El patrimonio nacional de un país está formado por los bienes culturales y naturales heredados de los antepasados. El patrimonio cultural incluye elementos tangibles como edificios históricos y obras de arte, e intangibles como tradiciones y canciones. El patrimonio natural consiste en la flora, fauna y paisajes protegidos como parques nacionales. Todos estos elementos forman parte de nuestra historia y cultura, y debemos cuidarlos y preservarlos para las futuras generaciones.