El documento describe las características distintivas de los seres vivos según Tomás de Aquino y Aristóteles. Los seres humanos se diferencian de otros seres vivos por su razón, voluntad e inteligencia, pero comparten con ellos la posesión de vida y la capacidad de realizar funciones vitales. Según Tomás de Aquino y Aristóteles, los seres vivos se caracterizan por la automoción, la unidad, la organicidad, la inmanencia, la autorrealización y el movimiento cíclico y armónico.