Este documento proporciona instrucciones para reparar las juntas de ventanas de madera que están dañadas por la humedad. Explica que las grietas y fisuras externas se pueden reparar con espuma de poliuretano y mortero antihumedad. También recomienda limpiar y consolidar la madera dañada, y utilizar cinta adhesiva y espuma autoexpandible para sellar las juntas y evitar que entre agua.
1. Capítulo: Reparar las juntas de la ventana
A veces, para evitar que el frío y la humedad entre en su casa debe "actuar" fuera
de ella, especialmente, si sus ventanas son de madera y están ya un poco viejas.
Posibles soluciones.- Según el estado de las ventanas puede optar por diferentes
alternativas:
-Si a la madera de la ventana le ha afectado la humedad, posiblemente se agriete,
se reseque y acabe rompiéndose. En este caso, debe hacer una reparación a
fondo, arreglando la carpintería y las posibles grietas que aparezcan en el
revestimiento de la fachada.
- Estas grietas o fisuras exteriores se reparan con espuma de poliuretano, un
aislante muy bueno y fácil de manejar. Una vez aplicada y seca, no olvide dejar un
pequeño espacio a ras de superficie para terminar de rellenar con un mortero
específico antihumedad.
- En el caso de que la madera esté en muy mal estado, seguramente se vea en la
necesidad de cambiar la ventana. De esta forma, evitará males mayores.
- Si no estaba tan mal como creía, utilice para ello productos resistentes y
duraderos.
Materiales.- En cualquier tienda especializada encontrará productos como:
limpiadores antimoho, morteros antihumedad, revestimientos acrílicos para
impermeabilizar, limpiadores de humedad, espuma de poliuretano, endurecedores
de pintura, etc. Por otro lado, debe contar con ciertas herramientas, nos referimos a
una espátula, una paleta, un cepillo para limpiar madera, cinta adhesiva, etc.
Evite que se cuele el agua.- Una vez que ha descubierto la junta por donde no sólo
entra el frío sino también el agua, haga lo siguiente:
Utilice una espátula o cuchillo para raspar la junta que hay entre el marco de la
ventana y la pared. De esta forma, retirará todas las partículas sueltas que haya.
Esto, además, sirve para crear una superficie de más agarre a la hora de aplicar la
masilla de relleno. También debe eliminar las manchas que tenga la madera con un
cepillo. Si hay restos de pintura puede retirarlos con decapante. En las partes de la
madera estropeadas aplique un consolidante, un endurecedor de madera.
2. No olvide proteger la carpintería adecuadamente antes de ponerse manos a la
obra. Para ello, utilice una cinta adhesiva muy adherente, así no la manchará.
Aplique espuma autoexpandible para rellenar las fisuras y, a continuación, el
mortero del revoco.