El documento discute varias preguntas sobre la salvación, incluyendo si solo los cristianos serán salvos, si otras religiones pueden conducir a la salvación, y si aquellos que nunca han oído hablar de Jesús pueden ser salvos. Finalmente, argumenta que Jesús es el único camino a la salvación y que la iglesia tiene el deber de predicar el evangelio a todas las naciones.
2. «Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo» (Hechos 16:31)
• ¿Solo los cristianos profesos serán salvos?
• ¿Solo los cristianos de determinada confesión
serán salvos?
• ¿Puede alguien ser salvo sin haber conocido a
Jesús?
Ésta es una clara
afirmación acerca de cómo
conseguir la salvación. No
obstante, nos podemos
plantear algunas preguntas
sobre este tema:
• ¿Salvará Dios a todas las personas porque Dios
ama a todos (universalismo)?
• ¿Cualquier religión es válida para alcanzar la
salvación (pluralismo)?
Ante la realidad de que
millones de personas
mueren cada generación
sin haber conocido Jesús,
nos podemos plantear
nuevas preguntas:
• ¿Por qué es necesario que el mundo entero
oiga el Evangelio?
• ¿Es posible que el mundo entero oiga el
Evangelio?
Finalmente, nos podemos
plantear algunas
cuestiones acerca del
deber de predicar el
Evangelio al mundo:
3. «Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual
ha venido a ser cabeza del ángulo. Y en ningún otro hay salvación; porque
no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos
ser salvos» (Hechos 4:11-12)
Pedro deja claro que no existe otro camino de salvación
aparte de Jesús. Así que debemos deducir que solamente los
cristianos pueden alcanzar la salvación.
Incluso hay denominaciones que piensan que fuera de su
iglesia no puede haber salvación.
Por otro lado, el mismo Pedro
afirmó: «En verdad comprendo
que Dios no hace acepción de
personas, sino que en toda nación
se agrada del que le teme y hace
justicia» (Hechos 10:34-35).
Si hay personas que temen a Dios
y hacen justicia sin conocer a
Jesús, ¿acaso no serán éstos salvos
aunque no sean cristianos?
4. Nadie será salvo sino por la sangre de
Jesús, aunque no sepa que su sangre le
ha salvado.
A través de la ley escrita por Dios en el
corazón, y por el testimonio de las cosas
creadas, toda persona puede aceptar o
rechazar la salvación (Romanos 1:20).
Aunque nunca hayan oído hablar de
Jesús, Él los salvará si responden
adecuadamente a la luz que han
recibido (Juan 10:16).
«Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que
es de la ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos,
mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su
conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos, en el día en
que Dios juzgará por Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a
mi evangelio» (Romanos 2:14-16)
5. «a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino
que se complacieron en la injusticia» (2ª de Tesalonicenses 2:12)
El universalismo enseña que, dado que Dios
es amor, Él dará a todos la vida eterna, sin
importar lo que hizo en esta tierra. Para ellos
no hay muerte eterna, no hay condenación.
Esto es contrario a la clara enseñanza de
Jesús: hay camino de salvación y camino de
perdición (Mateo 7:13-14).
El pluralismo enseña que cualquier
religión conduce a la salvación.
Pero ya vimos que solo hay un camino de
salvación: Jesús (Hechos 4:11-12). Que un
budista pueda ser salvo por la sinceridad
con que obedeció a su conciencia no
hace de Buda su salvador. Jesús lo salva.
6. «Y les dijo: Id
por todo el
mundo y
predicad el
evangelio a
toda criatura»
(Marcos 16:15)
Dios ama a todas las personas, pero todas las
personas son pecadoras y necesitan la gracia, y esta
gracia ha sido revelada en Jesús. Él ha llamado a su
iglesia a difundir las buenas noticias de su gracia al
mundo.
Tenemos una orden clara: «levanta fuertemente tu
voz» (Isaías 40:9). Es nuestra responsabilidad
anunciar al mundo el camino de salvación, las
buenas nuevas del Evangelio.
Aunque los paganos pueden
responder positivamente a la
revelación divina «mínima», eso
no significa que Dios no desee que
tengan un conocimiento mayor del
camino de salvación.
7. «La Iglesia es el medio señalado por Dios para
la salvación de los hombres. Fue organizada
para servir, y su misión es la de anunciar el
Evangelio al mundo. Desde el principio fue el
plan de Dios que su iglesia reflejase al mundo
su plenitud y suficiencia. Los miembros de la
iglesia, los que han sido llamados de las
tinieblas a su luz admirable, han de revelar
su gloria. La iglesia es la depositaria de las
riquezas de la gracia de Cristo; y mediante la
iglesia se manifestará con el tiempo, aun a
“los principados y potestades en los cielos”
(Efesios 3:10), el despliegue final y pleno del
amor de Dios»
E.G.W. (Los hechos de los apóstoles, pg. 9)
8. «Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para
testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin» (Mateo 24:14)
Las misiones destinadas a convertir a los no
cristianos se pueden encontrar con algunas trabas:
Una planificación inadecuada.
Educar, sanar y ayudar; pero no predicar el evangelio.
Recursos y personal insuficiente.
Naciones que prohíben la predicación del cristianismo.
Pero tenemos de Dios las siguientes promesas:
Él mismo nos acompaña (Mateo 28:20).
Nuestros enemigos no podrán vencernos
(Mateo 16:18).
El mensaje llegará a todo el mundo
(Hechos 1:8).
La Palabra de Dios prosperará y cumplirá
su misión (Isaías 55:11).
9. «Hay muchas personas que están
clamando por el Dios viviente, y
anhelan la presencia divina. Las
teorías filosóficas o los ensayos
literarios, por brillantes que sean, no
pueden satisfacer el corazón. Los
asertos e invenciones de los hombres
no tienen ningún valor. Que la Palabra
de Dios hable a la gente. Que los que
han escuchado sólo tradiciones, teorías
y máximas humanas, oigan la voz de
Aquel cuya palabra puede renovar el
alma para vida eterna»
E.G.W. (Palabras de vida del gran Maestro, pg. 22)