2. Qué es el desempleo El desempleado es la parte de la población que no realiza un trabajo remunerado de manera legal, es decir no tiene un contrato o papeles que atestigüen la actividad de estas personas. Pero que en cambio debido a su condición de español si se sitúa en las listas del INEM (Instituto Nacional de Empleo), o si esta persona ha realizado un trabajo legal en momentos anteriores y ha hecho su contribución a la hacienda pública por su salario durante un tiempo mínmo predispuesto puede disfrutar de una paga llamada prestación por desempleo. Es por este motivo que los inmigrantes sin papeles no entran en las listas del paro español, debido a su no condición de españoles.
4. EL DESEMPLEO EN ESPAÑA: El desempleo en españa está en su peor momento desde que se recuerda debido a una crisis mundial en la que España se ha visto especialmente envuelta y de la cual le está siendo muy dificil salir, y lo que es peor se está viendo cada vez más metida en ella aumentando casi cada día el número de desempleados casi alcanzando los 4 milliones (3.200.000) frente a los 23.101.500 de activos. Los sectores que han salido peor parados han sido (a octubre de 2009): -servicios (62.447 personas 29,2%) -agricultura (11.899 personas 12,48%) -1 er empleo (9.953 personas 3,59%) -construcción (8.802 personas 1,24%)
5. FUTURO DEL DESEMPLEO EN ESPAÑA: A octubre de 2009 un estudio demuestra que en este mes el paro aumento en 99000 persona, siendo este mes un 2% peor para el empleo en España que el anterior, de seguir esta ruta para finales de año se esperan unos datos realmente desalenadores con 4,6 millones de parados en España que generarían mayor gasto al país haciendo que muchos otros servicios públicos se resientan. Y por tanto muchas empresas que viven de estos servicios quebrarían generando aún más paro.
8. ADAM SMITH: Este economista de la época de las colonias es reconocido en su mayor parte debido a su libro la riqueza de las naciones, gracias al cual las sociedades antiguas se replantearon su visión de la economía pues Adam Smith proponía que la riqueza de un pueblo debe medirse por el valor de sus tierras para la labranza unido a su posibilidad de explotarlas, en lugar de como hasta la fecha se había medido según la cantidad de materiales preciosos que dicho país tuviese en sus arcas.