Este documento describe la nefropatía hipertensiva, un trastorno dañino del riñón causado por una persistente elevación de la presión arterial. Como resultado de la hipertensión, se acumula material hialino en las paredes de las arterias y arteriolas renales, haciendo que sus paredes sean más gruesas y la luz del vaso más angosta, lo que provoca isquemia e induce atrofia tubular, fibrosis e irregularidades glomerulares. Esto conduce a la retención de urea, ácido úrico y creatinina