La restauración dental puede mejorar la comodidad, capacidad masticatoria y salud oral del paciente, así como elevar su autoimagen desde coronas individuales hasta la rehabilitación completa de la oclusión. Un diagnóstico completo requiere evaluar la historia médica, oclusión, exploración bucal, modelos y radiografías para determinar el tratamiento apropiado considerando la salud física y emocional del paciente.