Revista digital interactiva gratuita, con notas, comentarios, música, videos e informaciones de todo el mundo tanguero. Editada en Rosario, Santa Fe, Argentina.
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1. Tangoycultura
Popular
Tango y unidad
OSVALDO PUGLIESE:
TESTIMONIOS DE UNA VIDA
ACERCA DEL ARTE SIN TIEMPO
NI GEOGRAFÍA
TANGO NUEVO, TANGO DE SIEMPRE
Noticias * Discos * Cuentos * Milongas en Rosario
* Tango en el Mundo y mucho más!
Nº153Año XIV
Marzo/abril
2014
2. DIRECCIÓN:
Ricardo Schoua
TEMA MUSICAL: Corralera
AUTOR: Anselmo Aieta
INTÉRPRETES: Julia Rebekka Adler viola
José Gallardo piano
COLABORADORES:
Juan Manuel Avellaneda
Ricardo Bruno
Beatriz Villar
Horacio Cavallo
Ángel Mario Herreros
DISEÑO: Adriana Rolón
PARA COMUNICARTE CON NOSOTROS
contacto@intertango.com
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Tel: (0341) - 4355629
ROSARIO - SANTA FE - ARGENTINA
Las notas firmadas no reflejan
necesariamente la opinión
del editor.
3. Sumario
Editorial
Tip!
Tip!
Tango y unidad
Editorial: Tango y unidad
Acerca del arte sin tiempo
ni geografía
Lectores
Tango nuevo, tango
de siempre
Aquellas hermosas
canciogasiones
Polémica en el Foro
Milongas rosarinas
Discos
Tango en el mundo
Videos
Silencio en la noche
Poema Soy
4. Tango y unidad
Editorial
e
n múltiples
ocasiones se
ha hablado de
que los tangueros
tenemos que estar
unidos. ¿Es posible?
¿De qué manera?
Yo creo que depende
de lo que se
entienda por unidad.
Es cierto que a todos
los que abrazamos
el tango como un
sentimiento, una
pasión, nos une
precisamente ese
sentimiento. Pero
también es cierto
que tenemos muchas
diferencias de
concepción, a veces
muy profundas,
sin mencionar
las diferencias de
intereses. Yo diría
que es lógico, es
inevitable y es
bueno que existan
esas diferencias, el
asunto es cómo las
manejamos.
Desde el punto de
vista del difusor, y
hay que entender
que esta tarea le
cabe a cualquiera
cuya actividad
esté relacionada
con el tango, hay
que promover con
amplitud todo lo que
aparece, salvo lo que
sea de mal gusto
o de mala calidad.
No nos engañemos:
en el medio hay
mucho ego y mucha
envidia y no dan
muchas ganas de
difundir a quienes
personifican dichas
actitudes. A muchos
les resulta difícil
entender que cuanto
más actividades
se den a conocer,
sin cuestiones de
cartel, más impulso
tendrá el tango y
todos saldremos
beneficiados (incluso
aquéllos que hoy son
indiferentes).
Este es un camino
de unidad en la
diversidad. En su
trayecto hoy vemos
iniciativas conjuntas
e intercambios que
hay que intensificar.
A través de nuestra
revista, nuestro
diario Mundo
Tanguero, nuestro
grupo en Facebook,
intentamos
transitarlo de la
mejor manera
posible. Contamos
con la comprensión
y el apoyo de todos
ustedes.
¡Muchas gracias!
¡Hasta el próximo
número!
Ricardo Schoua
5. Notas
Acerca del arte sin
tiempo ni geografía
M
anuel Machado decía:
Hasta que el pueblo las
canta
las coplas, coplas no son
y cuando las canta el pueblo
ya nadie sabe el autor.
Procura tú que tus coplas
vayan al pueblo a parar,
que al volcar el corazón
en el alma popular
lo que se pierde de nombre
se gana de eternidad…
Se lo escuché a Facundo Cabral,
probablemente en el disco
“América Canta” que en 1998
grabó con Andrés Jiménez en vivo
en Puerto Rico.
Y lo recordé hoy escuchando
una grabación de Biagi donde la
mejicanísima “Cielito Lindo” se les atribuye en autoría a los hermanos
Fresedo. Tal vez por travesuras de los derechos fonográficos o, pensando
con buena voluntad, una confusión con los arregladores y –presumo-
autores de unos compases antes del primer estribillo.
Quirino Mendoza Cortez es el autor de “Cielito Lindo”, aunque en algún
momento (cuentan los foristas de Internet) se llegó a dudar de que
fuese mejicana, porque su primera copla habla de la andaluza Sierra
Morena. Uno de los mencionados foristas dice que la interpenetración
cultural entre España y América es tan grande que en nuestra Argentina
también esos versos andaluces se reproducen en una zamba que en
SADAIC está registrada a nombre de Antonio Tormos (sic, ver SADAIC)
sobre una letra popular.
6. Cuando algo te satisface mucho,
mucho, quieres darlo a conocer,
compartirlo. El tango muy poco
conocido y practicado a nivel
popular, nos llevó a quererlo
disfrutar y compartir al aire libre
en Cd de México hace unos 15
años. Primero algunos compañeros
bailaron en la Alameda Central,
seguimos en Parque México,
Coyoacán y la Casa de la
Cultura Juan Rulfo. Luego otros
grupos se han encargado de llevar
el 2 x 4 a muchos otros lugares
en la forma de tango en la calle
y tango itinerante -a bordo de un
turibus con paradas a bailar en
lugares emblemáticos de la Ciudad
de México, Toluca, Monterrey,
Guadalajara y muchos otros sitios.
Más allá de la similitud de la
melodía con una de 1924 de
Alfredo Pelaia (no registrada en
Autores y Compositores) lo cierto
es que Tormo »
» popularizó la zamba Ay que se
va como saludo musical de sus
programas de radio.
No es mi intención la suspicacia
sobre autorías o “curros”; prefiero
rescatar los versos de Machado
(a Borges le preguntaron en una
conferencia en el Instituto de
Cultura Hispánica de Madrid si
había olvidado a Antonio Machado
y contestó “no sabía que Manuel
Machado tuviese un hermano”).
No cabe ninguna duda de que “…lo
que se pierde de nombre/ se gana
de eternidad...”
Además, allá por los tiempos de don
Quirino, nacido en 1860, no se habían
establecido los derechos de autor. De
hecho el español Iradier y Salaverri
-por su editor musical rebautizado
Yradier- (1809-1865), después de
visitar Cuba y enamorarse de la
habanera no sólo nos regaló “La
Paloma” sino “El Arreglito”, pieza
famosa… Gracias a otro autor.
Georges Bizet la convirtió en la
habanera de la ópera Carmen
creyendo que era del acervo
popular americano.
Así cruzaban el Atlántico melodías
y coplas en la panza de los
barcos en uno y otro sentido. Una
recopilación de poesía popular
peruana de Nicomedes Santa Cruz
recoge un cantar que cuenta que
“A la mar fui por naranjas/cosa que
la mar no tiene…”
Cuando un amigo asturiano me
escuchó cantar otra versión de
esas coplas que grabaran Leda
Valladares y María Elena Walsh en
“Canciones de Maricastaña”, con
los ojos brillantes preguntó ¿Cómo
puedes conocer tú eso siendo tan
joven, si a mí me lo cantaba mi
madre de chaval…”?
Notas
Lectores
7. Cuando le dije que era mucho
más antigua que su mamá,
brindamos e intentamos
a dúo la segunda parte
que dice “…La farola de mi
pueblo/está partida en dos
cachos:/una alumbra a los
marinos/y otra alumbra a los
borrachos…”
Cosas de la globalización.
En bodega transatlántica o
a bordo de Internet el arte
popular nos une más que
cualquier tratado económico
o político.
Y qué bonito suena Cielito
Lindo en tiempo de tango por
la orquesta de Biagi, miren
hasta dónde me llevó…
Será hasta la próxima, claro
está, si la barra no dispone
mejor cosa.
Juan Manuel Avellaneda
Curiosidades
La experiencia es única y vale la
pena vivirla. Como muestra visiten
mi cuenta en Flickr donde tengo
una modesta colección de Outdoors
Tango. ¡Cuento con su feedback y les
saludo desde la Meseta del Anáhuac!
Francisco J. Romero, MBA
Clic en http://www.flickr.com/photos/
pacoromero/sets/
EMPA - Escuela de Música
Popular de Avellaneda
Por si alguien no se enteró....
Hace casi 28 años (en mayo de
1986), nacía la Escuela de Música
Popular de Avellaneda, fundado
por prestigiosos músicos de amplia
trayectoria en la escena popular.
Horacio Salgán, Manolo Juarez,
Hugo Pierre, Daniel Binelli y Rodolfo
Mederos conformaron el primer
Consejo Academico encargados de
coordinar la tarea que por primera
vez se llevaría a cabo: sistematizar la
enseñanza del tango, el folklore y el
jazz en una institución de educación
musical que recibiría, no solo a
estudiantes de Buenos Aires, sino
también a estudiantes del resto del
país y del exterior.
A veces los efectos marketineros y los
juegos de palabras que se utilizan,
nos hacen olvidar ciertas aclaraciones
que NUNCA están de más....
¡Gracias maestros!
http://www.empa.edu.ar/
seccion/historia
EMPA - Escuela de Música Popular
de Avellaneda
Primera escuela Sudámericana
de Musica popular de avellaneda.
Formación básica, formación docente,
profesorado de instrumento, Areas de
jazz, tango y folklore
EMPA.EDU.AR
Claudia Humoller
8. Están los que crean, los que recrean,
los que crean y recrean de una manera
y de otra. Hay, como siempre hubo,
diferentes estilos. Hay como siempre
hubo, diferentes gustos entre
los que reciben al tango,
y por lo tanto hay
diferentes opiniones
sobre esos estilos.
Gusta más tal o
cual cantor, músico,
poeta, bailarín…
Siempre fue así, y
en esto también está
eso de la continuidad.
Creo que no es una
nueva “época dorada”.
Esa ya existió y fue
increíble. ¡Cómo me hubiese
gustado ser parte de ella…! Y al
mismo tiempo ¡cómo me gusta ser
parte de esta época de resurgimiento
del tango!
http://argentinatango.es/Tango-
nuevo-tango-de-siempre.-He-aqui-la-
cuestion-plantea-Ricardo-Bruno-en-
Argentina/703
Agradecemos a Eduardo Aldiser
de lo que pasa hoy con el tango. Hoy los
que escriben, los que interpretan en lo
cantado, tocado y bailado, conocen de
qué están hablando, saben en su gran
mayoría de dónde viene la cosa, ya sea
para recrear, para darle una vuelta de
rosca más, pero saben bien quiénes
fueron, cómo pensaban y sentían el
tango los que empezaron.
R
icardo Bruno ha publicado
en Argentina Tango
una amplia encuesta
sobre el tango “nuevo”.
Aquí, una de las
respuestas:
Hernán “Cucuza”
Castiello, cantor,
letrista y compositor:
En el tango está
pasando todo lo que
tiene que pasar… Entre
esas cosas pasa el tango
“nuevo”, y las comillas son
porque, si bien en muchos
casos hay composiciones, cantores,
músicos, público nuevo, no sé si
rotularlo como “tango nuevo”.
Prefiero verlo como continuación,
una prolongación, con el sello
propio de cada cantor, músico,
compositor, autor. Eso sí… está
hecho hoy es verdad, pero sigue
siendo “consecuencia” de… Esto lo
digo como un halago, como mérito
Notas
Tango
nuevo,
tango de
siempre
9. Aquellas hermosas
canciogasiones
(O cuando Rosario fue la capital de Buenos Aires)
M
is primeras
imágenes de
Rosario son, allá
en un tiempo ahora
lejano, una estación de
tren y la calle Cafferata
en dónde el tío Natalio
tenía una colchonería.
“Todos somos hijos de la
historia”, decía alguien.
Hijo, o mejor dicho nieto
de “rusos” chacareros, a
mí la historia me parió
porteño por culpa y
gracia de mi abuelo
materno. Sus cuatro
hermanos inmigrantes
habían echado
rápidamente raíces en
las quintas de Funes y
en los distintos barrios
rosarinos, pero mi
abuelo encalló su barco
en los conventillos de
San Cristóbal y en los
cabarutes de 25 de
Mayo, por lo que cada
vez que teníamos que ir
a visitar a nuestra
parentela, al abuelo
había que desamarrarlo
del Obelisco.
Pero era cuestión de
subirse al tren en
Retiro y apuntar
nomás la proa para
el lado de Rosario.
Luego llegaron los
años de la
adolescencia, el abuelo
partió de nuevo, pero
esa vez nunca más lo
volvimos a ver. Y así
Rosario me quedó en
la postal de las pibas
del barrio Etchesortu,
en las ásperas tenidas
futboleras, y en el
orgullo malevo de la
“otra” ciudad con
cicatriz de puerto.
Notas
10. En fin, pasaron los años de ese
tiempo inocente y la vida me
encontró con el pelo rapado y un
fusil en la mano jugando a los
soldaditos en la VII Brigada Aérea
de Morón. Mientras los milicos
preparaban su disparatada
incursión en Malvinas, los colimbas
cantábamos en las rondas de pan
duro y mate cocido el “…y rasguña
las piedras”, o el más inextricable
aún “jugo de tomate frío…”.
Terminé el servicio militar y al año
estalló la guerra, pero la canción
ya no era la misma.
Exhaustos y desorientados por
tantos años de prohibiciones,
hurgábamos las huellas de una
edad robada en un repertorio un
tanto críptico, legado de los años
’70. Pero la canción ya no era la
misma. ¿Cómo entender que
Manal, Spinetta, Charly, el mismo
León Gieco, comenzaran de pronto
a sonar en la radio con natural
cotidianeidad?. Difícil.
Para algunos, el rock nacional ya
no tenía razón de ser si ya no
pertenecía al territorio exclusivo
del culto. Para otros, había que
salir de la secta, de los sótanos y
sumarse a la gente, agrandar los
horizontes, admitir otras
posibilidades que excedieran al
rock. Era el momento de cantar
una que sepamos todos che.
Entonces, la voz cantante llegó de
Rosario, igual que en los ‘60 con
Los Gatos de Nebbia. Un tal
Baglietto le anunciaba a Mirta que
alguien estaba de regreso. Era en
Abril, y a un año, todavía
resonaban los acordes del
bombazo que hundiera al Belgrano
en los oídos de nuestra
inconsciencia colectiva.
Necesitábamos respuestas,
palabras que hablaran de nosotros.
No bastaba con sólo pedirle a Dios.
A decir verdad, casi nadie reparaba
en si los desconocidos que
figuraban en la contratapa del long
play como los autores de los temas
eran rosarinos u oriundos de la
Puna de Atacama. Poco importaba
ese detalle desde nuestra
cosmovisión porteñocentrista. Lo
que importaba era volver a cantar.
Sin embargo, esos apellidos fueron
instalándose de a poco en cada
uno de nosotros. Fandermole,
Abonizio, Goldín, de los Santos.
No estábamos acostumbrados a la
figura del intérprete en el rock. -
¿Qué es eso de cantar temas de
otros?-.
Pero pronto comprendimos que
esos pajueranos no se andaban
con chiquitas. Con el susodicho
Fandermole, un paisano de
metáforas llevar (“Sabes hermano
lo triste que estoy, / se me ha
hecho un duelo de trinos y sangre
la voz”), comenzamos a recuperar
ese regodeo con el universo
interior de la poesía. Goldín
proclamaba su lograda preposición
onírica: “Dulce pájaro, / mirada de
volcán”. Y el Adrián Abonizio nos
refregaba su épica de antihéroes
casi criollos, casi tangueros, al son
de sus historias de perdedores:
“(…) para el que vuelve del infierno
/ ya no hay más fantasías, / sólo
existe un tiempo blando.”
Después Fito confesaba que era del
‘63. (Yo soy del ‘61), pero todo me
era familiar: Kennedy, Vietnam, el
golpe del ‘76, Lennon… “¿Qué pasa
en la Tierra / que el cielo es cada
vez más chico? . Pero… ¡Oia!
¿¡Estos tipos escuchan a
Discépolo!? : “La Tierra está
maldita / y el amor con gripe, en
cama. / La gente en guerra grita,/
bulle, mata, rompe y brama.”
(-¿Qué sapa Señor?-, Enrique
Santos Discépolo).
11. A propósito: ahora que pasaron los
años y ya estoy en edad de contar
los heridos, los muertos y los que
quedamos en pie, sospecho que
esos provincianos de ciudad que
arremetieron allá por los ’80
tuvieron algo que ver con el lento
rescate que los jóvenes de aquella
época comenzáramos a hacer de la
lírica del tango. Al fin y al cabo,
todo lo importante que le sucedió a
la música de Buenos Aires,
comenzó primero por suceder lejos
de Buenos Aires.
Nos acercábamos a los treinta, el
tango nos acechaba detrás de cada
herida absurda. Mientras tanto, yo
le afanaba a un amigo la “Canta
Rock” para aprenderme los acordes
de El témpano. No era cuestión de
perder el tren con las minitas. Ya
no éramos adolescentes.
La canción ya no era la misma,
venía de otra ciudad, de otras
quemaduras de asfalto. Con olor
a pucho, con cielo de pampa.
Por eso, de vez en cuando, me da
por enchufar mi destartalado
Winco para recordar aquellos
viejos tiempos difíciles y bellos
escuchando esas canciones que
nos hicieron cantar una década
más.
Y juro que se me cae un lagrimón.
Todavía me emocionan ciertas
cosas.
Alejandro Szwarcman
http://alejandroszwarcman.blogspot.com.
ar/2009/12/aquellas-hermosas-
canciogasiones-o.html
Notas
DE NUEVO TANGO -
Documental sobre tango joven
https://www.youtube.com/watch?v=ncd4bwhojEA
Documental realizado por Tomás Crom
y Guadalupe Fernández
12. Notas
Angel Mario Herreros
Queridos: quiero compartirles algo...
Resulta que anoche recibí un mensaje
privado de una muchacha que está
haciendo alguna clase de profesorado
(no le pedí mayores precisiones)...
esta persona me escribió de parte de
un amigo mío (un artista plástico por
el que siento gran respeto y aprecio)
quien le pasó mis datos en la creencia
de que sé algo de tango (jeje).
La cuestión es que la joven me pidió
que hiciera una comparación entre ¡la
CUMBIA y el TANGO! Y me pidió letras
de tango que se puedan asimilar a la
cumbia, como, por ejemplo, ¡LOS
MAREADOS! (Enrique Cadícamo)...
aclarándome que ella sabe que
“ALGUNAS LETRAS DE TANGO NO
ESTÁN VINCULADAS A LA CUMBIA”...
Ella funda su parecer respecto de la
similitud entre cumbia y tango en los
siguientes aspectos:
1) Ambos géneros nacieron en la
marginalidad.
2) Las letras de ambos géneros están
escritas en “lenguaje cerrado”
(lunfardo)
Aclaro que, en un momento de la
comunicación, ella hace hincapié en la
“cumbia villera”.
Por supuesto mi respuesta fue
categórica: NO HAY RELACIÓN ENTRE
AMBOS GÉNEROS, por lo tanto no
podemos extrapolar parámetros que
permitan alguna comparación a base
de afinidades...
A nivel compás la cumbia está
escrita, aparentemente, en 4x4,
aunque en la práctica se trata de un
ritmo binario... mientras que el tango,
que comenzó en 2x4, pasó luego al
4x4 y por fin, en muchos casos, al
4x8...
La gran mayoría de las letras de tango
no utiliza lunfardo (mal que nos pese).
Es más, los más grandes letristas del
género (Homero Manzi; Homero
Expósito; José María Contursi) no
escribieron en lunfardo (o lo utilizaron
en dosis terapéuticas)... es claro que
hay excepciones como Discepolín.
Tampoco el formato de las letras se
parece en nada a la cumbia... tampoco
su sustrato filosófico.
Hasta aquí la anécdota... AHORA LA
REFLEXIÓN: lamentablemente son
muchas las barbaridades que se
difunden sobre el Tango... Datos,
anécdotas inexistentes, afirmaciones
totalmente falsas dichas con gran
autoridad por algunos “historiadores” y
“conocedores” del género, repetidas
hasta el cansancio hasta
institucionalizarse...
Justamente anteayer hablaba con el
forista Marcelo Castelo, un esforzado y
concienzudo estudioso del género, y
ambos coincidíamos en la necesidad
de esclarecer acerca de tantos y tantos
clichés del tango que nada tienen que
ver con la realidad y que la gente,
inocentemente, toma como “verdad
revelada”...
No pretendo, con estas palabras, hacer
escarnio de muchos “investigadores”
del tango, muchos de ellos
seguramente bien intencionados. Con
Marcelo comentábamos que en la
época en que se hicieron algunos
estudios no se contaba con los medios
y recursos con que hoy se cuenta para
profundizar en muchos aspectos del
gotán... y también es cierto que la
mayoría de estos “estudiosos”
Polémica
en el Foro
13. tampoco tenían en su momento
(ni tienen ahora) los conocimientos y
técnicas relacionadas, por ejemplo, con
el “análisis crítico”, un bagaje
metodológico que les permita ahondar
en determinadas cuestiones...
SE IMPONE, AMIGOS, UNA NUEVA
LECTURA SOBRE MUCHOS ASPECTOS
DEL TANGO, que aporte mayor
seriedad, mayor rigurosidad, tanto al
trabajo de campo como a las
conclusiones en cuanto al estudio de
nuestra querida música popular, a
menos que queramos seguir
repitiendo, como loros, dando por
ciertas afirmaciones muchas veces
cuestionables, respecto del género
que decimos amar... como siempre
digo: SÓLO SE AMA LO QUE SE
CONOCE... y la madre de todo avance
en el conocimiento son la duda, la
curiosidad y la discusión.
Andrés Palacio Sciabarrasi
A mi me suele suceder de usar algunos
parangones del Cuarteto, para intentar
entender cosas del Tango y sus
Orquestas. Aquí en Córdoba existió una
continuidad sobre la Orquesta con
música en vivo para el baile Social en
los clubes desde 1960 en que las
mismas bandas que tocaban tango,
también hacían otros ritmos hasta
moldear un nuevo genero autóctono
como el Cuarteto. (De hecho las
primeras bandas de Cuarteto también
tienen discos de tango). Actualmente
en los mismos grandes clubes de barrio
donde otrora tocaban orquestas de
Tango, hoy tocan grandes bandas de
Cuarteto, es una continuidad en el
espacio social que nunca se cortó. (Y
ojo que son 14 músicos tocando en
vivo, nada de playback ni cosas raras,
que sí tiene la Cumbia). Otro aspecto
interesante es la circulación en la pista,
cuando la masa baila, giran en sentido
antihorario. Otra observación es que
cuando La Mona toca en una
determinada zona de la Ciudad, otras
bandas intentan los clubes mas alejados
a éste, quiero decir la dinámica de los
lugares y la programación atentos a los
mas convocantes me hace acordar a un
D’Arienzo tocando en determinada zona
de Baires o un Pugliese en Avellaneda...
Y EL RESTO DE LAS ORQUESTAS
ACOMODANDOSE para no perjudicarse.
En fin, son observaciones desde los
social nada más. Saludos
Angel Mario Herreros
Andrés Palacio Sciabarrasi: entiendo el
punto, es más, cuando me voy de gira,
y estoy a 10.000 km. de mi país...
¿Sabés qué música llevo? ¡Cuarteto! No
tango... Cuarteto... no me preguntes
por qué, pero me hace sentir muy cerca
de la tierra... Al tango lo llevo conmigo,
en mi cabeza, en mi corazón, en mi
guitarra y mis zapatos de baile... pero
los CD’s que llevo son de La Mona y de
Rodrigo... serán mis genes cordobeses,
por parte de madre, no sé...
Marcelo Castelo
Coincido Angel Mario Herreros con
todo lo que decís. Ya lo hemos
hablado y estamos de acuerdo que el
Tango se merece una nueva etapa,
una de revisión, utilizando
metodología científica y ciencias
complementarias como la antropología
social. Creo que Hugo Lamas y
Enrique Binda con su libro “El Tango
En La Sociedad Porteña - 1880-1920”
dieron el puntapié inicial.
Lamentablemente la batalla no va a
ser fácil, estos mitos están muy
instalados y promovidos por los que
vos alguna ves llamaste “impúdicos
fabricantes de refritos”. Estos
recopiladores están por doquier,
incluso en facultades de renombre
como FLACSO y otros centros de
enseñanza de menor renombre. Creo
que el problema es que “Una buena
parla, mata a una buena idea...”,
entonces los chamuyeros logran
captar un mercado, que tipos grosos
como Roberto Selles no pueden llegar
debido a un bajo perfil y una alta
dosis de humildad. Como dijera
Discepolín “Los inmorales nos han
igualado....” yo agrego que nos han
superado.
14.
15. Notas
Angel Mario Herreros
Ahora, Andrés Palacio Sciabarrasi:
disculpame, pero tus consideraciones de
orden social no me convencen para
hacer un parangón del tango con la
cumbia... de ninguna manera... Incluso
no creo que estas observaciones que
hacés respondan a motivos o
explicaciones sociales: fijate, en primer
término, la gran mayoría de las danzas
sociales, como el tango, que se bailan
colectivamente, se mueven en sentido
antihorario... esto no es privativo del
tango y el cuarteto, ni mucho menos...
en segundo término, esto de la dinámica
de los lugares, obedece más bien a
razones comerciales que sociales o
culturales, puede aplicarse incluso a la
elección de poner un almacén de barrio
cerca o lejos de un gran supermercado...
se trata de no competir en forma directa
con un adversario de poder superior...
Por último, la continuidad de los espacios
sociales tampoco es exclusiva de estos
dos géneros, sino que se repite en
cantidad de lugares y para diferentes
ritmos... en Mi Club, de Banfield, donde
organiza el amigo Marcelo Castelo,
también se suceden, alternativamente,
la música disco, tecno, tango... y por
esto no explica vector sociológico
alguno. Por último, amigo, el
fundamento de mi mensaje, digo, la
razón última de mi post era que muchos
clichés que no se sostienen de ninguna
manera, circulan a través de los años...
son repetidos permanentemente... y no
resisten, en ocasiones, el menor
análisis... Repito, es necesario estudiar
al tango con un poquito más de rigor y
seriedad... Va un abrazo.
Marcelo Castelo
Andrés Palacio Sciabarrasi la verdad es
que desconozco el origen y evolución
del cuarteto. Lo que si te puedo decir es
que las primeras orquestas de Tango,
también tocaban otros ritmos, debido a
eso luego se impuso la denominación
de “Orquesta Típica Criolla”, no nos
olvidemos que un músico de Tango, es
ante todo, un músico. Lo mismo rige
para cualquier otro género. Por ejemplo
Javier De Ciriaco, cantante de sexteto
milonguero, antes cantaba heavy metal.
También vemos muchos bailarines de
folklore que luego terminan siendo
bailarines de Tango, como ejemplo
tenemos a Roberto Herrera. Con esto
quiero decir que esos cambios de un
género musical a otro, no significan que
los géneros se hallen emparentados.
Y no nos olvidemos que los músicos de
cualquier género, son ante todo
miembros de una sociedad, por lo tanto
comparten una dinámica social, lo cual
puede generar conductas similares, sin
que esto signifique una relación directa
entre ambos.
Angel Mario Herreros
Marcelo Castelo: en un todo de acuerdo
contigo: IMPÚDICOS FABRICANTES DE
REFRITOS... es verdad, en algún
momento los definí así...
RECOPILADORES... Es verdad que el
medio está lleno de chamuyeros, meros
repetidores, que dicen lo que les parece
y les conviene, sin saber, O A
SABIENDAS, de que hacen al Tango un
daño enorme... siempre digo que EL
TEMPLO SE NOS HA LLENADO DE
MERCADERES... Por último, el gran
Roberto Selles ha pecado, peca y
pecará de HUMILDAD y PERFIL BAJO...
y esto hace que, lamentablemente, su
voz no haya sido suficientemente
escuchada.
No olvidemos a Enrique Rodríguez y su
Orquesta de Todos los Ritmos... ni que
D’Arienzo también tocó jazz... o que
Roberto Rufino también cantó boleros
disfrazado de “El Cantante
Enmascarado”... y no hables de Raúl
Lavié... ¿Entonces, sucede que todos
estos ritmos están emparentados? No...
una y mil veces... NO.
Héctor Enrique Capocasale
Más allá del absurdo que para mi
supone trazar paralelismos entre la
cumbia villera y el tango (aunque
recuerdo un trabajo publicado en
16. existe un problema de desnaturalización
y extrañamiento del objeto de estudio
tango. Son incontables los trabajos
académicos que he leído sobre el tango
en los cuales sistemáticamente se lo
analiza a través de bibliografía
completamente ajena sin tener un
sustento teórico de peso sobre el objeto
principal. Esa es mi sencilla opinión: un
exceso metodológico y teórico
complementario que intentan encajar
forzadamente.
Angel Mario Herreros
Amigo Héctor Enrique Capocasale: ante
todo quiero felicitarte por la propiedad
con que te expresás... estoy bastante
de acuerdo con tu mensaje, salvo por
esto, que en mi opinión implica una
contradicción tuya, dicho sea con todo
respeto... Por un lado decís,
textualmente “se lo analiza a través de
bibliografía completamente ajena sin
tener un sustento teórico de peso sobre
el objeto principal”, por otro lado decís:
“exceso metodológico y teórico
complementario que tratan de encajar
forzadamente”... ¿Hay o no sustento
teórico? Permitime contarte mi teoría,
con la que creo Marcelo Castelo está de
acuerdo, conforme nuestras charlas
personales: La realidad es que la
mayoría de los “estudiosos del tango”
no estudia, o estudia “de memoria”
(que no es estudiar) como lo hacían
algunos en la secundaria... Estos
pseudo historiadores repiten sin
razonar... acumulan bibliografía tras
bibliografía... no aplican método
científico... o, peor aún, formulan las
teorías más disparatadas... Hoy (creo
que por un interés monetario o afán de
figurar) hay una cantidad de
profesionales de distintas disciplinas
que tratan de explicar y divulgar el
tango a través de sus profesiones...
desde médicos y filósofos hasta
maestros zen... sin preocuparse
primero en aprender de tango...
vendedores de humo... Insisto, se
necesita una nueva camada de
investigadores serios, con herramientas
adecuadas y conocimientos técnicos,
que además sepan de tango en serio...
y se necesita que estas personas
revisen una serie de clichés que muchos
tienen como “verdad revelada”... no
será fácil, hay demasiados intereses en
juego...
Marcelo Castelo
Héctor Enrique Capocasale creo estar
de acuerdo con lo que decis y digo
“creo” porque no me quedan claras
algunas cosas, a saber:
1- El estudio de la historia en la
actualidad, se nutre de muchas ciencias
complementarias como ser la
antropología social, la antropología
arqueológica, la matemática, la
biología, etc. Sí creo que en ocasiones
se hace uso de elementos que nada
tienen que ver con el objeto de estudio,
con intención de “forzar” conclusiones.
Pero quiero dejar clara mi postura
acerca de la imperiosa necesidad de
utilizar ciencias complementarias.
2- No entiendo a que te referís con
exceso metodológico. Si lo decís en
función de anteponer el método a la
prueba, estoy de acuerdo, pero
igualmente no me queda claro.
Sería bueno si podés ampliar o
simplificar tu argumento de manera que
sea mas claro, al menos para mi.
Gracias.
Angel Mario Herreros
Muy bien, Marcelo Castelo, quizás
interpreté mal al amigo Héctor Enrique
Capocasale... sería bueno que abundara
un poco más en sus conceptos, a fin de
aclarar un poco el asunto.
Héctor Enrique Capocasale
Estimado Angel Mario Herreros, muchas
gracias por tus palabras. Cuando
menciono un “exceso metodológico y
teórico complementario” hablo
nuevamente de toda la bibliografía
ajena al tratamiento exclusivo del
tango, a modo de corolario. Perdón si lo
expresé de manera confusa. Amigo
Marcelo Castelo, al igual que vos pienso
17. Notas
elortiba.org bastante correcto, que sólo los
analizaba en conjunto con el fin de demostrar la
circularidad en la transformación valor/
mercancía que sufren ciertas expresiones
culturales, aunque aún así pude leer unos
cuantos clichés que no vienen al caso) creo que
existe un problema de desnaturalización y
extrañamiento del objeto de estudio tango. Son
incontables los trabajos académicos que he
leído sobre el tango en los cuales
sistemáticamente se lo analiza a través de
bibliografía completamente ajena sin tener un
sustento teórico de peso sobre el objeto
principal. Esa es mi sencilla opinión: un exceso
metodológico y teórico complementario que
intentan encajar forzadamente.
Angel Mario Herreros
Amigo Héctor Enrique Capocasale: ante todo
quiero felicitarte por la propiedad con que te
expresás... estoy bastante de acuerdo con tu
mensaje, salvo por esto, que en mi opinión
implica una contradicción tuya, dicho sea con
todo respeto... Por un lado decís, textualmente
“se lo analiza a través de bibliografía
completamente ajena sin tener un sustento
teórico de peso sobre el objeto principal”, por
otro lado decís: “exceso metodológico y teórico
complementario que tratan de encajar
forzadamente”... ¿Hay o no sustento teórico?
Permitime contarte mi teoría, con la que creo
Marcelo Castelo está de acuerdo, conforme
nuestras charlas personales: La realidad es que
la mayoría de los “estudiosos del tango” no
estudia, o estudia “de memoria” (que no es
estudiar) como lo hacían algunos en la
secundaria... Estos pseudo historiadores repiten
sin razonar... acumulan bibliografía tras
bibliografía... no aplican método científico... o,
peor aún, formulan las teorías más
disparatadas... Hoy (creo que por un interés
monetario o afán de figurar) hay una cantidad
de profesionales de distintas disciplinas que
tratan de explicar y divulgar el tango a través
de sus profesiones... desde médicos y filósofos
hasta maestros zen... sin preocuparse primero
en aprender de tango... vendedores de humo...
Insisto, se necesita una nueva camada de
investigadores serios, con herramientas
adecuadas y conocimientos técnicos, que
además sepan de tango en serio... y se necesita
que estas personas revisen una serie de clichés
que muchos tienen como “verdad revelada”...
no será fácil, hay demasiados intereses
en juego...
Curiosidades
Es bastante conocido
por todos que ¡Tango!
es una película
musical argentina en
blanco y negro que
se estrenó el 27 de
abril de 1933 dirigida
por Luis Moglia Barth.
Es considerada la
primera película
sonora Argentina.
Lo que no es tan
conocido, que el
1 de agosto del
mismo año, también
se estrenaba en
Dinamarca una
película homónima.
Dirigida por George
Schnéevoigt, TANGO
es también sonora y si
bien se estrenó el
1 de agosto, su rodaje
comenzó varios meses
antes, por lo que
ambas películas fueron
concebidas al mismo
tiempo sin ninguna
conexión aparente
entre ambas.
En la imagen, el
cartel de la misma.
Marcelo Castelo
18. Notas
Marcelo Castelo
Héctor Enrique Capocasale creo estar
de acuerdo con lo que decis y digo
“creo” porque no me quedan claras
algunas cosas, a saber:
1- El estudio de la historia en la
actualidad, se nutre de muchas ciencias
complementarias como ser la
antropología social, la antropología
arqueológica, la matemática, la biología,
etc. Sí creo que en ocasiones se hace
uso de elementos que nada tienen que
ver con el objeto de estudio, con
intención de “forzar” conclusiones. Pero
quiero dejar clara mi postura acerca de
la imperiosa necesidad de utilizar
ciencias complementarias.
2- No entiendo a que te referís con
exceso metodológico. Si lo decís en
función de anteponer el método a la
prueba, estoy de acuerdo, pero
igualmente no me queda claro.
Sería bueno si podés ampliar o
simplificar tu argumento de manera que
sea mas claro, al menos para mi.
Gracias.
Angel Mario Herreros
Muy bien, Marcelo Castelo, quizás
interpreté mal al amigo Héctor Enrique
Capocasale... sería bueno que abundara
un poco más en sus conceptos, a fin de
aclarar un poco el asunto.
Héctor Enrique Capocasale
Estimado Angel Mario Herreros, muchas
gracias por tus palabras. Cuando
menciono un “exceso metodológico y
teórico complementario” hablo
nuevamente de toda la bibliografía
ajena al tratamiento exclusivo del
tango, a modo de corolario. Perdón si lo
expresé de manera confusa. Amigo
Marcelo Castelo, al igual que vos pienso
que las ciencias complementarias son
necesarias y mucho. Lo que señalo es
que hay trabajos enteros donde se
justifica hasta el último punto y coma
de las herramientas conceptuales y
teóricas para realizar un análisis, pero
hay poco y nada en relación a lo que se
analiza. Para ser más gráfico, leí un
trabajo sobre los efectos de la
globalización en el tango a partir de una
perspectiva decolonial.
Al leer la bibliografía, pude observar que
todo el material era sobre teóricos del
pensamiento decolonial y las políticas
culturales, lo que me permitió
comprobar que los datos del objeto
tango (algunos realmente
cuestionables) los sacaron mágicamente
de una galera y que no hay una
rigurosidad en cuanto a las fuentes.
Marcelo Castelo
Héctor, yo voy un poco más allá...
Creo que directamente faltan fuentes
primarias.. La verdad es que a veces
leo trabajos llenos de referencias
bibliográficas que más que una
investigación histórica, parece una
monografía de un estudiante secundario.
CUALQUIER INVESTIGACION QUE SE
PRECIE DE SERIA, DEBE LLEGAR A
FUENTES PRIMARIAS. Si no lo
deberíamos encuadrar en la categoría de
ensayo.
Gustavo Saraceni
Yo la verdad que no se como es la
historia, pero no encuentro el mas
mínimo paralelismo entre la cumbia
villera, un genero surgido a partir de un
estudio de marketing, y el tango, un
genero surgido de una evolución musical
y social de y en diferentes partes
del mundo.
22. OSVALDO PUGLIESE:
Testimonios de una vida
Autora: Lucela Delma “Beba” Pugliese.
Mucho se ha
escrito acerca
de Osvaldo,
pero en estas
páginas se
encuentra lo
que faltaba
en cuanto
trabajo se
conoce del
maestro.
Además
de datos
históricos
acerca de la
trayectoria del
compositor de
“La yumba”,
sumamente
interesantes, está
lo otro, lo que Beba
conoce como nadie,
el Pugliese íntimo e
ignorado en su etapa
fundamental como
creador, su vida
familiar con infinidad
de anécdotas teñidas
de un recuerdo
sentimental que fija
en la memoria de los
sucesos importantes.
(Del Prólogo de Oscar
del Priore).
ATEMPORAL
El maestro Víctor Lavallén presenta
en este disco sus originales ideas
para tocar los clásicos tangos y las
nuevas composiciones.
Su nuevo tango “Atemporal”
confirma ese sonido
tan particular que el
maestro ha logrado
desde los arreglos
y la interpretación.
Lo acompañan en la
orquesta jóvenes
instrumentistas
como Pablo
Estigarribia
que presenta aquí
su tango
“Victorioso”, dedicado al maestro
Lavallén y Alejandro Bruschini
que presenta su tango
“Airoso”, como así también Germán
Martinez en teclado enlazando
generaciones con Washington y
Leonardo Williman en violines y
Silvio Acosta en el bajo. Sumados
a ellos el cantor Hernán
Lucero con versiones
impecables de
“Recordándote”
y “Vigilia” entre otras.
‘Tango sin tiempo’,
significa todo el tango,
todos los tiempos unidos
en un repertorio donde
encontramos desde las
melodías de los años
treinta con tangos de
Mora o Barbieri hasta el presente
en la visión del maestro
Víctor Lavallén.
Libros-Discos
23. ContactoTango
Son piezas en estilo de tango de
cámara contemporáneo para viola
y piano tocados por Julia Rebekka
Adler y José Gallardo. Es una música
hermosa, exquisitamente interpretada.
Quizá no resulte familiar al oido del
tanguero tradicional, pero demuestra
la trascendencia de nuestra música y el
amor que despierta en la sensibilidad de
los grandes músicos, presente en cada
pieza. Un nuevo aporte a la universalidad
del tango. La calidad de producción
del CD es impresionante y hace honor
a la jerarquía de los intérpretes.
Es un repertorio de tango de cámara
nuevo y genial. Al lado de Piazzolla
se encuentran nombres como Miguel
Varvello, Pablo Aguirre, Gustavo
Beytelmann y Luis Borda.
La violista alemana Julia Rebekka Adler
ya se hizo conocer internacionalmente
con sus interpretaciones de las
sonatas para viola solo de Mieczyslaw
Weinberg. El pianista argentino José
Gallardo está viviendo desde hace
varios años en Alemania y llegó a ser
uno de los pianistas de música cámara
más buscados en Europa.
Discos
25. Del 21 al 23 de
marzo 2014, Open
Embrace, en Flúðir
(Islandia). DJ:
Jörg Haubner.
Del 21 al 24 de
marzo 2014, Milonga
Love Equinox, en
Sofía (Bulgaria).
Maestros: Juliana
Aparicio y Jose Almar,
Del 27 al 30 de
marzo 2014,
TangoFest
Dresden,
en Dresden
(Alemania).
Maestros: Michelle
y Joachim,
Alejandra Hobert
y Adrian Veredice,
Juan Pablo Alonso
y Anne Müller.
Música en vivo:
Solo Tango
Orquesta. DJ´s:
James Bates,
Genís Parra,
Raluca Teodor y
Csongor Kicsi. DJ´s:
Analia LaRubia del
Giglio, Lucia Mírzan,
Gergana Boeva,
Csongor Kicsi.
El 22 de marzo
2014, Venezia In
Tango, en Venecia
(Italia). DJ´s:
Roberto Rampini.
Bernhard Gehberger,
Juan Pablo Alonso,
Céline Deveze, Drago
Azdajic, Daniela
Feilcke-Wolff.
Del 28 al 30 de
marzo 2014, Austin
Spring Tango Festival,
en Austin (EE.UU.).
Maestros: Esteban
Moreno y Claudia
Codega, Joe Corbata
y Lucila Cionci,
Del 17 al 20 de
abril 2014, I Festival
Tangomagico, en
el Palacio de La
Magdalena de
Santander (Cantabria
- España). Maestros:
Ezequiel Herrera
y María Antonieta
Tuozzo, Alejandro
Regine y Umbe
Aranguren, Vito
Muñoz y Claudio
Maximiliano Cristiani y
Jesica Arfenoni. DJ´s:
Felipe Martínez, Vanja
Modzelewski, Esteban
Moreno, Avi Taicher,
Fil Cruz Jr., Tim Hall.
Del 28 al 31 de
marzo 2014, Florida
Keys Tango Marathon,
en Pigeon Key (EE.
UU.). DJ´s: Adam
Hoopengardner, Avik
Cardona, Alejandro
Fernandez Llaona y
Marina Cuervo,
Oscar del Vecchio y
Núria Llaona. DJ´s:
Maurice Gambra
y Julio Tijero.
Organizan: Núria y
Oscar / La Magia
Del Baile.
Basu, Burak Özkösem,
Angel Montero, Burcin
Unel, Radu Jianu.
Del 11 al 13 de abril
2014, X Aniversario
de la Asociación
Tanteas, en Segovia
(España). Maestros:
Campeones Mundiales
Tango Salón 2011
“Diego Benavidez y
Natasha Agudelo”.
Orquesta: Fabián
Carbone Cuarteto
Típico. Organiza:
Asociación Tanteas.
www.rincondeltango.com
26. Requiem para
La Última Esquina
Letra: A. Szwarcman, Musica: J.
Ogivieki, Arreglos y Dirección:
N. Basurto, Guion: G. Triberti,
Voz: Roberto De Lozano
https://www.youtube.com/
watch?v=uLjELFVexoc#t=159
Videos
Rubí – Altertango
Música: Juan Carlos Cobián.
Letra: Enrique Cadícamo.
https://www.youtube.com/watch?v=Bjd7KZfNfWI
27. Rodolfo y María Cieri:
Gallo ciego
(Agustín Bardi)
https://www.youtube.com/watch?v=WXrbEol-zcs
28. Cuento
Silencio
en la noche
S
alió de la
milonga con
el cuerpo
entangado y el
alma hecha un
fuelle. Siempre me
pasa lo mismo —
pensó—, así nunca
lo conseguiré. A
la salida de las
milongas debería
haber una de esas
duchas que hay
en las centrales
nucleares
para sacarse
la radiación
del cuerpo —
refunfuñó. Dos
personas que
lo escucharon
al cruzarse con
él, se alejaron
espantadas. Hay
mucho loco suelto,
se comentaron con
la mirada. Pero el
tango, sobre todo
el último, seguía
impregnando
cada milímetro
de su cuerpo,
produciéndole
hormigueos de
violín y espasmos
de bandoneón.
Pensó en la ducha
que se daría al
llegar a casa.
Agua hirviendo
para quitarme el
tango del cuerpo
y agua helada
para quitármela a
ella de la cabeza,
pensó. Pensó en las
dos porciones de
pizza de ayer que
lo esperaban en la
heladera. Recordó
una botella de
grappa que dormía
su borrachera en
algún cajón del
congelador. Tango,
ducha, pizza y
grappa, tarareó
a ritmo de tango.
Tango, ducha, pizza
y grappa, repitió
como estribillo.
Y después de la
grappa, lo mejor
será el olvido,
se dijo. El olvido
debería ser el
chan-chan final
de todo tango.
Como en la
vida misma. O
acaso no es el
olvido el final de
todas las cosas,
se preguntó
con más
afirmación que
interrogación.
En su memoria
aún sonaba ese
tango, el maldito
tango de la
despedida. Había
estado a punto
de decírselo,
de lanzarse de
una vez, aunque
le respondiera
que no. Pero,
29. una vez más, el tango
se le quedó corto. Pensó
en las otras tandas como
oportunidades perdidas.
Pensó en los abrazos
pasados y en los momentos
en que casi sí, pero al final
no. Pensó en pegar la vuelta,
regresar a la milonga recién
cerrada y seguir la estela
de su perfume. Tal vez aún
estuviera por ahí, pensó.
Tal vez había caminado
los mismos pasos, con los
mismos pensamientos en el
alma y los acordes de ese
último tango vibrando en su
corazón. Pero no. Ella sólo
caminó unos metros y en la
esquina, sola, sin él, esperó
un taxi. Podría haberme
esperado, pensó ella, podría
haberme acompañado,
se lamentó. Pero más se
lamentó de no haberle dado
más pistas, de no haber sido
capaz de bajar la guardia, en
lugar de pretender que él lo
hiciera todo. Seguramente
lo espanté con mi silencio,
pensó después de indicarle
al taxista la dirección. Pensó
en pegar la vuelta y seguir
sus pasos desde el coche.
Tal vez aún estaba por ahí,
caminando con las manos en
los bolsillos preguntándose
por qué. O quizá estuviera
sentado en el banco de una
plaza soñando con verla
llegar y ella bajaría corriendo
del taxi y se abrazaría a él
sin decir palabra. Después de
todo, por qué tenía que ser
él quien tomara la iniciativa
y no ella, si realmente lo
deseaba. Pero el taxista
no la hubiese entendido, la
hubiera tomado por loca. Eso
no sucede en las películas
norteamericanas, se dijo,
ahí los taxistas entienden
de amor y son capaces de
avanzar a 100 kilómetros
por hora por la Quinta
Avenida, en medio de un
embotellamiento, para llevar
a la chica al Central Park al
encuentro de su amor. El
taxista la miró por el espejo.
Ella sintió vergüenza. ¿Habré
pensado esa estupidez en voz
alta?, se preguntó sonrojada.
Sintió frío. Pensó en un té.
Un té bien caliente y un
par de tostadas. Aún tengo
mermelada de arándanos,
pensó, y casi sin pensar,
pagó y bajó.
Entraron a sus casas con el
cuerpo cansado y el alma
arrepentida. Sintieron la
necesidad de escribir lo que
les pasaba. Necesitaban
poner en palabras lo que
sus mentes les dictaban.
30. Necesitaban
entender y
explicarse una
historia con final
feliz. O, al menos,
con un final.
Buscaron, junto
al teléfono, un
cuaderno viejo
y algo con qué
escribir. ¡Nunca
se encuentra
un maldito lápiz
cuando más se
lo necesita!,
protestaron en voz
alta, cada uno en
su casa. Y, cada
uno en su casa, se
sentaron a escribir.
Pensaron durante
un rato. Ella con un
té y dos tostadas
con mermelada. Él
con dos porciones
de pizza fría y un
vaso de grappa
bien helada.
Miraron hacia el
techo como si las
palabras fueran a
lloverles desde el
cielo, pero el cielo,
además de raso,
suele ser mudo.
Garabatearon
palabras sueltas,
perdidas,
incoherentes.
Arrancaron una
hoja. Dos hojas.
Tres. Descubrieron
que el corazón no
escribe, sólo siente.
Y aunque la mente
dispare palabras,
una tras otra, en
un bombardeo
incesante, no hay
mano, no hay lápiz,
no hay teclado
capaz de escribir
a esa velocidad
y con semejante
intensidad.
Finalmente, él en
su casa y ella en la
suya, se quedaron
dormidos sobre
la hoja en blanco,
y no sobre las
sábanas blancas
que ambos, sin
atreverse a decirlo,
habían soñado,
al unísono, en la
misma milonga y
en el mismo tango.
Es que siempre,
siempre, o nos
sobran sentimientos
o nos faltan
palabras.
Dos o tres horas
más tarde, ella
en su casa con
el té frío, él en
la suya con la
grappa caliente,
despertaron sobre
sus cuadernos
abiertos. Pero
las hojas ya no
estaban en blanco,
sino sembradas
de palabras. En el
cuaderno de ella,
con letra de él, y
en el cuaderno de
él, con letra de ella,
apareció escrita
una historia. Una
misma historia. Un
hombre, una mujer
y una milonga. Una
caminata y un taxi.
Una central nuclear
y el Central Park.
Un té caliente con
tostadas y una
grappa helada con
pizza fría. Y al final,
justo al final de
la historia y antes
de la firma —la
firma de ella en el
cuaderno de él, la
firma de él en el
cuaderno de ella—,
una misma frase
entrecomillada:
“Esta noche,
al terminar el
último tango, te
hubiera pedido que
durmieras conmigo.
Pero, una vez más,
no encontré las
palabras”.
Jorge Gómez
Monroy
La Plata, 28 de febrero
de 2014
31. Poema
Soy agua en pleno desierto,
un oasis en la arena;
soy alba cuando despierto
y en la noche, luna llena.
Soy posta en ese camino
donde descansa el viajero;
soy dueña de mi destino,
de mi viaje placentero.
Soy placer para el deseo
del que busca ser feliz;
con mayor claridad veo
de la vida, su matiz.
Soy gratitud porque siento
que el universo me abriga;
soy alegría y contento
en reposo o con fatiga.
Soy estrella, luz intensa,
la más bella realidad;
soy mente inquieta que piensa,
serena o en tempestad.
Soy barco, y mi itinerario
tiene ruta compartida;
soy viajero solidario,
tripulante de la vida.
Soy, quién sabe desde cuándo,
y seré desde hoy en más;
soy timón y estoy al mando,
soy timonel de la paz.
Beatriz Villar
Poema que recibió una Mención
en el Certamen Nacional de Poesía
“Francisco Luis Bernárdez” organizado
por el Centro de Amigos de las Artes
y la Biblioteca Juan M. Gutiérrez
de Lomas de Zamora,
el 8/12/2013
Soy