1. RESEÑA
EL PODER Y LA GLORIA I
Italia, segunda mitad del siglo XVII y siglo XVIII
SOCIO-HUMANISTICA
JOHN JAIRO VARGAS OJEDA
UNIVERSIDAD PEDAGOGICA Y TECNOLOGICA DE COLOMBIA
TUNJA
2013
2. EL PODER Y LA GLORIA I
Italia, segunda mitad del siglo XVII y siglo XVIII
El estilo barroco tiene sus principios en obras artísticas de finales del siglo XVI. Un
ejemplo claro es Della Porta (iglesia de los JESUITAS, <con un estilo contenido y
severo>), en la cual se deja de lado las reglas de la arquitectura clásica para
introducir mayor variedad, novedad y efectos. De esto, que cada artista nuevo
debe concebir y construir decoraciones más impresionantes y complicadas para
generar impresión. En Italia esta concepción de decorar y tener novedad en
construcciones y edificaciones entre inicios y finales del siglo XVII dan como
resultado la explosión del barroco.
Francesco Borromini (1599-1667) en una iglesia barroca (él, es el arquitecto),
denota su influencia renacentista. En esta utiliza un frontis que enmarca la puerta
central y usa unas pilastras para conseguir un efecto de mayor riqueza. Esto
reflejo, que deja de lado la arquitectura clásica y propone en su iglesia formas
diferentes; cúpula, torres a los lados y fachada. En esta iglesia, el primer piso de
las torres es cuadrado y el segundo redondo relacionados con un extraño
cornisamento. En las puertas, se observa como el tímpano, encima de la puerta,
enmarca una ventana oval.
Espirales y volutas del estilo barroco dominan la estructura general y detalles
decorativos. Los edificios como el de Borromini, son considerados como
perturbadores en su ornamentación y teatrales. Borromini con su iglesia quiere
demostrar fastuosidad, esplendor y movimiento. Iglesias barrocas son
caracterizadas por el uso ostentoso de la pompa y piedras preciosas, estuco y oro
que tienen como fin dar una visión más celestial de la gloria de la iglesia. Esta
fastuosidad en momentos puede parecer demasiado mundana, pero la iglesia
(cuantos más fuertes eran las protestas paganas contra el aspecto de las iglesias),
tomo servicios de los artistas barrocos. La reforma y la exclusión del culto a las
imágenes influyeron en el desarrollo del barroco.
El arte le sirvió a la iglesia, ya no solo como forma de enseñar la doctrina a gente
que no sabía leer, sino también para persuadir y convertir a personas que habían
leído. El auge de los artistas en la iglesia, tuvo como consecuencias la
transformación de las iglesias en grandes representaciones de gran aspecto y
esplendor para que se tomara una determinación. Todos los detalles y
decoraciones tiene un efecto pero en conjunto. Estas decoraciones y
modificaciones en la iglesia son el marco para el ritual esplendido de la iglesia
romana. Velas en el altar, incienso en las naves y acordes del órgano y el coro en
la misa producen un efecto mágico.
3. La teatralidad en el barroco tiene su mayor exponente y precursor en Gian
Lorenzo Bernini (1598-1680) destacado retratista. Éste, tenía el poder de captar y
reproducir las expresiones de sus modelos como nadie con lo cual confirió una
forma visible a la experiencia religiosa. Bernini en una de las capillas laterales de
una iglesia romana, represento en un altar la historia de Santa Teresa (El éxtasis
de Santa Teresa), una monja del siglo XVI que narro su éxtasis celestial en un
libro, donde dice, como un ángel con una flecha dorada traspasa su corazón
produciéndole dolor y a la vez deleite. Un visitante nórdico encontraría en esta
escultura efectos de teatralidad pero más detenidamente vería la emotividad que
el artista pudo plasmar. Si se acepta que el altar de Bernini provoca fervorosa
exaltación y transporta a una dimensión mística, se debe aceptar que Bernini
logra este objetivo magistralmente. Esta emotividad grandiosa que expresa su
obra hasta ese momento no había sido representada por ningún artista hasta ese
entonces. En la obra de Bernini se observa como deja de lado esas reglas clásicas
en las vestiduras y provee a estas de movimiento y agitación, esculpiendo éstas
retorcidas y desmenuzadas. Estas características en el arte, en poco tiempo
fueron reproducidas en gran parte de Europa.
Este tipo de obras como la de Bernini debe ser juzgado en el sitio en el cual fueron
hechas igual que decoraciones y arreglos de las iglesias barrocas. Un ejemplo de
esto, es la decoración de un techo de la iglesia de los jesuitas en Roma pintada
por Gionanni Battista Gaulli (discípulo de Bernini), en el cual se cae en la ilusión
de que la bóveda de la iglesia se ha abierto y que estamos ingresando con la
mirada en la gloria celestial, donde se denotan los efectos obtenidos por Gaulli.
El artista con dicha pintura rompe el marco de la iglesia, con lo cual logra confundir
y abrumar, de modo que no se pueda saber qué es lo real y qué lo ilusorio. Por
esto, obras como estas solo pueden ser apreciadas en el lugar en el que fueron
hechas, con lo cual el desarrollo del Barroco influido por los nuevos efectos y
características que agregaba cada artista, como en la pintura y escultura, siendo
artes independientes, decayeran en Italia y en toda la Europa católica.
Los artistas italianos del siglo XVIII, fueron famosos por su estilo para decorar todo
tipo de interiores con lo cual se mostrara esplendor en cualquier lugar, como por
ejemplo en un monasterio. Un ejemplo de ellos, fue Giovanni Battista Tiemplo
(1696-1770), con su una de sus decoraciones, una decoración en un palacio de
Venecia realizada en 1750 (El Banquete de Cleopatra). En la cual él despliega
alegres colores y vestidos suntuosos. Dichas obras son agradables a la vista, pero
estaban marcando el fin de la gran edad del arte italiano.
Solo la pintura y grabado de panoramas continúo el arte italiano a inicios del siglo
XVIII. En Italia los visitantes desarrollaron sus capacidades artísticas, en especial
en Venecia donde las perspectivas son maravillosas se creó una escuela de
4. pintores. Uno de ellos fue, Francesco Guardi (1712-1793) que con su obra “Vista
de San Giorgio Maggiore, Venecia, h”, nos sigue mostrando el sentido de
suntuosidad, de luz y color característico del arte veneciano. Ese estilo barroco
caracterizado por la afición al movimiento y a los efectos atrevidos se puede
expresar hasta en una simple perspectiva de una ciudad. Guardi con base en
pintores del siglo XVII expresa que impreso un panorama podemos contemplarlo y
agregarle detalles. Todas las características, efectos y en general el estilo barroco
fueron influyentes en épocas posteriores.