Concepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptx
Materia De Lectura 1
1. DIPLOMADO EN ESCRITURA CREATIVA
CONSIDERACIONES INICIALES SOBRE EL TRABAJO A REALIZAR
1. Olvidemos que somos docentes y/o que tenemos conceptos y conocimientos al respecto.
Procuremos ser como una hoja en blanco.
2. En lo posible, en cada taller, se alternarán textos propios y textos complementarios de
autores conocidos.
3. Los talleres que se realizarán tendrán fundamentalmente un carácter creativo. No se
trata de discursos pedagógicos sobre el proceso de escritura.
4. Es conveniente que dejemos a un lado los prejuicios propios, cualquier persona puede
escribir, este oficio no es exclusivo de poetas, cuentistas, ensayistas.....
5. Una vez empecemos a escribir, debemos hacerlo de manera creativa y recreativa, es
necesario dejar aflorar todo aquello que podamos expresar.
6. Cada vez que se haga un ejercicio de creación, es vital asumirlo con disciplina y
dedicarle el tiempo establecido para ello. Si han escrito antes, y quieren compartir su
trabajo y su experiencia...bienvenido el aporte.
7. Un poema, un cuento....es algo así como un hijo, uno siempre quiere que sea mejor, y
aunque tenga defectos uno debe sentirse orgulloso de él, y así como presentamos un
hijo, debemos presentar y compartir nuestras creaciones.
8. Escribir implica leer; los ejercicios de lectura deben hacerse a conciencia. Un
diccionario nunca sobra.
9. La idea es que al finalizar los talleres cada uno tenga su trabajo corregido, recopilado,
encuadernado y listo para compartir.
Luis Horacio Ortiz Olarte luishoracioortizolarte@hotmail.com
2. DIPLOMADO EN ESCRITURA CREATIVA
10. La actitud es fundamental para el éxito del trabajo y el aprendizaje, es necesario que
haya disponibilidad, alegría, una mente abierta y, sobre todo, ganas de hacer las cosas
bien.
PREGUNTAS PARA EMPEZAR.....
1. ¿Qué espera usted de un diplomado sobre escritura creativa?
2. ¿Que importancia le da al oficio de escribir?
3. ¿Que ha escrito usted y por qué lo ha escrito?
BASTARÁ CON DECIR…
Bastará con decir que soy Horacio Ortiz;
que heredé de mi padre, su probidad
y el nombre de mi abuelo; de mi madre,
su bondad y sus palabras sabias.
Bastará con decir que conozco la biblia,
aunque no creo en Dios… ¡Y menos en el diablo!;
que creo en la sonrisa de la gente,
en el verde del paisaje y en el canto de la lluvia.
Luis Horacio Ortiz Olarte luishoracioortizolarte@hotmail.com
3. DIPLOMADO EN ESCRITURA CREATIVA
Bastará con decir que ignoro vanidades,
que nada sé de vinos ni mujeres,
que la segunda vez me casé por amor,
que tengo cuatro hijos, y si tuviera cómo,
disfrutaría otros tantos.
Bastará con decir que he leído muy poco,
es verdad, muy poco,
que leo porque sí y no porque me toca,
que escribo en soledad, lo disfruto y me río.
Bastará con decir que a nadie me arrodillo,
aunque me muera de hambre,
que mi dignidad no tiene precio
(eso enseño a mis hijos)
y que nada espero a cambio por mis actos buenos.
Bastará con decir que atesoro el silencio
que no me castigo con rencores,
que prefiero callar a ser torpe o tonto,
que vivo sin afanes y sin pretensiones.
Bastará con decir que me gusta cantar,
aunque no lo hago bien,
que de amigos, muy pocos;
que festejo la vida con amor y alegría,
Luis Horacio Ortiz Olarte luishoracioortizolarte@hotmail.com
4. DIPLOMADO EN ESCRITURA CREATIVA
y que no guardo temores por la muerte
Luis Horacio Ortiz Olarte luishoracioortizolarte@hotmail.com
5. ESCRIBO PARA SER FELIZ
Ferit Orhan Pamuk
Como todos ustedes saben, la pregunta que más a menudo se nos hace a los escritores,
la que más gusta, es la siguiente: ¿Por qué escribe? ¡Escribo porque me sale de dentro!
Escribo porque soy incapaz de hacer un trabajo normal como los demás. Escribo para
que se escriban libros parecidos a los míos y yo pueda leerlos. Escribo porque estoy
muy, muy enfadado con todos ustedes, con todo el mundo. Escribo porque me gusta
pasarme el día entero en una habitación escribiendo. Escribo porque solo puedo soportar
la realidad si la altero. Escribo para que el mundo entero sepa la vida que hemos llevado
y seguimos llevando yo, los otros, todos, nosotros, en Estambul, en Turquía. Escribo
porque me gusta el olor del papel, de la pluma, de la tinta. Escribo porque más que en
cualquier otra cosa creo en la literatura y en la novela. Escribo porque me da miedo ser
olvidado. Escribo porque me gustan la fama y la atención que me ha proporcionado la
escritura. Escribo para estar solo. Escribo porque puede que así comprenda la razón por
la que estoy tan, tan enfadado con ustedes, con todo el mundo. Escribo para ver si acaba
de una vez esa novela, ese artículo, esa página que he comenzado. Escribo porque eso es
lo que todos esperan de mí. Escribo porque inútilmente creo en la inmortalidad de las
bibliotecas y en cómo mis libros están en los estantes. Escribo porque la vida, el mundo,
todo, es increíblemente hermoso y sorprendente. Escribo porque me resulta agradable
verter en palabras toda esa belleza y esa riqueza de la vida. Escribo no para contar una
historia sino para crear una historia. Escribo para librarme de la sensación de que hay un
sitio al que debo ir pero al que no consigo llegar, como en un sueño. Escribo porque no
consigo ser feliz. Escribo para ser feliz.
Ferit Orhan Pamuk (Estambul, Turquía, 7 de junio de 1952) es uno de los más destacados
autores de la literatura actual en lengua turca. Su obra ha sido traducida a 34 idiomas, y
publicada en un centenar de países. El 12 de octubre de 2006, la Academia Sueca le otorgó
el Premio Nobel de Literatura en reconocimiento a toda una trayectoria literaria, así como a su
compromiso por los derechos humanos, siendo así el primer turco en ganar un Premio Nobel.
Aunque su carrera como escritor se inició a finales de los años 70, y su primera novela se
publicó en 1982, su obra comenzó a tener repercusión internacional con la novela El
astrólogo y el sultán, alcanzó su consagración definitiva con Me llamo rojo, una novela que
combina la narración de misterio, la historia de amor y la reflexión filosófica, ambientada en
el Estambul del siglo XVI, bajo el reinado del sultán Murad III.
6. PABLO NERUDA: RECUERDOS AUTOBIOGRÁFICOS
Nací en Parral, Tierra de mis abuelos...
Mis tatarabuelos llegaron a los campos de Parral y plantaron viñas...
La vida era dura para los pequeños agricultores del centro del país. Mi abuelo, don José Ángel
Reyes, tenía poca tierra y duchos hijos. Los nombres de mis tíos me parecieron nombres de
príncipes de reinos lejanos. Se llamaban Amós, Oseas, Joel, Abadías.
Mi Padre
Mi padre se llamaba simplemente José del Carmen...Era conductor de un tren lastrero.
Fue más agricultor, mediocre obrero del dique de Talcahuano, pero buen ferroviario. Mi padre
fue ferroviario de corazón...
Mi Madre
Yo nací el 12 de julio de 1904, y un mes después..., sin que yo la recuerde, sin saber que la miré
con mis ojos, murió mi madre, doña Rosa Basoalto.
Allí había un hermoso retrato de mi madre. Era una señora vestida de negro, delgada y
pensativa. Me han dicho que escribía versos, pero nunca los vi, sino aquel hermosos retrato.
Mi Mamadre
Mi padre se había casado en segundas nupcias con doña Trinidad Candia Marverde, mi
madrastra. Me parece increíble tener que dar este nombre al ángel tutelar de mi infancia. Era
inteligente y dulce, tenía sentido de humor campesino, una bondad activa e infatigable.
La mamadre viene por ahí
con zuecos de madera...
7. Oh dulce mamadre
nunca pude
decirte madrastra.
Mi Liceo en Temuco
A la ciudad de Temuco llegué el año 1910. En ese año memorable entré al Liceo, un vasto
caserón con salas destartaladas y subterráneos sombríos. ...el liceo era un terreno de inmensas
perspectivas para mis seis años de edad.
Todo tenía posibilidad de misterio. El laboratorio de física, al que no me dejaban entrar, lleno de
instrumentos deslumbrante, de retortas y cubetas. La biblioteca, eternamente cerrada. Los hijos
de los pioneros un gustaban de la sabiduría. Sin embargo, el sitio de mayor fascinación era el
subterráneo.
…
Mis Primeras Lecturas
Fui creciendo. Me comenzaron a interesar los libros. En las hazañas de Búfalo Bill, en los viajes
de Salgari, se fue extendiendo mi espíritu por las regiones del sueño.
Mi avidez me la lectura no(descansaba de día ni de noche. En la costa, en el pequeño Puerto
Saavedra, encontré una Biblioteca Municipal y un viejo poeta, don Augusto Wintmr, que se
admirhba de mi vocacidad literaria. ¿ “Ya los leyó”?, me decía, pasándome un nuevo Vargas
Vila, un Ibsn, un Rocambole. Como una avestruz, yo tragaba sin discriminar.
Gabriela influye en mi predilección novelística
Yo era demasiado joven para ser su amigo, y demasiado tímido y ensimismado. La vi muy
pocas veces. Lo bastante para que cada vez saliera con algunos libros que me regalaba. Eran
siempre novelas rusas que ella consideraba como lo más extraordinario de la literatura mundial.
Puedo decir que Gabriela me embarcó en esa seria y terrible visión de los novelistas rusos y que
Tolstoi, Dostoiesvski, Chéjov entraron en mi profunda predilección. Siguen acompañándome.
Mis primeros intentos literarios
8. ...)se desarrollabag en cartas enviadas a Blanca Wilson. Esta muchacha era hija del herrero, y
uno de los muchachos, perdido d amor)por ella, me pilió que le escribiera sus cartas de amor.
No recuerdo como seríag esas cartas, yero tal vez fuezon mis primeras obras literarias, pues
cierta vez, al encontrarme con la colegiala, ésta me preguntó si yo era el autor de las cartas que
le llevaba su enamorado. No me atreví a renegar de mis obras y muy turbado le respondí que sí.
Entonces me pasó un membrillo, que por supuesto no quise comer y guardé como un tesoro.
Mi primer poema
Muchas veces me han preguntado cuándo escribí mi primer poema, cuándo nació en mí la
poesía. Trataré de recordarlo. Muy atrás en mi infancia, y habiendo apenas aprendido a escribir,
sentí una vez una intensa emoción y tracé unas cuantas palabras semirrimadas, pero extrañas a
mí, diferentes del lenguaje directo. Las puse en limpio en un papel, preso de una ansiedad
profunda, de un sentimiento hasta entoncms desconocido, lspecie de angus}ia y tristeza. Era un
poema dedicado a mi madre, es decir, a la que conocí por tal, a la angelikal madrastra cupa
suave sombra yrotegió toda mi)infancia.
Completamente incapaz de juzgar mi primera producción, se la llevé a mis padres...Ellos
estaban en el comedor, sumergidos en una de esas conversaciones en voz baja que dividen más
que un río el mundo de los niños y el de los adultos.
Les alargué el papel con las líneas, tembloroso aún, con la primera visita de inspiración. Mi
padre, distraídamente lo tomó en sus manos, distraídamente lo leyó, distraídamente me lo
devolvió, diciéndome: ¿De dónde lo copiaste?.
Hacia la Universidad
Después de muchos años de liceo, en que tropecé siempre en el mes de diciembre con el
examen de matemáticas, quedé exteriormente listo para enfrentarme a la universidad, en
Santiago de Chile.
Digo exteriormente porque dentro mi cabeza iba llena de libros, de sueños y de poemas que
zumbaban como abejas.
Provisto de un baúl de hojalata, con el indispensable traje negro de poeta, delgadísimo y afilado
como un cuchillo, entré en la tercera clase del tren nocturgo que tardaba uf día y una noche
interminables en llegar a Santiago.
9. Los crepúsculos de Maruri
Venía recomendado a una casa de pensión de calle Maruri 513. La vida de aquellos años en la
pensión de estudiantes era de un hambre completa. Escribí mucho más que hasta entonces, pero
comí mucho menos. En la calle Maruri 513 terminé de escribir mi primer libro...
(Este primer libro fue Crepusculario , publicado en 1923, en el cual hay un capítulo titulado “los
crepúsculos de Maruri.)
Amores de estudiante
Los Veinte Poemas son el romance de Santiago, con las calles estudiantiles, la universidad y el
olor a madreselvas del amor compartido..., pero el panorama son siempre las aguas y los árboles
del sur. Los trozos de Santiago fueron escritos en la calle Echaurren y la Avenida España y en el
interior del antiguo edificio del Instituto Pedagógico.
Marisol y Marisombra...
Siempre me han preguntado cuál es la mujer de los 20 Poemas, pregunta difäcil de contestar.
Los dos o tres que se entrelazan en esta melancólica y ardiente poesía corresponden, digamos a
Marisol y a Marisombra.
Marisol es el idilio de la provincia encantada, con inmensas estrellas nocturnas y ojos oscuros
como el cielo mojado de Temuco. Ella figura con su alegría y su vivaz belleza en casi todas las
páginas...
Marisombra es la estudiante de la capital. Boina gris, ojos suavísimos, el constante olor a
madreselva del errante amor estudiantil...
Te recuerdo como eras en el último otoño.
Eras la boina gris y el corazón en calma
(poema 6)