La fractura hidráulica, el método utilizado en la extracción de gas de esquisto, requiere de una mezcla de químicos contaminantes, como en este pozo en estado estadounidense de Texas, fronterizo con México.
México: Los químicos del gas de esquisto sin barreras
1. México: Los químicos del gas de esquisto sin barreras
(Por Emilio Godoy)
La fractura hidráulica, el método utilizado en la extracción de gas de
esquisto, requiere de una mezcla de químicos contaminantes, como
en este pozo en estado estadounidense de Texas, fronterizo con
México. Crédito: Gobierno de Estados Unidos
México, 27 de junio (IPS).- El nuevo marco legal en México para la
industria petrolera no profundiza el control del uso de químicos
nocivos en la extracción de los hidrocarburos no convencionales, lo
que hace temer a ambientalistas y expertos sobre el incremento de
su consumo en una industria en apertura al capital privado.
Con la reforma energética “se va a agudizar el uso de químicos. Las
nuevas leyes no lo abordan. Necesitamos saber qué se utiliza, porque
si no, no conocemos las consecuencias.
Por eso, queremos que se prohíba el ‘fracking’ (fractura hidraúlica)”,
señaló a IPS la activista Claudia Campero, del canadiense Proyecto
Planeta Azul.
Un paquete de nueve iniciativas que incluyen el establecimiento de
ocho nuevas leyes y reformas a otras 12 sobre hidrocarburos, agua,
electricidad y fondos petroleros llegaron esta última semana de junio
al plenario del Senado, tras ser discutida desde el día 10 por su
Comisión de Energía.
El bicameral Congreso legislativo modificó 11 de diciembre de 2013
los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución, en lo que supuso la
apertura a inversores privados, locales y extranjeros, de la
2. exploración, extracción, refinación, transporte, distribución y
comercio de hidrocarburos.
La reforma desmanteló las bases de la nacionalización de la industria,
vigente desde 1938.
El análisis de proyectos de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex),
junto con reportes del Congreso de Estados Unidos y de la industria
petrolera local, permiten dimensionar la utilización de químicos en la
extracción de gas de esquisto o de lutitas.
Las perforaciones para obtener hidrocarburos incrustados en rocas
subterráneas utilizan el método de fractura hidráulica, conocido
también por el término inglés “fracking”, para así liberarlos a gran
escala.
«»Otros modelos latinoamericanos.
Países como Brasil y Colombia ya empezaron a licitar bloques de
exploración y explotación de gas convencional y no convencional y a
crear regulaciones. La Agencia Nacional de Petróleo, Gas Natural y
Biocombustibles de Brasil (ANP) licitó 240 bloques de crudo y gas en
noviembre de 2013.
En su resolución 21, emitida el 10 de abril, la ANP estipuló una
relación de productos químicos, con el potencial impacto sobre la
salud humana y el ambiente, utilizados en el proceso, transportados y
almacenados, incluyendo sus cantidades y composiciones.
Además, el operador debe describir los componentes químicos a
utilizar durante el fracking, destacando si son inertes o informando de
su potencial para reaccionar al contacto con las aguas subterráneas,
las rocas, plantas y seres humanos y las medidas de control.
En Colombia, la Agencia Nacional de Hidrocarburos prepara los
lineamientos para el uso de la fractura. Este año, la entidad ofrece 25
áreas petroleras y gasíferas, incluidas de esquisto.
Ese proceso y la recuperación del gas exigen grandes volúmenes de
agua y aditivos químicos, algunos nocivos. Además, la excavación y
fractura horizontal generan enormes cantidades de residuos líquidos.
Por el proceso, estos residuos pueden contener químicos disueltos y
otros contaminantes que requieren tratamiento antes de ser
desechados, e igualmente durante según especialistas y
organizaciones como la ambientalista Greenpeace.
El estudio de impacto ambiental de Pemex sobre el Proyecto Regional
Cuenca de Sabinas Piedras Negras 2007–2027, en los norteños
estados de Coahuila y Nuevo León, describe que “los residuos líquidos
generados serán lodos”.
Son desechos calificados como peligrosos por las propias regulaciones
mexicanas y se componen principalmente de diésel, barita y
bentonita, un coctel tóxico para la salud humana y el ambiente.
3. El documento indica que la perforación y fractura hidráulica requiere
del uso de químicos nocivos como bentonita, cal, carbonato de calcio,
cloruro de calcio, sosa caústica, aditivos, emulsiones y jabones. Esos
elementos pueden dañar la piel, los pulmones, el hígado y los ojos.
El plan es destinar a la exploración y explotación de gas 34.000 de
las 4,5 millones de hectáreas de la Cuenca de Sabinas Piedras
Negras. El área para extracción de gas se extiende por 21.270
hectáreas, de las que 8.035 son para perforación de pozos.
A ello se suma el Proyecto Regional Petrolero Poza Rica Altamira y
Aceite Terciario del Golfo 2013-2035, que se extiende por los estados
de Veracruz (sudeste), Hidalgo (centro) y Puebla (sur), planifica el
uso de químicos similares.
En marzo, Pemex presentó el estudio de impacto ambiental de este
proyecto ante La Secretaría (ministerio) de Medio Ambiente, pero lo
retiró en mayo debido a que afectaba áreas naturales en Puebla. Se
prevé que lo reintroduzca con una extensión geográfica más limitada.
El consorcio ha perforado 18 pozos de gas de esquisto, de los cuales
cinco están por cerrar su fase exploratoria, en Coahuila, Nuevo León,
Tamaulipas y Veracruz.
Pemex proyecta para los próximos 50 años operar 6.500 pozos a
nivel comercial, pero la explotación de gas de esquisto podría quedar
en manos privadas debido a la reforma energética.
El consorcio identificó cinco regiones con potenciales recursos de gas
no convencional desde el norte de Veracruz hasta Chihuahua, en la
frontera con Estados Unidos.
La estadounidense Administración de Información de Energía (EIA,
por sus siglas en inglés) sitúa a México en el sexto lugar mundial en
reservas de gas no convencional técnicamente recuperable, detrás de
China, Argentina, Argelia, Estados Unidos y Canadá, en un análisis
sobre 137 depósitos en 41 países.
Pemex carece de datos sobre el nivel en las sustancias químicas que
utiliza de la concentración Inmediatamente Peligrosa para la Vida o la
Salud (IDHL, por sus siglas en inglés). Greenpeace calcula que la vida
útil de un pozo requiere de 380.000 litros de aditivos en los fluidos
del fracking.
La estadounidense organización Intercambio de Disrupción Endocrina,
dedicada a compilar y difundir información científica sobre los
problemas de salud y ambiente por la exposición a químicos que
actúan como interruptores endocrinos, identificó 944 productos
usados en la fractura hidráulica que contienen 632 sustancias de ese
tipo.
En Estados Unidos están operativos más de 72.000 pozos
fracturados, según el sitio desarrollado por la industria, que enlista 59
4. químicos, coincidentes con los componentes inyectados por Pemex,
como metanoles, isopropanol, carbonatos y ácidos.
www.fracfocus.com
La gubernamental pero autónoma Comisión Nacional de
Hidrocarburos (CNH) ya definió un borrador para las operaciones de
gas de lutitas, que no contiene límites al uso de químicos, según
constató IPS.
“El problema de los químicos es el residuo, que debe estar tratado,
para evitar que entren en contacto con la gente y generen daños al
ambiente y a las personas. Vamos a calificar que sean tratados”,
explicó a IPS el comisionado Néstor Martínez.
Esa evaluación se refiere a temas como uso y contaminación del
agua, utilización de químicos peligrosos y generación de sismos, y
busca minimizar accidentes operacionales, prevenir la contaminación
por residuos, fluidos y químicos, así como minimizar la huella
ambiental.
Entre los rubros regulados aparecen los tipos de lodos de perforación,
la calidad de la cementación o sellado del pozo, la fractura hidráulica
y la descarga de fluidos y sólidos.
Los contratistas de Pemex deben presentar a la CNH un plan de
manejo del pozo, con especificaciones que los operadores deben
cumplir en esos temas.
“Hay muchos químicos que no han sido probados, más los nuevos
que se desarrollan. Las empresas usan el secreto industrial como
escudo para ocultar información”, denunció Campero.
Será en octubre, cuando la Secretaría de Ambiente comience a
revisar las normas sobre perforación de pozos y descarga de
residuos.
http://www.ipsnoticias.net/2014/06/los-quimicos-del-gas-
de-esquisto-sin-barreras-en-mexico/ •