Tipos y causas de la violencia contra la mujer según la ONU
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3. Las Naciones Unidas definen la violencia contra la mujer
como "todo acto de violencia de género que resulte, o
pueda tener como resultado un daño físico, sexual o
psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales
actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad,
tanto si se producen en la vida pública como en la
privada".
5. La violencia contra la mujer -especialmente la ejercida
por su pareja y la violencia sexual- constituye un grave
problema de salud pública y una violación de los
derechos humanos de las mujeres.
Las cifras recientes de la prevalencia mundial indican que
el 35% de las mujeres del mundo han sufrido violencia de
pareja o violencia sexual por terceros en algún momento
de su vida.
Por término medio, el 30% de las mujeres que han tenido
una relación de pareja refieren haber sufrido alguna
forma de violencia física o sexual por parte de su pareja.
6. Un 38% de los asesinatos de mujeres que se producen
en el mundo son cometidos por su pareja.
Estas formas de violencia pueden dar lugar a
problemas de salud física, mental, sexual y
reproductiva y otros problemas de salud, y aumentar
la vulnerabilidad al VIH.
Entre los factores de riesgo de comisión de actos
violentos cabe citar un bajo nivel de instrucción, el
hecho de haber sufrido maltrato infantil o haber
presenciado escenas de violencia en la familia, el
uso nocivo del alcohol, actitudes de aceptación de
la violencia y las desigualdades de género.
7. Entre los factores de riesgo de ser víctima de la
pareja o de violencia sexual figuran un bajo nivel de
instrucción, el hecho de haber presenciado escenas
de violencia entre los progenitores, la exposición a
maltrato durante la infancia, y actitudes de
aceptación de la violencia y las desigualdades de
género.
En entornos de ingresos altos, hay ciertos indicios de
la eficacia de los programas escolares de
prevención de la violencia de pareja (o violencia en
el noviazgo) entre los jóvenes.
8. En los entornos de ingresos bajos, aparecen como
prometedoras otras estrategias de prevención primaria,
como la micro financiación unida a la formación en
igualdad de género y las iniciativas comunitarias dirigidas
contra la desigualdad de género o tendentes a mejorar
la comunicación y las aptitudes para las relaciones
interpersonales.
Las situaciones de conflicto, posconflicto y
desplazamiento pueden agravar la violencia y dar lugar
a nuevas formas de violencia contra las mujeres.
10. Causa daño visible o no en la mujer, hace uso de la
fuerza física, o de algún objeto o arma. Siendo la
mas evidente por las manifestaciones físicas.
Manifestaciones:
Empujar o aventar.
Escupir.
Jalar el cabello, despeinar.
Golpear con manos, codos o cabeza, abofetear.
Patear.
Lanzar objetos a la persona con el fin de herirla.
Usar objetos o armas de fuego y punzo-cortantes
para golpear o agredir.
Tratar de ahorcar o asfixiar, etc.
11. Daña la estabilidad psicológica o emocional de la
mujer. siendo muy peligrosa ya que no se percibe a
simple vista.
Manifestaciones:
Amenazas verbales, insultos, ofensas, gestos, gritos,
humillaciones, etc.
Desprecio, indiferencia y falta de atención.
Negligencia y/o abandono.
Acoso y hostigamiento.
Comparaciones destructivas y/o difamación.
Rechazo, discriminación por género.
Privación de la libertad o privacidad.
Enojo por incumplimiento de tareas consideradas
propias de la mujer, etc.
12. Incluye los actos que se ejercen directamente sobre
el cuerpo y la sexualidad de la mujer. Contiene en
ella violencia física y psicológica.
Manifestaciones:
Presión para tener relaciones sexuales no deseadas.
No usar ni permitir el uso de preservativos aún
cuando ella lo pida.
Contagiarla con Infecciones de Transmisión Sexual
(ITS).
Obligarla a realizar o recibir tocamientos sexuales no
deseados.
Durante el acto sexual obligar a la mujer a prácticas
no pedidas ni deseadas.
Obligarla a prostituirse o a tener relaciones sexuales
con otras personas.
Violación sexual, etc.
13. Acto que se ejerce contra el ingreso económica y/o
pertenencias de la víctima.
Manifestaciones:
Amenazas verbales que atenten contra el bienestar
económico de la familia.
El hombre controla el dinero y toma las decisiones
económicas.
Obligar a la mujer a trabajar para aportar a la
economía familiar.
Privación o destrucción de los vienes personales y
materiales pertenecientes a la mujer.
Negar el derecho de la mujer a trabajar para aportar
a la economía familiar, etc.
Que el hombre disponga de dinero o las
pertenencias de la mujer sin su consentimiento u
obligándola.
14. Toda acción u omisión que limitan el derecho de la mujer
a decidir libre y voluntariamente sobre su función
reproductiva con respecto al numero y espaciamiento
de los hijos, acceso a métodos anticonceptivos, etc.
15. Son todas las acciones u omisiones que
constituyen la violencia extrema de
violencia contra las mujeres producto de la
violación de sus derechos humanos, y que
puede culminar en el homicidio u otra
forma de muerte violenta de mujeres. Este
tipo de violencia es la mas extrema y brutal
y dentro de esta están contenida la
violencia psicológica, física y sexual.
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17. En términos generales, la violencia contra la mujer por
parte de su cónyuge está sustentada en el mito de la
inferioridad del sexo femenino, a su situación de
desigualdad en la sociedad, a la dependencia
económica, al temor por la vida de sus hijos y la propia.
También, al desconocimiento de sus derechos ante la ley,
a la falta de confianza de la mujer en sí misma, a la falta
de educación y a las presiones sociales, lo que conduce
a la inoperancia de los mecanismos de protección de los
organismos del Estado.
18. Atestiguar o experimentar abuso desde la
infancia (lo que está a asociado a que en el
futuro los niños sean perpetradores de
violencia mientras las niñas experimenten
violencia contra ellas);
Abuso de sustancias (incluyendo alcohol),
asociado a una mayor incidencia de la
violencia;
Pertenencia de las mujeres a grupos
marginados o excluidos.
19. Limitadas oportunidades económicas (factor
agravante para la existencia hombres
desempleados o subempleados, asociado
con la perpetuación de la violencia; y es un
factor de riesgo para mujeres y niñas, de
abuso doméstico, matrimonios forzados,
matrimonios precoces, la explotación sexual
y trata).
La presencia de disparidades económicas,
educativas y laborales entre hombres y
mujeres al interior de una relación íntima
Conflicto y tensión dentro de una relación
íntima de pareja o de matrimonio
20. El acceso inseguro de las mujeres al control
de derechos de propiedad y de tierras.
Control masculino en la toma de decisiones
y respecto a los bienes.
Actitudes y prácticas que refuerzan la
subordinación femenina y toleran la
violencia masculina ( por ejemplo, la dote,
pagos por la novia, matrimonio precoz).
Falta de espacios para mujeres y niñas,
espacios físicos o virtuales de encuentro que
permitan su libre expresión y comunicación;
un lugar para desarrollar amistades y redes
sociales, vincularse a asesores y buscar
consejos en un ambiente de apoyo.
21. Uso generalizado de la violencia dentro de
la familia o la sociedad para enfrentar los
conflictos;
Un limitado marco legislativo y de políticas
para prevenir y hacer frente ante la
violencia;
Falta de sanción (impunidad) para
perpetradores de la violencia; y ,
Bajos niveles de concientización por parte
de los proveedores de servicios, así como
de los actores judiciales y los encargados
de hacer cumplir la ley.
22. Mito: Ha ocurrido sólo una vez, no ocurrirá más.
Realidad: La violencia doméstica no es un incidente aislado.
Normalmente forma parte de un patrón de violencia que irá
en aumento.
Mito: Sólo cierto tipo de hombres abusan de sus parejas.
Realidad: No existe un tipo de abusador. La edad,
constitución, raza, religión o forma de ser no son factores
determinantes.
Mito: Los hombres que maltratan son enfermos mentales.
Realidad: No existe relación causa-efecto entre la
enfermedad mental y violencia doméstica. La violencia está
motivada por un deseo de controlar y mantener el poder
sobre la mujer.
Mito: Los hombres que asaltan o abusan de sus parejas son
violentos por naturaleza.
Realidad: La mayoría de los hombres que abusan de sus
parejas no se muestran violentos fuera del hogar.
23. Mito: La violencia domestica está provocada por el alcohol.
Realidad: Un gran número de hombres violentos atacan
cuando están sobrios. El alcohol es una excusa más que usan
los hombres violentos para justificar sus acciones y no hacerse
responsables de ellas.
Mito: Si hubiera sido tan violento, ella lo habría denunciado
antes.
Realidad: El 46% de las mujeres no denuncian la violencia que
sufren por miedo a represalias, y una gran mayoría porque
piensan que no van a ser creídas o tomadas en serio, o no
saben salir de la situación dado su estado emocional.
Mito: Los hombres también son agredidos por sus parejas.
Realidad: Los archivos policiales muestran que el 99% de la
violencia en la pareja la realiza el hombre hacia la mujer.
Mito. Cuando una mujer dice no, en realidad quiere decir sí.
Realidad. Muchos hombres creen que las mujeres dicen no
cuando desearían decir que sí. Pero un hombre nunca tiene
derecho a ir en contra de los deseos de la mujer o de
mantener relaciones sexuales sin su consentimiento. Cuando
una mujer dice no, simplemente significa eso.
24. Mito: La violación ocurre a manos de extraños.
Realidad: El 83% de las mujeres son violadas por alguien a quien conocen y
en quien confían. El 20% son amigos/novios y el 33% esposos. El resto son
conocidos.
Mito: Los hombres que maltratan han sido maltratados en la infancia.
Realidad: No existe evidencia alguna de que exista un ciclo de abuso. La
mayoría de hombres y mujeres abusados en la infancia no optan por abusar
en la edad adulta. Es más, si fuera así habría un mayor número de
maltratadoras.
Mito: Una vez que un hombre está excitado, no puede hacer nada por
controlar su necesidad sexual.
Realidad: No hay excusa para justificar la violación.
Mito: La mujer estaba borracha/drogada/tenía mala reputación/ vestía
provocativa/le sedujo. Él le dio lo que estaba pidiendo.
Realidad: Estos hombres intentan desacreditar a la mujer a la que violan
para justificar su delito. Ninguna mujer pide o se merece que la violen o
agredan sexualmente.