1. DEFINICIONES DE VIOLENCIA
Según la RAE la violencia es:
1. Cualidad de violento.
2. Acción y efecto de violentar o violentarse.
3. Acción violenta o contra el natural modo de proceder
En el diccionario enciclopédico Salvat encontramos las mismas definiciones pero se completa la
tercera y última:
• Acción violenta o contra el natural modo de proceder, haciendo uso abusivo de la fuerza.
Esta definición aporta algo nuevo al identificar el acto violento con el uso abusivo de la fuerza. No
solo introduce la palabra fuerza sino también el adjetivo abusivo que añade un matiz negativo.
Una definición más completa y específica es la que presenta Robert Audi en el libro “Pensar la
violencia”:
• Ataque o abuso enérgico de las personas por medios físicos o psicológicos.
La definición se va concretando, el acto violento puede ser físico o psicológico.
Garver, otro autor mencionado en este libro, demuestra como es posible violentar a una persona en
su anatomía (violencia física), o con respecto a su capacidad para adoptar sus propias decisiones
(violencia psicológica), y demuestra que cada uno de estos dos tipos de violencia tiene formas a la
vez personales e institucionalizadas. Estos son algunos ejemplos obvios, organizados según su
sistema:
PERSONAL INSTITUCIONAL
FÍSICA • asaltos • disturbio
• violación • terrorismo
• homicidios • guerra
PSICOLÓGICA • paternalismo • esclavitud
• amenazas • racismo
• difamación • sexismo
2. Debemos matizar que en la vida real, rara vez las cosas están organizadas de forma tan sencilla. La
violación no sólo constituye un ataque contra la integridad física de alguien, sino que,
generalmente, tiene efectos devastadores sobre su capacidad para tomar decisiones apropiadas
respecto de su futura vida sexual. En el ámbito del terrorismo, al igual que en la guerra, importa
igual ejercer la coerción sobre las decisiones del adversario como llevar a cabo con éxito una
agresión física. En definitiva, es imposible hacer una división clara entre violencia física y
psicológica, ya que, en la mayoría de los casos el uso de la fuerza física provoca un daño
psicológico de manera directa o indirecta. Lo esencial es que todos los casos que indica Garver
pueden caracterizarse como transgresión de, por lo menos, uno o dos derechos humanos
fundamentales
1. el derecho a determinar qué hace nuestro cuerpo y qué se hace con él;
2. el derecho a tomar nuestras propias decisiones y afrontar las consecuencias de nuestros
propios actos.
En base a esta clasificación y a las anteriores definiciones expuestas, proponemos una definición
final de violencia entendida como:
El término que utilizamos para condenar el hecho de que alguien haya disminuido o destruido en
todo o en parte la capacidad de una persona para la acción y para la interacción, tanto en relación
a la integridad física como al proceso de adopción de decisiones
Todas las definiciones de violencia son estudiadas en el sentido de violentar a la persona. En lugar
de pensar en la violencia según la naturaleza de la fuerza que se utiliza y del agente que lo hace,
nos centramos en los efectos que ha de causar esta fuerza sobre su receptor. En términos generales,
nos obliga a desviar nuestra atención del causante a la víctima de la violencia.
3. CONTEXTUALIZACIÓN
Para analizar el tema que vamos a tratar, la violencia en los informativos, tenemos primero que
poner en orden nuestras ideas sobre la violencia. Después de buscar la definición más correcta sobre
la violencia en el punto uno, vamos a intentar contextualizarla de forma más definida, estudiando
diferentes teorías y procesos por los que aflora la violencia, y a la vez, enmarcarlo dentro del mundo
de los medios de comunicación de masas, prestando especial atención a las teorías de usos que los
receptores hacen de los mismos.
Actualmente pasamos mucho tiempo frente al televisor, se ha convertido en uno de los pasatiempos
a los que más tiempo libre dedicamos y evidentemente ha traído ciertas consecuencias, tanto
positivas como negativas, pero nosotros solo intentaremos analizar las relativas al uso de la
violencia. Desde tal perspectiva debemos señalar que la mayor parte de esa violencia la recibimos
desde los medios de comunicación, especialmente desde la televisión (el más usado) y todavía no
están claros los efectos de esta posible sobrexposición.
Algunos estudiosos de la comunicación de masas e intelectuales sostienen que la abundancia de
emisiones violentas en televisión son causadas por fuerzas poderosas a las que interesa mantener la
agresividad en la sociedad para poder manipularla. Fuera de teorías en cierto modo
“conspiratorias”, es innegable es que: una razón para conseguir una reducción o erradicación de
las representaciones de violencia en televisión, es que una parte importante del proceso de
socialización se basa en el aprendizaje a partir de un modelo. 1 Es decir, los medios de
comunicación tienen un papel primordial en la creación de referentes en nuestra sociedad. Teniendo
una particular influencia en los niños, Lyle y Hoffmann demuestran con sus estudios que la
televisión juega un papel principal en la vida diaria de los niños en edades comprendidas entre los 3
y los 5 años.
Ahora vamos a indagar más en las causas del porqué de la violencia. Hay que distinguir, primero,
en dos tipos de violencia a grandes rasgos, la directa o personal: cuando una persona comete un acto
violento únicamente por motivos personales como demencia, apasionamiento, ira, etc... y otro tipo
de violencia que es producto de las condiciones sociales, en la que los individuos no son los
generadores, si no la base estructural en la que se da la violencia, es conocida como violencia
estructural o indirecta.
1 SEIJAS CANDELAS, Leopoldo Rafael. La violencia en Televisión. Universidad Complutense. Madrid. 1988.
4. Existe una violencia primaria, madre de toda violencia, que es la injusticia que encontramos en
todas partes... Existen pequeños grupos de familias privilegiadas cuya opulencia es mantenida por
la miseria de millones de conciudadanos. Llamo violencia a la injusticia porque, de hecho, la
misera mata a un mayor número de personas que las más sangrientas guerras.2
Está acertada aproximación a la violencia estructural nos permite teorizar sobre el porque de los
actos violentos. Muchas personas que los cometen no son desequilibrados mentales, ni tienen
ningún tipo de trastorno, recurren a ella porque es una forma de luchar contra la violencia
estructural que sufren, por ello, en muchos casos la violencia se debe entender como el resultado
de las tensiones existentes entre las distintas clases sociales y sus posiciones dentro de la estructura
social que forman. Aunque en ciertos sectores hablar de lucha de clases está considerado anticuado,
creemos que, como detonante de actos violentos continua siendo un factor muy importante. Pues
muchas personas se ven obligadas a participar en este tipo de comportamiento para internar vencer
las injusticias del sistema existente.
Tiene también una gran importancia el hecho de que nuestra vida sea tan “social”, estamos
constantemente agrupandonos según ciertos criterios, cada vez más específicos, y en contra de lo
que a primera vista pudiera parecer, la agresividad de todo un grupo respecto a otro es generalmente
más elevada que la de un individuo con otro. Esto se explica porqué cuando el individuo se
encuentra dentro de un grupo, tiene más dificultades para ser unos mismo; algunos lo llaman
intencionalismo hostil: una reacción de desconfianza y de defensa frente a los otros. Dificultando
las actitudes compresivas hacia los demás y facilitando las agresivas.
Más si cabe, teniendo en cuenta que en nuestro sistema capitalista, las sociedades modernas
desarrollan comportamientos agresivos por el culto a la competencia individual. El individuo
aislado tiene que luchar con los otros para superarlo, desbancarlo y si puede incluso humillarlo, esto
se nos enseña desde bien pequeños, creando una tensión hostil que hace crecer la agresividad.
Pudiendo llegar a transformarse en enfermedades patológicas, causadas por está tensión. De hecho
son muchos los estudios que hablan que en un futuro, no muy lejano, el mayor problema de salud
en los países desarrollados serán las enfermedades mentales de diversos tipos.
Profundizando un poco más sobre los aspectos biológicos de la agresividad, es importante
mencionar una tipo de ciencia que surgió a mitad del siglo XX, la etología, una rama de la biología
y la psicología experimental que se basa en el estudio del comportamiento de los animales en su
medio natural, no en recreaciones del mismo. Es decir, se basa en la importancia de realizar buenos
y rigurosos estudios de campo. Algunos de sus miembros más destacados como Walter Rudolf
2 PESSOA CAMARA, Elder. Espiral de Violencia. Sígueme Salamanca. 1970.
5. Hess, sostienen que en el cerebro humano se ha demostrado la existencia de estructuras que cuando
son estimuladas responden de forma agresiva, más concretamente que las estimulaciones en el
hipotálamo posterior producen agresividad, y al contrario, lesiones estereotáxicas encima de los
cuerpos mamilares en el hipotálamo posterior suprimen la conducta agresiva.
A nivel psicológico, existen también varias teorías para explicar la agresividad. Una de las más
conocidas es la elaborada por un grupo de psicólogos de Yale, que llegaron a la conclusión que toda
agresión es producto de una frustración (la teoría es conocida como frustración-agresión),
frustración entendida como una barrera física o mental ante la satisfacción de una necesidad. Freud
también contribuyo a ampliar el conocimiento sobre las actitudes violentas, en 1923 expone en su
libro Más allá del placer, su famosa teoría sobre la pulsión de muerte, la tendencia inherente a toda
vida orgánica que se evidencia en actos encaminados a la búsqueda de un estado anterior a la vida.
En la actualidad estas teorías se han superado y se viene investigando más desde la perspectiva
conductista, que dice que la violencia sería una conducta aprendida, y mediante ese proceso de
aprendizaje es posible aumentarla o disminuirla. Por eso la necesidad según muchos estudiosos, de
limitar la cantidad de imágenes violentas que se emiten en los medios de comunicación, ya que
supondrían una notable mejora en el proceso socializador del individuo. Como curiosidad comentar
que en la película La Naranja Mecánica, se presentan diversas técnicas conductistas para reducir la
agresividad del protagonista.
Vamos ahora ha explicar algunas de las teorías sobre comunicación más conocidas y aceptadas, que
son muy importantes a la hora de entender como los medios de comunicación influyen en nosotros,
pudiendo incluso manipularnos, como sostiene la primera teoría de la que hablaremos. La teoría de
la aguja hipodérmica, realizada a finales de los años 20, sostiene que los medios de de
comunicación intentan moldear conciencias, en el sentido de uniformar criterios ideológicos que
sirvan a intereses específicos, un contenido en un producto televisivo genera un efecto en las
actitudes o la conducta del espectador.
El modelo linear de Shannon y Weaver, elaborada en 1948; es una teoría matemática pensada en
función de la cibernética, en especial de las maquinas electrónicas y como se comunican. Esta teoría
permite, sobre todo, estudiar la cantidad de información de un mensaje en función de la capacidad
del medio, se puede medir también la velocidad de transmisión del mensaje y el ruido que hace
disminuirla. Lo que vienen a decir con esta hipótesis es que cuanto más probable y predecible sea el
mensaje, más rápido es recibido por el receptor y más fácilmente descodificable.
6. El profesor de la Universidad de Yale, Harold Laswell, planteo en 1948 el modelo de Laswell que
proponía cinco preguntas (no son relevantes para este estudio) que resumían todo lo que entraba en
juego en el proceso de comunicación. No supuso un gran avance, pues seguía con la idea inicial de
la comunicación lineal, Estimulo-Respuesta.
La teoría de los efectos generalizados del estimulo es interesante para nuestro estudio; es una teoría
conductista que intente encontrar la relación causal entre los medios de comunicación y la violencia
social; sus resultados fueron los esperados, a mayor numero de contenidos violentos en los medios
de comunicación, se daba un mayor numero de actos violentos. La siguiente teoría tenia la intención
de desmentir esta.
La teoría de los dos pasos o de los efectos limitados, elaborada por Paul Lazarfeld, se servia de una
encuesta muy elaborada para poder extraer datos sobre como los medios de comunicación influían
en la decisión de voto de los electores. Lazarfeld encontró que los medios no tenían influencia
masiva en los votantes, sino que estos eran persuadidos por miembros de grupos primarios o
referencias por los que se consideraban líderes de opinión. En este período bajo el predominio del
funcionalismo en la sociología, cuando las concepciones simplistas de la sociedad de masas
compuesta por los individuos de todo tipo de relaciones sociales, son rechazadas a favor de un
descubrimiento de los lazos gregarios entre las personas.
La teoría de la exposición selectiva plantea que, cuanto más elevado sea el nivel cultural y
educativo, y mayor la interacción grupal o social, mayor sera la capacidad para rechazar contenidos
agresivos o violentos, por lo que volvemos un poco a la capacidad del receptor para discriminar
contenidos y no verse afectado por ellos.
Por último hablaremos de la teoría de los usos y gratificaciones, que toma como punto de partida al
consumidor de los medios masivos de comunicación, más que los mensajes de estos en función de
sus experiencias directas. Contempla a los medios del público como usuarios activos de los medios
mas que pasivamente influidos por ellos. Por lo tanto, no presume una relación directa entre
mensaje y efecto, sino que postula entre los medios del público hacen uso de los mensajes y que
esta utilización actúa como una variable en el proceso del efecto.
Para terminar con esta contextualización, vamos a hablar un poco de la manipulación en la
televisión. Un tema muy ligado a las teorías de la comunicación que hemos expuesto anteriormente,
ya que algunas de ellas hablan que la manipulación es el fin último de los medios de comunicación
7. de masas (la teoría de aguja hipodérmica), y otras niegan que tal manipulación se puede llevar a
cabo sin la ayuda de los espectadores que son parte activa en la recepción del mensaje.
Es innegable que la televisión es un vehículo de control y el símbolo de la cultura de masas. Es un
inmejorable instrumento de homogeneización cultural y la ventana por la cual un mayor numero de
personas acceden a la información y por tanto a su particular visión del mundo.
A grandes rasgos, la televisión construye un mundo aparentemente neutro que supuestamente
representa el mundo real, de hecho se ha convertido en el nuevo espacio público. Nos enseña una
visión más agradable de la vida, con la intención de conquistarnos. Al ser un medio preferentemente
visual, la imagen dentro de la televisión esta muy estereotipada, la inmensa mayoría de las personas
que aparecen en ella responden al canon de belleza vigente, algo que no sucede en la sociedad. Su
influencia socio-económica también es notable, la imagen de éxito y felicidad que muchas veces
transmite, junto con la ingente cantidad de publicidad y su notable impacto (es el medio que más
ingresos genera por la publicidad) hace que el público se cree unas falsas necesidades que pueden
llegar a frustrarlo.
A nivel informativo, que es el que más nos interesa, la manipulación es más sutil. Como hemos
señalado antes, los medios de comunicación se han convertido en el nuevo espacio publico, las
dificultades de la política y la regresión a lo privado han dejado disponible un ámbito en el que los
medios de comunicación disfrutan de una hegemonía casi absoluta. A ellos les corresponde definir
qué es lo público, establecer los límites dentro de los cuales se va a mover tal concepto y con qué
otros actores compartir dicho escenario.3 Esto significa que los medios realizan una primera
manipulación cuando seleccionan que noticias son los suficientemente importantes como para
ocupar un determinado tiempo en sus espacios informativos, y las seleccionan no en base a lo que
sea más relevante para la sociedad en general (entendiendo la televisión como un servicio público),
si no en función de sus intereses privados. Tienen la última palabra en decidir los temas de
discusión y los supuestos “intereses” de las personas.
Esto les da una gran libertad a la hora de presentar las noticias, ya que son sabedores de su
condición privilegiada como informadores de la sociedad; la inmensa mayoría de la población no
contrasta la información que recibe y para más inri suele ser un público fiel, utilizan siempre los
mismos canales para recabar información; lo que ayuda a reforzar su posición dominante. Y les
permite ir refinando cada vez más sus estilos comunicativos, con el único fin de reforzar su posición
empresarial en el sector. Cada vez importan menos las buenas practicas profesionales y más los
indices de audiencia y los balances económicos
3 ORTEGA, Féliz. La política mediatizada. Alianza Editorial. Madrid. 2011.