Este documento describe diferentes tipos de ética (ethos) que pueden guiar la conducta humana. Define el ethos que busca objetivos de manera continua, el ethos que ama y cuida de los demás, el ethos que se responsabiliza por sus acciones, el ethos de la solidaridad que une a la humanidad, y el ethos compasivo que ayuda a los que sufren. Finalmente, describe a San Francisco de Asís como el mayor representante del ethos integrador que combina todos estos principios a través de su vida y enseñanzas.
2. GENEALOGÍAS DE LA ÉTICA
ETHOS: Sistema racional de principios
El Ethos que busca
El Ethos que ama
El Ethos que cuida
El Ethos que se responsabiliza
El Ethos que se solidariza
El Ethos que se compadece
El Ethos que integra
3. EL ETHOS QUE BUSCA
Este ethos a variado la forma de vida y el pensamiento de
los seres humanos, logrando que cada persona siempre se
proponga un objetivo y pueda conseguirlo sea como sea,
sin importar las dificultades que se presente en aquel
camino, siempre y cuando respete al ser humano y a la
naturaleza.
El ethos que busca siempre es continuo, nunca se detiene
y esto a concebido al ser humano mejorar su calidad de
vida y el entorno donde se encuentra.
4. EL ETHOS QUE AMA
El ethos que ama argumenta un nuevo entendimiento de
vivir. Apreciar al otro es darle razón de ser. Amar al
hermano quiere decir acompañarlo en sus tristezas,
angustias y problemas, es estar allí para siempre apoyarlo
con una voz de aliento. El amor es manantial de valores.
Solo ese ethos que ama se permanece a la altura de los
retos actuales porque tiene presente a todos los seres
humanos. Hace que las personas que están separadas se
unan y se vuelvan hermanos. Todo lo que amamos,
siempre va estar al cuidado de nosotros.
5. EL ETHOS QUE CUIDA
El cuidado forma la calidad central del nuevo modelo de
civilización que trata de surgir en todo el mundo.
El cuidado tiene una doble función de preparativos de
destrucción futura y de regeneración de daños sucedidos.
El cuidado posee ese don que refuerza la existencia, a las
condiciones ecológicas, sociales y espirituales que admite
la creación de la vida y de su propia transformación.
El ethos que cuida y ama es curativo y defensor. Hace
recuperación de llagas, despeja el futuro y concibe
seguridad. Por último se puede concluir que el ethos que
ama se completa con el ethos que cuida.
6. EL ETHOS QUE SE
RESPONSABILIZA
Responsabilidad es la capacidad de dar respuestas claras a los
problemas que se viven en la actualidad y esto sólo se puede
llegar a ser con un ethos que ama, cuida y se responsabiliza.
La responsabilidad surge cuando nos damos cuenta de las
consecuencias de nuestros actos sobre otros y sobre la naturaleza.
La precaución y la cautela son los compartimientos importantes
que debe tener el ser humano en este ethos..
Este ethos implanta algunas actividades considerables las cuales
son; respecto a la sociedad, la economía, la naturaleza y a la
atmósfera de nuestras sociedades.
7. EL ETHOS QUE SE
SOLIDARIZA
Se debe despertar un sentimiento profundo de hermandad y de
familiaridad que haga inadmisible el pensamiento de rechazo ante
aquellas personas por su raza, estrato económico, ideología política y
religión por parte de los que poseen poder gubernamental y
económico.
Los seres humanos debemos proponer el cuidado, cariño y el amor.
Para así dar mayor seguridad a aquellas personas que se sientan
débiles tanto físicamente como emocionalmente.
Nuestra misión es cuidar de los seres, ser los protectores del
patrimonio natural y cultural común, para así brindar un mejor futuro
y calidad de vida a nuestras nuevas generaciones.
8. EL ETHOS QUE SE
COMPADECE
Este desea incorporar a todos los seres humanos que han sufrido
durante su vida y han pasado grandes dificultades en ella, allí
aquellas personas se sentirán como en casa y tendrán buen
recibimiento, además pueden expresar sus angustias y problemas
para brindarles ayuda.
Tener compasión es condolerse del hermano por considerarlo
desamparado, sin fuerzas y vencido ante todas sus dificultades.
El desapego y el cuidado son las virtudes que realiza la compasión.
Por el desapego renunciamos a poseer las cosas materiales. Por el
cuidado velamos por su bienestar y las socorremos en su
sufrimiento.
9. EL ETHOS QUE SE INTEGRA
Para este ethos el mayor representante es San Francisco de Asís, considerado “el
último cristiano”. Orientó su vida por la experiencia evangélica, recobrando el
vigor del cristianismo. En él se integran todos los ethos:
En él descubrimos el ethos que busca
Es un representante singular del ethos que ama
Vivió ejemplarmente el ethos que cuida
Es un ejemplo del ethos que se compadece
Dio testimonio del ethos que se solidariza
Enseñó de manera concreta, el ethos que se responsabiliza.
El ethos franciscano integra todo. Simpatiza con todo y hace de este mundo un
hogar agradable al ser humano.