El documento describe la rehabilitación de fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis. Se discuten los tipos de fracturas del fémur, incluyendo las cervicales y trocantéreas, y sus tratamientos quirúrgicos como osteosíntesis e implantes de cadera. La rehabilitación incluye evaluaciones musculoesqueléticas, neurológicas y funcionales iniciales, así como tratamientos kinesioterapéuticos para mejorar la movilidad y prevenir complicaciones.
2. E – 26-230-A-10 Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis Kinesiterapia
localización, una trombosis venosa
1 Fractura del cuello del fémur. profunda, un infiltrado o un dolor de
1 1 A.1. Psoas; 2. Músculo glúteo; 3.
origen muscular (por ejemplo, en los
Músculos aductores.
B.1. Acción muscular (flecha roja);
aductores). En todos los casos deben
2. Zona de cizalla; 3. Reacción buscarse zonas de hipo o hiperestesia.
mecánica (flecha verde).
Examen ortopédico
2 2 • Evaluación articular
La determinación de la amplitud del
movimiento articular de la cadera no
debe ejercer presión sobre el foco de la
fractura ni generar un riesgo de luxa-
3 ción de la prótesis: en la medida de lo
posible, las rotaciones se evalúan con el
3 A B
miembro inferior en extensión y la
rótula al cenit, sin olvidar las demás
articulaciones, en especial las del otro
I Fracturas trocantéreas — Situación social, modo de vida y miembro inferior.
La tendencia quirúrgica de los últimos contexto psicoafectivo: el pronóstico es
años es acercar el material de osteosín- muy diferente en una persona que
antes del accidente vivía en su domici- • Evaluación muscular
tesis al eje mecánico del fémur, para
obtener en lo posible el apoyo total lio con su familia, que en otra alojada Es inútil, e incluso peligroso, realizar
inmediato. en una institución. pruebas funcionales en algunos múscu-
Durante las 3 primeras semanas el — Es importante tener en cuenta las los: el único objetivo del examen inicial
apoyo puede ser más o menos doloroso causas del traumatismo, en particular es determinar la integridad muscular,
y por esta razón debe ser progresivo, lo las caídas por mareos o vértigos, y el sobre todo en zona periarticular. En
cual es especialmente difícil en las per- tipo de dolor. cambio, es indispensable evaluar la
sonas de edad. fuerza de los miembros superiores, la
Antecedentes del miembro contralateral y la de los
I Objetivos y principios — Traumáticos: Fracturas del hombro, músculos del tronco, ya que el estado de
de rehabilitación de la muñeca, de una vértebra o del los mismos condiciona la rehabilitación.
otro extremo superior del fémur, más
Los trabajos de Rydell y Hodge [11, 33] frecuentes en las personas de edad con Examen neurológico
hicieron olvidar muchos prejuicios osteoporosis conocida o ignorada. El hallazgo del signo de la «rueda den-
sobre la movilización de las caderas des- — Reumatológicos: periartritis escapu- tada», de temblor o de una hipertonía
pués de una fractura del cuello u otras lohumeral y en especial artrosis dorso- leve, incluso aislada, y asociada a dis-
intervenciones de cadera. Su mérito fue minución de la autonomía, es bastante
lumbar.
salir del esquema de Pauwels [25, 32], que frecuente. Indica la existencia de un
sólo analiza la cadera en el plano frontal. — Pleuropulmonares y cardiovasculares:
insuficiencia respiratoria crónica, insu- síndrome extrapiramidal hasta enton-
El informe menciona, además, las fuer- ces inadvertido y, en ocasiones, causan-
zas que actúan sobre la cadera durante ficiencia cardíaca, etc.
— Venosos y tromboembólicos. te de la caída. En ese caso a menudo se
la flexión y demuestra: encuentran otros antecedentes traumá-
— que no hay una razón válida para — Urinarios: infecciones recidivantes,
pérdidas o retenciones, antecedentes ticos y/o una pérdida insidiosa de
prohibir sentarse a un paciente recién autonomía.
operado; prostáticos o antecedente de prolapso.
Una astasia-abasia oscurece el pronós-
— que la permanencia en cama no care- — Digestivos: úlcera, hernia hiatal, tras-
tico funcional y aumenta considerable-
ce de riesgos, particularmente en caso tornos del tránsito.
mente las dificultades de la rehabilita-
de abducción activa y elevación del ción kinesiterapéutica, sobre todo
miembro en extensión; Examen físico
cuando se asocia pie equino.
— que debe proscribirse absolutamen- Desde el principio se buscará una defi-
te la rehabilitación del glúteo mediano • Inspección
ciencia sensitiva global o una hiper-
en cadena abierta, cualquiera sea la La postura espontánea puede revelar estesia en la zona del nervio femorocu-
patología; una actitud viciada. El aspecto morfos- táneo, o inclusive la presencia excep-
— que un apoyo parcial igual al peso tático permite evaluar la troficidad cional de una deficiencia motora crural
del miembro se revela en una cadera muscular en forma comparativa y evi- o ciática.
lesionada como el mejor método de tar confusiones por la presencia de un
descarga. edema y/o un hematoma. También se Examen de laboratorio
investigará (no sólo clínicamente) una Incluye ionograma, hepatograma, glu-
I Examen inicial desigualdad de longitud de los miem- cemia y determinación de urea y creati-
Responde a necesidades funcionales bros inferiores y se examinará el estado nina. El recuento de plaquetas es siste-
expresadas en un marco de coherencia cutáneo, especialmente el de la cicatriz mático frente a la administración de
terapéutica, teniendo en cuenta los (tamaño, localización, aspecto). heparinas de bajo peso molecular
antecedentes médicos, las complicacio- (HBPM).
nes eventuales y el contexto médico, También se necesita un hemograma,
• Palpación
psíquico y social. velocidad de sedimentación (VS) y
Se evaluará la calidad de la piel y de la PCR (proteína C reactiva). Completan
Anamnesis cicatriz (consistencia, presencia de estas investigaciones las muestras para
— Comparación de la edad civil con la infiltrado, aumento de temperatura). El detectar infección hospitalaria y un
edad fisiológica. dolor provocado puede indicar, por su examen citobacteriológico de orina.
2
3. Kinesiterapia Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis E – 26-230-A-10
Examen radiológico el desarrollo de pielonefritis o de prosta-
El día de la admisión se realizan radio- titis y la posterior diseminación hacia la
grafías de control, fundamentalmente prótesis de la cadera.
para verificar la integridad del material Las complicaciones tromboembólicas
de osteosíntesis y una eventual luxa- [26] se previenen con tratamiento antico-
ción de la prótesis durante el traslado. agulante, que no siempre evita el desa-
La radiografía simple de abdomen per- rrollo de una tromboflebitis e incluso de
mite diagnosticar un fecaloma, muy una embolia pulmonar. La controversia
frecuente en período postoperatorio, persiste en lo que se refiere a la sustitu-
causante de falsas diarreas. La radio- ción temprana de las HBPM por antivi-
grafía de tórax se solicita de rutina en taminas K y HBPM durante 30 a 45 días
todos los casos en que hay patologías con fines preventivos, a menos que la
asociadas (cardiomegalia, imágenes decisión dependa de factores económi-
pulmonares sospechosas, etc.). cos. El riesgo disminuye notablemente
cuando se añaden algunos métodos
Examen funcional mecánicos simples: cama en declive,
Deben evaluarse el aprendizaje para masajes de drenaje, contracciones mus-
desplazarse con seguridad, los actos de culares y medias de contención. La pre-
la vida diaria, un eventual aumento de cocidad de la bipedestación y la deam-
peso, la sensibilidad a la hipotensión bulación es eficaz contra la paresia intes-
ortostática y los efectos del tratamiento tinal, causante de estasis venosa. 2 Placa y tornillo de compresión DHS-THS.
médico en curso.
Patologías asociadas
El examen general permite conocer el Rehabilitación 3 Clavo IMHS/Gamma.
peso del paciente, el tratamiento médi- propiamente dicha
co habitual y tener en cuenta la presen-
cia de diabetes, hipertensión arterial, FRACTURAS TRATADAS
un trastorno del ritmo, insuficiencia POR OSTEOSÍNTESIS
cardíaca, una arteritis o cualquier otra Son las fracturas de la región trocanté-
afección que pueda incidir sobre la rea (osteosíntesis con placa y tornillo
tolerancia al esfuerzo y la posibilidad de compresión DHS, THS o clavo
de rehabilitación en kinesiterapia y bal- Gamma/IMHS, clavos de Ender), las
neoterapia. También se debe descartar fracturas intracapsulares del adulto
la presencia de hipoacusia, de disminu- joven y las fracturas en coxa valga (figs.
ción de la agudeza visual, de un estado 2, 3 y 4) [9, 32, 39, 41].
depresivo, incluso profundo.
Se distinguen dos modalidades de
acuerdo a la posibilidad de apoyo pre-
I Prevención de las complicaciones coz o no.
Condiciona el pronóstico vital, así
como el futuro funcional y social de los I Apoyo precoz posible
pacientes. La calidad de la cadena de En la mayoría de los casos, gracias a la
cuidados es el factor principal [7, 27, 29]. solidez y estabilidad de los implantes,
Para prevenir los trastornos tróficos es posible instaurar una rehabilitación
cutáneos (escaras, flictenas) deben cum- activa precoz; las más beneficiadas son
plirse las premisas siguientes: posición las personas mayores [18, 39].
correcta en la cama, inspección y masaje
de las zonas de apoyo, cuidados de Fase postoperatoria inmediata
higiene, cambios de posición, equilibrio Desde el día siguiente a la intervención
nutricional y bipedestación precoz. En se indican los movimientos vedados
algunos pacientes se justifica la instala- (movimientos que generan presión en
ción de un colchón antiescaras. el foco de fractura) y se enseñan las
La prevención de las actitudes viciosas posiciones correctas de acuerdo a las
requiere seguimiento por parte de un necesidades antálgicas y ortopédicas.
equipo experimentado y el uso de apa- Mediante sesiones cortas y repetidas,
ratos adecuados. durante las cuales debe prevalecer la
Las complicaciones respiratorias, es- ausencia de dolor, se busca «pulir» la
pecialmente infecciosas, se previenen articulación mediante movilizaciones
con kinesiterapia (ventilación, ex- activas asistidas de poca amplitud. La
pectoración). flexión de la cadera obligatoriamente
La lucha contra las infecciones urinarias debe asociarse a la flexión de la rodilla
requiere una hidratación suficiente (de para evitar el efecto «leva». En el aspec-
1,5 a 2 litros cada 24 horas). Después de to muscular se utilizan técnicas de esti-
la extracción de la sonda permanente se mulación para mejorar eventuales 4 Tornillos. Fractura con impacto y fractura en
deberá sondar de forma intermitente, hipotonías. La calidad de la contractili- coxa valga.
incluso después de las micciones, para dad muscular se mantiene mediante
controlar la reanudación de la actividad contracciones estáticas, primero solas y
vesical y evitar las complicaciones después alternadas y/o rítmicas, de los marcha se simula con movimientos de
(retención, infección). Las infecciones músculos agonistas-antagonistas pe- rotación de la pelvis sobre el fémur, con
deben tratarse rápidamente para evitar riarticulares. El esquema cinético de la el paciente en decúbito dorsal.
3
4. E – 26-230-A-10 Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis Kinesiterapia
Igualmente se trabaja sobre los músculos
del miembro contralateral, de los miem-
Plan incliné
Plano inclinado
bros superiores y del tronco. Se tratará
que el paciente adquiera la mayor auto-
nomía posible y que pueda efectuar los Angle
Ángulo Unipodal
Monopodálico Bipodal
Bipodálico
cambios de posición por sí solo, con la
finalidad de variar los puntos de apoyo.
Al levantarse por primera vez, además 20 ° 33 % 16,5 %
de los parámetros ortopédicos deben
tenerse en cuenta algunos criterios de
control: pulso, tensión arterial, nivel de
hemoglobina, presencia de disnea, as-
pecto clínico. El paciente debe participar 30 ° 50 % 25 %
lo más activamente posible en el proceso
de traslado de la cama al sillón, desli-
zando por sí mismo el miembro inferior
sobre el plano de la cama, con la rodilla
en extensión y, en caso de necesidad, con 40 ° 66 % 33 %
ayuda del kinesiterapeuta.
Fase de rehabilitación precoz
El retorno a la posición vertical comien-
za después de la supresión de los dre-
60 ° 80 % 40 %
nes (alrededor del 4º día); el paciente
joven ejercita la marcha entre barras
paralelas, respetando dos imperativos:
ausencia de dolor y progresividad.
En la persona mayor por lo general se
utiliza la técnica de retorno progresivo a
75 ° 90 % 45 %
la posición vertical en plano inclinado.
Poidsdel cuerpo
Peso du corps
Teóricamente, sin considerar las fuer- Valeurs théoriques
Valores teóricos
zas de roce, el apoyo del 50 % del peso
corporal se realiza a 30º de inclinación
sobre el plano horizontal, con apoyo de 5 Técnica de bipedestación progresiva en plano inclinado.
ambos pies, el 25% en cada miembro
(fig. 5).
El retorno a la posición vertical debe Fase de readaptación de fractura, demora la evolución y dila-
ser precoz, particularmente en la perso- Se basa en un tríptico compuesto por ta el plazo de reanudación del apoyo.
na mayor en la cual los trastornos de ganancia de amplitud, fortalecimiento
equilibrio, que en ocasiones son la muscular y aprovechamiento funcio- Fase postoperatoria inmediata
causa del accidente, pueden agravarse nal, condicionado por el grado de con- Se emplean las mismas técnicas de reha-
rápidamente y obstaculizar la rehabili- solidación. bilitación que para el apoyo precoz pero
tación. A menudo el terapeuta subesti- — Ganancia de amplitud: se utilizan con menor intensidad, pues la analgesia
ma el miedo a caer del paciente; lo más movilizaciones activas y activas asisti- debe ser estricta y no debe aplicarse
adecuado es proporcionar en un das, e incluso posturas progresivas fuerza sobre el foco de fractura.
comienzo seguridad y luego estímulo, condicionadas por el dolor.
eventualmente con ayuda de un trata- — Fortalecimiento muscular: se privile- Fase de rehabilitación precoz
miento médico específico. gian las técnicas clásicas, especialmente El aprendizaje del apoyo contacto es
Un nuevo desequilibrio obliga a modi- los ejercicios en cadena cerrada que res- largo. En una primera etapa, la marcha
ficar el programa de rehabilitación. El tituyen la acción muscular a su esque- se practica entre barras paralelas.
retorno precoz a la posición vertical ma cinético usual.
contribuye a la readaptación rápida del El paciente debe aprender a levantarse
— Aprovechamiento funcional: el obje- deslizando el miembro operado sobre
sistema vestibular. Al principio es nece- tivo es pasar de la autonomía a la inde-
sario realizar un trabajo de equilibrio la cama para levantarse del lado sano.
pendencia. Para su realización es útil y Así evita la flexión de la cadera con la
primero en posición sentada y luego en necesario adaptar el rendimiento de los
bipedestación, tratando de llevar hacia pierna extendida durante los desplaza-
movimientos a las condiciones del mientos de la cama al sillón y del sillón
delante la proyección del centro de gra- ambiente y del medio de vida anterior.
vedad. Las técnicas de estimulación a la cama, y la aplicación de fuerzas
Múltiples factores llevan a los pacien- importantes sobre el extremo superior
asistida [8, 22] suelen ser muy eficaces. El tes, especialmente las personas mayo-
trabajo del equilibrio en posición de pie del fémur durante dicho movimiento.
res, a adoptar un nuevo estilo de vida.
y al caminar se realiza de preferencia El kinesiterapeuta debe enseñar al
descalzo, pues permite recibir las infor- paciente a pensar el movimiento antes
maciones extero y propioceptivas. I Apoyo diferido de realizarlo.
Luego de superar estas etapas puede Se indica en el paciente joven (fracturas Una vez superada esta fase profiláctica
iniciarse el trabajo de la marcha. En un cervicales inestables), ya que la preocu- comienza la marcha con apoyo simula-
primer tiempo siempre se utilizan pación por conservar la cabeza femoral do adecuado, que se controla con una
barras paralelas y luego bastón inglés. puede conducir a una osteosíntesis y al balanza u otras técnicas más sofistica-
Estos elementos de sostén pueden reposo del miembro durante varias das. El apoyo contacto (llamado «apoyo
regularse si persiste un desequilibrio semanas. La reducción debe ser perfec- simulado» o «paso virtual»), además de
posterior. ta: un ensamble frágil, a causa del tipo su interés desde el punto de vista mecá-
4
5. Kinesiterapia Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis E – 26-230-A-10
nico en lo que se refiere a la descarga de
Poids
Peso del cuerpo en inmersión
la cadera, permite mantener el esquema
de marcha. De este modo se evita la
Plano inclinado Marcha con
posición de triple retracción, flexión de Agua dulce
la rodilla y la cadera, que incrementa Valores teóricos bastones
considerablemente la presión sobre el
20% 12º Apoyo simulado con 2 BM
foco de fractura.
40% 20º
Cuando se trata de una persona mayor
que no puede controlar la fuerza de 60% 30º Apoyo de 1/3 con 2 BM
apoyo del miembro operado, se utiliza Apoyo de 1/2 con 2 BM
70% 40º
la técnica de retorno progresivo a la Apoyo de 3/4 cuartos con 1 BS
posición vertical mediante plano incli- 90% 60º 1 BS
nado [36]. 100% 75º
La reanudación del apoyo será una
decisión conjunta entre el cirujano y el
kinesiterapeuta.
El principal criterio de control en la rea- 6 Rehabilitación en balneoterapia: apoyo progresivo. BM: bastón-muleta; BS: bastón simple.
nudación del apoyo es el dolor. A
menudo es la expresión de una lesión
incipiente en el foco de fractura y obli- ramidal, comienza por enseñar al
ga a practicar radiografías de control paciente cómo instalarse correctamente
para descartar una impactación o un en la cama (cojín de abducción o simi-
desplazamiento secundario. lar, según la posición del paciente) y
Además de la utilización del plano cómo levantarse con total seguridad.
inclinado, el apoyo progresivo puede Paralelamente se enseñan los movi-
hacerse en balneoterapia [12], previa mientos recomendados y vedados, ya
extracción de los hilos y de la aplica- sean del muslo sobre la pelvis o del
ción de un apósito adhesivo de protec- tronco sobre los miembros inferiores,
ción. En la práctica, la bipedestación así como sobre las rotaciones con pie
progresiva mediante inmersión xifoi- fijo en el suelo durante los cambios de
dea en agua dulce equivale al 40 % del dirección (fig. 8A, B y C).
peso corporal, es decir, el 20 % en cada Incorporar y automatizar estas consig-
miembro. El empuje hidrostático facili- nas no es fácil y requiere numerosas
ta la circulación de retorno y ayuda a repeticiones: para recoger un objeto del
resorber los edemas por estasis; con suelo espontáneamente se seguirá un
chorros de agua submarinos de presión protocolo bien establecido; lo mismo
variable (fig. 6) se provoca un efecto sucede con el aprendizaje para levan-
sedativo y miorrelajante que facilita los tarse o para apoyar de preferencia el
movimientos habitualmente dolorosos. lado sano. Consejos y adaptaciones
ergoterápicas contribuyen eficazmente
Fase de readaptación en la prevención (instalación, pinza de
En esta fase, los objetivos y principios mango largo, etc.). 7 Prótesis intermedia.
del apoyo precoz y del diferido son La ganancia de amplitud no es la preo-
similares; las técnicas de rehabilitación cupación esencial, en la mayoría de los
están dirigidas a reintegrar el miembro casos el movimiento articular es sufi- con ayuda de la gravedad, colocando la
a sus funciones de locomoción y pro- ciente. cadera contralateral en flexión.
pulsión, que han estado perturbadas La calidad de la contractilidad y la toni- Una vez que se adquiere el esquema de
durante varias semanas. Los ejercicios ficación muscular se consiguen con téc- marcha correcto con la ayuda de las
en cadena cerrada o semicerrada nicas clásicas pero dependen de las técnicas estáticas, se pasa a la utiliza-
adquieren aquí mucha importancia. vías de acceso quirúrgico utilizadas. ción de bastones-muletas, fase más
funcional. El registro de las actividades
diarias pone de manifiesto los movi-
FRACTURAS TRATADAS I Fase de rehabilitación precoz mientos potencialmente luxantes y las
POR ARTROPLASTIA
Después de la extracción de los drenes maniobras difíciles de realizar. De esta
Para muchos autores, las artroplastias puede comenzar una fase más activa y evaluación surgen los consejos ergonó-
se indican en personas de edad fisioló- funcional. micos y las prescripciones preventivas
gica elevada. El objetivo es la reintegra- Los ejercicios de equilibrio con apoyo individuales y personalizadas (altura
ción rápida del miembro a su función bipodálico preceden a la reanudación del asiento, aparato de ayuda para ves-
original, evitando cualquier complica- de la marcha entre barras paralelas. El tirse, toma de conciencia y automatiza-
ción y, sobre todo, un desacondiciona- apoyo sobre el lado operado se alivia ción del movimiento).
miento [6, 17]. para no hacer trabajar las suturas mus-
culares y respetar el umbral doloroso. I Fase de readaptación
I Fase postoperatoria El equilibrio de la pelvis con apoyo
monopodálico se busca progresiva- Es una fase de reintegración familiar,
inmediata (fig. 7) social y económica, en lo posible dentro
mente en plano inclinado, en cadena
Se consideran tres puntos fundamenta- cerrada, así como en balneoterapia en del medio de vida anterior, realizando
les: la prevención de las luxaciones, el cuanto el estado cutáneo lo permita. El modificaciones en la vivienda (barras
movimiento articular y la tonificación desarrollo eventual de un flessum de la de apoyo, acceso a la ducha, etc.) si
muscular. cadera se previene con trabajo estático fuese necesario.
La prevención de la luxación, de eleva- de los glúteos y posturas progresivas, A fin de evitar la dependencia en per-
do riesgo en caso de síndrome extrapi- con el paciente en decúbito dorsal y sonas de edad avanzada, la reintegra-
5
6. E – 26-230-A-10 Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis Kinesiterapia
por las lesiones del arco posterior
según la clasificación AO (Asociación
para la osteosíntesis) o la de Tile [23, 37]:
— grupo A: es una lesión vertical del
arco anterior; sin lesión del arco poste-
rior; el traumatismo es estable en el
plano horizontal y vertical;
— grupo B: lesión que afecta única-
mente al plano anterior de los ligamen-
tos sacroilíacos o fractura incompleta
del sacro o del ala ilíaca; este trauma-
A A tismo es inestable en el plano horizon-
1 2
tal. En algunos casos, la pelvis puede
abrirse como un libro;
— grupo C: hay rotura completa del
arco posterior; los desplazamientos son
posibles tanto en el plano vertical como
en el horizontal.
Esta clasificación permite comprender
la anatomía patológica de las fracturas
y, por lo tanto, sus consecuencias fun-
cionales (figs. 9, 10, 11 y 12).
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
B 1 B 2 Las fracturas unilaterales o bilaterales
del arco anterior a menudo son fracturas
de fatiga y requieren un tratamiento
funcional, con reanudación rápida de la
marcha. En caso de grandes desplaza-
mientos se puede indicar fijador o torni-
llo. La consolidación se produce rápida-
mente, por lo general en 3 semanas.
Las separaciones púbicas o las fractu-
ras-separaciones generalmente se tra-
tan con fijador externo o placa supra-
púbica. En la mujer joven, la placa se
retira a los 6 meses.
La reanudación del apoyo suele diferir-
se 6 semanas.
En las roturas completas del arco pos-
C 1 C 2
terior, el fijador externo o la placa púbi-
ca no suprimen la inestabilidad verti-
8 Educación del paciente para prevenir la luxación.
cal; es necesario agregar una tracción
A.1. Movimientos vedados: flexión del tronco/flexión/aducción/ rotación interna; 2. Movimientos reco-
mendados: ayuda con aparatos/flexión del miembro inferior (MI). con peso suspendido elevado (> 10 kg)
B.1. Movimientos vedados: flexión/aducción/rotación interna del miembro inferior (MI); 2. durante 6 semanas, o una osteosíntesis
Movimientos recomendados: ayuda con aparatos/flexión del miembro inferior (MI). posterior que permite a los pacientes
C.1. Movimientos vedados: rotación con pie fijado al suelo; 2. Movimientos recomendados: rotación sentarse, en especial en caso de trau-
con el pie levantado. matismo torácico asociado. El apoyo se
reanuda, según los casos, entre 6 sema-
nas y 3 meses [25, 34, 35, 38].
ción puede ponerse en marcha aun con ca, de una rama del marco obturador
resultados analíticos imperfectos y con en una mujer mayor, y el estallido de la TRATAMIENTO
rendimientos funcionales suficientes. pelvis por traumatismo violento en un DE REHABILITACIÓN
Sólo los pacientes que presentan com- adulto joven, caso en que la mortalidad Las técnicas de rehabilitación depen-
plicaciones requieren una rehabilita- puede alcanzar el 50 %. den directamente de las indicaciones
ción más prolongada en medio hospita- El anillo pélvico cumple dos funciones quirúrgicas:
lario; los demás deben continuar un principales: — con apoyo precoz y objetivo funcio-
tratamiento ambulatorio [10]. — trasmite las presiones del peso del nal: la intención es rehabilitar los
cuerpo hacia los miembros inferiores e, miembros inferiores para su función
inversamente, la reacción del suelo inicial, sin provocar dolor;
hacia el tronco; — con apoyo diferido, tomando en
Fracturas de la pelvis — permite la sustentación de las vísce- cuenta el plazo de consolidación: desde
(excepto el acetábulo) ras pélvicas y la protección de los ele- la fase de permanencia en cama hasta
mentos vasculonerviosos destinados a la reanudación del apoyo lo principal
Los traumatismos de la pelvis pueden la pelvis menor y a los miembros infe- es la movilización activa asistida y el
ser muy diferentes en cuanto a su gra- riores. mantenimiento de la función muscular.
vedad: no existe una medida común La clave de las inestabilidades de las La balneoterapia y la utilización del
entre la fractura de fatiga osteoporóti- fracturas de la pelvis es proporcionada plano inclinado permiten un apoyo
6
7. Kinesiterapia Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis E – 26-230-A-10
tórax, abdomen y columna vertebral;
9 los pacientes con fracturas múltiples
tienen sobre todo lesiones de los miem-
bros inferiores. Las complicaciones vas-
culares comprometen la supervivencia
inmediata del herido.
La abertura cutánea se encuentra en el
3% de los casos; los derrames tipo
Morel-Lavallée son fuente de infeccio-
nes secundarias y necrosis. Las lesiones
anorrectales y vaginales son frecuentes.
Las complicaciones urológicas se produ-
cen en el 7 al 25 % de los casos; las lesio-
nes uretrales son fuente de secuelas tar-
días y de trastornos sexuales: dispareu-
nia en la mujer, trastornos de la erec-
ción y la eyaculación en el hombre [42].
Las complicaciones neurológicas (14 %) [24]
consisten en avulsiones radiculares,
A sobre todo observadas en las fracturas
del sacro; su recuperación es impensa-
ble aun con reducción correcta de la
fractura; otras series refieren simples
estiramientos que pueden recuperarse
tardíamente.
Las complicaciones inherentes al trata-
miento no son excepcionales: infeccio-
nes, desplazamiento secundario tras la
extracción de un fijador, rotura de tor-
nillo, etc.
Las pseudoartrosis, sobre todo del sacro,
explican una parte de las secuelas dolo-
rosas a largo plazo.
Por último, y según diferentes estadís-
ticas, la proporción de heridos que se
reintegran a su empleo anterior oscila-
ría entre el 25 y el 50 %.
B C
Fracturas
progresivo. La recuperación funcional a un movimiento de torsión, comienza
de los miembros inferiores y del eje recién en la fase de readaptación.
del acetábulo [19, 21]
«pelvis-tronco» se realiza por interme- Se deben distinguir dos formas de frac-
dio de las técnicas habituales. En fase COMPLICACIONES [3, 16] turas del acetábulo:
precoz, cualquier cambio de posición Las lesiones aisladas de la pelvis (28 %) — las fracturas de la pared posterior o
se realiza en bloqueo activo; la activi- son menos frecuentes que los politrau- posterosuperior, que casi siempre se
dad muscular dinámica, asociada o no matismos (72 %) que afectan cráneo, asocian a una luxación de la cadera;
11
10
7
8. E – 26-230-A-10 Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis Kinesiterapia
I Tratamiento de rehabilitación
12
En caso de tratamiento ortopédico se
coloca una tracción-suspensión duran-
te 6 semanas, siempre que la congruen-
cia y la estabilidad de la articulación no
estén afectadas. La rehabilitación co-
mienza precozmente en situación de
«ingravidez», cuidando en especial de
no movilizar la cadera en flexión para
no reproducir el mecanismo del trau-
matismo inicial.
En caso de tratamiento quirúrgico, la
colocación de una placa posterior per-
mite una rehabilitación precoz con las
precauciones antes citadas, especial-
mente durante los traslados. La reanu-
dación de la marcha es posible, impo-
niendo el pie contacto para evitar en
A absoluto el efecto «leva». La balneotera-
pia facilita el aprendizaje. El apoyo total
se indica hacia el final del segundo mes.
Durante la fase de readaptación, la apa-
rición de dolores mecánicos puede
indicar el desarrollo de una artrosis
precoz o de una necrosis.
FRACTURAS SIMPLES
O COMPLEJAS DE LAS COLUMNAS
Existen dos actitudes terapéuticas, una
ortopédica y otra quirúrgica.
I Tratamiento ortopédico
Este modo de tratamiento, de reducción
equivalente, da mejores resultados que
el tratamiento quirúrgico. En las perso-
nas de edad, habitualmente se prefiere
obtener la consolidación del acetábulo,
incluso imperfecta, y proceder ulterior-
B mente a una artroplastia total, como en
las fracturas osteocondrales asociadas
del polo superior de la cabeza femoral.
Consiste en una tracción-suspensión
prolongada de 6 semanas.
La tracción transtibial, por la elonga-
ción dolorosa de los ligamentos de la
rodilla, es un factor de algodistrofia
refleja; la tracción transfemoral es más
recomendable.
I Tratamiento quirúrgico
Se impone en caso de fracturas comple-
jas (fracturas de las dos columnas o
C transversales en T) insuficientemente
reducidas por el tratamiento ortopédi-
co. Tienen el inconveniente de requerir
— las fracturas de las columnas, sim- pante continúa siendo la parálisis aso- incisiones amplias que afectan al
ples o complejas, que plantean proble- ciada de los glúteos. potencial muscular. Además se com-
mas completamente diferentes. prueba un porcentaje de osteomas
post-operatorios muy elevado.
I Tratamiento quirúrgico
FRACTURAS DE LA PARED
POSTERIOR DEL ACETÁBULO La reducción de la luxación es una I Tratamiento de rehabilitación
urgencia imperativa, si se demora,
Se producen por un choque frontal con- La actitud frente a la persona mayor
aumenta el riesgo de necrosis cefálica.
tra la cadera y la rodilla flexionadas. con tratamiento ortopédico y reducción
La luxación de la cadera puede ser res- Puede colocarse una tracción-suspen- imperfecta es esencialmente antálgica.
ponsable del estiramiento pléxico del sión, la que permite contener la luxa- El uso de bastones suele ser la solución
tronco lumbosacro, como lo indica la ción y realizar una tomografía compu- transitoria.
deficiencia de la región anteroexterna y tadorizada a fin de orientar las indica- En caso de tratamiento quirúrgico, la
del tibial posterior, pero lo más preocu- ciones terapéuticas. intensidad de la rehabilitación depende
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9. Kinesiterapia Rehabilitación de las fracturas del extremo superior del fémur y de la pelvis E – 26-230-A-10
de la extensión de las suturas muscula- siva, particularmente en la vía ilioin- de un fragmento del techo desprovisto
res, especialmente de los músculos glú- guinal que corta vasos linfáticos, sobre de vascularización.
teos, y de la consolidación del foco de todo cuando previamente se aplicó
fractura. La fase de readaptación se tracción transósea. La administración
caracteriza por la lentitud de la recupe- de antibióticos permite reducirlas aun- I Artrosis precoz
ración de la fuerza muscular, y requie- que no suprimirlas.
Las fracturas mal reducidas no justifi-
re el uso prolongado de bastones
can su aparición.
durante la marcha. I Osificaciones
El diagnóstico se basa en la limitación
COMPLICACIONES dolorosa de los movimientos, signos
inflamatorios locales sin signos infec- Conclusión
I Nerviosas ciosos y una nube radiológica mal limi-
La vía ilioinguinal impone el aislamien- tada a pesar del tratamiento con antiin- La readaptación y la rehabilitación tras
to de los nervios femorocutáneo y crural flamatorios. Son más frecuentes en los las fracturas del extremo superior del
que pueden encontrarse estirados; el politraumatizados (cráneo, abdomen,
fémur y/o de la pelvis implican tres con-
simple aislamiento del femorocutáneo tórax) sobre todo si han debido ser ven-
puede dejar parestesias durante varios tilados y sedados. ceptos: la restauración en cadena cerrada
meses; la sección del nervio puede ser La aplicación de radioterapia es contro- de la actividad eficaz de los músculos
causa de neuromas invalidantes. Más vertida en razón del riesgo carcinológi- glúteos, la reanudación precoz del apoyo,
infrecuentes son los estiramientos ciáti- co tardío. Puede utilizarse en caso de adaptado a cada caso particular, y la edu-
cos, las necrosis perineales y las parálisis reintervención para ablación de un cación del movimiento con ayuda de
del nervio pudendo interno. osteoma. material ortopédico.
Se trata de alcanzar un objetivo único, la
I Infecciosas I Necrosis óseas «calidad de vida», concepto subjetivo
El porcentaje de infecciones nosoco- Pueden ser cefálicas, parciales o totales, cuyo «director de orquesta» debe ser el
miales es elevado en esta cirugía exten- y también acetabulares con afectación propio paciente.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo original: Maldjian A, Bouric JM et Tayon B. Rééducation des fractures de l´extrémité
supérieure du fémur et du bassin. Encycl. Méd. Chir. (Elsevier, Paris-France), Kinésithérapie-Médecine physique-Réadaptation, 26-230-A-10, 1999, 10 p.
Bibliografía
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