1. EL TIEMPO DE PELEAR ES HOY
Hay momentos cruciales en la vida de todo grupo humano, donde uno
puede darse cuenta que lo que se haga es tan importante que significa el
chance de cambiar su historia para siempre, para bien o para mal.
Para el gremio médico, ese momento ha llegado. El momento en que se
encuentra nuestra pelea es tan importante que puede significar el virar al
éxito o al fracaso, ¿y de quienes va a depender esto? Pues de todos y
cada uno de nosotros. De todos los líderes y los agremiados, las bases y
las directivas. Una se nutre de la otra en energía, fortaleza y estrategias.
Ayer en la asamblea nacional, en el hospital D.A.Carrión, mientras
denunciaban el abuso de colegas contra colegas, la lista inacabable de
actos de corrupción e injusticias, además de disertar con una lucidez
maravillosa y sobre todo con inteligencia y previsión sobre lo que se
viene con la famosa reforma del sector -por la que se le ha otorgado al
MINSA el poder de hacer lo que le venga en gana con la salud del país
120 días o sea la hecatombe completa-, con la imagen de Carrión al lado
de la mesa donde se encontraba la dirigencia del movimiento afianzamos
el concepto que al fin estamos haciéndonos respetar al exigir a una
ministra-que no ha sido capaz de prepararse para la epidemia, que no
sabe nada de Medicina pues es Bachiller en sociología (que explica la
falta de conocimiento e ineptitud demostradas) – que se ha olvidado que
tiene una obligación que cumplir con su firma y su palabra, que no siga
mintiendo más bien que nos respete.

2. Pues si antes no fuimos capaces de hacernos respetar este es el
momento de hacerlo, pues ya estamos hartos, ya nos cansamos de la
gente que no valora nuestra labor, que no aprecia nuestro sacrificio diario
por el que solo pedimos un trato justo, el cumplimiento del compromiso
rubricado en un acta, que ya no se burlen de nuestro justo derecho a vivir
con decoro con nuestra familia, y que merecemos largamente eso que
pedimos pues aún es poco para lo que deberíamos recibir.
Y entonces quedo claro, ha llegado al fin el momento de hacer fuerza
porque harto sabemos que nada, absolutamente nada en nuestra
historia, se ha conseguido sin esfuerzo. Pero esa fuerza tiene que ser
contundente y tan grande que haga que nuestra historia cambie de una
vez por todas. Llegó el momento de dejar a un lado el miedo, la pereza,
la apatía o lo que sea que hace que no estemos todos a una sola voz
reclamando lo justo apoyando a nuestra dirigencia ¿o es que acaso
piensan que no es justo?, ¿o es que esperan que fracase para después
reclamar a quienes se dejó solos en la pelea y lavarse las manos?, me
niego a creer que sea porque la filosofía “que otros hagan que a mi igual
me va a tocar” sea lo que esté primando porque sería pelear no solo
contra autoridades del MINSA que parecen enemigas acérrimas sino
además con una mano atada por los mismos colegas, lo que resultaría
inconcebible y doloroso.
Ojalá no se repitan malos ejemplos como el del colega Ugarte que hora
avergüenza al gremio, al hacer de caja de resonancia de la Ministra que
miente y para quien las voces de la asamblea nacional ya reclaman el

3. debido castigo por su deslealtad.
Así que esta semana la historia de cada uno de todos los médicos del
MINSA se juega su batalla más grande y más dura en muchos años, y el
resultado dependerá de nosotros. De cada nombrado que desea mejores
condiciones de trabajo y un sueldo realmente justo y acorde a su labor,
de cada contratado que desea la estabilidad anhelada y seguridad futura,
de cada Residente que está consciente que estamos peleando para que
no pasen lo mismo que nosotros y se les reconozca con los mismos
derechos y beneficios.
Estamos amparados por la razón, con la legalidad del acta firmada, con
dirigentes que se las están jugando el todo por el todo, cada uno de
nosotros debe saber desde qué lugar peleará pero sobre todo cuánto
ayudará al éxito o al fracaso de nuestras reivindicaciones muy justas y
factibles. Es el momento definitivo, si se deja pasar quizás ya no se
repita, solo depende de tu decisión- colega, hermano y compañero- el
hacer respetar a tu profesión o dejar pasar esta oportunidad irrepetible
para ti y todos los que estamos hermanados por el amor a la Medicina y
unidos bajo la sombra de Carrión.
Iliana Romero Giraldo
Pediatra Hospital del Niño
CMP 27837