa del dolor [2], las pruebas que palpan las
posiciones óseas y la movilidad no indican con seguridad la causa anatómica del dolor.
La articulación sacroilíaca forma parte de un sistema
que incluye la columna lumbar, la pelvis y las caderas y
no funciona, por tanto, de manera aislada.
Las pruebas de movilidad que buscan «aislar» la
articulación sacroilíaca en movimientos específicos
pueden ser útiles pero no la aíslan exclusivamente a
ella. Estas pruebas de movilidad global proporcionan,
por tanto, información sobre un tipo de movimiento
que incluye varias articulaciones. Se les denomina
impropiamente «pruebas de movilidad sacroilíaca».
La articulación sacroilíaca está rodeada por músculos
poderosos, varios de los cuales se insertan en los ligamentos y la cápsula articular. Para Vleeming, la disfunción muscular puede reducir o aumentar la movilidad
sacroilíaca [6].
Se describen aquí tres pruebas que evalúan la hipomovilidad y una prueba de hipermovilidad (mejor
denominada como prueba de inestabilidad).
Prueba de los pulgares ascendentes,
en bipedestación
También se conoce como prueba de flexión en bipedestación (PFB). El paciente está de pie, con los pies
ligeramente separados. El terapeuta se sitúa detrás de él
y contacta con los bordes inferiores de las EIPS de
ambos lados. Le pide que realice una flexión anterior y
Kinesiterapia - Medicina física
Figura 2. Prueba de flexión en bipedestación.
Figura 3.
Prueba de flexión en posición sentada.
observa si una de las EIPS asciende más que la otra. La
prueba indica amovilidad sacroilíaca del lado del pulgar
ascendente (Fig. 2).
Prueba de los pulgares ascendentes,
en posición sentada
También se conoce como prueba de flexión en posición sentada (PFPS). El paciente está sentado con los
pies ligeramente separados. El terapeuta se sitúa detrás
de él y contacta con los bordes inferiores de las EIPS de
ambos lados. Le pide que realice una flexión anterior y
observa si una de las EIPS asciende más que la otra. La
prueba indica amovilidad sacroilíaca del lado del pulgar
ascendente (Fig. 3).
En las pruebas PFB y PFPS, es necesario tener en
cuenta, al comenzar la prueba, una posible asimetría de
las EIPS. Los osteópatas afirman que la PFPS detecta la
hipomovilidad del sacro con relación al hueso ilíaco,
mientras que la PFB detecta la hipomovilidad del hueso
ilíaco con relación al sacro. Esto nunca se ha demostrado en estudios científicos.
Prueba de Gillet
También se denomina Stork test. El paciente se coloca
de pie frente a una pared y apoya las manos en ella. El
3
4. E – 26-008-E-05 ¶ Exploración física de las articulaciones sacroilíacas
Figura 6.
Figura 4.
Prueba de Gillet.
Thigh thrust test.
Según Snijders [21], esta prueba puede considerarse
como una manera de verificar si los ligamentos de la
pelvis y de la unión lumbopélvica transfieren correctamente las cargas entre el tronco y las extremidades
inferiores, ya que ésa es su función.
Mens propuso originalmente esta prueba para la
mujer embarazada. Se ha demostrado que la relaxina
aumenta la movilidad de las articulaciones sacroilíacas y
del pubis, sobre todo en los últimos tres meses del
embarazo. Los estudios se refieren a menudo a mujeres
embarazadas. La hipermovilidad es aquí más común.
Pruebas de reproducción del dolor
Figura 5. Active straight leg raising (ASLR).
terapeuta se sitúa detrás colocado un dedo de su mano
izquierda sobre S2 y un dedo de su mano derecha sobre
la EIPS derecha. Para explorar la articulación sacroilíaca
derecha, el paciente realiza una flexión de la cadera
superior a 90°. Con esta flexión, la EIPS se hace posteroinferior, lo que significa que la movilidad de la
articulación sacroilíaca es correcta. Por el contrario, el
mantenimiento en un plano horizontal o la elevación
de la EIPS indica amovilidad (Fig. 4).
Prueba de inestabilidad de la pelvis
(elevación activa de la pierna extendida)
También se conoce como ASLR (active straight leg
raising) o elevación activa de la pierna extendida. El
paciente se coloca en decúbito supino (Fig. 5).
Paso 1: el paciente realiza una elevación activa de una
pierna extendida y luego de la otra (de sólo unos
20 cm). Se le pregunta si la prueba se ha acompañado
de sensación de debilidad en su realización o de dolor
glúteo al elevar la pierna.
Paso 2: el kinesiterapeuta comprime lateralmente la
pelvis al tiempo que pide al paciente una segunda
ejecución de la prueba.
Si la debilidad y/o el dolor disminuyen con la compresión de la pelvis, existe inestabilidad (debilidad de los
músculos que estabilizan la pelvis: abdominales bajos y
glúteos mayores). La prueba consiste pues en evaluar el
estado de inestabilidad.
Mens ha estudiado la cantidad de fuerza que es
necesario ejercer [20]; resulta suficiente una tensión de
50 newtons (lo que corresponde a una «buena» compresión manual).
4
Tratan de determinar si la articulación sacroilíaca es la
causa del dolor del paciente. La prueba es positiva si el
paciente experimenta el dolor que siente con su lumbalgia. La prueba es negativa si no existe dolor o si éste
no es característico. Estas pruebas tienen un mayor
potencial como herramientas de diagnóstico, ya que los
síntomas que llevan a consultar se utilizan para indicar
si la prueba es positiva o negativa. La fuerza intrínseca
utilizada debe ser mínima (es decir, alcanzar el umbral
doloroso, añadir una pequeña tensión adicional y
recuperar). El problema radica en que dos terapeutas no
coinciden respecto a cuál es la «fuerza mínima» que
debe aplicarse.
El nombre de las pruebas se basa en la terminología
inglesa.
Thigh thrust test
Esta prueba también se conoce como posterior pelvic
pain provocation test o PPPP o P4.
El paciente se coloca en decúbito supino, con la
cadera en flexión y ligeramente en aducción por el lado
que se va a explorar y con el pie sobre la camilla. El
terapeuta se sienta al lado de la articulación sacroilíaca.
Ejerce presión posterior en el eje de la diáfisis femoral
para estirar los ligamentos sacroilíacos posteriores. La
otra mano se coloca en la pelvis opuesta. Una variante
consiste en colocar la cadera a 90° de flexión. En este
caso, el pie no se apoya sobre la camilla (Fig. 6).
Un falso positivo puede provenir de un dolor glúteo
de origen coxofemoral o de la tensión de los músculos
glúteos (piriforme en particular).
Prueba de separación
Esta prueba también se llama prueba de abertura
anterior ilíaca o gapping. El paciente se coloca en
decúbito supino. El terapeuta coloca sus manos sobre
ambas espinas ilíacas anterosuperiores (EIAS), con los
brazos cruzados. Empuja hacia atrás y afuera con el fin
de estirar los ligamentos sacroilíacos anteriores (Fig. 7).
Prueba de Gaenslen
El paciente se coloca en decúbito supino en el borde
de la camilla, con una pierna doblada y la otra colgando
Kinesiterapia - Medicina física
5. Exploración física de las articulaciones sacroilíacas ¶ E – 26-008-E-05
Figura 7. Prueba de separación.
Figura 8.
Figura 9.
Prueba de Gaenslen.
Prueba de compresión.
fuera de la camilla. El terapeuta se coloca lateralmente.
Acentúa la hiperflexión de la cadera y la extensión de
la otra pierna, que tiene por objeto provocar un estiramiento sacroilíaco máximo en nutación en el lado de la
pierna flexionada y en contranutación en el lado de la
pierna extendida (Fig. 8).
Esta maniobra es, a pesar de todo, sólo orientativa, ya
que provoca dolor en muchos pacientes con lumbalgia,
que toleran mal la extensión de la columna lumbar,
incluso si el explorador mantiene bien la flexión de la
extremidad inferior opuesta.
Prueba de compresión ilíaca
Esta prueba también se denomina prueba de acercamiento. El paciente se coloca en decúbito lateral. El
terapeuta coloca sus manos sobre la cresta ilíaca contralateral. Empuja hacia el suelo para estirar los ligamentos
sacroilíacos posteriores (Fig. 9).
Figura 10. Prueba de FABER.
Figura 11.
Sacral thrust test.
supino, con el muslo del lado explorado en ligera
abducción, la rodilla doblada y el pie a la altura de la
rodilla de la pierna en extensión. El terapeuta fija con
una mano el ala ilíaca opuesta a nivel de la EIAS y con
la otra se apoya en la cara medial de la rodilla izquierda
(Fig. 10).
Para una prueba de la articulación sacroilíaca
izquierda, imprime un movimiento vivo y poco amplio
para hacer descender la rodilla izquierda en abducción,
que estira los ligamentos sacroilíacos anteriores. El dolor
indica una disfunción sacroilíaca del lado FABER,
también llamada disfunción sacroilíaca articular en
hiperconvergencia.
Si el dolor se siente en la cadera o los aductores, no
se trata de una disfunción sacroilíaca. La contractura del
psoas también puede causar dolor en la ingle.
Sacral thrust test
Esta prueba también se llama compresión sacra o
prueba del trípode. El paciente se coloca en decúbito
prono. El terapeuta coloca una mano sobre el sacro, con
los dedos hacia el coxis, la otra mano se coloca perpendicularmente sobre la primera. Ejerce una presión hacia
la camilla que estira los ligamentos sacroilíacos posteriores. La presión sobre la cara posterior del sacro pone
en juego las dos articulaciones a la vez (Fig. 11).
Prueba de sensibilidad del ligamento
sacroilíaco posterior largo
La prueba consiste en buscar una sensibilidad dolorosa al ejercer una presión-fricción a dos dedos por
debajo de la EIPS (a medio camino entre la EIPS y el
ángulo inferolateral [AIL] del sacro) (Fig. 12).
Prueba de FABER
Prueba de resistencia a la abducción
Esta prueba también se conoce como prueba de
flexión abducción rotación lateral (FABER: Flexion
Abduction External Rotation). El paciente está en decúbito
El paciente se coloca en decúbito supino. El terapeuta
lleva la extremidad inferior a 30° de abducción manteniendo la pierna en posición neutra en el plano sagital.
Kinesiterapia - Medicina física
5
6. E – 26-008-E-05 ¶ Exploración física de las articulaciones sacroilíacas
Validez de una combinación
de pruebas
La sensibilidad y especificidad de tres pruebas (o más)
de provocación proporcionan valores altos de sensibilidad y especificidad, que oscilan alrededor de 0,90 para
la sensibilidad y de 0,80 para la especificidad, teniendo
en cuenta cinco estudios [25, 28, 30, 31, 33].
Las relaciones de probabilidad positivas y negativas
que se obtienen con una asociación de tres pruebas
(o más) son buenas según tres estudios [28, 30, 31]
(Cuadro II).
Figura 12.
Situación del ligamento sacroilíaco posterior largo.
Aplicando una contrarresistencia a nivel de la rodilla, se
pide al paciente que empuje en abducción.
■ Validez de las pruebas
Criterio de referencia
La validez se enfrenta a varios problemas. Solamente
las pruebas de reproducción del dolor tienen su patrón
oro, que consiste en la disminución del dolor (75, 80 o
90%, según los autores) tras la inyección de anestésico
en la articulación sacroilíaca.
Este método resulta controvertido para algunos
autores, que utilizan como argumento el hecho que un
dolor sacroilíaco no se origina necesariamente a nivel
intraarticular, sino también en las estructuras
circundantes [22].
Incluso tomando como definición del síndrome
sacroilíaco un dolor de origen intraarticular, la validez
de este método queda cuestionada, ya que la infiltración
puede anestesiar otras estructuras infiltrándose a través
de la cápsula y dar así falsos positivos [23].
El patrón oro es más complicado en las pruebas de
posición y de movilidad, donde se da preferencia a la
utilización de instrumentos de medición como criterio
de referencia. Sturesson [19] ha utilizado un método
radioestereométrico, mientras que Levangie [24] ha
construido un aparato de medición que se coloca en el
suelo para evaluar la simetría de la pelvis. La validez de
cada una de estas técnicas resulta cuestionable y no
permite hacerse realmente una idea sobre la validez de
las pruebas. También hay que tener en cuenta que la
movilización de esta articulación no se puede hacer sin
solicitar otras estructuras.
En general, en presencia de dolor de origen discal, las
pruebas de provocación producen falsos positivos. La
fiabilidad diagnóstica de las asociaciones de pruebas
mejora si uno se limita a pacientes con síntomas que no
se «centralizan» tras movimientos repetitivos. En caso
de centralización (fenómeno específico del dolor de
origen discal), una prueba de provocación positiva
carece de valor [25].
Validez de las pruebas «individuales»
Después de analizar varios estudios de validez, las
pruebas individuales con la mayor sensibilidad y especificidad son, por orden: thigh thrust, FABER, compresión, separación, Gaenslen y sacral thrust [15, 17, 25-33]
(Cuadro I).
Las cuatro primeras son las más válidas y recomendables.
Existen menos datos acerca de la prueba de sensibilidad y de abducción contra resistencia. La prueba de
sensibilidad ligamentosa no es específica.
6
■ Reproducibilidad
de las pruebas
Casi todos los estudios utilizan el coeficiente Kappa
como prueba estadística específica de concordancia. La
interpretación de los valores de Kappa se ha hecho
según las recomendaciones de Landis y Koch, a saber:
• entre 0,00 y 0,20: insignificante;
• entre 0,21 y 0,40: discreta;
• entre 0,41 y 0,60: moderada;
• entre 0,61 y 0,80: sustancial;
• entre 0,81 y 1,00: casi perfecta.
Reproducibilidad de
las pruebas «individuales»
Sólo se recogen aquí los resultados de los estudios de
metodología mediana y buena [26, 34-49].
En general, las pruebas de posición y de movilidad
presentan una fiabilidad discreta.
Sólo la prueba de ASLR tiene una fiabilidad sustancial.
Entre las pruebas de reproducción del dolor, sobresale
la thigh thrust test (fiabilidad sustancial). Otras dos
pruebas (sensibilidad ligamentosa y abducción contra
resistencia) también presentan una fiabilidad sustancial,
pero se han estudiado poco. Otras pruebas de dolor
tienen una fiabilidad moderada (Cuadro III).
Fiabilidad de una combinación
de pruebas
La combinación de las pruebas de movilidad ofrece
una fiabilidad moderada (Cuadro IV). La combinación
de tres pruebas de dolor proporciona una fiabilidad
sustancial. La combinación de movilidad y dolor da una
fiabilidad de moderada a sustancial.
■ Discusión
Algunas pruebas requieren una calidad de percepción
particular. La poca experiencia influye e introduce un
sesgo en los resultados. Diversos estudios han demostrado que la experiencia mejora la calidad manual de
diagnóstico. ¿En qué momento se puede decir que se es
«experimentado» en un ámbito en particular? Es una
pregunta difícil de contestar, porque depende de
muchos factores.
¿Hay que quedarse con la primera impresión o es
necesario realizar varias veces la prueba de movilidad?
Es posible que la primera vez no se encuentre exactamente la referencia adecuada. En cambio, realizar varias
veces una prueba moviliza los tejidos y puede modificar
su flexibilidad.
Durante la exploración, los pacientes podrían experimentar el dolor con más intensidad cuando se ejecutan
Kinesiterapia - Medicina física
7. Exploración física de las articulaciones sacroilíacas ¶ E – 26-008-E-05
Cuadro I.
Estudios de validez.
Prueba
Sensibilidad
Especificidad
VPP
VPN
RP+
RP-
Thigh thrust
0,88
[28]
0,69
0,58
0,92
2,80
0,18
0,55
[30]
0,70
0,35
0,84
1,81
0,62
0,81
[29]
0,98
0,71
0,88
0,93
[31]
0,64
0,36
[15]
0,50
1
[27]
0,80
0,90
0,81
0,60
0,81
3,20
0,49
[30]
0,81
0,37
0,58
1,24
0,94
[31]
0,73
[26]
1
0,53
[28]
0,71
0,47
0,76
1,84
0,66
0,44
[30]
0,80
0,40
0,83
2,29
0,68
0,63
[31]
0,79
0,71
[15]
0,26
0,69
[28]
0,69
0,52
0,82
2,20
0,46
0,22
[30]
0,83
0,28
0,78
1,37
0,92
0,60
[31]
0,70
0,70
[26]
1
0,66
[30]
0,51
0,28
0,84
1,37
0,64
0,63
[31]
0,76
0,69
FABER
[28]
0,40
Compresión
0,60
0,26
Gaenslen
0,98
0,23
Separación
[26]
[15]
0,16
1
[27]
0,77
0,70
[26]
0,99
0,63
[28]
0,75
0,56
0,80
2,50
0,50
0,33
[30]
0,74
0,27
0,79
1,29
0,89
0,53
Sacral thrust
[15]
0,29
[27]
Abducción c/resistencia
1
Sensibilidad ligamento
0,95
[15]
0,09
0,91
[32]
0,28
0,87
VPP: valor predictivo positivo; VPN: valor predictivo negativo; RP+: relación de probabilidad positiva; RP-: relación de probabilidad negativa.
Cuadro II.
Combinaciones de pruebas.
Asociación de 3 pruebas
positivas
Sensibilidad (y 95%
intervalo de confianza)
Especificidad (y 95%
intervalo de confianza)
VPP
VPN
RP+
RP-
Laslett [28]
0,94 (0,72-0,99)
0,78 (0,61-0,89)
0,68
0,96
4,29
0,80
Ozgocmen [30]
0,43
0,83
0,44
0,83
2,75
0,66
Van der Wurff [31]
0,85 (0,72-0,99)
0,79 (0,65-0,93)
0,77
0,87
4,02
0,19
[25]
0,91 (0,62-0,98)
0,83 (0,68-0,96)
0,77
0,70
Laslett
Young [33]
VPP: valor predictivo positivo; VPN: valor predictivo negativo; RP+: relación de probabilidad positiva; RP-: relación de probabilidad negativa.
las últimas pruebas de dolor. Puede suceder que la
acumulación de estrés reduzca el umbral de sensibilidad.
Por tanto, es conveniente empezar por la prueba más
fiable/válida y así sucesivamente.
¿Reconoce el paciente correctamente su dolor habitual
(concordancia) o se trata de otro dolor (discordancia)?
Esto puede influir en la interpretación y la fiabilidad.
Algunos autores creen que sólo la combinación de
varias pruebas puede orientar el diagnóstico. Como una
Kinesiterapia - Medicina física
sola prueba resulta a menudo insuficiente, diversos
autores sugieren usar una batería de pruebas. Este
principio hace posible que dos observadores disientan
sobre algunas de las pruebas que haya que utilizar pero
estén de acuerdo con la conclusión final si aceptan que,
por ejemplo, tres pruebas positivas pueden ser suficientes para considerar el resultado positivo. Esta selección
aumenta las posibilidades de acuerdo sobre una disfunción (Fig. 13).
7
8. E – 26-008-E-05 ¶ Exploración física de las articulaciones sacroilíacas
Cuadro III.
Estudios de fiabilidad.
Prueba
Cuadro IV.
Combinaciones de pruebas.
Valor Kappa
Combinación de pruebas
2 movilidad sobre 3
0,04
[46]
3 movilidad [34]
0,54
2 dolor sobre 3 [30]
0,45
3 dolor (sobre 3) [34]
0,85
3 dolor [47]
0,70
3 dolor sobre 5 [30]
0,57
3 dolor sobre 5 [41]
0,70
4 dolor sobre 7 [39]
0,67
2 movilidad + 2 dolor (sobre
4) [39]
0,52
0,26 [39]
Altura EIPS
0,26
0,69 [34]
Altura crestas ilíacas
2 movilidad + 2 dolor [34]
0,66
2 movilidad + 3 dolor [34]
0,61
3 movilidad + 2 dolor [34]
0,69
3 movilidad + 3 dolor [34]
0,23
0,17 [40]
0,54 [39]
PFB
0,05 [49]
0,53 [34]
0,62 [39]
PFPS
0,23 [35]
0,63
0,02
Gillet
[26]
[36]
0,22 [38]
[39]
Valor Kappa
[39]
0,40
0,05 [44]
0,37 [34]
0,18 [39]
SLR activa
0,81
Thigh thrust
Dolor glúteo
unilateral (alrededor
de la EIPS) con o sin
dolor lumbar
0,75 [45]
[39]
0,70 [26]
0,64 [38]
0,82 [42]
0,75 [47]
0,50
[34]
0,50 [30]
0,73 [39]
Separación
Dolor sordo,
intermitente, que aumenta
en posición sentada
y de pie prolongada,
con la marcha
0,84 [26]
0,69 [42]
Thigh thrust test
que provoca un
dolor que resulta familiar
0,36 [43]
0,63 [47]
0,17 [39]
Gaenslen
0,61
[38]
0,72 [42]
0,32 [30]
0,51 [39]
Compresión
Síntomas que no
se «centralizan»
después de
movimientos
repetidos
No
Prueba de FABER,
compresión y
separación que provocan
un dolor que resulta
familiar
Sí
Diagnóstico
de disfunción
sacroilíaca
Sí
0,79 [26]
Prueba SLR activa
que provoca un dolor
que resulta familiar
0,77 [42]
0,26 [48]
0,16 [43]
No
0,53 [47]
Prueba PFB
positiva
0,46 [30]
0,59 [39]
FABER
Inestabilidad
sacroilíaca
0,54 [26]
Hipomovilidad
sacroilíaca
0,62 [38]
0,54 [47]
0,47 [34]
0,51 [30]
0,65 [39]
Sacral thrust
Sí
0,30 [38]
Figura 13. Árbol de decisiones. Conducta que debe observarse en caso de dolor glúteo unilateral. EIPS: espina ilíaca
posterosuperior; SLR: straight leg raising; PFB: prueba de flexión
en bipedestación.
0,32 [42]
0,82 [30]
0,38 [39]
Sensibilidad ligamento
0,34 [26]
0,41 [38]
0,83
Abducción contra resistencia
[39]
0,64 [34]
EIPS: espinas ilíacas posterosuperiores; PFB: prueba de flexión en
bipedestación; PFPS: prueba de flexion en sedestación; SLR: straight leg
raising.
8
■ Conclusión
En general, se constata que las pruebas de posición y
de movilidad presentan menor fiabilidad, excepto la
prueba de ASLR. Las pruebas de provocación de dolor
presentan una reproducibilidad que se considera aceptable. Las pruebas de provocación de dolor o de movilidad más dolor se pueden combinar para orientarse
hacia un diagnóstico de disfunción sacroilíaca.
Kinesiterapia - Medicina física
9. Exploración física de las articulaciones sacroilíacas ¶ E – 26-008-E-05
La validación de las pruebas de la articulación
sacroilíaca se enfrenta a varios problemas, como el
hecho de que la movilización de esta articulación no se
puede realizar sin solicitar otras estructuras que podrían
ser responsables del dolor o la ausencia de patrón oro
para evaluar las pruebas de movilidad.
Además, el patrón oro que a menudo se utiliza para
evaluar la validez de las pruebas de provocación de
dolor sacroilíaco es la disminución del dolor después de
la inyección de un anestésico en la articulación
sacroilíaca. Esta técnica resulta controvertida para
algunos autores, que utilizan como argumento el hecho
de que el dolor sacroilíaco no se origina necesariamente
a nivel intraarticular, sino también en las estructuras
circundantes.
Las pruebas de posición y de movilidad para identificar una disfunción sacroilíaca no se han podido validar.
La mayoría de pruebas de provocación de dolor son
válidas y una combinación de tres pruebas (o más) de
provocación ofrece valores altos de sensibilidad y
especificidad.
“
Para recordar
La ASLR se puede utilizar para diagnosticar la
inestabilidad sacroilíaca.
Se pueden recomendar cuatro pruebas válidas y
fiables: thigh thrust, FABER, compresión y
separación.
La combinación de tres pruebas de reproducción
del dolor aumenta las posibilidades de acuerdo
sobre una disfunción sacroilíaca.
.
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P. Fransoo, Licencié en kinésithérapie, maître assistant (fransoo.patrick@belgacom.net).
Haute école libre I Prigogine, Section kinésithérapie, 150, rue de la pêcherie, 1180 Bruxelles, Belgique.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo original: Fransoo P. Examen clinique des articulations sacro-iliaques.
EMC (Elsevier Masson SAS, Paris), Kinésithérapie-Médecine physique-Réadaptation, 26-008-E-05, 2011.
Disponible en www.em-consulte.com/es
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