SIN

1. Estimadas compañeras y compañeros:
Estamos en tiempos difíciles. Nos recortan las pensiones, Nos recortan los
salarios, se facilita el despido, aumenta el paro y seguimos con la Ley del
tijeretazo que, en la Comunidad Autónoma, supone el mayor retroceso conocido,
en las condiciones de vida y trabajo de su personal.
Gracias a las continuas y masivas movilizaciones; gracias a la participación
de miles de vosotros y vosotras en asambleas, manifestaciones,
concentraciones, encierros… El Gobierno Regional ha accedido a “hablar” con
las organizaciones sindicales que han impulsado unitariamente este proceso.
Esto no quiere decir que haya decidido rectificar. Tan solo ha bajado de su
pedestal y ha reconocido que tanta gente en la calle no puede quedar sin
respuesta y, sobre todo, que tanta gente en la calle daña seriamente su
credibilidad. El problema es que, mucho nos tememos, sus intenciones no van
mucho más allá de reunirse.
Hasta ahora, no hay ninguna negociación real en los temas importantes y
se viene repitiendo, desde la reunión del 25 de enero con el Presidente
Valcárcel, la ronda de posiciones, sin ninguna propuesta efectiva de cambio
esencial por parte del Gobierno. Lo que se dice “marear la perdiz”.
Desde nuestra organización, sólo le hemos expuesto lo que venimos
demandando desde el 21 de diciembre: que las medidas de recorte se
deroguen, en la forma que sea. A pesar del optimismo que traslada el Consejero
Constantino Sotoca, responsable de la negociación, y que reflejan los medios de
comunicación, no vemos expectativas de cambios fundamentales en la posición
del Gobierno.
Observamos con preocupación, cómo se dice en los centros de trabajo y en
los foros de opinión, que se está negociando y, que por lo tanto, se está cediendo
ante la Administración, aceptando tan solo pequeños retoques a la Ley, y no su
derogación efectiva. Hasta ahora no conocemos ni una sola propuesta del
Gobierno, salvo cambiar la redacción de artículos que, o eran ilegales
(contradecían normas de superior rango) o estaban mal escritos (hasta el punto
de expresar lo contrario de lo querían) o eran innecesarias por estar ya
recogidas en otras normas. Así que no se está negociando nada de peso y,
evidentemente, no se puede estar cediendo cuando no hay nada esencial sobre
la mesa. Ni tampoco se está consiguiendo nada de importancia.
Continuamos con las movilizaciones, que tanto daño le están haciendo al
Gobierno, aunque estén intentando desactivarlas con estas reuniones y las

2. interpretaciones interesadas sobre ellas que proporciona a los medios de
comunicación.
Evidentemente no todas las organizaciones estamos teniendo la misma
actitud en las reuniones. Y el Gobierno también está fomentando la división,
intentando ganarse la participación de algunas para, a cambio de
modificaciones de carácter secundario, lograr un acuerdo y acabar con la crítica
generalizada de su política hacia los servicios públicos y sus empleados.
Las personas que estamos yendo a las mesas y coordinando las acciones
contra las medidas, ante este panorama, queremos trasladar la necesidad
imperiosa de seguir con las movilizaciones para lograr frenar este disparate.
Participamos en las mesas para trasladar nuestras posiciones, contribuir
a la firmeza sindical conjunta y conocer de primera mano lo que dice el
Gobierno. Pero dudamos si tienen algún sentido, cuando no se observa intención
o capacidad manifiesta para rectificar.
Otro problema que nos asalta es el mantenimiento de la unidad, que no
puede ser a cualquier precio. Las movilizaciones están teniendo un éxito sin
precedentes gracias al mantenimiento de la unidad sindical, pedida y agradecida
en todas las asambleas, aunque para lograrla estamos cediendo en algunas
posiciones en aras de la unidad. Mientras estemos ejecutando el grueso de las
propuestas que se deciden en las distintas asambleas de centros de trabajo, lo
seguiremos haciendo.
Pero están apareciendo contradicciones entre la decisión de caminar
unitariamente y la de mantener una actitud de dignidad y resistencia frente a las
agresiones que contiene la Ley de Medidas Extraordinarias. Hay sindicatos que
ya hacen una valoración positiva de una negociación que sólo existe para
aspectos colaterales. En cualquier caso, desde la vocación asamblearia de esta
organización, en caso de duda, este Secretariado no tomará ninguna decisión
que no esté avalada por la mayoría de la afiliación.
Ya sabéis lo que hay: Nada parecido a lo que intencionadamente publicita
el Gobierno Regional y que va saliendo en los medios de comunicación. Este
Secretariado sigue con nuestros principios: hacemos lo que decimos, decimos
lo que hacemos. Animamos a todas y cada una de las personas afiliadas, que
tan dignamente estáis participando en todas las movilizaciones, a haceros eco
de la verdadera situación y contribuyáis a hacer realidad este lema, difundiendo
en los centros de trabajo esta situación tergiversada interesadamente por el
Gobierno.
No se prevén cambios de fondo y lo único que puede forzarlos es continuar
con la resistencia demostrada hasta hoy.
Hoy más que nunca, es necesaria vuestra participación en las asambleas y
en las movilizaciones que vayáis decidiendo en los centros de trabajo. También
en las movilizaciones más globales, que agrupan a todos los sectores de la

3. Comunidad Autónoma, como será la manifestación, que de nuevo ha de ser
masiva, del jueves 10 de diciembre por la Gran Vía murciana.
Os esperamos también en la próxima Asamblea, de toda la organización, el
próximo martes 8 de febrero, en el Salón de Actos del IES Miguel de Cervantes
(junto a la Escuela de Idiomas de Murcia) a las 17,30 h, para decidir qué hace
vuestro sindicato ante la situación. La participación es la garantía de nuestro
éxito y la garantía de que no decidimos sólo unas pocas personas.
CONTRA LOS RECORTES LABORALES Y SOCIALES:
DIGNIDAD Y RESISTENCIA
Murcia, 1 de febrero de 2011
Un saludo de los compañeros y compañeras del Secretariado Intersindical