4. Valores como la integridad, la simpleza, la justicia y la satisfacción de realizar un trabajo bien hecho podían fácilmente transmitirse en una empresa privada a través del trabajo. Para los protestante en general, y los Quákeros en particular, el pecado y los vicios surgían en el tiempo de ocio, lo que lleva a los protestantes a dedicar mucho tiempo al trabajo y al ahorro, principios opuestos al catolicismo