El arte abstracto surgió a comienzos del siglo XX como una reacción contra las creencias tradicionales que habían sido cuestionadas. Se desarrolló en Europa entre las dos guerras mundiales, impulsado inicialmente por artistas que buscaban nuevas formas de expresión alejadas de lo figurativo. París se convirtió en el principal centro de este movimiento en la posguerra, aunque tuvo detractores. El arte abstracto abarcó diferentes corrientes como la geométrica y la antigeométrica y se extendió a nivel internacional
2. De 1912-1920
A comienzos del siglo XX, un número de creencias aceptadas habían
sufrido ataques procedentes de una variedad de fuentes. Charles Darwin
había reivindicado un origen de las especies natural en lugar de divino;
Friedrich Nietzsche había rechazado la moral cristiana a favor de una
doctrina de la voluntad; y Karl Marx había declarado que la religión era el
opio del pueblo. En 1900 Sigmund Freud publicó la interpretación de los
sueños.
En lo social, la rápida industrialización y el crecimiento del capitalismo
sirvieron para realzar las discrepancias entre la clase trabajadora y la
acaudalada, y condujeron al surgimiento del socialismo en Europa. En
Rusia, donde la grieta fue más extrema, a la sublevación de 1905 siguió en
1917 la decisiva revolución del proletariado. A medida que los apoyos
exteriores comenzaron a colapsarse, y Europa se dividió contra sí misma en
la Gran Guerra de 1914-1918, artistas tan dispares como Vasili
Kandisnky, se volvieron hacia una abstracción que confiaba menos en las
formas del mundo incierto y cambiante, y más en los valores universales,
basados en las doctrinas filosóficas o místicas.
3. De 1920-1939
A pesar de su devastador y masivo número de víctimas, la primera
guerra mundial abrió paso a un período de cambio político y cultural. Por
una parte, ayudó a acelerar los desarrollos revolucionarios en Europa y, por
la otra, a alimentar los movimiento de vanguardia nacidos en el período de
preguerra. Como resultado de las hostilidades nacionales de 1914-1918,
durante la década de 1920 los artistas abstractos comenzaron a buscar
colaboración internacional.
Con al llegada de nuevos medios de comunicación como la radio, el
gramófono y el cine, en ese momento se podía alcanzar un público mucho más
amplio e influir con el espíritu nuevo que impregnaba todas las esferas de la
vida. Si para algunos la sensación de cambio socavaba en el antiguo orden y,
por lo tanto, parecía amenazador, para otros representaba desafiantes
posibilidades en las cuales nuevos conceptos de hombre y sociedad podían
unirse a nuevas técnicas artísticas. A los ojos de quienes lo practicaban, el
arte abstracto inequívocamente tiene que ver con el progreso y el cambio.
4. De 1939 a 1956
Para 1939 la abstracción se había establecido como una tradición
alternativa en pintura y escultura, pero no había conseguido llegar a un público
amplio. En las décadas después de la segunda guerra mundial, emepero, surgió
un modelo diferente.
A pesar de las convulsiones de la segunda guerra mundial y la
ocupación, París continuó siendo un centro principal para el arte europeo de la
posguerra. No obstante, el restablecimiento de la pintura abstracta en París
tuvo lugar ante la indiferencia y la hostilidad oficiales; todavía en 1951 los
artistas abstractos nativos de Francia tenían que rellenar una solicitud al
gobierno francés, para solicitar el derecho a estar representados en una
exposición de arte francés en el extranjero. A pesar de tales dificultades, una
amplia variedad de artistas abstractos floreció en París, apoyados entonces
por un pequeño grupo de críticos y dueños de galerías que escribieron artículos
y libros u organizaron exposiciones en apoyo de los particulares tendencias de
las que ellos eran partidarios. Esto difería de la situación de preguerra, donde
el impulso había procedido de los propios artistas, y condujo inevitablemente a
la agrupación de diferentes artistas.
5. Ha sido llamado también arte informal, siendo esta segunda
denominación la que más se aviene , pues esta corriente prescindió de todas
las formas naturales y tradicionales de expresión, al igual dio importancia
al color y a las diversas materias que se usaron.
Contra el surrealismo, el arte abstracto no tiene forma espontánea en
la ejecución, aunque a veces no la excluye, y una pintura abstracta puede ser
utilizada casi como un experimento científico; en cambio, puede haber una
libertad absoluta sin atenerse a ningún comedimiento.
Después de tanta anarquía y de haber abierto las puertas a toda
libertad se comprende fácilmente cómo tuvo que aparecer el llamado arte
abstracto, aunque tiene un fondo político que es la protesta contra la
segunda guerra mundial.
El padre del arte abstracto fue Kandinsky.
6. El arte abstracto nació hacia el año 1910; Esta
corriente artística atravesó una adolescencia exenta de
acontecimientos en cuanto a la resonancia pública que
tuvo, y más adelante, a mediados de los años cuarenta,
celebró un triunfo postrevolucionario tardío. Partiendo de
su cuartel general, París, donde había sido importado por
emigrados holandeses, rusos y alemanes, la abstracción
conquistó no sólo Europa, sino también todo el mundo
Occidental. Durante veinte años reinó de forma
indiscutible.
El internacionalismo innato del arte abstracto,
ignorando todas las fronteras para atravesar océanos
y continentes, parecía justificar por aquel tiempo el
concepto de arte mundial. Sin embargo, desde la
perspectiva actual, se puede considerar que la
abstracción abarcó una gama enorme de signos y
símbolos que reflejaron un mundo cambiante.
En 1929 se organizó en París la primera
exposición global de las obras de Kandinsky, que
fue seguida un año más tarde por la primera
exposición internacional de arte abstracto. Con ello,
se puso en marcha oficialmente la difusión sobre los
objetivos de la nueva pintura en la capital mundial
del arte de la primera mitad del siglo XX.
7. Se formó un grupo llamado
Abstraction-création, que puso la base para
la abstracción internacional de la École De
Paris. Los acontecimientos se aceleraron
con el traslado a París de los hermanos
escultores rusos Pevsner y Gabo, con la
huída de Kandisky de la Alemania nazi y
también con la actividad de Mondrian, la
presencia de Arp y varios surrealistas y,
finalmente, por la penetración de las ideas
constructivistas rusas y de la Bauhaus.
La fascinación por estas
ideas fue muy poderosa. “Liberación” fue la
palabra clave, como para los revolucionarios
del años 1910. El color y la forma tuvieron
por fin plena autonomía como valores por sí
“Midi” mismos; la pureza de medios se convirtió en
Auguste Herbin. un axioma.
8. En Francia, comenzó a circular la noción de “nouvelles realités”. Los
artistas comprendieron que lo que no se ve puede ser real. Era la física la
que abría los ojos de los artistas a la compleja estructura del tema y su
naturaleza ambivalente. Las verdades eternas se relativizaron, y las dos
guerras mundiales tuvieron su papel en la destrucción, para siempre, de la
confianza ingenua en los valores tradicionales e inmutables.
Según los representantes de “las nuevas realidades”, la pintura
convencional y realista sólo representaba la apariencia y la superficie de las
cosas, no su esencia o núcleo. Desde este descubrimiento negativo llegaron
a la conclusión positiva de que debía ser posible inventar un mundo, un
mundo pictórico que, por una parte, fuera más verdadera que la apariencia
ilusoria y, por otra, no se encontrara tan lejos de la realidad como la
abstracción geométrica.
9. Este mundo de imágenes se basaría en la
misma medida en la expresión visual y
mental del artista, que, libremente traducida
y con independencia de los colores y formas
naturales se manifestaría como pintura
sobre la tela como la propia creación del
artista, una nueva realidad. Éste ya no
reproduciría una impresión inmediata, sino el
eco o resonancia que ésta provocaba en su
mente. .
Así, el alejamiento del arte de la
realidad, su huída hacia la utopía, se
invirtió por lo menos parcialmente, ya que no
se pretendía una crítica de las condiciones
contemporáneas. Los horrores de la
segunda guerra mundial y sus
consecuencias, creían los artistas, eran
sencillamente demasiado monstruosas para
permitir una representación directa del arte.
10. En el arte abstracto puede encontrarse una división de
representaciones. Estas dos partes son la “geométrica” y la
“antigeométrica” .
El arte abstracto geométrico fue la expresión de una
revuelta de la racionalidad europea contra la emoción
descontrolada, de la fría objetividad contra la sentimentalidad
artificial, del orden contra la anarquía. La forma perfecta que
buscaban perecía representar lo que siempre existe. Ante el
telón de fondo de la irracionalidad desenfrenada que condujo a la
segunda catástrofe mundial, esta actitud tuvo seguramente un
significado histórico.
Sin embargo, lo que los geométricos del arte moderno
acabaron por diseñar fue el plan de construcción de un mundo
abstracto-utópico sin una conexión directa con la naturaleza o
con la realidad social de la época. La alternativa naturaleza o
abstracción era demasiado dogmática y absoluta para ser viable.
Los artistas recordaron que el arte, realista o no, nunca podía
ser pura representación, que su objetivo y esencia no era la cita,
sino la transformación y el diseño formal.
11. En cuando al arte abstracto
“antigeométrico” puede decirse que éste
fue muy importante después de la segunda
guerra mundial, y con el tiempo fue
generando a distintas corrientes como al
tachismo, al art informel o al art autre.
Esta corriente tiene su punto de
partida en el expresionismo y se
considera al arte como una manifestación
del espíritu, siendo su iniciador Paul
Klee, que pretendía representar sin arte
figurativo los impulsos espirituales,
teniendo por ello un fondo simbólico por
lo que se ha dicho que sus pinturas son
grafismos del espíritu.
12. “Golpes en azul”
Hans Hartung
En esta obra, puede notarse
cómo a través de violentas
pinceladas el autor expresa
sentimientos de frustración o
inquietud.
Igualmente, el fondo azul marino
nos indica cierto ánimo. Todo en
conjunto puede traducirse a algún
momento existencial por el que
cruzó el artista. También se puede
inferir que el color oscuro de las
pinceladas apoyan lo antes dicho.
13. Bibliografía:
Ruhrberg Karl, et.al, Arte del siglo XX, Barcelona, Taschen,
2000, 840p.p.
Moszynska, Anna, El arte abstracto, Barcelona, Destino,
1996, 239 p.p.
Lozano Fuentes, José , Historia del arte, México, Patria,
2009, 611 p.p.