El documento describe la misión Deep Impact de la NASA, cuyo objetivo era estudiar la composición interna de un cometa mediante el impacto controlado de una sonda contra el cometa Tempel 1. La sonda se separó en dos módulos, el Flyby que fotografió el impacto y estudió la eyección de material, y el Impactor que golpeó la superficie. Los datos obtenidos revelaron que los cometas contienen hielo, gas y polvo primitivos del Sistema Solar.