Einstein estaba en preescolar cuando el profesor le preguntó cuánto eran dos más dos y cuántos mandamientos había. Einstein respondió que las respuestas eran relativas dependiendo de cómo se vean los números o a quién se apliquen los mandamientos. Cuando el profesor se enojó y lo llamó hijo de puta, Einstein dijo que también era relativo dependiendo de cuál madre se esté refiriendo.