Documento entregado como trabajo final del módulo I. Comunicación Interpersonal de la Materia 5. Habilidades de Dirección del Máster Universitario en Recursos Humanos de la Universidad de Deusto cursado por Alex Rayón Jerez durante el curso 2010/2011.
1. Curso 2010/2011 Materia 5: Habilidades en Dirección
Máster Universitario en Recursos Humanos
Facultad de C.C.E.E. y Empresariales La
Comercial Módulo I: Comunicación
interpersonal
Ing. Alex Rayón Jerez (alex.rayon@deusto.es) Profesor: Jesús Cartón
COMUNICACIÓN INTERPERSONAL
Muchas veces actuamos sin pensar en las repercusiones. Actos inconscientes, y lo peor de todo,
muchos de ellos siendo ejecutados en ausencia de valores y principios humanos. Es el lóbulo central el
encargado de controlar los impulsos y las emociones, es donde reside la conciencia, la lógica y la capacidad
de discriminación que tiene un homínido. En definitiva, es el órgano encargado de orquestar la conducta del
ser humano. Es por ello, que este órgano central de planificación es considerado como el más importante
para definir el comportamiento de un ser humano.
El ser humano aprende de la experiencia: actuar, acertar/fallar y aprender. La sabiduría popular
generalizada cree que el ser humano aprende más cuando erra, pero esto no es así. Un estudio reciente del
MIT, ha demostrado que cuando una acción genera un buen resultado, las células del cerebro se sincronizan
con lo que un animal está aprendiendo. En los últimos tiempos, se ha convertido en un dogma social que la
crisis económica hará al ser humano mejor, porque de los errores se aprende. Una crisis de ética (aunque
eufemísticamente se ha bautizado como crisis de liquidez) que parece haberse convertido en la escuela del
futuro, en la escuela que educará al futuro ser humano honesto y altruista.
Yo creo que es un planteamiento inválido, y de ahí quiero partir para explicar cómo la comunicación
interpersonal sí que podría ayudar evitar el advenimiento de crisis futuras. Es preciso partir del hecho que el
mundo sufre una polarización de personalidad muy importante. En el bloque occidental predomina la visión
hedonista e individualista de tratar de satisfacer las necesidades privadas con carácter egoísta como medio
regulador de una sociedad justa. El bloque oriental, por contra, es más altruista, más colectivista, importa
menos el YO y aparece más el nosotros.
Simplemente la forma de expresarnos expone el argumento que saco a colación. Aquí en Occidente
predominan las expresiones en primera persona, mientras que el bloque oriental el pluralismo en primera
persona está a la orden del día. La economía actual se rige por la Ley de la Oferta y la Demanda, que no es
más que un eufemismo del ser egoísta. Aplicado al contexto de este documento: Yo Padre, modelo no
consciente, que no percibe la realidad como una estructura altruista donde se debiera fomentar la cohesión
social.
En realidad está mal calificado ese modelo de oferta y demanda como una ley, ya que bajo
legislación, se obliga. Sin embargo, ¿alguien obliga a consumir algo en unas determinadas condiciones? No.
En economía no se debiera de hablar de leyes, ya que ésta se basa en la relación existente entre nosotros
como Adultos que debiéramos ser y la naturaleza que nos da soporte. Es decir, conciencia del yo Adulto y
responsabilidad (entendiendo ésta como la asunción de las consecuencias derivadas de nuestros actos). Todo
ello llevaría a una coherencia social.
Pero bajo el actual modelo de competitividad, el ser humano Adulto se ve sustituido por el Padre. El
hombre es un animal, y dado que la economía está basada en necesidades y los animales utilizan su instinto
de supervivencia, cada yo Padre ve a los otros Padres o Niños como sus enemigos, convirtiendo al modelo en
un escenario donde competir.
Pero el ser humano es libre, es capaz de decidir qué quiere hacer. Cada uno es lo que quiere ser, cada
uno debiera ser consciente, adoptar el Yo Adulto que sabe lo que conviene hacer en cada momento, lo que se
debe hacer. Es decir, pasar a un modelo de libertad (conviene hacer) desde un modelo basado en leyes (debe
hacerse). Mediante esta transición de una sociedad con Yo Padres a Yo Adultos, los Yo Niños serían
educados en otro entorno más social y humanitario.
¿Y por qué todos y cada uno de nosotros aceptamos el modelo actual, rígido y basado en leyes? Por
eso que llamamos principios, que no hacen más que entrar en contradicción continuamente, originando las
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fricciones recurrentes en el día a día de nuestras vidas. Es por ello que todos debiéramos experimentar una
transición hacia el estado Adulto, asumiendo conductas lógicas donde no pongamos en contradicción
nuestros principios.
¿Es razonable que depositemos nuestros ahorros en una entidad financiera que esté financiando los
alimentos transgénicos cuando se sabe que la agricultura intensiva (fertilizantes, insecticidas, semillas
transgénicas, etc.) representan el 60% de las emisiones de CO2? No, si pensamos de manera lógica, y
tenemos conciencia social. Lo que pasa que para tomar esa decisión, ponemos nuestros principios en
contradicción anteponiendo la usura a nuestra moral. De nuevo: el yo animal, el Yo Adulto que debe ganar
cuánto más dinero mejor, el Yo egoísta, el Yo inconsciente. Esto es lo que hay que cambiar.
Esta exposición de la polarización cultural pretende hacer ver que en realidad lo que falta en el
mundo son estados del Yo Adulto. Como se expone en la obra “Yo estoy bien, tú estás bien” de Thomas
Harris el estado del Yo Adulto es aquel que emplea el pensamiento basado en la analítica y la reflexión. Es
decir, menos impulsivo e inconsciente que el resto de estados, y sobre todo, más próximo a la realidad. Es
decir, aquel perfil de persona que la crisis ha manifestado escasea en el mundo actual.
Centrémonos en el bloque individualista occidental para exponer cómo la comunicación
interpersonal podría ayudar al autor de este documento a mejorar el modelo social actual. Vivimos en una
sociedad muy contaminada por los prejuicios. El antropólogo francés Claude Lévi-Strauss en sus trabajos
sobre antropología estructural consideraba a la cultura como un sistema de comunicación. Este enfoque
antropológico, enuncia que las reglas económicas sostienen la comunicación, esto es, la comercialización de
bienes y servicios. La economía gobierna el mundo.
Partiendo de dicho aserto, si se dispone de una cultura contaminada por posiciones del Yo Padre que
tratan de justificar por todos los medios esos prejuicios que abundan, está claro que la crisis es estructural, no
coyuntural por una crisis económico-financiera. Y la importancia de adoptar más posiciones Adultas queda
reforzada por la creciente ola globalizadora y migratoria de personas. No me refiero sólo a los 44 millones de
refugiados, sino al propio choque cultural que se producirá como resultado de ello. La crisis estructural se
puede agravar en caso de no producirse una cohesión social, que los recientes casos han mostrado se ve
mermada en época de crisis económica. La ONU recientemente alertaba sobre la estigmatización a la que se
somete a los refugiados. De seguir actuando con prejuicios, posiciones dominantes y poco cohesionadoras
del yo Padre y Niño, la crisis estructural social mundial es cosa de años (o meses, poniéndonos alarmistas).
Otro dogma social generalizado es tender a externalizar las culpas de todo. Muchas veces se critica
que las administraciones públicas son las principales responsables de la crisis del modelo social actual. Es
más, incluso se las culpa de la post-crisis, dado que su inacción está agravando más aún la situación. Pero,
¿en algún momento nos hemos planteado cuán culpables somos todos y cada uno de nosotros?
Aquel que presume de saber, pero no hace/ejecuta, sabe menos que cualquier otro. En el fondo, lo
que hay en el mundo no son más que contradicciones. Hay personas que presumen de defender la ecología,
pero luego no tienen problema alguno en depositar su dinero en un banco que quizás esté financiando la
explotación del aceite de palma en Indonesia, simplemente porque le de más rentabilidad que otro banco (en
otras palabras, porque le ofrece bonos respaldados por hipotecas basura que parece darán mucha rentabilidad
porque las vende un broker americano). Nos hemos creado departamentos personales: se puede ser
ecologista, presumir por ello de tener conciencia social, pero luego financiar actividades perniciosas.
Es decir, que falta un Yo Adulto integral, respetuoso con su moral de manera transversal, en todas las
áreas de la sociedad. Y es esta carencia de Adultos integrales la que ha roto la estructura del sistema. Es
decir, que las contradicciones humanas son las que han llevado a la destrucción de un modelo de cohesión
humana que hoy por hoy no funciona. El contrato social de Jean-Jacques Rousseau se asienta en principios
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que violan cualquier coherencia social.
Algo hay que cambiar, y como exponía Paulo Coelho en sus obras, la educación puede servir como
palanca de cambio. Lo que pasa que no se puede hacer palanca con churros, y desde las escuelas de infancia,
hasta las universidades, se están fabricando churros. Simplemente el nombre con el cual son denominadas las
escuelas de infancia en la sociedad (guarderías) dice mucho: guarderías, ¿qué se guarda en ellas pues? No se
guarda o aparca un Niño, sino que se debería educar un Niño con posiciones Adultas.
Los Niños, independientemente de su edad, no escuchan lo que decimos, sino que ven lo que somos.
Predicar con el ejemplo que dicen. Y dado que me dedico en el ejercicio profesional a la educación, creo que
la comunicación interpersonal tiene mucho que aportarme también.
La educación tiene múltiples definiciones, pero la que más se asemeja a lo que debiera ser es esa que
enuncia que se trata de un proceso de concienciación cultural, moral y conductual. Es decir, un proceso,
entendido como un conjunto de tareas, en el que intervienen varios agentes (uno o varios profesores, y uno o
varios estudiantes), y de manera social, bidireccionalidad profesor-estudiante, se establece un camino para
aprender entre todos. Es lo que se ha venido a llamar en los últimos tiempos como aprendizaje social,
dejando obsoleta la educación clásica de transmisión de conocimientos de manera unidireccional profesor-
alumno.
El marco teórico del nuevo modelo de aprendizaje está bien, pero los agentes fallan. Y fallan porque
un estudiante construye su conducta y su moral viendo lo que son los que le rodean. Y si lo los rodean son
Padres, entendiendo por los mismos a sus padres biológicos y tutores de aprendizaje, lo que se hace es
enseñar lo que se debe hacer, no razonar lo que conviene hacer.
Modelo imperativo frente a modelo razonado. Y como ha quedado manifestado en la primera parte
de este documento, la sociedad carece de ese Yo Adulto que razona de manera lógica y mantiene una
conducta ajustada a la realidad.
El Adulto se concentra en hechos, no en los sentimientos y prejuicios. Es decir, establece un marco
objetivo frente a la subjetividad que establecen los sentimientos y los prejuicios. Esto es un caso muy
recurrente en la educación actual. ¿Por qué en las universidades se sigue enseñando que el beneficio personal
de cada uno llevará a un mercado regulado? Quizás es hora de exponer una visión menos animal de la
economía y exponer modelos más altruistas y de cooperación entre las personas.
Pues se siguen enseñando por los prejuicios arraigados. Y lo que es aún peor, el instrumento más
poderoso que tenemos para educar, que es el lenguaje, la herramienta que utilizamos para comunicarnos, se
emplea mal, por lo que la comunicación tampoco es la que debiera emplearse. Los profesores utilizan (y
siento no incluirme en el colectivo pero no comulgo con lo que expongo) su Yo Adulto para defender sus
prejuicios. Esto no hace más que hacer borrosa la realidad.
Un alumno recién licenciado cree conocer la economía real, pero no es más que una mera
aproximación. La educación en occidente está muy condicionada a los modelos educativos regulados. Un
ejemplo para exponer la maleabilidad del modelo educativo actual es el ejemplo del sistema educativo de
Camboya. Este país lucha por que sus jóvenes reconstruyan los pedazos de la sociedad que fue quebrada por
el régimen de los Jemeres Rojos. Tras décadas de olvido, el recuerdo del genocidio se ve ahora como el
único camino para conseguir una reconciliación que aún está lejos de ser alcanzada. El 81% de los
camboyanos nacidos después de 1979 (fin del regimen de Pol Pot) describe su conocimiento sobre la época
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como pobre o muy pobre. No conocen la realidad, no hay Yo Adultos que transmitan lo que conviene hacer.
Es una sociedad arraigada en Yo Padres que dicen lo que se debe hacer. Conciencias ciegas e ignorantes.
¿Por qué no apostar por las escuelas libres democráticas? En éstas, las normas son establecidas por
democracia, así como los contenidos, la dinámica de participación, etc. Es decir, la cooperación entre los
agentes sociales permite la aparición de los Yo Adulto que establece lo que conviene, que razona qué será
mejor aprender. Es decir, sustituir el Padre Normativo que establece un procedimiento y asegura el control de
los contenidos por el Adulto. Menos burocracia y más autonomía.
De esta forma se romperían los lazos culturales arraigados en principios que en lugar de ser asépticos
suelen ser bastante tendenciosos. El modelo educativo actual hace un uso intensivo de Padres Salvadores que
generan dependencia. Estos modelos debieran conseguir lograr que el alumno se vea más autónomo, que se
vea capaz de valerse por sí mismos, un poco en la línea de lo que busca conseguir el nuevo Modelo de
Aprendizaje de Bolonia.
Por último, también es importante citar la posibilidad de sustituir un modelo de evaluación crítico
por otro social de corrección cooperativa. No hay crítica positiva, siempre es negativa. Los trabajos
actualmente son evaluados con frases como “Tu trabajo está mal”. Esta manifestación Adulta tiene bastantes
carencias de conducta psico-social para estimular el aprendizaje del alumno. En su lugar debiera utilizarse un
Yo Adulto que no asignase responsabilidades por el trabajo mal realizado, sino que buscase separar el hecho
(el trabajo mal realizado) de la persona (el alumno).
Lo que debiera hacer el profesor Adulto es utilizar el pensamiento lógico colaborativo, buscando y
preguntando al alumno porqué cree que ha puesto algo que pudiera estar mal ateniéndose a hechos
conocidos, de forma que se despertase el estímulo de autocorrección en lugar del de culpabilidad. Es más, el
alumno pudiera sentirse curioso como un Niño, ya que al buscar el profesor una mayor empatía, quizás se
consiguiera despertar la creatividad que tanto falta en las sociedades actuales.
Hay que dar un mayor derecho al error, un mayor derecho al problema, entendiendo éste como una
oportunidad para encontrar el sentido a la realidad que nos rodea, no como un obstáculo con el que se acaba
de tropezar.
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