Trichomonas vaginalis es un protozoario transmitido sexualmente que causa una infección vaginal caracterizada por leucorrea espumosa y fétida. Afecta del 25 al 60% de las mujeres y se transmite principalmente a través del contacto sexual. Los síntomas incluyen prurito, ardor y descamación vaginal. Se diagnostica mediante el examen microscópico del exudado vaginal y su tratamiento consiste en la administración de tinidazol o metronidazol.