Este documento describe cuatro pasos importantes para lograr una evaluación válida del desempeño en una organización: 1) seleccionar el tipo de datos a evaluar como productividad, características personales y pericia; 2) determinar quién realizará la evaluación como el empleado, compañeros, supervisores u otras fuentes; 3) decidir sobre una filosofía de evaluación comparando empleados o usando un criterio establecido; y 4) superar diferencias en las evaluaciones.