Gestión comunitaria para la reducción del riesgo de desastres y respuesta ante el cambio climático en la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez y la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México
2. 1
Contenido
Introducción
1. Problemática e impactos del cambio climático en la región de Chiapas
1.1 El Huracán Stan en el 2005
1.2 Respuesta ante el huracán Stan
1.3 San Cristóbal de Las Casas
1.4 Tuxtla Gutiérrez
2. Marco teológico pastoral de la problemática ambiental
2.1 Un breve recorrido en los documentos de la Iglesia Latinoamericana
2.2 Visión
2.3 Principios y valores
3. Propuestas de acciones
3.1 Objetivos de la estrategia
3.2 Ejes estratégicos
3.3 Estrategia de implementación
3.4 Seguimiento
3.5 Formación, acciones de respuestas y redes locales
3.5.1 San Cristóbal de Las Casas
a) Objetivos específicos
b) Estrategias de formación
c) Metas
d) Temas de formación
3. 2
a. Contenido temático de las Jornadas de Formación Ambiental
Comunitaria.
b. Contenido temático de Jornadas de Formación Ambiental a
Representantes Parroquiales.
c. Contenido Temático de Jornadas de Formación Ambiental a
Agentes de Pastoral Diocesana.
e) Acciones de respuesta
a. Viveros de árboles para la reforestación
f) Creación de Redes Locales
3.5.2 Tuxtla Gutiérrez
a) Objetivos específicos
b) Estrategia de formación
c) Meta
d) Temas de formación
a. Contenido temático de las jornadas de Formación Ambiental
Comunitaria
b. Contenido temático de las Jornadas de Formación Ambiental
a Representantes Parroquiales.
c. Contenido temático de las Jornadas de Formación Ambiental
a Agentes de Pastoral Diocesana.
e) Acciones de respuesta
a. Construcción de estanques
b. Reforestación en zonas degradadas
c. Reforestación de árboles frutales
d. Siembra de hortalizas
e. Otras actividades comunitarias
f) Creación de Redes Locales
Consideraciones finales
4. 3
Introducción
El cambio climático es considerado por muchos como el mayor problema a ser enfrentado por
la humanidad en el presente siglo. Es un reto de claras responsabilidades comunes que son
asumidas de manera diferenciada por los países del orbe.
En la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez y Diócesis de San Cristóbal de Las Casas han formulado
el proyecto de Gestión comunitaria para la reducción del riesgo de desastres y respuesta ante
el cambio climático para manifestar con las comunidades una respuesta ante el cambio
climático.
Con esta finalidad se formula la estrategia de sensibilización que será el conjunto de acciones
que se implementarán en el contexto determinado de la Arquidiócesis y Diócesis con el
objetivo de lograr el fin propuesto, en este caso la sensibilización para que las comunidades
participen en acciones orientadas a la mitigación y adaptación al cambio climático. Para efectos
del proyecto se entenderá la estrategia de sensibilización como el documento que reúna ese
conjunto de acciones que luego se implementarán a nivel comunitario.
Este documento se ha dividido en tres puntos principales que obedecen a la metodología de
ver, juzgar y actuar de manera que podamos responder a las necesidades de las comunidades
vulnerables ante el cambio climático.
1. Problemática e impactos del cambio climático en la región de Chiapas
Según el Sistema Nacional de Información Ambiental y Recursos Ambientales dependiente de
SEMARNAT1
(Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales) del Gobierno Mexicano dice
que en el caso de los desastres relacionados con la degradación ambiental se requiere un
tratamiento específico, tanto desde el punto de vista conceptual, como de la evaluación del
desastre desde la perspectiva de la protección ambiental y el desarrollo sustentable. Las
primeras manifestaciones de los procesos de deterioro se dejaron sentir en el ámbito local,
después se ampliaron al espacio regional y en la actualidad se extienden por todo el territorio
nacional. En estos procesos la temporalidad de sus efectos es un factor clave.
Algunos de estos procesos como la deforestación, el deterioro de los suelos, la sobre
explotación de algunas pesquerías, la sequía y la escasez del agua están manifestando sus
efectos desastrosos en corto plazo.
Otros, como la capacidad limitada de la atmósfera para absorber las emisiones excesivas de
carbono (CO 2), la contaminación del agua y los vertidos insustentables de residuos sólidos en
1
Cf.http://www.semarnat.gob.mx/temas/ordenamientoecologico/Documents/bitacora_cuenca_valle_mexic
o/diagnostico_final%2022_marzo_1.pdf
5. 4
ríos y mares se muestran tenuemente en algunas regiones y ciudades del país, pero sus efectos
verdaderos amenazan con manifestarse intensamente en el mediano y largo plazo2
.
Las tendencias destructivas para el medio ambiente han cobrado tal velocidad en los últimos
años, que no sólo están agotando rápidamente el capital natural del país y acelerando los
procesos de contaminación de aire y agua, sino que también están frenando las capacidades
productivas y se encuentran estimulando el surgimiento de un conjunto diverso de conflictos
sociales.
1.1 El Huracán Stan en el 2005
El huracán Stán causó inundaciones y desprendimientos en los países centro americanos de
Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras y Nicaragua además del sur de
México durante los días 3, 4 y 5 de octubre de 2005. Este huracán ocasionó por lo menos 1,620
muertes según datos oficiales (CENAPRED).
En la primera semana de octubre de 2005, el huracán Stan llegó a Chiapas, Estado ubicado en el
sureste de la República Mexicana. Fue de tal magnitud el impacto de este fenómeno natural
que las lluvias no cesaron en varios días, hubo deslaves en carreteras, puentes derrumbados,
ríos desbordados y miles de personas perdieron todo: casa, cosechas y animales.
Su paso por México, el ciclón Stan ya degradado a tormenta tropical, dejó al menos 16 muertos
y más de 100,000 damnificados, además de unos seis puentes colapsados por las crecidas de
los ríos, específicamente en el Estado de Chiapas. El desbordamiento del río Coatán
en Tapachula arrasó 2,500 viviendas.
1.2 Respuesta ante el huracán Stan
Tras la atención a la emergencia e iniciado el proceso de reconstrucción, la Arquidiócesis de
Tuxtla Gutiérrez y la Diócesis de San Cristóbal de las Casas dieron inicio con el proyecto de
Reducción de la Vulnerabilidad Ambiental y Social en los municipios de Chicomuselo y Monte
Cristo de Guerrero, con el financiamiento de Cáritas Española 2007‐2010.
En este proyecto se consideraron a seis comunidades pilotos las cuales fueron: Las Flores,
Santo Domingo y Vado Ancho en la Diócesis de San Cristóbal de las Casas; Toluca, Río Negro y
Nuevo Río Negro en la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez. Se aplicaron tres líneas estratégicas
las cuales consistieron en la Incidencia Política, la Reducción de Riesgo y el Desarrollo
Comunitario Sustentable.
En lo referente a la Reducción de Riesgos, las seis comunidades cuentan con sus Planes
Comunitarios de Gestión Integral de Riesgos, Cinco de las comunidades cuentan con albergues
comunitarios equipados para emergencias, también cuentan con una organización comunitaria
2
Cf. MORENO S., ANA ROSA, URBINA S., Javier, Impactos sociales del cambio climático en México, INE‐
SEMARNAT‐PNUD, México D.F. 2008, 73 pp.
6. 5
para la atención a la emergencia en la cual se distribuyen responsabilidades y tareas. Las
comunidades mencionadas tienen ahora radios con frecuencia VHS de uso comunitario que ha
fortalecido la comunicación y, sobre todo, en el sistema de monitoreo y alerta temprana.
En la línea de Desarrollo Sustentable con la capacitación en Ordenamiento Ecológico
Comunitario se ha fortalecido la organización comunitaria. Como resultado de esto se han
obtenido sus planes de Ordenamiento Ecológico Comunitario. Los beneficiarios están
capacitados en la construcción de letrinas aboneras secas y fogones ahorradores, utilizándolos
en los espacios comunes de la comunidad; además, han recibido capacitaciones en abonos
orgánicos y recuperación de suelos, para ponerlas en práctica en los huertos comunitarios y en
las parcelas familiares; se les ha capacitado en la construcción de estanques piscícolas donde se
realiza la crianza de peces de la especie tilapia.
Durante el año 2010 se lograron implementar diferentes programas productivos encaminados
al mejoramiento de la nutrición de las familias beneficiadas por el proyecto y a la vez la
comercialización de los productos obtenidos a las demás familias. Por consiguiente se crearon
semilleros‐viveros de árboles tanto frutales como maderables, renovación de cafetales,
estanques de piscicultura, cultivo de hongos‐setas, invernadero para hortalizas, fortalecimiento
en la panadería del grupo de mujeres, mejora del sistema de agua potable, micro granjas (pollas
de doble propósito carne y huevo, pavos y cerdos).
La Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez dentro de su proceso pastoral se ha propuesto trabajar
mediante el análisis y reflexión sobre la situación ambiental, para reforzar una cultura de
reconciliación hacia el cuidado del medio ambiente.
Consideramos por tanto la debida pertinencia la continuidad de respuestas ante el cambio
climático. Estas comunidades tienen el compromiso de realizar un papel multiplicador para
poder compartir las experiencias adquiridas con anterioridad y que puede ayudar en la
facilitación de herramientas y conocimientos en el tema de Gestión de Riesgos.
Así mismo se considera necesario el debido seguimiento a los proyectos productivos
implementados dentro de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas y de la Arquidiócesis de
Tuxtla Gutiérrez para afianzar el proceso organizativo y lograr la auto‐sustentabilidad.
El área de trabajo que corresponde a estas comunidades continúa siendo preferente debido a
la situación geográfica en la que se encuentran a márgenes del río Yayahuita, que se desborda
con mucha facilidad año con año y es uno de los más caudalosos del Estado, y en cerros
atravesados por varios arroyos que crecen en temporadas de lluvias.
1.3 San Cristóbal de Las Casas
El territorio del municipio de Chicomuselo, catalogado como de alta marginación, está
constituido en un 50 % de terrenos accidentados dado que ocupan las estribaciones de la Sierra
Madre de Chiapas, el resto lo integran terrenos planos y semiplanos de la depresión central.
7. 6
Es preocupante el peligro que representan los deslizamientos de rocas y lodo en los terrenos
montañosos para las comunidades que habitan en las partes bajas como es el caso de las
poblaciones de la Sierra, consideradas como de alto riesgo.
También, para las comunidades de la zona planada que habitan en las orillas de la “Presa La
Angostura” el desbordamiento del agua representa amenaza de inundaciones cada época de
lluvias, sobre todo en temporada de intensas precipitaciones.
Las amenazas sobre los recursos naturales de las comunidades como el agua, la diversidad
biológica y los recursos minerales son promovidas por proyectos de empresas transnacionales
concesionadas.
La situación de alta vulnerabilidad de las comunidades de la cobertura diocesana y, de manera
específica de las 9 comunidades de la Parroquia de Chicomuselo, a las que se orienta el
Proyecto GRCC, es la base para analizar y prevenir con enfoque integral las causas de la
problemática que enfrentan durante las fuertes precipitaciones.
1.4 Tuxtla Gutiérrez
El cambio climático en esta región actuará reduciendo la disponibilidad del agua, afectando la
salud y ampliando la distribución de vectores; asimismo los hogares se verán afectados por
inundaciones y se pondrá en peligro la seguridad alimentaria, entre otros impactos de igual
gravedad.
Así podemos determinar algunas principales amenazas que frecuentan las comunidades de
Tuxtla Gutiérrez: pobreza, terremotos, inundaciones, tormentas, tala inmoderada de laderas y
cuencas, quema intencional de los bosques, falta de tratamiento de la basura y de aguas
negras, los desechos tóxicos de las fábricas que contaminan los ríos y lagunas, agotando el
agua, por consiguiente deslizamientos de laderas y sequías. Todo esto pone en riesgo la salud y
la vida de las personas.
En la débil organización comunitaria encontramos escaso trabajo comunitario, baja integración
al plan de desarrollo municipal y estatal y poco compromiso solidario.
Vemos el incremento en el desempleo que viene a ser causa de la migración de los varones y
por ende las comunidades se ven sustentadas, en la mayoría, por mujeres, niños y ancianos.
Además, se vive una experiencia de ruptura de la cultura ancestral.
Esta situación motiva a fortalecer la capacidad organizativa de las comunidades de las regiones
más vulnerables para determinar participativamente las formas de reacción ante las causas de
los desastres, así como elaborar mapas de riesgo ambiental a fin de prevenir consecuencias
desastrosas.
8. 7
2. Marco teológico pastoral de la problemática ambiental
Observamos que el desafío de los cambios climáticos se afronta con serenidad, pero también
de manera oportuna, comenzando precisamente a nivel local. Por ello, es justo que veamos el
planteamiento de esta cuestión desde el lado teológico pastoral, donde el pensamiento
cristiano se sitúa, viendo que la naturaleza es fruto de la intervención de Dios y de su infinito
amor.
2.1 Un breve recorrido en los documentos de la Iglesia Latinoamericana
Desde la I Conferencia Episcopal Latinoamericana realizada en Río de Janeiro3
en 1955, la
Iglesia viene haciendo un llamado a “preocuparse en colaborar del mejor modo posible para la
elevación de las condiciones de vida y trabajo, empleando los medios que en concreto parezcan
posibles y oportunos”.
Por eso, no podemos dejar de pensar en la situación inhumana y de pobreza que viven millones
de personas, expresada por ejemplo en mortalidad infantil, falta de vivienda adecuada,
problemas de salud, salarios de hambre, el desempleo, el subempleo, desnutrición,
inestabilidad laboral, migraciones masivas forzadas y desamparadas4
.
Esta pobreza no es una etapa casual, sino el producto de situaciones de una estructura
económica, social y política individualista, egoísta e injusta que se encuentra “impregnada no de
un autentico humanismo, sino de materialismo”5
excluyente.
El cambio climático no es discriminatorio, ni tiene en cuenta las fronteras de los estados que en
su caminar ha incidido gravemente sobre las personas en la otra punta del mundo, afectando
tanto a ricos como a pobres, a la población rural y a la población urbana, en el norte y en el sur.
Sin embargo, resulta evidente que la población pobre de los países en desarrollo es y será la
más afectada.
En el Documento de Puebla (1979) aparece claramente la preocupación por el daño provocado
al medio ambiente:
3
Carta Apostólica "Ad Ecclesiam Christi" del Papa Pio XII a los Obispos Latinoamericanos, 60. Iª Conferencia General del
CELAM Río de Janeiro, Agosto de 1955,
4
Cfr. III Conferencia General del Episcopado Latinoamericano "Puebla — 1979"
5
SS Juan Pablo II, Discurso Inaugural III, 3. LXXI, p. 201.
10. 9
En la Conferencia de Aparecida8
nuevamente los obispos vuelven a hablar sobre los aspectos
ambientales, tocando el tema del Cambio Climático.
“… Con mucha frecuencia se subordina la preservación de la naturaleza al desarrollo
económico, con daños a la biodiversidad, con el agotamiento de las reservas de agua y de otros
recursos naturales, con la contaminación del aire y del cambio climático…” “… La región se ve
afectada por el recalentamiento de la tierra y el cambio climático provocado principalmente
por el estilo de vida no sostenible de los países industrializados” (DA, 66).
Ante esta situación se plantea que “La mejor forma de respetar la naturaleza es promover una
ecología humana abierta a la trascendencia que respetando a la persona y la familia, los
ambientes y las ciudades, sigue la indicación paulina de recapitular todas las cosas en Cristo y
de alabar con Él al Padre (Cf. I Cor. 3, 21‐23). El Señor ha entregado el mundo para todos, para
los de las generaciones presentes y futuras. El destino universal de los bienes exige la
solidaridad con la generación presente y las futuras. Ya que los recursos son cada vez más
limitados, su uso debe estar regulado según el principio de justicia distributiva respetando el
desarrollo sostenible” (DA 125).
El problema del Medio Ambiente se inserta en la perspectiva del problema fundamental que
vive el hombre contemporáneo en los inicios del siglo XXI y del Tercer Milenio: la lucha entre
una cultura de la vida y una cultura de la muerte tal como lo expresa con claridad el Magisterio
de Juan Pablo II, especialmente a partir de su Encíclica “Evangelium Vitae” (1995), donde nos
habla del valor y del carácter inviolable de la vida.
En la Centesimus Annus, el Papa Juan Pablo II nos dice “Además de la destrucción irracional del
ambiente natural hay que recordar aquí la más grave aún del ambiente humano, al que, sin
embargo, se está lejos de prestar la necesaria atención. Mientras nos preocupamos
justamente, aunque mucho menos de lo necesario, de preservar los hábitat naturales de las
diversas especies animales amenazadas de extinción, porque nos damos cuenta de que cada
una de ellas aporta su propia contribución al equilibrio general de la tierra, nos esforzamos muy
poco por salvaguardar las condiciones morales de una auténtica ecología humana”(38).
8
V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe "Aparecida —2007"
11. 10
Cuando el Papa Juan Pablo II habla de “ecología humana” se refiere a una concepción ética
precisa, según la cual, el equilibrio del ecosistema, la defensa y la salubridad del ambiente,
exigen la responsabilidad del hombre en la utilización del conocimiento científico y de la
tecnología como instrumentos para curar las plagas del hambre, vencer las enfermedades,
proteger a la humanidad de los desastres naturales.
Finalmente es importante tomar en cuenta el mensaje de Su Santidad Benedicto XVI en la
celebración de la XLIII Jornada Mundial de la Paz, el 1 de enero de 2010, en donde el tema fue
“Si quieres promover la paz, protege la creación”. Señala, el Papa, la gran importancia que
tiene lo “creado”, puesto que “la creación es el comienzo y fundamento de todas las obras de
Dios” y su salvaguarda se ha hecho hoy esencial para la convivencia pacífica de la humanidad,
por lo que es indispensable que la humanidad renueve y refuerce «esa alianza entre ser
humano y medio ambiente que ha de ser reflejo del amor creador de Dios, del cual procedemos
y hacia el cual caminamos» (2). Para el papa “la crisis ecológica, brinda una oportunidad
histórica para elaborar una respuesta colectiva orientada a cambiar el modelo de desarrollo
global siguiendo una dirección más respetuosa con la creación y de un desarrollo humano
integral, inspirado en los valores propios de la caridad en la verdad. Por tanto, desearía que se
adoptara un modelo de desarrollo basado en el papel central del ser humano, en la promoción
y participación en el bien común, en la responsabilidad, en la toma de conciencia de la
necesidad de cambiar el estilo de vida y en la prudencia, virtud que indica lo que se ha de hacer
hoy, en previsión de lo que puede ocurrir mañana”(21).
En La Encíclica Caritas in Veritate, Benedicto XVI recuerda que “para salvaguardar la naturaleza
no basta intervenir con incentivos o desincentivos económicos, y ni siquiera basta con una
instrucción adecuada. Éstos son instrumentos importantes, pero el problema decisivo es la
capacidad moral global de la sociedad. Si no se respeta el derecho a la vida y a la muerte
natural, si se hace artificial la concepción, la gestación y el nacimiento del hombre, si se
sacrifican embriones humanos a la investigación, la conciencia común acaba perdiendo el
concepto de ecología humana y con ello de la ecología ambiental. Es una contradicción pedir a
las nuevas generaciones el respeto al ambiente natural, cuando la educación y las leyes no las
ayudan a respetarse a sí mismas. Los deberes que tenemos con el ambiente están relacionados
con los que tenemos con la persona considerada en sí misma y en su relación con los otros. No
12. 11
se pueden exigir unos y conculcar otros. Es una grave antinomia de la mentalidad y de la praxis
actual, que envilece a la persona, trastorna el ambiente y daña a la sociedad.”
Algunos principios de la Doctrina Social de la Iglesia sobre el cuidado de la creación:
• La revelación bíblica inspira los principios morales fundamentales del designio de Dios
sobre la relación entre el hombre y la creación.
• La naturaleza es expresión de un proyecto de amor y de verdad: nos precede, nos ha
sido dada como ámbito de vida, nos habla del Creador y de su amor a la humanidad.
• El respeto a lo que ha sido creado tiene gran importancia, puesto que la creación es el
comienzo y el fundamento de todas las obras de Dios.
• El mundo no es producto de una necesidad cualquiera, de un destino ciego o del azar;
procede de la voluntad libre de Dios que ha querido hacer participar a las criaturas de
su ser, de su sabiduría y de su bondad.
• El desarrollo humano integral está estrechamente relacionado con los deberes que
derivan de la relación del hombre con el entorno natural.
• Es indispensable que la humanidad renueve y refuerce esa alianza entre ser humano y
medio ambiente que ha de ser reflejo del amor creador de Dios, del cual procedemos y
hacia el cual caminamos.
• El medio ambiente es un don de Dios para todos. Su uso representa para nosotros una
responsabilidad para con los pobres, las generaciones futuras y toda la humanidad.
• El ambiente natural, obra del Creador, lleva en sí una gramática que indica la finalidad y
criterios para un uso inteligente de los bienes de la creación, no instrumental ni
arbitrario.
• El hombre interpreta y modela el ambiente natural mediante la cultura, la cual es
orientada a su vez por la libertad responsable, atenta a los dictámenes de la ley moral.
• La iglesia tiene una responsabilidad respecto a la creación y la debe hacer valer en
público. No sólo debe defender la tierra, el agua y el aire como dones de la creación que
pertenecen a todos; debe proteger sobre todo al hombre de la destrucción de sí
mismo.
Por lo tanto, las Diócesis de nuestra región se ven motivadas a hablar sobre la solidaridad con
los pobres y devolver la esperanza a los que la han perdido tal como lo señala el Tercer Sínodo
13. 12
Diocesano de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, celebrado desde su convocación el día
25 de enero de 1995, hasta su conclusión proclamada el día 3 de noviembre de 1999 “Cristo se
encarnó y asumió nuestra humanidad entera para construir el Reino de Dios. Así también
nosotros debemos manifestar nuestra solidaridad inculturizándonos, compartiendo más de
cerca los problemas de los pobres, apoyándolos y animándolos con los recursos a nuestro
alcance, sin hacer distinción de raza, lengua, religión u organización política. Este compromiso
nos exige analizar y atacar de raíz el sufrimiento, la pobreza y la marginación en que viven las
personas y comunidades de esta región” (239). Por eso, prosigue el documento, “como
Diócesis debemos ser solidarios de forma orgánica para poder estar informados y colaborar
con determinados ministerios donde la necesidad lo requiera (241). E invita a “visitar las zonas
más afectadas por conflictos y catástrofes, para ayudar y devolver la esperanza a los que han
perdido el ánimo” (242). Motivados a que la “solidaridad deberá tender a superar situaciones
de emergencia y a evitar en lo posible la dependencia del exterior” (244).
La Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, en el Plan Diocesano de Pastoral 2009‐2019, quiere ser
una Iglesia de discípulos y misioneros, atentos a las situaciones, acontecimientos y personas
para discernir lo que dice y pide Dios a través de ellos. El plan afirma que “los grandes cambios
de diferentes tipos (social, económico, político, cultural, religioso), que afectan las vidas en
este tiempo, nos interpelan y guiados por el Espíritu Santo estamos llamados a dar una
respuesta pastoral a partir del Evangelio” 9
. El Plan continua diciéndonos que “Creemos que la
creación, a la cual pertenecemos, es manifestación del amor providente de Dios; que nos ha
sido entregada, como administradores, para que la cuidemos y la trasformemos en fuente de
vida digna para todos. Pues la misma naturaleza es un lugar de encuentro con Dios. Por eso
estamos llamados, como discípulos y misioneros a contemplarla, cuidarla y utilizarla,
respetando siempre el orden que le dio el Creador. El destino universal de los bienes exige la
solidaridad con la generación presente y futura”10
. Por eso, motiva a la formación constante,
permanente, sistemática e integral para poder dar respuesta a los desafíos pastorales11
,
impulsa, en su línea pastoral número 612
, el tema del cuidado de la creación con su objetivo
estratégico: “Reconocer y agradecer el don de la creación, cuidándola, promoviéndola y
9
Cf. Plan Diocesano de Pastoral de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez 2009‐2019, Tuxtla Gutiérrez Chiapas
2009, p. 18.
10
Ibidem, p. 19.
11
Ibidem, p. 20.
12
Ibidem, p. 36.
14. 13
defendiéndola del deterioro progresivo para hacer uso adecuado de ella y alabar al Dios
Creador” y asume como línea de acción los siguientes puntos:
1.‐ Impulsar y fomentar una educación y espiritualidad ecológica
1.1 Elaborando catequesis que promuevan el cuidado del medio ambiente de manera
integral, progresiva y sistemática.
1.2 Realizando campañas de concientización sobre el deterioro ecológico.
1.3 Creando programas ambientales (reforestación, limpieza del ambiente).
1.4 Formando equipos de protección civil.
2. Promover un uso adecuado y consciente del medio ambiente
2.1. Impulsando proyectos para la utilización de productos orgánicos
2.2. Creando un organismo diocesano que coordine las actividades del cuidado del medio
ambiente
2.3. Aprovechando para este fin los medios de comunicación.
2.2 Visión
La visión de esta estrategia de sensibilización concibe a las comunidades de cada Diócesis de
México, con bajos niveles de vulnerabilidad y organizadas, que superan positivamente los
Impactos del Cambio Climático y crean comunidades en procesos de transformación social,
integral y sostenible, cuyas familias mejoran considerablemente sus condiciones de vida.
2.3 Principios y valores
La estrategia se desarrollará con algunos principios y valores los cuales serán aplicados durante
el proceso de la transformación social de las comunidades, parroquias, Arquidiócesis y Diócesis.
Bien común
Universalidad de los bienes de la creación
Dignidad Humana
Justicia Climática
Participación
Solidaridad
Subsidiaridad
Equidad
El uso inteligente de los bienes de la Creación
Respeto y cuidado por la Creación Divina
Reflexión Cristiana y Ética
Personas libres y corresponsables con el Creador
Convivencia con la naturaleza
15. 14
Reconciliación con la naturaleza
Celebración con la naturaleza
Desentrañar los signos y lenguajes de la naturaleza
Asentimiento a la Verdad de la Creación
Promoción de la Paz en la protección de la Creación.
3. Propuesta de acciones
Ante las situaciones de vulnerabilidad y amenazas que padecen las comunidades de la Diócesis
de San Cristóbal de Las Casas y de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez nos proponemos a
presentar algunas respuestas ante el tema del cambio climático y acciones que favorezcan la
transformación social, integral y sustentable, de las comunidades.
2.1. Objetivos de la estrategia
1. Disminuir el impacto del cambio climático en las comunidades y familias que las
Cáritas acompañan, así como a nivel general en el país, a través de procesos de
fortalecimiento de capacidades y una cultura de prevención en la Gestión Integral
del Riesgo, que permitan reducir la vulnerabilidad y mejorar las condiciones de vida,
creando bases sustentables para la transformación social.
2. Promover procesos alternativos de producción sostenibles, que permitan mejorar la
disponibilidad y acceso a alimentos para las familias, a través de procesos de
organización comunitaria activa y participativa.
3. Desarrollar una conciencia crítica ante el fenómeno del Cambio Climático que
genere procesos de Participación e Incidencia Política en cuanto al manejo de los
recursos naturales, protección del medio ambiente y políticas públicas relacionadas
a la disminución de gases del efecto invernadero.
3.2 Ejes estratégicos
Los ejes que se han definido para conformar esta estrategia son los siguientes:
1. Gestión Comunitaria del Riesgo
2. Formación y Sensibilización
3. Reconciliación y Cuidado de la Creación
16. 15
3.1 Seguridad y Soberanía Alimentaria
3.2 Economía Solidaria y Consumo Responsable
3.3 Conservación y uso sostenible de los Recursos Naturales
4. Participación e Incidencia Política
3.3 Estrategia de implementación
La implementación de la Estrategia de sensibilización estará vinculada directamente
con las iniciativas que se puedan establecer a nivel de cada Diócesis especialmente en
aspectos de:
Formación de sensibilización en las comunidades integradas al proyecto GRCC
Promover la sensibilización en otras parroquias de la Diócesis y/0 Arquidiócesis
Espacios de participación e incidencia política a nivel local y nacional
Coordinación interinstitucional con otros actores
Promover espacios de vinculación y coordinación interinstitucional y alianzas que
faciliten la integración de diversos sectores relevantes en el abordaje y tratamiento del
Cambio Climático
Formulación de acciones como respuesta ante el cambio climático
Sistematización de experiencias
Socialización y empoderamiento de la Estrategia de sensibilización por parte de las
comunidades y del personal diocesano y nacional
3.4 Seguimiento
El seguimiento de esta Estrategia de Sensibilización, en primera instancia se puede realizar
desde el referente de las Cáritas Diocesanas bajo la coordinación del director de la misma
Cáritas y de los referentes de Cáritas Nacional.
3.5 Formación y acciones de respuestas
La formación tanto del personal como de las comunidades sobre el tema del cambio climático
es esencial para el diseño y ejecución de procesos y proyectos, fortalecimiento de las
comunidades y el logro de los objetivos planteados. Aún más, se requiere una formación del
corazón para ser sensibles a las situaciones que viven las personas más vulnerables y solidarias
con ellas en la transformación social.
17. 16
Las acciones de respuesta son formas concretas para responder ante el cambio climático de
una manera proactiva, participativa, incluyente y sostenible.
3.5.1 San Cristóbal de Las Casas
Para la etapa de formación, Cáritas de San Cristóbal de Las Casas propone los siguientes
objetivos para sus comunidades.
a) Objetivos específicos
‐ Conocer y estar al tanto de los acontecimientos naturales, ambientales y sociales para
la transformación social en nuestra comunidad con un comportamiento consciente,
responsable y sostenible con el medio ambiente.
‐ Fomentar la información, sensibilización, participación y educación sobre el cambio
climático, sus causas, efectos y posibles soluciones (medidas de mitigación y
adaptación) como motor generador de cambio de hábitos y actitudes en las familias
participantes.
‐ Identificar y preparar acciones concretas e intervenciones específicas para la
prevención de riesgos.
‐ Mejorar y encontrar solución a los problemas ambientales y productivos que afectan
nuestra región y comunidad.
‐ Motivar y fortalecer la sostenibilidad con los recursos naturales y la autonomía
alimentaria mediante los saberes y tecnologías locales, contribuyendo a un proceso de
cultura de prevención de riesgos.
b) Estrategias de formación
‐ Facilitar los talleres en y con las comunidades del proyecto de la parroquia de
Chicomuselo.
‐ Desarrollo de los talleres y jornadas en San Cristóbal de Las Casas dirigidos a
representantes parroquiales y agentes de pastoral.
‐ Participación con perspectiva de género (hombres y mujeres) en los talleres y jornadas
de formación y sin preferencia étnica.
‐ Aprovechar los eventos diocesanos (asambleas, reuniones, encuentros) para dar a
conocer el plan de formación ambiental que impulsa Cáritas de San Cristóbal mediante
el proyecto “Gestión Comunitaria para la Reducción de Riesgos y Adaptación al Cambio
Climático”, así como para invitar o convocar a reuniones o jornadas dirigidos a
representantes parroquiales y/o a agentes de pastoral.
‐ Invitar a asesores/as que conocen y manejan los temas ambientales.
‐ Diseñar y elaborar material gráfico de sensibilización y didáctico.
‐ Diseñar, reproducir y distribuir material con contenido sobre cambio climático.
18. 17
c) Metas
‐ 8 talleres comunitarios de sensibilización para la elaboración de planes de respuesta al
cambio climático.
‐ 8 reuniones‐taller con representantes comunitarios para definición de planes.
‐ 2 jornadas de formación con representantes parroquiales para la gestión de riesgo.
‐ 1 encuentro de representantes parroquiales de la diócesis para definir acciones de
mitigación.
‐ 3 talleres de formación ambiental.
d) Temas de formación
a. Contenido temático de las Jornadas de Formación Ambiental Comunitaria
I. La Vulnerabilidad y las Capacidades Organizativas Comunitarias
II. Los fenómenos naturales y nuestras capacidades de prevención
III. Manejo responsable del recurso forestal con sentido sostenible como una
respuesta al cambio climático
IV. Conservación campesina del maíz criollo en el contexto de autonomía alimentaria
V. Construyendo nuestro Plan Local de Gestión de Riesgos
VI. Nuestra Respuesta como comunidad
b. Contenido temático de Jornadas de Formación Ambiental a Representantes Parroquiales
I. Los Acontecimientos Naturales, Ambientales y Sociales que afectan nuestra región
y comunidad
II. El Cambio Climático, sus causas, efectos y posibles soluciones
III. La Sostenibilidad y La Autonomía Alimentaria mediante los Saberes y Tecnologías
Locales
c. Contenido temático de Jornadas de Formación Ambiental a Agentes de Pastoral
Diocesana
I. El Cambio Climático
II. Plan de acción diocesano
e) Acciones de respuestas
Viveros de árboles para la reforestación
Como acciones de respuesta al cambio climático se dará proceso a la reforestación en los
espacios despoblados, acordando con las mismas comunidades según la técnica a seguir,
recolectar semillas y plántulas nativas de árboles para evitar problemas de adaptación de
especies de árboles de otras regiones. Para tal efecto, por parte del proyecto GRCC se
19. 18
entregará a las familias bolsas de polietileno para establecer almácigos locales a fin de poder
atender la germinación y desarrollo de las plantas en tanto llega la próxima temporada de
lluvias para su trasplantación. Para su seguimiento se atenderá con sistema de agua entubada
para el riego de los almácigos, captando agua en tinacos de plástico de 2500 litros y 100 metros
de manguera de 0.5 pulgadas.
f) Creación de redes locales
Para la implementación de las redes locales se invitarán a otras comunidades a participar en la
formación de tal manera que se socialice el contenido de la misma; apoyarnos con algunas
instituciones para la impartición de los temas y en el proceso de trabajo en conjunto.
3.5.2 Tuxtla Gutiérrez
Para la etapa de formación, Cáritas de Tuxtla Gutiérrez propone los siguientes objetivos para
sus comunidades.
a) Objetivos específicos
‐ Compartir y elaborar conocimientos teóricos y herramientas prácticas para incorporar
la reducción del riesgo de desastres y la adaptación como parte integral de los
procesos de desarrollo local.
‐ Fortalecer los conocimientos de los participantes en cambio climáticos y reducción de
riesgos por desastres naturales.
‐ Promover el intercambio de experiencias y la identificación de buenas prácticas.
b) Estrategia de formación
‐ Se capacitaran a 2 representantes de cada comunidad quienes replicarán lo aprendido y
se realizarán reuniones en cada comunidad involucrada en el proyecto.
c) Meta
‐ Se darán talleres de formación a nivel comunitario, parroquial, y tres talleres
diocesanos.
d) Temas de formación
Contenido temático de las jornadas de formación a nivel comunitario
Tema 1.‐ Guía de trabajo para la elaboración de los mapas de riesgos comunales.
Tema 2.‐ EDAN (Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades).
Tema 3.‐ El suelo.
Tema 4.‐ El bosque.
Tema 5.‐ El agua.
Tema 6.‐ Control y manejo de la basura.
20. 19
Tema 7.‐ Bolsas de plásticos.
Tema 8.‐ Vivir en riesgo, dormir seguro (Video).
Tema 9.‐ El llamado de la tierra (Video).
Tema 10.‐ Calentamiento Global (video).
Tema 11.‐ Presentación en Power Point de Cambio climático.
Tema 12.‐ Elaboración de plan local de emergencia comunitario.
Tema 13.‐ Que hacer en caso de lluvias
Tema 14.‐ Catequesis del medio ambiente.
Tema 15.‐ Manejo integrado de plagas.
Tema 16.‐ Crisis climática.
Tema 17.‐ Fenómenos naturales (Movimientos de terrenos, erosión de suelos, huracán,
incendios, inundaciones, sismos, peligro volcánico).
Contenido temático de las jornadas de formación a nivel parroquial
Tema 1.‐ Guía de trabajo para la elaboración de los mapas de riesgos comunales.
Tema 2.‐ Ante la emergencia solidaridad. Guía metodológica de apoyo.
Tema 3.‐ Funciones generales de protección civil.
Tema 4.‐ Cambio climático.
Tema 5.‐ Fenómenos naturales (Movimientos de terrenos, erosión de suelos, huracán,
incendios, inundaciones, sismos, peligro volcánico).
Tema 6.‐ Modelo Autogestivo solidario, como respuesta a la gestión del riesgo y cambio
climático.
Tema 7.‐ Herramientas locales para la reducción de riesgos de desastres
Tema 8.‐ Catequesis del medio ambiente.
Tema 9.‐ Plan Diocesano de Pastoral 2010‐2019 Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez.
Contenido temático de las jornadas de formación a nivel diocesano
Tema 1.‐ Guía de trabajo para la elaboración de los mapas de riesgos comunales.
Tema 2.‐ Ante la emergencia solidaridad. Guía metodológica de apoyo.
Tema 3.‐ Funciones generales de protección civil.
Tema 4.‐ Fenómenos perturbadores (Socio‐organizativos, geológicos, hidrometeoro lógicos,
químico‐tecnológicos, sanitarios‐ecológicos.
Tema 5.‐ SIAT (Sistema de Alerta Temprana).
Tema 6.‐ Uso de tecnologías en el sistema de alertamiento
Tema 7.‐ Manejo integral de riesgos de desastres (Ciclo de los desastres)
Tema 8.‐ Herramientas locales para la reducción de riesgos de desastres
Tema 9.‐ Modelo Autogestivo solidario, como respuesta a la gestión del riesgo y cambio
climático.
Tema 10.‐ Cambio climático y emergencia.
Tema 11.‐ Instituto de protección civil para el manejo integral de riesgos de desastres.
Tema 12.‐ Plan estatal de desarrollo Chiapas solidario 2007‐2012.
Tema 13.‐ Objetivos del desarrollo del milenio (la protección civil como eje transversal.
Tema 14.‐ Taller para diseñar estrategia para construir la paz
21. 20
Tema 15.‐ Nuestra experiencia informe contingencia Tabasco 2007 (Caritas de Tabasco,
México)
Tema 16.‐ Catequesis del medio ambiente. (En la semana social).
Tema 17.‐ Plan Diocesano de Pastoral 2010‐2019 Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez.
e) Acciones de respuestas
Construcción de estanques
Se construirán 2 estanques piscícolas para la cría y engorda de peces, con la finalidad de
mejorar la dieta alimenticia en las comunidades más vulnerables por los fenómenos naturales,
uno en la comunidad de Río Negro de la parroquia del Señor del Calvario, municipio de
Montecristo de Guerrero y el otro estanque en la comunidad de San Miguel de la parroquia de
Nuestra Señora de la Candelaria. Esta actividad ayudará a buscar alternativas de alimentación
para las comunidades debido a las carencias de alimentos por consecuencia del cambio
climático. Se motivará a la Secretaría de Pesca del Estado de Chiapas a donar 2, 000 crías de la
especie tilapia como inicio de este proceso.
Reforestación en zonas degradadas
Para contrarrestar el efecto del cambio climático con el proyecto plan zonal de vulnerabilidad
ambiental, se reforestó con 60,000 arbolitos de pinos en cuencas de los ríos y áreas
degradadas en las comunidades de Toluca y Rio Negro. Estas comunidades seguirán dando
seguimiento en el cuidado de los mismos.
Reforestación de árboles frutales
Se reforestarán los solares o traspatios de las familias beneficiadas por el proyecto con plantas
frutales tales como aguate jass, limón persa, mandarina, durazno, pera y manzana, las cuales
contribuirán a mejorar la dieta alimenticia de las familias. Para lograr la siembra se impartirán
asesorías y técnicas de cultivo, utilizando abonos orgánicos.
Siembra de hortalizas
Se sembrarán hortalizas (rábano, cilantro, acelga, ejote, cebolla blanca, calabacitas) en las
comunidades de Toluca, Río Negro, Nuevo Río Negro y El Caracol. Las siembras se realizarán en
los traspatios de las familias participantes en el proyecto. Esta actividad ayudará a buscar
alternativas de alimentación para las comunidades debido a las carencias de alimentos por
consecuencia del cambio climático.
Otras actividades comunitarias
El saneamiento ambiental tiene como objetivo alcanzar niveles crecientes de salubridad
ambiental, comprende el manejo sanitario del agua potable el comportamiento higiénico que
22. 21
reduce los riesgos para la salud y previene la contaminación. Tiene por finalidad la promoción y
el mejoramiento de condiciones de vida urbana y rural.
Es por ello que las comunidades del proyecto GRCC se organizarán para realizar la limpieza de
su comunidad, recogiendo toda la basura inorgánica (bolsas de plásticos, botellas de plásticos
etc.) una vez al mes. Esta actividad se realizará en coordinación con el programa oportunidades
de la secretaria de salud.
f) Creación de Redes Locales
Para la implementación de las redes locales se invitarán a otras comunidades a participar en la
formación de tal manera que se socialice el contenido de la misma; apoyarnos con algunas
instituciones para la impartición de los temas y en el proceso de trabajo en conjunto.
Consideraciones finales
Con mucha esperanza ofrecemos esta estrategia de sensibilización, conscientes de que la
Iglesia de México, como pueblo de Dios en su infinita sabiduría, se da cuenta que la Tierra está
sufriendo, que la Creación de Dios está siendo maltratada por el mismo hombre y que necesita
dar una respuesta solidaria y responsable a nivel comunitario.
Todas las informaciones fueron recabadas y analizadas por los referentes del proyecto de la
Cáritas de San Cristóbal de Las Casas, Cáritas de Tuxtla Gutiérrez y Cáritas Mexicana. El material
que ofrecemos ha sido diseñado para ponerla en marcha en las comunidades y parroquias de la
Arquidiócesis y Diócesis bajo el proyecto de Gestión Comunitaria para la reducción del riesgo de
desastres y respuesta ante el cambio climático. Sin embargo, es importante mencionar la
posibilidad de socializarla con las comunidades que la necesiten y se amplíe con nuevas
experiencias.
No podemos dejar de mencionar que al utilizar la metodología de ver, juzgar y actuar
contemplamos también el aspecto de evaluar y celebrar. Por tal motivo, llevar esta estrategia a
las comunidades vulnerables y amenazadas ante el cambio climático, con un fin integral y
sustentable, es bueno recabar la evaluación final del proyecto y agradecer a Quien hizo todas
las cosas y a Quien por tal motivo fueron creadas (Col 1,16) y las recapitula en sí (Ef 1,10) a través
de la práctica de Acción de Gracias (1 Ts 5,18‐19) motivados por el Espíritu de Dios.
Concluimos con las palabras de Monseñor Gustavo Rodríguez Vega, Presidente de CEPS‐Cáritas
Mexicana: “Háganlo y serán recordados no sólo por el mundo actual, sino también por
nuestros hijos y por los hijos de nuestros hijos, como los hacedores de políticas que con
23. 22
responsabilidad encararon uno de los mayores desafíos que la humanidad ha enfrentado,
evitando la mayor tragedia para la Tierra y los seres humanos que la habitamos”13
.
13
Comunidad parroquial. Animadora del cuidado de la creación. CEPS‐Cáritas Mexicana, México D.F., 2011,
p. 131. Discurso de Monseñor Gustavo Rodríguez Vega, Presidente de CEPS‐Cáritas Mexicana en la COP16,
Cancún, México, 10 de diciembre de 2010.