2. Dos amigas casadas, totalmente borrachas sintieron unas ganas irresistíbles de hacer pipi.
3. Apavoradas e borrachas, sin otra alternativa, pararon el carro y decidieron ir asi mismo dar una meada en el cementério.
4. La primera fue, se alivio, y entonces se acordo que no tenía nada para secarse. Agarro la pantaleta, se seco con ella y la botó.
5. La segunda, que también no tenia nada para secarse, penso: “Yo no voy a botar mi pantaleta carísima y linda”.
6. Entonces, agarró la cinta de una corona de flores que estaba en cima de una campa y la coloco por dentro para no mojar la pantaleta.
7. Al dia seguiente uno de los maridos llamó al otro por teléfono, y dijo:
8.
9. - Usted tiene suerte, la mia llegó a casa con una faja amarrada en el culo, que decia: “Jamas te olvidaremos - António, Moisés, Renato y toda la facultad”.